Iniquidades II Parte Por: Juanita Cercone C Cuando pensamos en iniquidades pensamos en cosas terribles, en pecados horrorosos que nosotros como hijos de Dios nunca hemos cometido, ni vamos a cometer. Tal vez algún antepasado terrible y pervertido de hace muchas generaciones pero yo, jamás! El Señor empezó a enseñarme y darme luz. Conforme vamos creciendo en nuestro caminar con el Señor, El nos va dando cada vez más conocimiento. Vemos cosas que antes no veíamos. Nuestro carácter, nuestra forma de ser, nuestros pensamientos, nuestras palabras, y todo lo que somos no puede ser igual, tiene que cambiar continuamente. Pablo va más allá e inclusive nos insta a que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo. Deuteronomio 30:17 dice: “Más si tu corazón se apartare y no oyeres y te dejares extraviar empujar, arrastrar, y te inclinares a dioses ajenos y les sirvieres, si te dejares, yo os protesto hoy que de cierto pereceréis”. Mientras que, Proverbios 16:2 dice que: “Todos los caminos del hombre son limpios en su propia opinión”. Las iniquidades son pecados que toman asidero en nuestras vidas, en nuestra sangre y pasan de una generación a otra. Son conductos, caminos por donde el enemigo tiene derecho a entrar. Por supuesto, cuando confesamos nuestros pecados El nos perdona. Sin embargo la bendición va a depender de mi continuidad y diligencia, de vivir en obediencia, si me aparto y empiezo a pecar nuevamente, la palabra de Dios dice que el espíritu inmundo va y toma consigo otros siete espíritus peores que él y entrados moran allí y el postrer estado viene a ser peor que el primero. Lucas 11:26. Iniquidades según la palabra: Isaías 59: 4 • Confían en vanidad y hablan falsedades. No confiar en Dios y hablar cosas que no son, aún no hablar Su palabra. Vanidades- Tojú =en hebreo significa cosas vacías , vanas, cosas que no valen. Falsedades- mentira, engaño vano, traición. • Conciben maldades y dan a luz iniquidad. Maldades- áven- afanarse en vano, reducirse a nada. Iniquidad-áven- afanarse en vano, reducirse a nada. Significa lo mismo. Salmo 7:14 Se preño de iniquidad y dio a luz engaño, (da a luz mentira). • Iniquidad-áven. Afanarse en vano • Engaño-mentira Job 15:35 Concibieron afanes, dolor y dan a luz iniquidad. El preocuparnos constantemente, el no confiar en Dios. El estar lleno de estrés. • Afanes-dolor-amál- trabajo, esfuerzo agotador, preocupación. Iniquidad-engaño, fraude, traición. Isaías 33:11 Concebisteis hojarascas (cosas inútiles), rastrojos (residuos, el campo después de segar) daréis a luz. Hacer cosas inútiles. P ej. Oral Roberts. Cuando sabemos el propósito de nuestras vidas y no somos diligentes en su cumplimiento. • Hojarascas-cosas inútiles –cash- paja, estopa. • Rastrojos-cash- paja, estopa, hojarasca. Santiago 1:15 …entonces la concupiscencia (malos pensamientos y malos deseos), después que ha concebido, da a luz el pecado (iniquidad); y el pecado, siendo consumado, da a luz la muerte. El tener malos pensamientos y malos deseos. El ocupar nuestra mente en cosas que no son correctas, produce un patrón de pecado. • Pecado- es akjoákji- patrón. Oseas: 10:13 Habéis arado impiedad y segasteis iniquidad. Comeréis el fruto de mentira, porque confiaste en tu camino y en la multitud de tus valientes. Confiar en nuestras propias fuerzas en nuestros recursos y no en Dios. Aquí se da el orgullo, la soberbia y la altanería. •Impiedad- maldad (mal moral). Mateo 22:37 Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón (afectos internos) y con toda tu alma (conciencia) y con toda tu mente (pensamientos). Job 4:8 Recapacita: Los que aran iniquidad y siembran injuria, la siegan. (el solo hecho de hablar mal de otros, hablar lo que no es o no sabemos). •Iniquidad-áven-afanarse en vano. •Injuria-amál esfuerzo agotador, preocupación, aflicción, agravio, dolor. El desgastarnos en cosas inútiles. Salmo 119:37 Aparta mis ojos para que no vean la vanidad (iniquidad); vivifícame en tu camino. Apártame de querer ningún otro plan sino el tuyo. Reaviva el afecto de mi corazón hacia ti. Confírmame la seguridad de que tus promesas son para mí porque en ti confío y te reverencio. (Biblia al Dia). •Vanidad-shav- mal destructivo, ruina, inutilidad . Isaías 59: 13 • Prevaricar y mentir contra Jehová. • Apartarse de en pos de nuestro Dios. • El hablar calumnia y rebelión. • Concebir y proferir de corazón palabras de rebelión. Isaías 59:7 sus pensamientos, pensamientos de iniquidad. (pensamiento constante en hechos negativos, en ofensas, en lo malo de los demás) La Palabra del Señor nos insta a que como sus hijos debemos centrar nuestros pensamientos en El. • Poned la mira en las cosas de arriba y no en las de la tierra. • Por lo demás hermanos todo lo bueno todo lo puro, todo lo amable si hay virtud alguna, si hay algo digno de alabanza en esto pensad. • ¿Qué produce la iniquidad? La iniquidad no permite que nuestras oraciones sean escuchadas. Isaías 59:2: Vuestras iniquidades son las que hacen separación entre vosotros y vuestro Dios, Vuestros pecados han hecho que su rostro se oculte de vosotros para no escuchar. Salmo 66:18: Si en mi corazón yo hubiese consentido la iniquidad el Señor no me habría escuchado. Isaías 1:16 Lavaos y limpiad; quitad la iniquidad de vuestras obras de delante de mis ojos, dejad de hacer lo malo. Proverbios 22:8 El que sembrare iniquidad, iniquidad segará. Exodo 34: 6-7 dice que El perdona nuestros pecados, rebeliones e iniquidades. • Tenemos que profundizar en el análisis de la vida que llevamos. Todos estos pasajes nos hablan de iniquidades que pueden arraigarse en nuestro ser por medio de actitudes y comportamientos que se transforman en patrones, en tendencias que pasan de una generación a otra. Son pecados no confesados. El hablar mal de las demás personas o lo que no sabemos (chisme), el afanarnos en vano y no confiar en el Señor, el preocuparnos excesivamente, el hacer cosas inútiles sin ningún propósito desgastándonos en cosas vanas, el tener malos pensamientos o malos deseos, el confiar en nuestras propias fuerzas siendo orgullosos, soberbios y altaneros, en resumen el no cumplir el propósito que El tiene destinado para nuestras vidas. Jesucristo nos dijo que oráramos, “Venga tu Reino, hágase Tu Voluntad aquí en la tierra como en el cielo.” Como cristianos, como hijos del Dios de dioses y Señor de Señores, herederos juntamente con Cristo, no somos como todos los demás, por lo tanto no podemos darnos el lujo de vivir como todos los demás. Somos personas de propósito, con un destino. Como hijos de Dios debemos de crecer en nuestro caminar con el Señor y permitirle a El, día a día nos muestre nuestras faltas para poder cumplir Su propósito en nuestras vidas. Filipenses 1:6 El que comenzó la buena obra en nosotros la terminará hasta el día de nuestro Señor Jesucristo. Proverbios 4:18 La senda del justo es como la luz de la aurora que va en aumento hasta que el día es perfecto. Algunas de estas actitudes nos parecen inofensivas y talvez podemos pensar que todos las hacen y es algo común, pero nosotros no somos como todos los demás. Usted y yo, al entregar nuestras vidas a nuestro Señor Jesucristo hemos decido hacerlo a El nuestro Señor. Eso implica que ya no vivimos nosotros, sino Cristo en nosotros y por lo tanto todo nuestro ser ha sido cedido a El para que se haga Su voluntad aquí en mi vida como en el cielo.