El Desempeño profesional de la Orientación desde una Visión de Intervención Interactiva Dra (Ed.) Alida Malpica. Dpto. Orientación. Facultad de Ciencias de la Educación Universidad de Carabobo. Venezuela. Email: alidamalpica@hotmail.com 1. RESUMEN El presente trabajo tuvo como propósito proponer el desempeño profesional de la Orientación desde una visión de intervención interactiva, el mismo surge como respuestas a los cambios generados con las políticas educativas venezolanas en la Educación a partir de 1999, entre las que se mencionan: la revolución tecnológica y científica, el currículo y los nuevos retos del quehacer del profesional de la Orientación los cuales se convierten en aspectos de interés para realizar esta investigación. Usando la complementariedad metodológica, se utilizó la investigación documental, la exploratoria y la investigación acción, donde a través de los aspectos relevantes del Ser, el Deber Ser y el Quehacer surgieron tres elementos estructurales: la pertinencia, la acción y la operatividad, que sirvieron de soporte para consolidar la visión del desempeño profesional de la Orientación. Los resultados permitieron diseñar desde la praxis orientadora e intervención interactiva para la Orientación Venezolana, específicamente en la primaria, un desempeño profesional del orientador donde participe toda la comunidad escolar, se ofrezcan ambientes gratos y placenteros a través de la interacción permanente, la reflexión constante para intervenir todo tipo de situaciones personales, académicas, vocacionales, laborales, comunitarias y así hacer de la escuela un lugar para aprender a aprender. 2. INTRODUCCIÓN Los comienzos de la práctica profesional de la Orientación en Venezuela fue concebido de manera sistemática desde los años sesenta según Calonge (1988), estuvo determinada por la influencia europea, expresada en planes y programas tomados del modelo de Orientación norteamericano, con énfasis en lo remedial. En los años siguientes, sobre los principios del humanismo se introduce el término asesoramiento; en este sentido, el orientador pasa a ser un asesor-consultor y cumple funciones de agente motivador de cambios para la comunidad, a través de los adultos significantes (docentes, padres y representantes y alumnos). Durante los años 80, el asesoramiento psicológico llega a la educación con una concepción más amplia en su aplicación como es el bienestar humano con énfasis en lo acción preventiva y de desarrollo. Al respecto, Casado (1987), acota con respecto al asesoramiento refiere su tendencia cuando expresa: “sustituir el énfasis de la atención remedial por el preventivo y de desarrollo, ”pasar del individuo al colectivo” y “sustituir la función de especialista que atiende casos por la de asesor o consultor” (p.72). En ese mismo orden de ideas, Williams (1988), expresa que el modelo de asesoramiento sugiere la actuación del orientador como “asesor comunitario y cuya función sea agente promotor de crecimiento y de cambio; a la vez que actúe dentro de un esquema ecológico multidisciplinario” (p.7). Diez años después de este surgimiento, es cuando se establece un programa para cumplir con las funciones de prevención y desarrollo el Programa Nacional de Orientación (1993) concebido por el Ministerio de Educación. Bajo estas mismas premisas, el modelo de intervención adoptado para esos momentos en Venezuela fue el modelo de programa, propuesto para ser ejecutado a nivel nacional a partir del año 1993. El mismo fue emanado por la Oficina de Asuntos Socio-Educativos del Ministerio de Educación –OASEME-, organismo responsable de operacionalizar las políticas y acciones en materia de orientación. También Vital (2000), da sus aportes refiriéndose al otorgamiento del rol que se le da al orientador en ese ámbito de acción una triple connotación: consultor- asesorinvestigador. Asimismo en el Código de Etica del profesional de la Orientación (2001), establece los roles según las áreas y contextos para el ejercicio profesional del orientador estos son: Mediador(a), Asesor(a), Promotor(a) o Interventor(a), Consultor(a), Planificador(a), Investigador(a) y Otros. En la actualidad el Sistema Nacional de Orientación aprobado en 2009, responde directamente a las necesidades y requerimientos del desarrollo del Ser y del Convivir en concordancia con el Conocer, Hacer y Servir, demandadas en nuestra sociedad bolivariana contemporánea en construcción. Se sustenta en un conjunto de fundamentos que soportan la acción educadora de la orientación mediante su praxis social y desde los cuales se derivan los indicadores que permiten identificar el retorno de los logros planteados en las finalidades del Sistema. El Sistema Nacional de Orientación, asume los retos del apoyo de los procesos de formación del ciudadano caracterizado por valores propios del humanismo, solidaridad, participación protagónica, co-responsabilidad, sentimiento de pertenencia, sentido de patria y una profunda convicción ecológica. El Sistema Nacional de Orientación regula, organiza, promueve, integra y fortalece el desarrollo de programas, planes y servicios de orientación, que ya existen en forma desarticulada y dispersas en diversas instituciones y comunidades en los ámbitos local, regional y nacional, y creando aquellos que se estimen como necesarios. Lo expresado en los párrafos anteriores sobre la práctica orientadora, nos presenta un panorama en cuanto a la exigencia en el desempeño profesional de la Orientación desde una visión más amplia y dinámica por lo que se hace necesario proponer el desempeño profesional en la Orientación desde la intervención interactiva; para la misma se toma en cuenta la labor de la Orientación a partir de los años 80 por varias razones específicas: 1) Por ser una época al parecer de muchos cambios significativos para la Educación y la Orientación en Venezuela; se promulga la creación de la Ley Orgánica de Educación y la institucionalización de Educación Básica, además de los cambios curriculares producto de las nuevas políticas educativas 2) por los cambios en la acción de la Orientación que se evidenciaron con la aparición del asesoramiento en la educación como un enfoque preventivo y de desarrollo y 3) por las experiencias vividas desde el año 1979 por la autora de este trabajo, como docente y orientadora de los cambios que se han implementado en el sistema educativo, desempeñándose en los niveles de Educación Básica (primaria) y en Media Diversificada y Profesional. 3. METODOLOGIA A través de la investigación documental, exploratoria y la investigación acción se presentan los Puntos de Encuentro, extraídos de los Documentos Oficiales y No Oficiales, los eventos científicos, los eventos académicos y la práctica orientadora revisados; revelan aspectos importantes a tomar en cuenta del Ser, el Deber Ser y el Quehacer de la Orientación manifestados en la formación integral del educando, la familia y la comunidad; la atención de la Orientación dirigida a todo lo que va unido al educando y su contexto; la acción de orientar no es solamente responsabilidad del orientador sino que es compartida con todos los entes de la comunidad escolar. Por otro lado, se resalta que esa acción, debe estar dirigida hacia la prevención y la intervención; esto impone al orientador tomar las medidas precisas para que se pueda prever situaciones problemáticas. También se destaca el hecho educativo hacia un proceso interactivo – constructivo, traducido en una acción reciproca que se ejerce y lo que sirve par construir nuevos conocimientos y la creación de servicios de Orientación. Con estas aseveraciones, la atención se hace presente para todos los miembros, la responsabilidad se asume en conjunto y se abren nuevos espacios para la Orientación. Del resultado de esta revisión surgieron ciertas dimensiones acotadas a continuación: El Significado del Desempeño Profesional El valor especial para la Orientación va dirigido a revisar la práctica orientadora, rescatar la actividad profesional, considerar nuevos lineamientos para redimensionar el proceso orientador, desarrollo de planes y programas, incrementar los servicios de orientación; por otra parte, revisar los modelos de orientación; dar respuestas a los cambios y percepciones de la Orientación, redefinir la conceptualización de la práctica de la orientación hacia una relación de acompañamiento y no como relación de ayuda, crear nuevos escenarios para la interacción interdisciplinaria y transdisciplinaria y por último la formación del orientador. La Intervención en la práctica del Orientador El término intervención se refiere a tomar parte en el asunto, mediar o interceder: Se ha usado como tratamiento terapéutico de casos problemas, de aprendizaje y de adaptación. En ese sentido, Maher y Zins (1989), indican que en los últimos años se ha usado en un sentido más bien preventivo. La intervención está reflejada al tomar parte en el hecho educativo; en cuanto a la mediación o intercepción de situaciones que dirige en su ejercicio profesional. Esta intervención está representada en el modelo teórico que el orientador utiliza para llevar a cabo la su labor, las acciones y las estrategias. Al revisar las acciones, estas son preventivas y de asesoramiento, lo que significa que el orientador sigue los lineamientos del Programa de Orientación y las Políticas de Protección y Desarrollo Estudiantil. Las estrategias manejadas corresponden a la entrevista, dinámicas de grupo, talleres, charlas y videos. Estrategias interactivas El uso de estrategias interactivas se presentó como una debilidad en los orientadores en servicio lo que se infiere en existe una insuficiencia de estrategias dinámicas, activas para ofrecer un entorno grato y placentero, donde interactúen todos los actores involucrados en el proceso de Orientación. Requieren, adicionalmente de estrategias interactivas, donde exista un flujo continuo de información, aprendizaje en la relación entre los alumnos, los medios, los recursos y el entorno. En tal sentido, el Orientador requiere formarse para la producción de proyectos interactivos en áreas de orientación; crear nuevas herramientas de trabajo para ampliar la cobertura de la labor orientadora y darle interactividad al proceso. Situación actual de la Orientación en el desempeño profesional Se observa que la Orientación sigue con un basamento en sus acciones el modelo humanista, éstas son conducidas hacia la prevención y asesoramiento; en ese sentido siguen los lineamientos del Programa de Orientación y de las Políticas de Protección y Desarrollo Estudiantil. Por otro lado, adolecen de equipos interdisciplinarios y es muy poca la incorporación que tienen los docentes, padres y representantes al proceso. Asimismo se obtuvo como dato que los orientadores siguen centrados en la escuela con poca proyección hacia la comunidad, su distrito escolar y su país. Todos estos aspectos acotados, indican con urgencia, la necesidad de incorporar elementos interactivos en la acción de la praxis orientadora para que el desempeño profesional esté acorde con las nuevas realidades sociales de la sociedad del siglo XXI y en atención a las nuevas exigencias del sistema educativo venezolano. La interactividad en el Proceso de Orientación La aplicación de los diseños de Elliott (1993 y 1996) y Schön (1992), en la investigación acción adquirieron un valor preponderante en la experiencia de campo asumida en esta investigación, éstos diseños involucraron una serie de actividades que se realizaron a lo largo del curso de acción; haciéndose presente lo interactivo durante el desarrollo de los proyectos de acción. Las actividades realizadas involucraron a toda la comunidad escolar en una forma activa y dinámica, interactuando todos los actores en el proceso. Al respecto Carey (1992), expresa: lo interactivo constituye un modelo de enseñanza que contempla a los participantes activos en el proceso de aprendizaje. Para Moore (1993), cualquier programa debe buscar la consecución de la interactividad de tres manera: entre el alumno y los contenidos (información), entre el alumno y el profesor (apoyo y motivación) e interacción entre los propios alumnos (comprensión del contenido). En ese orden de ideas, Calderón (2001) ubica dos formas de interactividad: una personal donde el estudiante asume una postura activa, de compromiso, de autonomía y la otra se refiere a lo social cuando aprende a reconocer en los demás compañeros, construye un equipo, reflexiona, creando un ambiente favorable para el trabajo efectivo. La interactividad esta contemplada como una acción recíproca, donde todos los canales permanecen abiertos para la acción; la interactividad en la Orientación está sujeta a una serie de elementos estructurales que sirven de sustentación y orden para su aplicación; entre los que se mencionan a) la multidireccionalidad, la cual se refiere a la relación constante con el otro y con el contexto, a través de una amplia gama de mediadores tales como profesores, padres, comunidad, compañeros, contenidos de enseñanza y contexto; b) la no linealidad expresada en lo abierto y libre de presiones; c) lo interactivo, en la exigencia de una actitud activa constante de reflexión en la acción, en cuanto a pensar en lo que se hace mientras se está haciendo y d) la flexibilidad, la disposición que tiene para acomodarse o adaptarse a otros, a diversas situaciones y ambientes. Resultados Los elementos que surgieron representados en los párrafos anteriores precisan las conexiones entre las ideas que consideramos imprescindibles en el desempeño profesional para la Orientación, el centro de este desempeño es la interactividad, aspecto que involucra todos los actores. Desde la praxis orientadora, estar interactuando toda la comunidad escolar de manera activa demuestra el compromiso que adquiere la labor profesional y el sentido de pertinencia social. Asimismo, la interactividad también permite la autonomía en las instituciones, para que éstas puedan tener libertad en sus actuaciones y se establezca la acción – reflexión, de todos los acontecimientos de la vida de la institución. Esa interacción requiere de la formación de equipos interdisciplinarios, que permitan la participación de otros especialistas que sirven de apoyo al proceso de Orientación y viceversa, y de esta manera se lograría el enriquecimiento de la labor orientadora con fuerza activa y socialmente comprometida. Por otro lado, cobra valor el rol del orientador en esta nueva visión del desempeño, ya que el papel protagónico que reclama este dinamismo exige desarrollar competencias directiva, de talento humano, organizacionales, de coordinación, tecnológicas e investigativas; para hacerle frente a las nuevas realidades que en educación se vislumbran. Igualmente la acción tiene que ser conducida hacia la prevención e intervención, para mediar o interceder en los asuntos educativos, de aprendizaje concernientes a cualquier contexto o área de la Orientación. Asimismo, la proyección recobra espacio para el justo reconocimiento del ejercicio profesional, dando a conocer su trabajo en todas las instancias; para ello requiere de actualización constante, con la participación en eventos académicos y científicos; que permitan una praxis orientadora al día con los avances científicos y tecnológicos que emergen en los nuevos tiempos. De la misma manera, la incorporación de los padres y representantes y la comunidad en general a la escuela, requiere de una integración donde se ejerza un binomio constante y sirva de poder transformador para convertir la institución en verdaderos espacios para la reflexión y de aprendizaje interactivo. Por ello, se hace necesario la incorporación como herramienta de trabajo los proyectos de Orientación constituidos en cursos de acción para ampliar la cobertura de la atención orientadora, incorporar a los directivos, docentes, a los padres y a los alumnos al proceso, facilitar el seguimiento de los alumnos/as, fortalecer las relaciones interpersonales, desarrollar competencias en los educandos y convertirse en un apoyo institucional para solventar las situaciones de índole personal, social, familiar que se presentan en la institución. A continuación se mencionan en detalle una serie de aspectos que son asumidos para llevar a cabo la propuesta para el desempeño profesional y vinculadas a los siguientes términos: Por qué?, Para qué; quién, cómo, áreas involucradas, cuándo, con cuáles, cuánto y dónde. ¿Por qué se realiza? Porque se quiere mejorar la práctica orientadora, específicamente en el nivel de la primaria (primero a sexto grado), de una manera reflexiva, consciente e interactiva. ¿Para que se realiza? Para que la orientación llegue a todos los ámbitos, se ofrezca un ambiente escolar agradable para el aprendizaje, con estrategias innovadoras, libre de presiones, donde se acciones constantemente, participe toda la comunidad escolar en el proceso orientador y así contribuir con el desarrollo integral del individuo como lo establecen las políticas educativas en el país. ¿Quién la realiza? El orientador conjuntamente con el equipo interdisciplinario de la institución (directivos, docentes, especialistas, padres, personal administrativo y obrero, alumnos, comunidad) ¿Cómo se realiza? Se establece tomando en cuenta los siguientes elementos para construirlo: la multidimensionalidad del proceso, la no linealidad, la interactividad, los ejes transversales del currículo, los ejes integradores de la acción orientadora, las competencias que se quieren desarrollar en los alumnos, la reflexión en la acción y la intervención por proyectos. ¿Areas involucradas en el desarrollo? Todas las áreas mencionadas: académica, personal –familiar-social, comunitaria, vocacional, laboral y recreativa. ¿Cuánto invertir? La inversión tiene que ver con la previsión del presupuesto de financiamiento y las vías para obtener los recursos económicos necesarios a través de aportes de instituciones gubernamentales y actividades que permitan obtener recursos propios. ¿Con cuáles recursos se cuenta? A) Recursos humanos: docentes, padres, alumnos, personal administrativo y obrero, directivos, fuerzas vivas de la comunidad, instituciones gubernamentales y no gubernamentales, alcaldías, asociaciones de vecinos, sociedad de padres y representantes, asociación civil, etc. B) Recursos materiales: con todo lo que posea la institución para desarrollar los proyectos de orientación, las estrategias, las técnicas y el producto de la autogestión. ¿Cuándo se realiza? Durante todo el año escolar, por lapsos, períodos, según las prioridades reflejadas en el plan estratégico manejado en la escuela. ¿Dónde se realiza? En todos los ambientes de la escuela, actividades al aire libre, en el aula, fuera de la escuela, en otras instituciones. Conclusiones A pesar que existe una variedad de estrategias, las acciones se centran en el asesoramiento y en la prevención; no revelan interactividad, ni la intervención por proyectos. Se reporta una necesidad de incorporar equipos interdisciplinarios, mayor integración y participación de la comunidad escolar a los programas de Orientación, una gran inquietud por obtener programas o guías a seguir para intervenir en la Educación Básica. Atendiendo a lo expresado por los autores, la interactividad se convierte en un requisito indispensable para hacer Orientación autónoma, libre, innovadora y reflexiva, humano, dominio comunicacional, tecnológico, liderazgo organizacional, de coordinación e investigación. Asimismo, el orientador debe dirigir su acción hacia la prevención e intervención, utilizando estrategias interactivas; proyectarse en todos sus formas y direcciones en el plantel educativo, en la comunidad, en su estado, representar a su país nacional e internacionalmente para dar cuenta de su trabajo y producción; actualizarse en los últimos avances científicos y tecnológicos para que el orientador demuestre su pertinencia dentro de la estructura educativa. El resultado de conectar el poder transformador, la acción reflexión y el apoyo institucional dio origen a lo que debe ser la praxis orientadora, la cual se establece como una actuación nueva, producto del pensar consciente; diferenciándola de la práctica que es el quehacer diario, repetitivo, automático sin reflexión previa. La propuesta del desempeño contiene en detalle una serie de aspectos que son asumidos para llevarla a cabo vinculadas a los siguientes términos: Por qué?, Para qué; quién, cómo, áreas involucradas, cuándo, con cuáles, cuánto y dónde. 4. REFERENCIAS - Calderón, R. (2001). La Interactividad en el Aprendizaje. Disponible en http://www.eltercertiempo.net/articulos/ne-0007.htm (Consulta: 2001, Noviembre 03). - Calonge, S. (1988). Tendencias de la Orientación en Venezuela. Cuadernos de Educación, 135, (2da, ed.). Caracas: Cooperativa Laboratorio Educativo. - Casado, E. (1998). Una Visión Psicosocial Alternativa para la Orientación Educativa. Revista de Pedagogía, XIX (54), 7-20. - Código de Ética del Profesional Orientación. (2001, Junio), Asamblea Nacional de Orientadores, XXI Encuentro Nacional. Portuguesa. - Corey, S. (1953). Action research to improve school practices. Nueva Cork: Columbia University. - Elliott, J. (1993). El cambio educativo desde la investigación – acción. Madrid: Morata. - Elliott, J. (1996). El Cambio Educativo desde la Investigación - Acción. Edic. (2) Madrid: Morata. - Ley Orgánica de Educación (1980). Gaceta Oficial de la República de Venezuela, 2.635 (Extraordinario), Julio 28, 1980. - Ministerio de Educación, Cultura y Deportes. (1993). División de Bienestar Estudiantil. Programa Nacional de Orientación. Caracas. - Ministerio de Educación, Cultura BásicaNacional. Caracas: UCEP. - Ministerio del Poder Popular para la Educación (2009). Proyecto Sistema Nacional de Orientación. Caracas. Venezuela. - Moore, M.G (1993) Three types of interaction. Revista RED, (12), 8-10. Consulta: 2004, Julio 25. - Schon, D. (1992). La Formación de Profesionales Reflexivos: Temas de Educación. España: Paidós. - Vital, F.(1998). Vigencia de la Orientación en el Sistema Educativo Venezolano: Su Contribución al Cambio en Organizaciones Educativas. Revista de Pedagogía, Vol. XIX, (54), Escuela Educación, U.C.V. y Deportes. (1997). Currículo