ALIMENTACIÓN EN BECERRAS LACTANTES. • MVZ MPA MIGUEL ANGEL BLANCO OCHOA En la actualidad la industria lechera en México no es autosuficiente en la producción de becerras, de acuerdo con algunos estudios; en el Valle de México se llegan a perder entre el 6.5% y el 52% de las becerras durante el proceso de crianza; en el estado de Baja California un promedio del 26% y en el estado de Hidalgo un 38%. En consecuencia se requiere importar miles de cabezas de vaquillas lecheras al año. Definimos “Cría de becerras” como aquellas etapas que van del nacimiento hasta el estado de vaquilla al parto, la comprensión adecuada del proceso de crianza, desde el nacimiento, demanda el entendimiento en términos generales, del ciclo biológico de los animales en sus etapas correspondientes al crecimiento y al desarrollo, ya que las transformaciones fisiológicas de los animales son las que determinan su mantenimiento y manejo. Este ciclo biológico se puede sintetizar de la siguiente manera: 9 9 9 9 Lactancia. Destete a los 6 meses de edad (evolución a rumiante). De la pubertad al primer servicio. De la concepción al parto. Estas etapas naturales correspondientes al ciclo biológico, generan el agrupamiento lógico que debe darse en todo sistema de crianza. A continuación se desglosa un agrupamiento recomendable en cualquier situación de hatos comerciales: a) Becerras lactantes. b) Becerras de 2 a 6 meses de edad. c) Becerras de 7 a 12 meses de edad. d) Becerras de 13 a 16 meses de edad. e) Vaquillas gestantes. El tipo de sistema para la crianza de becerras a elegir es variable debido a que existen diferencias entre las razas, utilidad zootécnica (doble propósito, productor de leche o carne) y diversidad de climas, entre otros factores. Los sistemas de crianza, se definen como la forma y métodos que se aplican a dicho proceso. Estos sistemas, en términos generales, se dividen en: intensivos, semiintensivos y en pastoreo posdestete. 9 9 Cada uno de estos sistemas comprende dos grandes etapas: La lactancia y La etapa posdestete, (la que a su vez comprende varias subetapas). La etapa de lactancia comprende dos métodos de destete: • Jefe del Departamento de Producción Animal: Rumiantes. Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia. Universidad Nacional Autónoma de México. Circuito Exterior de Cd. Universitaria, D.F. s/n. C.P. 04510. México, D.F. Tel: 5616 7161 blancoma@servidor.unam.mx 9 El destete precoz, aplicado casi sin excepción en sistemas de producción especializados, se lleva a cabo entre la quinta y la octava semanas de vida. 9 El destete tardío es practicado por lo general en sistemas de producción de doble propósito, especialmente en zonas tropicales. En el cuadro siguiente se desglosa lo anteriormente expuesto. Tabla 1: Sistemas para la crianza de becerras. Intensivo Estabulación permanente Alimentación controlada Con raza especializada Destete precoz Predominante en clima templado SEMIINTENSIVO PASTOREO POSDESTETE Estabulación Estabulación y pastoreo circunstancial Pastoreo estacional Con raza especializada o Pastoreo permanente por destete (5 o más meses cruza de edad) Destete precoz o tardío Con raza especializada o cruza Destete precoz o tardío Predominante en trópico húmedo La etapa de lactancia en sistemas de crianza intensivos se extiende por unos 60 días, y durante la misma, el aparato digestivo debe adquirir la capacidad de digerir carbohidratos estructurales (celulosa), que han de servirle a la becerra como fuente de energía para su crecimiento, por lo que es de suma importancia que el sistema de alimentación durante el periodo lactante sea eficiente. El sistema de alimentación de becerras durante el período lactante se basa en el uso de leche ó de sustitutos, así mismo, se inicia la administración de alimentos sólidos para favorecer el desarrollo ruminal; por lo tanto, una correcta manipulación de las dietas líquidas y sólidas determinará la eficiencia de la alimentación, el desarrollo de un rumen funcional y la obtención de ritmos de crecimiento aceptables. La alimentación con calostro en becerras recién nacidas, es esencial para la supervivencia de estas. Por definición, únicamente la secreción del primer ordeño después del parto debe ser denominada calostro. Las secreciones del segundo al octavo ordeño (cuarto día de la lactancia) son llamadas leche de transición, ya que su composición gradualmente se asemeja a la composición de la leche entera. Tabla 2: Composición de la leche y del calostro Componente Sólidos totales % Grasa % Proteína %1 Anticuerpos % Lactosa % Número de ordeño 1 2 3 4 Calostro Leche de transición 23.9 17.9 14.1 13.9 6.7 5.4 3.9 3.7 14.0 8.4 5.1 4.2 6.0 4.2 2.4 0.2 2.7 3.9 4.4 4.6 5 13.6 3.5 4.1 0.1 4.7 11 Leche entera 12.5 3.2 3.2 0.09 4.9 Minerales % 1.11 0.95 0.87 0.82 0.81 Vitamina A, ug/dl 295.0 --113.0 --74.0 1 Incluye el porcentaje de anticuerpos indicados en la siguiente línea 0.74 34.0 El calostro es una fuente rica de proteínas no específicas tales como la leucina α1 y ß4, lactoferrina, insulina, factores de crecimiento de insulina, factores anti-estafilocócicos y otros. Estas proteínas son importantes para la resistencia a enfermedades infecciosas así como para otras funciones de estimulación y crecimiento de los tejidos. Además de su valor altamente nutritivo, el calostro provee anticuerpos necesarios para proteger a las terneras recién nacidas de muchas infecciones que pueden propiciar diarrea y muerte. El papel del calostro en el proceso de transferencia de inmunidad pasiva a la becerra (a través de proteínas específicas, conocidas como inmunoglobulinas o anticuerpos maternos) es ampliamente conocido. Varios son los factores a tener en cuenta para maximizar la eficiencia de este proceso, entre ellos: a) La concentración de inmunoglobulinas en el calostro. Las inmunoglobulinas son proteínas críticas para la identificación y destrucción de patógenos en los animales. Existen tres tipos de Ig en el calostro: 9 IgG 9 IgM 9 IgA Adicionalmente, existen dos isótopos de IgG: IgG1 e IgG2. Estas Ig trabajan juntas para proveer a la becerra con la inmunidad pasiva hasta que desarrolle su propia inmunidad activa. El calostro contiene de 70 a 80% de IgG, 10-15% de IgM y 10-15% de IgA. La mayoría de las IgG en el calostro bovino son IgG1. Las IgG1 e IgG2 son transportadas desde la sangre de la madre hacia el calostro por medio de un mecanismo de transporte muy específico. Este mecanismo mueve grandes cantidades de IgG (particularmente IgG1) desde la sangre hacia la ubre. Por consecuencia, la concentración de Ig en el suero sanguíneo de la madre disminuye de una forma precipitosa, comenzando alrededor de las 2 a 3 semanas antes del parto. Las vacas requieren varias semanas para volver a sintetizar las inmunoglobulinas perdidas. Cabe mencionar que la IgM y la IgA son sintetizadas por los plásmidos en las glándulas mamarias. Cada una de las Ig tiene una función diferente. Las IgG identifican y ayudan a destruir patógenos invasores. Debido a que son de menor tamaño que las otras Ig, se pueden mover afuera del torrente sanguíneo y abrirse paso hacia otras partes del cuerpo donde pueden ayudar a identificar patógenos. Las IgM son los anticuerpos que sirven como la primera línea de defensa en casos de septicemia; son moléculas largas que permanecen en la sangre y protegen al animal de invasiones bacterianas. Las IgA protegen las superficies mucosas como la del intestino. Se adhieren a la mucosa intestinal y previenen que a su vez, los patógenos se adhieran y causen enfermedades. El administrar calostro por 3 días consecutivos a las becerras después del nacimiento es una excelente práctica porque se provee así de IgA al intestino protegiéndolo contra los patógenos. El calostro contiene grandes cantidades de IgG y pequeñas cantidades de IgM e IgA. Todas las Ig son importantes para la becerra y son necesarias para minimizar la posibilidad de enfermedades o muerte. Sin embargo, es importante recordar que las Ig son sólo una parte del sistema inmunológico de la becerra. Una buena nutrición, el disminuir la tensión y un ambiente limpio también ayudan a mantener a las becerras saludables. La cantidad de calostro a suministrar depende de varios factores incluyendo la cantidad de Ig en el calostro y el peso corporal de la becerra. La meta a lograr será que la becerra obtenga un mínimo de 10 gramos de IgG por litro de suero. El volumen de suero en la becerra, a las 24 horas de nacida, es aproximadamente un 10% de su peso corporal. Para obtener la cantidad de 10g/l, una becerra recién nacida que pesa 40 kg debe consumir 40 gramos de IgG del calostro o del suplemento, en las 24 horas después de nacida. Sin embargo, las IgG no son absorbidas en un 100%. La eficiencia de absorción es cercana a 35% (el otro 70-75% es utilizado por otras partes del cuerpo o no es absorbido). Por lo tanto, para alcanzar los 10g/l, la becerra debe consumir 114 gramos de IgG dentro de las primeras 24 horas. Añadiendo un margen de seguridad a estos cálculos (consiguiendo una concentración de IgG en el suero de 15 g por litro), la becerra necesita consumir 171 gramos de IgG. La eficiencia de absorción de IgG está en su más alto nivel inmediatamente después del nacimiento y disminuye casi a cero a las 24 horas de edad por lo que es de suma importancia que el calostro (o suplemento) sea suministrado tan pronto como sea posible después de nacer. Se ha estimado que la eficiencia de absorción varía ampliamente y puede variar de 65% a 25%. La mayoría de estos estimados, caen en el rango de 30 a 40%. La cantidad de Ig en el calostro es el factor más importante que se debe considerar para decidir cuánto calostro proporcionar a la becerra, por lo que a medida que su concentración disminuye en el calostro, mayor cantidad de éste se requiere. b) El volumen y calidad del calostro. Generalmente, la cantidad de calostro que se ofrece a las becerras recién nacidas es de 2 litros en cada una de las tomas que se harán durante el día. Sin embargo, en muchos casos, esto no provee suficientes anticuerpos. Por lo anterior, muchos veterinarios recomiendan dar 4 litros de calostro a las becerras Holstein en la primera administración, incluso utilizando una sonda directa al esófago, ya que de esta forma se puede maximizar la absorción de anticuerpos. Existe un método práctico para evaluar la calidad del calostro conocido como prueba de calostrometría. Figura 1. Efecto de la cantidad de calostro alimentado y tiempo de alimentación relativo al nacimiento en la transferencia de inmunoglobulina-G (IgG) del calostro a la sangre de la becerra. 1. Prueba de calostrometría Un método para estimar la calidad del calostro es usando un aparato llamado calostrómetro. Éste mide la gravedad específica del calostro y estima el total de gama-globulina basándose en una relación estadística. Lo anterior permite a los usuarios del calostrómetro estimar, con razonable certeza, la cantidad de globulina en el calostro, ya que el contenido de globulina es responsable del 69.9% de la variación en la gravedad específica del calostro (el coeficiente de correlación -r2- fue igual a 0.699). Se colecta el calostro del primer ordeño en un recipiente y parte de éste se deposita en una probeta de 250 ml para iniciar la prueba. Se introduce el calostrómetro para que éste flote en la muestra, separando la espuma de la superficie, para evitar lecturas falsas o erróneas. Se lleva a cabo la lectura en la escala cualitativa (en colores) y la cuantitativa (mg/ml) del calostrómetro y se registran las lecturas. El calostro se clasifica en tres categorías de acuerdo con la densidad o gravedad específica, las cuales son: 9 Superior: color verde, con gravedad específica de 1.047-1.075 y una concentración de inmunoglobulinas de 50 a 140 mg/ml de calostro. 9 Moderada: color amarillo, con gravedad especifica de 1.035 -1.046 y una concentración de inmunoglobulinas de 20 a 50 mg/ml de calostro. 9 Inferior: color rojo, con gravedad específica menor a 1.035 y una concentración de inmunoglobulinas menor a los 20 mg/ml de calostro. El problema más común que se ha observado por el uso del calostrómetro está asociado con la temperatura del calostro: una muestra de éste puede ser considerada de alta calidad si es medida a 5 °C, pero será considerada de baja calidad a temperaturas de 35 a 40 °C. Por consiguiente, si se utiliza el calostrómetro, es importante que se use siempre a una misma temperatura. Los fabricantes recomiendan usar el calostrómetro a una temperatura estándar de 22 °C. 9 Una segunda preocupación se relaciona con la composición del calostro. La cantidad de los componentes coloidales como la grasa y las proteínas no-Ig puede llegar a afectar la gravedad específica, por lo que el error asociado con el uso del calostrómetro aumenta. A pesar de todas estas preocupaciones, puede ser una herramienta práctica, especialmente para eliminar calostro de baja calidad. Para usarlo con mayor seguridad y exactitud siga estas recomendaciones: 9 Permita a la muestra de calostro enfriarse a la temperatura ambiente. 9 Introduzca el calostrómetro en el calostro. 9 Si el calostrómetro indica que el calostro es de baja calidad, no lo ofrezca a las becerras durante las primeras 24 horas de vida. 9 Si el calostrómetro indica que el calostro es de alta calidad, entonces utilice la regla de los 8.5 kg (si la vaca produce más de 8.5 kg de calostro, las probabilidades de que contendrá suficiente cantidad de inmunoglobulinas en el calostro son menores al 50%). 9 Si el calostro pasa la prueba del calostrómetro y la regla de las 8.5 kg, entonces alimente a la becerra tan pronto como le sea posible. c) El tiempo transcurrido desde nacimiento al primer consumo de calostro. La predicción del tiempo para la alimentación con calostro es importante por dos razones: 1.- La pérdida de sitios de absorción en los intestinos. La maduración de las células epiteliales de los intestinos comienza poco después del nacimiento por lo tanto durante las primeras 24 horas de vida el intestino es permeable a macromoléculas y anticuerpos que luego de ser absorbidos son transportados por la sangre, dando inmunidad a la becerra. Sin embargo el desarrollo celular del aparto digestivo, conlleva a la pérdida de su habilidad para absorber macromoléculas como los anticuerpos y por lo tanto, de descomponerlos en los aminoácidos que los constituyen. Además de la maduración de los intestinos, la secreción de enzimas digestivas en el abomaso y en los intestinos de las becerras puede reducir la eficiencia de la absorción de IgG al degradarlas antes de ser absorbidas. Al nacer y por un período corto de tiempo, la secreción de enzimas digestivas permanece limitada, dejando que macromoléculas como la IgG alarguen la digestión. Sin embargo, después de 12 horas, la secreción de enzimas se vuelve más notoria, reduciendo la habilidad de las moléculas de IgG para alcanzar la circulación periférica. 2.- La colonización bacterial de los intestinos. El tracto intestinal de las becerras recién nacidas es estéril al nacer; sin embargo, a las pocas horas, bacterias presentes en el medio ambiente comienzan a colonizar los intestinos. Esta colonización puede ser acelerada por el medio ambiente que promueve el crecimiento de patógenos. Si una becerra nace en un ambiente que contenga un gran número de bacterias patógenas, las oportunidades de colonización y por ende, de enfermedades, se incrementan. Esto puede conducir a que las becerras desarrollen septicemia y, a menudo, la muerte. La presencia de bacterias en los intestinos puede llegar a acelerar su “cierre”, con lo que se reduce la adquisición de inmunidad pasiva. La concentración de anticuerpos en el calostro promedia 6% (6g/100g), pero tiene un rango de 2 a 23%. En contraste, la concentración de anticuerpos en la leche es únicamente de 0.1%.(véase tabla 2) Estas proteínas son componentes vitales del sistema inmune, ayudan a identificar y destruir bacterias, así como otras partículas extrañas (antígenos) que han invadido el intestino. Los suplementos de calostro Los suplementos de calostro pueden ser usados bajo las siguientes situaciones: 9 Cuando el calostro no se encuentra disponible. 9 Cuando el calostro es de baja calidad. 9 Cuando el calostro puede estar contaminado por patógenos. a) Productos derivados del suero sanguíneo Recientemente, un suplemento derivado del suero sanguíneo fue introducido al mercado, mismo que ha sido aceptado como producto alimenticio por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA). Su aplicación mostró resultados aceptables cuando la alimentación se hizo en las dosis sugeridas; incluso la eficiencia de absorción de IgG fue mejor que la del calostro maternal. Cuando se suministraron esas dosis en cantidades mayores durante 24 horas, la absorción disminuyó en forma importante, lo que sugiere que el exceso de proteína en los intestinos puede perjudicar la absorción de anticuerpos. b) Productos derivados del suero de leche El suero de leche contiene inmunoglobulinas que pueden ser obtenidas mediante un proceso especial. Estos productos usualmente contienen de 25 a 30 gramos de IgG por dosis. La mayoría de las investigaciones indican que la absorción de IgG proveniente de estos productos es bastante pobre, y que la concentración de IgG alcanzada en el suero al alimentar con este tipo de productos es mucho menor que la alcanzada al alimentar a las becerras con productos derivados de suero o calostro maternal. c) Productos derivados del calostro Lo realizan compañías comerciales que se dedican a colectar calostro y procesarlo para la venta. En algunos de esos hatos, las vacas pueden ser vacunadas contra ciertos patógenos (por ejemplo, Escherichia coli) antes de que se colecte el calostro. El uso de suplementos derivados de calostro, que es secado por congelación, ha sido evaluado tanto para reemplazar al calostro como para añadirlo al calostro de baja calidad. Los resultados obtenidos indican que la eficiencia de absorción de IgG de estos productos es bastante pobre, ya que las becerras sólo alcanzan a absorber de 2 a 3 g de IgG por litro. Cuando los suplementos de calostro fueron añadidos al calostro, se observó muy poco cambio en las concentraciones de IgG en el suero. Ningún efecto de los suplementos de calostro suministrados se observó en las concentraciones de IgG en el suero a las 24 ó 48 horas después del nacimiento, sugiriendo que no hay ningún beneficio al añadir este tipo de productos al calostro normal. Tabla 3: Sustitutos de calostro Producto Calostro derivado de suero Calostro congelado Gramos de IgG por dosis de 480 cc Fabricado de: Subproductos queserías Vacas vacunadas rebaños selectos Calostro derivado de suero Suero bovino de bovino de de 25-30 gramos 25-60 gramos 45 gramos Consideraciones finales para el uso del calostro 9 Si se permite que el calostro se deje a temperatura ambiente por largos períodos de tiempo, el riesgo de que las becerras sean infectadas con patógenos causantes de enfermedades se incrementa. 9 El calostro y otros productos de la leche son excelentes medios de cultivo para las bacterias. A menos de que las vacas tengan mastitis o alguna otra infección, la contaminación microbiana del calostro deberá ser muy pequeña. Es necesario, por lo tanto, minimizar la contaminación del calostro después de su obtención, mediante el uso de equipo limpio, así como utilizar recipientes limpios para almacenarlo. Será oportuno pasteurizar el calostro que se ha dejado a temperatura ambiente por más de una hora. 9 La rápida refrigeración o congelación del calostro puede ayudar a minimizar el crecimiento bacteriano. El calostro puede estar congelado hasta un año sin que se produzca un cambio significante de descomposición de las inmunoglobulinas. El calostro ha sido congelado durante 15 años sin serios problemas de deterioro en su contenido de inmunoglobulinas. Los congeladores libres de hielo no son los indicados para congelar calostro por espacios largos de tiempo ya que tienen ciclos de descongelación en los cuales el calostro puede descongelarse parcialmente y esto acortará la vida de almacenamiento. 9 En caso de no contar con calostro se puede utilizar algún sustituto, no obstante, es mejor contar con un banco de calostro. Alimentación con dietas líquidas después del calostro. Con la finalidad de incrementar la eficiencia productiva en la crianza de becerras se han venido utilizando cantidades limitadas de leche entera o sustitutos de leche durante períodos de lactancia cortos. Uno de los principales objetivos es el de preparar a las crías para lograr una buena adaptación a las raciones balanceadas. En este proceso, tanto los productos lácteos como los concentrados tipo iniciadores juegan un papel clave sobre el consumo, desarrollo ruminal y comportamiento productivo. Con el fin de lograr un ahorro en el consumo y costo de producción, en la crianza de becerros se han venido reduciendo tanto las cantidades de leche, así como la edad al destete. Aunque la leche entera es el alimento ideal en la nutrición del ternero, la alta demanda de este producto para consumo humano ha estimulado el uso de sustitutos de leche con la finalidad de reducir los costos de alimentación liquida. El uso de sustituto de leche está determinado por aspectos tales como un precio menor con respecto a la leche. Con base en un estudio que evaluó el comportamiento productivo de becerros alimentados mediante dietas liquidas a base de leche entera y/o sustituto de leche, se concluyó que: 9 La alimentación liquida a base de leche entera ofrece ventajas sobre el comportamiento productivo de los becerros. 9 El costo de la dieta en base a leche resultó más económico que el uso de sustituto de leche. ($ 11.60 leche entera y de $13.30 MN para sustitutos). Tabla 4: Comportamiento productivo de los becerros. *Tratamientos=TI = Leche Entera; TII = Sustituto de Leche (Ultra Milc).ab Letras diferentes en hileras indican diferencia significativa (P<.05). Tabla 5: Ganancia diaria de peso vivo (GDP) de los becerros. *Tratamientos=TI = Leche Entera; TII = Sustituto de Leche (Ultra Milc) ab Letras diferentes en hileras indican diferencia significativa (P<.05) La Ganancia Diaria de Peso que se obtuvo indica que el aporte de nutrientes de la leche entera fue mejor, superando al sustituto de leche. Esto puede deberse a factores tales como un desbalance de aminoácidos esenciales, deficiente coagulación de la proteína en el abomaso y la digestibilidad inferior de sus componentes. Tabla 6: Conceptos financieros en la alimentación líquida de los becerros. *Tratamientos=TI = Leche Entera; TII = Sustituto de Leche (Ultra Milc) a Costo de ventas (31-08-01) en el ICA-UABC = $2.90/litros y precio de compra de las plantas Pasteurizadoras en la ciudad de Mexicali $3.40/litros Considerando la tabla anterior el sustituto de leche fue 12.78 % más caro que la leche entera, mientras que en relación al precio de compra de las pasteurizadoras solo fue más barato en el 2.2 %.. Por lo tanto, la leche entera se prefiere sobre sustitutos de la leche ya que es la fuente más natural y completa de nutrientes. Después del calostro y de la leche de transición, a la ternera se le debe de alimentar con leche que posea el más alto valor nutricional para permitir un crecimiento satisfactorio al menor costo. Así, los siguientes factores son importantes: a. Tipo de leche ofrecida. No toda la leche que es producida en la granja puede ser vendida, pero las terneras pueden hacer uso de la mayoría de la leche que no es aceptable para uso comercial. Las varias clases de leche disponibles en la granja para alimentar a las becerras jóvenes son: Leche fermentada El calostro, la leche de transición y la leche entera que son almacenadas a temperatura ambiente (menos de 21°C) se fermentaran. Durante el almacenamiento, la fermentación transforma la lactosa en ácido láctico, el producto se acidifica y puede ser preservado por varias semanas. Comparándolo con la leche entera, la ganancia promedio diaria es reducida ligeramente cuando se alimenta con una leche fermentada bien preparada. Sin embargo, la leche fermentada que es mal manejada tiende a tener una reducción importante en la ganancia promedio diaria. Leche mastítica La leche mastítica o leche de vacas tratadas contra mastitis puede ser dada a las terneras previniendo el contacto entre las terneras por lo menos 30 minutos después de la alimentación. Esta recomendación es para prevenir la transmisión de bacterias que causan diarrea o neumonía así como otros agentes infecciosos de una ternera a la otra. La leche de vacas que son tratadas contra mastitis puede incrementar el riesgo de problemas de salud, adicionalmente el uso de leche que contiene residuos de antibióticos puede propiciar a una selección de las bacterias que son resistentes. Como resultado, el tratamiento con antibióticos será menos efectivo a través del tiempo. Leche desgrasada La leche desgrasada es relativamente alta el proteína, pero contiene menos energía (50%) y vitaminas liposolubles (vitamina A) Leche entera La leche entera suplementada con un buen iniciador en grano son una combinación alimenticia excelente para terneras lecheras. El rendimiento en el crecimiento obtenido con leche entera y un iniciador en forma de grano es a menudo considerado como el estándar para evaluar otros productos o prácticas de manejo y alimentación. Tamaño de la porción. En cuanto a la cantidad de alimento una buena regla es alimentar con 1 kg de leche por día por cada 10 a 12 kg de peso corporal, al nacimiento. En otras palabras, una becerra debe recibir 8 a 10% de su peso corporal al nacimiento cada día. Las becerras deben de ser alimentadas con la misma cantidad de leche hasta que son destetadas. Conforme las becerras crecen, estas pueden utilizar mayores cantidades de leche sin embargo, si se limita el consumo de leche, a las becerras se propicia que consuman alimento sólido en esta etapa más temprano. b. Frecuencia de alimentación. La frecuencia de la alimentación se recomienda que sea en dos tomas igual cada día, con un contenido de 4 al 5% del peso corporal (la capacidad volumétrica del abomaso). La alimentación una vez por día es exitosa únicamente cuando existen condiciones muy buenas y estrictas de manejo. En la mayoría de las ocasiones, la alimentación una vez al día tiende a incrementar la frecuencia de diarrea así como otros problemas de salud. c. Método de alimentación. La alimentación con chupón fuerza a la ternera a beber lentamente y reduce la incidencia de diarrea y otros trastornos digestivos. Sin embargo, los beneficios de la alimentación con chupón se pueden perder si es que no se mantiene una higiene estricta en el equipo. A una becerra se le puede enseñar a beber de un balde dentro de los primeros días después del nacimiento, está técnica es fácil rápida y requiere de poco trabajo de limpieza. d. Temperatura de la leche. Es de particular importancia el controlar la temperatura de la leche durante las primeras semanas después del nacimiento. La leche fría tiende a causar más problemas digestivos que la leche caliente, durante las primeras semanas después del nacimiento, la leche debe de ser administrada a la temperatura corporal (39°C), pero temperaturas más bajas son aceptables para becerras mas grandes (25-30°C). Figura 2: Programa de alimentación líquida para becerras. Peso corporal Cantidad de alimento Número de tomas Becerra de 25 kg Becerra de 30 kg Becerra de 35 kg Becerra de 40 kg Becerra de 45 kg 1.25 kg/alimento 1.50 kg/alimento 1.75 kg/alimento 2.00 kg/alimento 2.25 kg/alimento 2 veces al día 2 veces al día 2 veces al día 2 veces al día 2 veces al día Concentrados preiniciadores. Los concentrados preiniciadores son, dietas sólidas suministradas de una determinada manera, que logran desarrollar totalmente el rumen en un lapso de tiempo breve, logrando una rápida transición de lactante a rumiante. El alimento preiniciador, provee niveles correctos de minerales y vitaminas, utiliza proteína de la mejor calidad y tiene aditivos de acción específica para el desarrollo de la mucosa del rumen. Para provocar un rápido desarrollo del rumen y permitir el destete temprano, el factor clave es el consumo de una dieta que permita el crecimiento del epitelio ruminal y de la masa muscular promoviéndose así la motilidad ruminal. El desarrollo del rumen debe cubrir cuatro aspectos: Tamaño, desarrollo muscular, habilidad de absorción y población microbiana. Variables que favorecen un rápido desarrollo ruminal a. Microorganismos en el medio rumino-reticular: Cuando las becerras nacen, el rumen es estéril, no hay bacterias presentes. Al día o dos de edad, empiezan a encontrarse bacterias, principalmente aerobias. Luego el número y tipo de bacterias va cambiando, a medida que el consumo de alimento seco aumenta y empieza a haber un sustrato disponible para la fermentación producida por bacterias anaerobias. Los cambios en el número de bacterias presentes son casi siempre en función del consumo de sustrato. Antes del consumo de alimento seco, las bacterias que existen en el rumen vienen como consecuencia de la fermentación de pelo, ingesta de cama o de la fermentación del reflujo de leche desde el abomaso. El tipo de sustrato consumido determinará los tipos de bacterias que predominen en el rumen en desarrollo. b. Agua en el rumen: Para fermentar un sustrato (grano, heno) las bacterias ruminales precisan un ambiente acuoso. Sin suficiente cantidad de agua las bacterias no pueden crecer y no se multiplican, la fermentación bacteriana es inhibida generando como consecuencia un atraso en el desarrollo ruminal. La leche no reemplaza al agua libre debido a que no ingresa al rumen, ya que mecanismo reflejo de la gotera esofágica es activo hasta las 12 semanas de edad y dirige ingesta de los lácteos en su paso por la garganta gracias al reflejo de succión, cerrando gotera y haciendo que el liquido en cuestión siga de largo hacia el abomaso sin caer en rumen. el la la el En cambio, los sólidos y el agua no desencadenan el reflejo y entran en el retículorumen. Casi la totalidad del agua que ingresa al rumen proviene del consumo de agua libre, que como generalmente es bebida de la misma agua que los animales adultos, está contaminada con microorganismos ruminales, y por lo tanto, contribuye a establecerlos en el rumen del ternero. c. Transito de contenido rumino-reticular (actividad muscular): El adecuado funcionamiento del rumen requiere que el material que entra pueda salir. Este mecanismo se produce por las contracciones del rumen, la presión y la regurgitación. Al nacimiento, el rumen tiene poca actividad muscular, en consecuencia tiene pocas contracciones y regurgitaciones (rumia) en la primera semana de vida. Con el incremento en el consumo de alimento seco, las contracciones del rumen comienzan, ya que la capa muscular mueve el contenido ruminal dentro del rumen. En becerras alimentadas exclusivamente con leche, las contracciones ruminales no son detectables por periodos extensos de tiempo, pero cuando las becerras consumen, además de leche, el grano y concentrado preiniciador, las contracciones del rumen pueden ser medidas ya a las 2-3 semanas de vida. d. Absorción de los nutrientes por la mucosa del rumen: El estímulo primario para el desarrollo del epitelio son los ácidos grasos volátiles (AGV: acetato, propionato y butirato). Los alimentos ingresados al rumen, como el preiniciador y forraje, son fermentados por las bacterias presentes y degradados a AGV. Por lo tanto, son las bacterias las que proveen los AGV para el desarrollo epitelial. Los productos finales de la fermentación, particularmente los ácidos grasos volátiles, son absorbidos por el epitelio ruminal, donde incluso el propionato y el butirato son metabolizados en los adultos. Esta absorción es un importante criterio para definir el desarrollo retículo-ruminal, ya que en la becerra neonata, la capacidad de absorber o metabolizar AGV es prácticamente nula. Por ello, el retículo-rumen debe desarrollar esta habilidad antes del destete. La capa mucosa provee al rumen de una superficie de absorción, pero al nacimiento, las papilas ruminales son pequeñas y no funcionales, absorben pocos AGV y no los metabolizan adecuadamente. Varias sustancias tienen efectos sobre el desarrollo de la mucosa del rumen, básicamente en relación al tamaño y numero de papilas y su habilidad para absorber y metabolizar AGV. En la siguiente tabla se pueden ver algunos con sus importancias relativas. Tabla 7. Sustancias con efecto en el desarrollo de la mucosa ruminal Sustancia Efecto relativo Leche ++ Acetato sal sódica ++ Propionato sal sódica +++ Butirato sal sódica ++++ Grano +++ Heno ++ Esponjas plásticas Partículas inertes Es evidente que los estímulos primarios para el desarrollo de la mucosa ruminal son los AGV, particularmente propionato y butirato. La leche, forraje y los granos que llegan al rumen y son fermentados por las bacterias residentes, contribuyen con AGV al estimulo de la mucosa. El desarrollo funcional del epitelio ruminal, es controlado principalmente por medios químicos y físicos ocasionados por la ingesta de alimento preiniciador ya que la presencia de un alimento seco y los productos de su fermentación son los factores responsables del desarrollo papilar del rumen. A diferencia las esponjas plásticas y las partículas inertes, ya que solo proveen acción mecánica y como no generan AGV finales, su actividad estimulante es nula. e. Sustrato: Los 4 puntos anteriores, bacterias, liquido, motilidad ruminal y capacidad de absorción, se desarrollan rápidamente cuando la becerra comienza a consumir alimento sólido, lo que significa que el factor primario que determina el desarrollo ruminal es el consumo de alimento sólido. Esta es la clave para lograr un desarrollo ruminal precoz. Como los granos proveen carbohidratos no estructurales que son fermentados principalmente a propionato y butirato, son la mejor alternativa para asegurar un pronto desarrollo del rumen. Por otro lado los carbohidratos estructurales de los forrajes tienden a ser fermentados hacia acetato, el cual es menos estimulante para el desarrollo de la mucosa, pero la fibra es necesaria por su contribución a mantener el pH ruminal. f. Nutrientes: Hay un cambio en los nutrientes disponibles para las becerras a medida que el rumen se desarrolla. Por ejemplo, la glucosa que inicialmente es disponible a partir de la digestión intestinal de la lactosa de la leche, con el desarrollo del rumen es reemplazada por los AGV, ahora disponibles a partir de la fermentación ruminal. Puesto que la glucosa era el principal metabolito energético, la disminución en la disponibilidad de la misma requiere de un considerable cambio en los sistemas enzimáticos del hígado, intestino, músculo, tejido adiposo y otros para adaptarse a la disminución de la glucosa como combustible e incrementar su dependencia de los AGV y de la glucosa generada por la gluconeogénesis, que como vía metabólica no era necesaria en la etapa previa. Hay una correlación directa entre estos cambios y el consumo de alimento sólido. Tabla 8. Cambios en la transición de prerumiante a rumiante prerumiante transición dieta liquida órgano principal abomaso fuente energía glucosa fuente proteína dietaria rumiante liquida + sólida sólida abomaso + rumen retículo-rumen-omaso glucosa + AGV ácidos grasos volátiles dietaria + bacterias bacterias + protozoos Consumo de alimento preiniciador: En un estudio realizado en México, referente a tres diferentes alimento preiniciadores para becerras en lactancia se observo que el alimento que se muestra en la tabla 9, con 21 % de Proteína Cruda mostró mejores resultados en relación a los otros dos con menores cantidades de Proteína Cruda. Tabla 9. Análisis Químico Inmediato: Método A.O.A.C. Materia seca % Humedad % % P.C. Extracto Etéreo % Cenizas % Fibra Cruda % Extracto libre de N % T.N.D. % E.D. Kcal/Kg (aprox.) E.M. Kcal/Kg (aprox.) Proteína verdadera % Calcio % Fósforo B.H. 90.94 9.06 19.17 5.20 5.80 2.57 58.20 78.58 3464.47 2840.57 BASE 90 90.00 10.00 18.97 5.15 5.74 2.55 57.60 77.76 3428.63 2811.18 BASE 100 100.00 0.00 21.08 5.72 6.38 2.83 64.00 86.40 3809.58 3123.53 18.08 2.16 0.57 Las becerras de este grupo consumieron una mayor cantidad de alimento 35517 g, fueron seguidas por las del grupo 2 que consumieron 27754 g y finalmente por las del grupo tres que consumieron 22968 g, existiendo diferencia entre los consumos voluntarios de los tres grupos del experimento (P=0.001). Cuando se consideró el consumo de alimento preiniciador en forma quincenal se pudo observar que el alimento ofrecido al grupo 1 fue también el que se consumió en mayor cantidad, mostrándose aumentos significativos (p<0.05) a partir del día 30 del experimento, el incremento en el consumo del grupo 1 fue mayor en todas las mediciones excepto en los primeros treinta días. El consumo diario de alimento de las becerras de los tres grupos se inició a partir del día 2, observándose que las becerras del grupo 1 y grupo 2 fueron aquellas que tuvieron un mayor consumo diario desde el día 4, alcanzando promedios diarios de 40 gramos en los primeros días. Los consumos de las becerras de los grupos 1 y 2 rebasaron los 1000 g de consumo al final del experimento, aunque las becerras del grupo 1 alcanzaron promedios superiores a los 1400 g. En relación a los resultados anteriores se puede comentar que por lo general la becerra recién nacida no consume alimento seco de inmediato. Algunos productores no ofrecen concentrado preiniciador sino hasta que la becerra tiene varias semanas de edad. Sin embargo, se debe recordar que el desarrollo del rumen no se inicia hasta que el alimento seco es introducido en la dieta, por lo que es muy importante ofrecer este concentrado aunque sea consumido en pequeñas cantidades. Es muy importante también que el alimento preiniciador contenga carbohidratos rápidamente fermentables debido a que los productos de su degradación ruminal, especialmente propionato y butirato, estimulan el crecimiento de las papilas. El alimento seco debe proveer suficiente volumen para estimular un incremento en la capacidad del rumen, en proporción al peso vivo, en becerros alimentados solo con leche hasta la 12ª semana de edad algunos investigadores observaron que las papilas del rumen no se desarrollaron adecuadamente. La cantidad de fibra que contenga el alimento preiniciador es muy importante. Desarrollos anormales de las papilas han sido observados cuando el concentrado carece de fibra o cuando la fibra ha sido molida finamente. El consumo de agua a libre acceso puede mejorar el consumo de concentrado preiniciador, ya que las bacterias ruminales deben vivir en un medio acuoso para fermentar el sustrato; además de que este consumo libre de agua puede reducir la incidencia de diarreas y aumentar la ganancia diaria de peso. Las becerras del grupo 1 alcanzaron un consumo voluntario promedio al día de 700 gramos, cantidad recomendada para realizar el destete, según varios autores, aproximadamente a los 37 días de la lactancia, situación que les favorece mucho si se considera que las becerras del grupo 2 y grupo 3 alcanzan los mismos 700 gramos de consumo promedio diario aproximadamente a los 42 y 51 días, respectivamente. Por lo anterior se evidencia que los alimentos texturizados son la mejor opción para asegurar el desarrollo precoz del rumen, debido a que los granos tratados proporcionan carbohidratos que se fermentan mas rápido para producir propionato y butirato. Cuando se evaluó la ganancia diaria de peso promedio de las becerras, se observó que los animales pertenecientes al grupo 1 tuvieron mejores ganancia diarias de peso en promedio que las de los otros dos grupos; las del grupo 2, a su vez, también obtuvieron mejores ganancias que las becerras del grupo 3, encontrándose que los grupos 1 y 2 no tuvieron diferencias, pero estos si presentaron diferencia con el grupo 3 (p<0.05). Las ganancias diarias de peso de las becerras del grupo 1 lograron promedios parecidos a los recomendados por varios autores, al igual que los obtenidos por las becerras del grupo 2, que se consideran aún como recomendables, no así las ganancias obtenidas por las becerras del grupo 3, que se consideraron por debajo de lo deseable desde el punto de vista de un desarrollo adecuado de las becerras de la raza Holstein-Friesian. Consideramos que estos incrementos en las ganancias diarias de peso de las becerras de los grupos 1 y 2 en relación a las del grupo 3, se pueden deber a que las primeras lograron obtener un mejor desarrollo de las papilas ruminales y del funcionamiento del rumen en general, debido a que sus consumos fueron también mayores y en forma mas temprana. Si dividimos la ganancias diarias de peso de las becerras de los 3 grupos, en forma quincenal, considerando los registros obtenidos, podemos observar que las ganancias diarias de peso de las becerras del grupo 1 fueron también mejores a partir del día 30, tiempo después del cual se observa un despegue en relación a los otros dos grupos hasta el día 60, sin incluirse diferencias (p>0.05) durante ese tiempo entre los tres grupos. El nivel de proteína cruda que contienen los concentrados preiniciadores, fue de suma importancia, ya que se ha observado que conforme aumenta la inclusión de esta en el alimento, la ganancia diaria de peso también aumenta, situación que se refleja en los resultados de este experimento si consideramos los análisis químicos proximales de los diferentes alimentos preiniciadores. Peso de las becerras: Al evaluar el peso de las becerras durante el desarrollo del experimento, se observó que el peso de las mismas fue en promedio al momento del nacimiento de 35.2 kg y a los 60 días, momento del destete, 58.58 kg, lográndose observar que no existen diferencias de peso entre las becerras de los 3 grupos durante casi todas las mediciones, excepto en las mediciones entre los 45 y 60 días, donde se observa una diferencia importante entre las de los grupos 1 y 2 y las del grupo 3 (p<0.05). Talla de las becerras: Cuando se evaluó el crecimiento de las becerras se encontró que la altura a la cruz al momento del nacimiento fue en promedio de 74.2 cm y que al final del experimento, a los 60 días de edad, fue de 83.6 cm; no se encontró diferencia en la estatura al momento del nacimiento (P>0.05) y conforme avanzaban en edad las becerras, se observó que las becerras del grupo 1 fueron las que tuvieron mayores aumentos en talla que los otros dos grupos de becerras involucradas en el experimento, sobre todo a partir del día 30 del experimento sin existir diferencias estadísticas (p>0.05). Cuando se calculó el crecimiento diario de las becerras en promedio, se observó que las becerras del grupo 1 tuvieron crecimientos superiores que los otros dos grupos, encontrándose diferencias considerables (P<0.001) para este parámetro entre el grupo 1 y los otros dos grupos de becerras. Esta situación resulta de gran interés ya que las becerras que recibieron el alimento concentrado número 1 tuvieron un crecimiento de 2 mm diarios mayor que las becerras de los otros dos grupo, lo que indica que hay indicios de que estas becerras serán de mayor talla si durante las demás etapas del desarrollo son alimentadas adecuadamente, pudiendo alcanzar quizás pesos y tamaños mayores para el momento de la inseminación artificial, logrando con esto ventajas importantes en la futura vida productiva de estas vaquillas. Recomendaciones para incrementar el consumo de concentrado: 9 Se considera que el alimento concentrado debe estar disponible a libre acceso tan pronto como sea posible después del nacimiento permitiendo que las becerras consuman la cantidad que deseen. Para que las becerras logren el consumo máximo de este alimento preiniciador, entonces se debe procurar ofrecer pequeñas cantidades, durante el día, asegurándose que siempre exista concentrado fresco y limpio disponible. 9 Las becerras consumen mejor los alimentos preiniciadores que son preparados en partículas de tamaño grueso o bien que sean peletizados, los granos rolados son preferidos a los alimentos molidos, ya que las becerras mastican mejor estos alimentos que los animales adultos. 9 Dado que el alimento tiene poca humedad, es normal que el animal ingiera mayor cantidad de agua luego del destete, por lo que debe asegurarse que disponga de agua limpia y fresca en todo momento. El destete Uno de los mayores misterios en la crianza de becerras consiste en determinar cuando están listas las becerras para ser destetadas. El criterio que debe ser satisfecho antes del destete es alcanzar un desarrollo del rumen adecuado. Cuando se retira el alimento liquido a la becerra, debe de ser capaz de obtener suficientes nutrientes del alimento sólido después del destete. Muchos de estos nutrientes se obtienen por medio de la fermentación ruminal, así que el rumen debe estar en buenas condiciones antes de que la becerra pueda ser destetada. La mayoría de las becerras tienen un adecuado desarrollo del rumen a las cuatro semanas de edad, y podrían ser destetadas a esa edad. Las becerras normalmente requieren de un par de semanas para empezar a comer cantidades significativas del alimento iniciador. Consecuentemente, toma por lo menos dos semanas para que las becerras coman suficiente iniciador para desarrollar el rumen suficientemente para que puedan ser destetadas. Si hay alguna interrupción en el consumo del iniciador, el desarrollo del rumen pueda atrasarse y la becerra podría no estar lista para el destete. ¿Cuánto alimento iniciador debe consumir una becerra para estar lista para el destete? La recomendación es: cuando una becerra Holstein esté consumiendo 1Kg de iniciador por día, por dos días consecutivos, entonces estará lista para ser destetada. Otras recomendaciones incluyen 700 gr/dia, por dos días y 1.4 Kg/dia por dos días. Las becerras Jersey son un poco diferentes, están listas para ser destetadas cuando consuman 450 gr/día, lo que ocurre normalmente a las cinco semanas de edad. Figura 3 Estimación de consumo de alimento iniciador por becerras Holstein. Bibliografía: http:// www.calfnotes.com. http://www.agricultural-management.com/becerras.html Linn J. Nutrición de la vaquilla en crecimiento. Holstein1996; 4: 26-27. Martínez A. Las vaquillas empiezan a los 12 meses, antes son becerras. Hoard′s Dairyman Magazine 1995; 161. Marin J. Sustitutos de la leche en la alimentación de terneras de reemplazo. Holstein 1992; 3(23): 17. Medina CM. Medicina productiva en la crianza de becerras lecheras. México: Uthea, 1994. Naylor J, Ralston S. Large animal clinical nutrition. 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