LA ETICA Los diccionarios definen la à tica como el estudio de la moral y la virtud; y la moral como la conducta de acuerdo a normas de lo correcto y el buen vivir; y estas normas a su vez serÃ−an los medios de orden social conocidos de manera generalizada como los “diez mandamientos”; y para una gran mayorÃ−a, solo les interesa conocer hasta aquÃ−. La à tica es una sub-rama de la FilosofÃ−a, y para entender su sentido filosófico hay que explicar primero a esta última. La FilosofÃ−a es la actividad que intenta comprender a través de preguntas y argumentos, el Universo y el sentido de su existencia, su principal rama de estudio es la MetafÃ−sica (mas allá de la FÃ−sica), la cual se hace preguntas que trascienden a la realidad y sus leyes, tales como: ¿Qué?, ¿Quién? y ¿Por qué?. Como consecuencia de la misma se deriva la OntologÃ−a, la cual estudia lo que es y lo que no es, la realidad y sus leyes, elaborando preguntas: ¿Cómo?, ¿Cuándo?, ¿Dónde?. De la OntologÃ−a deriva la Lógica, la cual estudia como se piensa la realidad, y esta a su vez produce tres sub-categorÃ−as que son la racional Dialéctica (o leyes constitucionales del Universo), la extremadamente abstracta Matemáticas, y la emocional y perceptiva Estética. De la Dialéctica deriva la EpistemologÃ−a, que trata sobre los métodos para alcanzar el conocimiento de la realidad; y de esta última llegamos a la Ciencia (o leyes adjetivas del Universo). Competidoras de la FilosofÃ−a son: el Esoterismo, que estudia lo que aparenta ser; la MitologÃ−a, que estudia lo imaginario o lo que está dentro del campo de la fantasÃ−a; y la TeologÃ−a, que estudia lo divino, y se mueve en un umbral que va desde la MetafÃ−sica a la MitologÃ−a. Si el fin ontológico de la FilosofÃ−a es la Ciencia; en ese mismo sentido del Esoterismo alcanzamos la Pseudociencia, y de la MitologÃ−a, la Religión. La à tica, con una mezcla de metafÃ−sica y ontologÃ−a, se encarga de la pregunta ¿Para que?, o las posibles intenciones del “Creador”. Como la MetafÃ−sica, más que de la mente, es una actividad de la consciencia, y por ende los animales no humanos no la manifiestan sino de manera instintiva; el fin ético primario del animal como ente viviente es sobrevivir (Ley de la Supervivencia o máxima ley biológica), y la expresión humana de esta ética instintiva seria “el fin justifica los medios”. El primer paso ético en la escalera humana para superar la animalidad es la à tica Teleológica; ésta nos plantea que los fines deben ser éticos, pero no pone mucha objeción en los medios. Aunque una ética todavÃ−a pasional, es un avance sobre el instinto animal, y es el nivel ético general que mÃ−nimamente alcanza un hombre obligado a socializar. El siguiente paso ético humano lo constituyó la à tica Deontológica; ésta nos dice que para que un fin sea ético, los medios para conseguirlo también deben serlo. Los “diez mandamientos” de la cultura-religión judaica son uno de los primeros planteamientos de ética deontológica, y un triunfo de la mente humana sobre las pasiones. Luego vendrÃ−a un tal Jesús a promover el próximo gran paso ético; éste nos dice que no basta con que los fines y los medios para alcanzarlos sean éticos, sino que la intención, impulso o voluntad también debÃ−a serlo; y al liberar de toda duda e hipocresÃ−a al acto ético, constituyó un triunfo de la consciencia por sobre la mente. Jesús no solo hace uso de la Dialéctica para fundir los “diez mandamientos” en tan solo dos: uno basado en la ley de “lucha de opuestos” (Ama a tu enemigo), y otro basado en la ley “de la cantidad a la cualidad” (Ama al Creador sobre toda la Creación); sino que también sugirió en el Autosacrificio (con gran énfasis demostrativo), la solución a todos los dilemas éticos que la ley de supervivencia produce (tamaña sugerencia). El Amor, planteado como el máximo valor ético 1 cristiano, es la fusión del Respeto como actividad de la consciencia, la Admiración como una actividad emocional de la mente, y el Deseo como una actividad del instinto animal (amar = desear + admirar + respetar). La à tica vista a través de la OntologÃ−a y otras ramas realistas de la FilosofÃ−a, encierra dos principios básicos: la JUSTICIA (basada en la ley dialéctica de causa y efecto, o de “lucha de opuestos”), que no es más que dar a cada quien lo que merece y le toca. Secundaria de ésta tenemos la EFICIENCIA, que no es más que justicia material, de espacio y tiempo. El otro principio básico es la CALIDAD (basada en la ley dialéctica “de la cantidad a la cualidad”), que no es más que dar a cada quien lo mejor. Y secundaria de ésta tenemos la NEGENTROPIA u ORGANIZACIà N, que no es más que todo lo contrario a entropÃ−a, caos, desorden, dispersión, pérdida, desinformación, inequidad, indisciplina, fraude, perversión, aberración, derrota, destrucción, muerte. Dar a cada quien lo que le toca…. lo mejor…… el amor. 2