28. Venezuela, el Talón de Aquiles del Imperio El Capitalismo Mundial es un inmenso proceso histórico, que evolucionó y se desarrolló a través de los milenios en espacios bien definidos y en tiempos muy específicos en el planeta Tierra. La acumulación de capital hacia un modo de producción predominantemente industrial y tecnológico ocurrió en un hábitat natural y en un marco social científicamente bien identificable. Con sus raíces en otras regiones, su existencia comenzó en Europa. Progresivamente salió de Europa y se globalizó como Revolución Francesa, para cambiar más adelante y de manera radical a todos los modos de producción anteriores a nivel mundial y también a sus bases energéticas, especialmente sus relaciones y medios de producción económicos, políticos, militares, morales y sociales (para refrescar la memoria véase: Marx y Engels, "El Manifiesto Comunista" y "El Capital"). Varios científicos y filósofos como John Stuart Mill, Adam Smith, David Ricardo, Thomas Malthus, Charles Darwin, Galileo Galilei, Isaac Newton, Rosa Luxemburgo, Lenin, Ernst Bloch, Kwame Nkrumah, y pensadores como Eduardo Galeano, André Gunder Frank, Heinz Dieterich, entre otros han estudiado y criticado al capitalismo y al imperialismo en su verdadero contexto histórico, como fue generado por parte de los países metropolitanos y diseminado alrededor del globo. No hace falta que uno sea un "marxista", "socialista", "comunista" o "terrorista" para estudiar científica y filosóficamente al capitalismo. Esto no tiene nada que ver con los pensadores o el pensamiento euro centrista, más bien involucra el estudio de las 171 realidades revolucionarias y emancipatorias en su verdadero contexto continental y global. El capitalismo mundial no se originó en la Antártida, ni tampoco su verdadera negación histórica, el socialismo, fue producto por ejemplo de los conflictos sociales de los pueblos Batwa o Khoisan en el desierto Kalahari de Sudáfrica. El Socialismo o Comunismo que al fin y al cabo son prácticamente dos conceptos sinónimos, se utilizan a nivel teórico pala indicar la Negación interna dialéctica dentro del proceso de producción capitalista global, dentro de nuestro actual sistema mundial. Estos conceptos no piensan por nosotros y tampoco son paja ideológica inventada por casualidad y utilizada por Reuters como arma en la guerra de información. Como términos, simplemente son palabras filosóficas y herramientas todavía muy ineficientes para el pensar o para el lenguaje, que connotan procesos reales en desarrollo dentro de la historia mundial. Lo mismo vale para los conceptos de revolución y contrarrevolución que son aproximaciones intelectuales a realidades concretas y a verdades globales. En pocas palabras, nosotros mismos hacemos el socialismo, lo pensamos y lo superamos de, por y para nosotros mismos. Cual palabra o cuál término usamos o aplicamos, inventamos o reinventamos en la actualidad, es de menor importancia, así que podríamos llamar al Socialismo "Ujamaa", "democracia revolucionaria", "Estalinismo", "Marxismo", "Bolchevismo", "terrorismo", "democracia dictatorial", "desarrollo endógeno" o incluso "Chavismo". El asunto es que el socialismo es la negación dialéctica de un verdadero y definido proceso mundial y de un sistema, que en todas partes refleja varias formas de una apariencia explotadora y dominadora, que siempre son apariencias de una misma cosa, del capitalismo. Su nexo global es el dinero, son las relaciones de dinero, las relaciones de cosas y la alienación. Esto es lo que la Revolución Bolivariana como socialismo tiene que negar: el capitalismo en Venezuela, América Latina e incluso en el Universo. Esto vincula a los esfuerzos emancipatorios transhistóricos internacionales de todos nuestros héroes revolucionarios, como 17? Bolívar, Ché, Lumumba, Fanon, Tito, Ho Chi Minh, etc. El Socialismo es el 'toque de diana' global para las masas empobrecidas del planeta, que están con el Presidente Chávez. Esto es el Socialismo Mundial, Nuestro Socialismo, que está relacionado íntimamente con la Revolución Bolivariana. Como sugiere Carlos Herrera correctamente: "Por ahora sólo la llamamos la Revolución Bolivariana. Dejémoslo así". (http://www. vheadline.com/readnews.asp?id=26428). En su comentario, Carlos Herrera explica y resalta los elementos de la Revolución Bolivariana, del socialismo y del nacionalismo. Él comenta: "... aunque Chávez siempre habla del anti-capitalismo, parece que el sector privado seguirá existiendo y que las concesiones de explotación de petróleo y gas para las multinacionales seguirán siendo garantizadas, aún cuando dentro de poco serán incluidas compañías brasileras, chinas hindúes e iraníes. ¿Por qué? Simplemente porque las transnacionales petroleras estadounidenses pertenecen a un régimen hegemónico, expansionista e imperialista, que históricamente ha chupado el petróleo de Venezuela como se chupa la sangre de alguien, para más de un siglo. Ya basta." (Ibid.) Otro comentarista de Vheadline, Alfredo Bremont, en relación a la Revolución Bolivariana como negación y como esfuerzo revolucionario socialista mundial, aclara en uno de sus artículos que "el petróleo es el único arma verdadera. Si se para el petróleo, se para el mundo". (http://www.vheadline.com/readnews.asp?id=26496) Esto identifica contundentemente lo que está en juego en Venezuela y en otras partes del mundo: "Es la Revolución Bolivariana que Washington tiene en la mira, y no el Jefe de Estado." (Ibid.) Sin embargo, la exigencia de parar los suministros de petróleo al mundo capitalista, imperialista y corporativo, es decir, a los EE.UU. y sus aliados beligerantes, significa "parar el mundo" y es un asunto bastante serio. 173 Un colapso inmediato y desorganizado del mercado mundial y del actual sistema global que se encuentra en agonía, causaría instantáneamente la muerte de centenares de millones de víctimas inocentes. Claro, por otro lado, a cuenta propia y como paso estratégico contra la intervención estadounidense, los "ciudadanos bolivarianos ahora pueden reclamar democráticamente una reducción de los envíos petroleros a Washington o incluso su suspensión completa." (Ibid.) Sin embargo, desde Heráclito la dialéctica nos enseña, que "la guerra es el padre de todas las cosas". El capitalismo inventó y reinventó su propia revolución social, sus luchas de clases y así las convirtió en su verdadera negación, el socialismo. Ahora bien, algunas preguntas pertinentes: ¿De qué manera vamos a hacer y a realizar cualquier revolución social o socialista en cualquier parte, sin las luchas de clases modernas y reinventadas? ¿Por qué no aplicamos también un análisis de clase a la misma Revolución Bolivariana? Como clase social, ¿qué se espera que haga o que sea la "Clase Media en Positivo" emergente de Venezuela? ¿Cómo vamos a lograr la Integración y Unidad Latinoamericana sin una feroz y ardiente lucha de clases a nivel internacional, sin una "guerra de clases" (Lula)? ¿No trabajamos todos? ¿No formamos clases trabajadoras modernas? ¿Qué, en términos de clase social son los Cisneros, Mendozas y Capriles? 174 ¿Son "Ciudadanos" o son "El Soberano" o son "El Pueblo" o son "Venezolanos"? ¿Aman a Venezuela y a los pobres, a los "recoge latas"? Actualmente, de todos los pueblos del mundo, el pueblo venezolano es el más politizado del planeta, esto significa que tiene una conciencia de clase prerrevolucionaria. En el 2002 el pueblo venezolano verificó que incluso posee una conciencia de clase prerrevolucionaria. ¿Cuándo vamos a analizar científica y filosóficamente estos fenómenos de clase únicos y expresarlos como práxis revolucionaria y teoría emancipatoria, como paradigmas para la revolución socialista mundial permanente? Es esta conciencia de clase social y política de la verdad, como la expresa Hugo Chávez Frías, lo que el "Imperio" estadounidense más teme, porque es su Talón de Aquiles.