INICIATIVA CON PROYECTO DE DECRETO POR EL QUE SE REFORMAN LOS ARTÍCULOS 61 Y 62 DE LA LEY GENERAL DE SALUD, EN MATERIADE SALUD MATERNA PERINATAL PARA LA PREVENCIÓN DE PREECLAMPSIA/ECLAMPSIA La suscrita, MARÍA CRISTINA DÍAZ SALAZAR , Senadora de la República de la LXII Legislatura del H. Congreso de la Unión, integrante del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional, con fundamento en lo dispuesto por el artículo 71, fracción II, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, así como en los artículos 8, numeral 1, fracción 1; 164, numeral 1; 169 y demás relativos del Reglamento del Senado de la República, someto a la consideración de esta Honorable Asamblea la siguiente; INICIATIVA CON PROYECTO DE DECRETO POR EL QUE SE REFORMAN LOS ARTÍCULOS 61 Y 62 DE LA LEY GENERAL DE SALUD, EN MATERIADE SALUD MATERNA PERINATAL PARA LA PREVENCIÓN DE PREECLAMPSIA/ECLAMPSIA, de conformidad con la siguiente: EXPOSICIÓN DE MOTIVOS Los problemas en materia de salud durante el embarazo han saltado al protagonismo social por el incremento que han mostrado a lo largo de los últimos años. El tema ha obtenido tal protagonismo que en el año 2000, 189 países miembros de la Organización Mundial de la Salud suscribieron los objetivos de Desarrollo del Milenio que 10 años después incluiría una Estrategia Mundial de Salud Materna e Infantil cuyo objetivo es evitar la muerte de más de 16 millones de mujeres y niños hasta el año 2015. Cabe destacar que la mayoría de los daños obstétricos y los riesgos para la salud de la madre y del recién nacido pueden ser prevenidos, detectados y tratados con éxito, mediante la aplicación de procedimientos para la detección y atención. Específicamente las complicaciones por hipertensión durante el desarrollo del feto han provocado un importante número de defunciones maternas. El padecimiento conocido como Preeclampsia/Eclampsia es considerado uno de los principales causales de muerte en mujeres embarazadas en México donde la frecuencia oscila aproximadamente en el 8% del total de embarazos. De estas complicaciones, el 98% se considera preeclampsia leve, el 3.75% preeclampsia severa y el 1.75% a eclampsia, en la catalogación más general que existe, pero una clasificación del Lineamiento, Diagnóstico y Manejo de la Preeclampsia/Eclampsia [1], publicado por la Secretaría de Salud en el año 2007, más ajustada a los síntomas que presenta la madre de acuerdo al periodo del embarazo se describe a continuación: Hipertensión gestacional Preeclampsia Eclampsia Hipertensión arterial mayor o igual de 140/90 mm Hg después de la semana 20 de gestación en ausencia de proteinuria en la orina. El diagnóstico puede considerarla hipertensión transitoria del embarazo si no se desarrolla preeclampsia y se normalizan los indicadores. Se puede clasificar como hipertensión crónica en caso de persistir los síntomas después de las 12 semanas de gestación. / Es un síndrome multisistémico cuya severidad puede ser variable, se presenta después de la semana 20 de la gestación y se caracteriza por la reducción de la perfusión sistémica, generada por vasoespasmo y activación de los sistemas de coagulación. También puede presentarse durante el parto o en las primeras 6 semanas después de éste. El cuadro clínico se caracteriza por la hipertensión arterial >140/90 mm Hg acompañada de proteinuria, es frecuente que además se presente cafalea, acúfenos, fosfenos, adema, dolor abdominal y/o alteraciones de laboratorio. Preeclampsia agregada Ocurre cuando en pacientes con hipertensión conocida antes de la a hipertensión crónica gestación, se agregan datos del síndrome de preeclampsia después de la semana 20 del embarazo. Hipertensión crónica Presencia de hipertensión arterial > 140/90 mm Hg antes de las 20 semanas de gestación o la que persiste después de 12 semanas posteriores al nacimiento. El mismo lineamiento indica como principales factores de riesgo la presencia de Preeclampsia en embarazos anteriores, periodo intergenésico mayor a 10 años, hipertensión arterial crónica, enfermedad renal previa, diabetes mellitus, trombofilias, índice de masa corporal > 30 kg/m2, mujeres mayores de 40 años, primipaternidad, factor paterno positivo para preeclampsia en pareja anterior e historia familiar de preeclampsia, diabetes mellitus, hipertensión arterial sistemática crónica e infertilidad. Siguiendo con el estudio de cifras se estima que a nivel mundial se presentan más de medio millón de defunciones maternas anualmente, de estas entre en 12% y 15% se relacionan directamente con trastornos hipertensivos. En México la preeclampsia/eclampsia se presenta entre el 5 y 10% de los embarazos y del total de defunciones maternas representa casi el 34%, sin que los números tengan una reducción significativa al pasar de los años. Actualmente existen diversos métodos para prevenir o reducir las complicaciones derivadas de enfermedades hipertensivas durante el embarazo y se debe considerar prioritaria la difusión del Lineamiento Técnico sobre Prevención, Diagnóstico y Manejo de la Preeclampsia/Eclampsia, así como diversos estudios realizados por instituciones públicas y privadas sobre el tema, a través de campañas de concientización e informativas encaminadas a la prevención y difusión de las consecuencias derivadas al no atender oportunamente el padecimiento en sus etapas iniciales. La Secretaría de Salud Federal, así como las dependencias estatales, deben priorizar la información referente a las enfermedades hipertensivas durante el embarazo dentro del presupuesto destinado a la producción y la difusión de material textual y visual distribuido principalmente en hospitales, clínicas y centros de salud de carácter público. Aunado a esto, diversas Asociaciones Civiles han desarrollado una larga lucha para consolidar la atención oportuna por parte de las dependencias gubernamentales correspondientes, entre las que destaca la Fundación Mexicana de Prevención y Salud Materna, A.C., cuya propuesta de prevención a través del Tamiz Perinatal durante el primer trimestre de gestación debe ser atendido de manera seria y pronta por esta dependencia en primera instancia y por las que consecuentemente se relacionan con la salud y seguridad de las madres mexicanas. Como se mencionó anteriormente, las implicaciones en la salud de las pacientes obstétricas por los trastornos hipertensivos del embarazo es muy alto, así como su morbi-mortalidad. Los programas de salud dirigidos a intensificar las acciones de atención oportuna y difusión informativa son puntos importantes a reconocer, sin embargo con los nuevos avances médicos en el campo de la obstetricia y medicina fetal, se han implementado nuevos métodos de tamizaje a la población obstétrica en general, con el fin de detectar las pacientes con un alto riesgo de desarrollar la enfermedad y así poder implementar manejos preventivos y seguimientos estrictos para disminuir las complicaciones. Este tipo de tamizaje está enfocado en dos puntos medulares: 1. Primero, ultrasonido: Revisar a todas las pacientes obstétricas entre las 11-14 y 22-24 semanas del embarazo, para la realización de una historia clínica completa, recabando la información de los factores de riesgo propios de la madre y ya mencionados previamente, además de realizar un ultrasonido obstétrico y revisando las condiciones de flujo de sangre hacia la placenta (arterias uterinas), sabemos que la mayor parte de las pacientes que desarrollarán esta enfermedad tienen esos flujos alterados por lo tanto en estos dos ultrasonidos es posible detectar aquellas que desarrollarán la preeclampsia severa, si el flujo de sangre anormal es detectado en el primer ultrasonido (11-14 semanas), inclusive se podría iniciar manejo médico (aspirina), la cual en estudios internacionales aleatorizados a nivel mundial ha reducido hasta en un 50% la posibilidad de tener una preeclampsia severa. Si se detecta hasta el segundo ultrasonido (22-24 semanas) no hay manejo médico pero puede ser referida a hospitales de tercer nivel antes de tener la sintomatología. Por lo tanto, el ultrasonido llevado a cabo por personal médico entrenado es pieza fundamental. 2. Segundo, Tamizaje Bioquímico: existen en la actualidad sustancias en el suero materno (muestras de sangre en la paciente embarazada), que pueden ser detectadas (Proteína plasmática asociada al embarazo PAPP-A y factor de crecimiento placentario), las cuales en conjunto con la revisión de ultrasonido (ya mencionado previamente) hacen posible detectar hasta el 90% de las pacientes que desarrollarán preeclampsia severa. En resumen, este tipo de programas pudieran tener un impacto muy importante en reducción de la mortalidad materna en el rubro de las enfermedades hipertensivas durante el embarazo. Es por eso que consideramos que en conjunto, a través de medios de difusión, tamizaje prenatal y entrenamiento adecuado del personal médico es posible alcanzar los objetivos del milenio. Los costos de este tipo de tamizajes en realidad se centran en contar con máquinas ultrasonido, los cuales muchos de nuestros hospitales cuentan ya con ellos y la implementación de pruebas bioquímicas (sangre materna), las cuales pueden llegar a ser no tan costosas como siempre y cuando el número de muestras sean mayores. Además el tiempo empleado en hacer este tipo de revisiones es muy reducido (5-10 minutos). Por último, al momento de iniciar con los centros de tamizaje, es posible fomentar de manera paralela la enseñanza a los médicos en entrenamiento, los cuales a su vez podrán continuar con su labor de escrutinio en sus comunidades. Además de fomentar la investigación ya que los mismos sueros en pacientes afectadas podrían ayudar a detectar nuevos marcadores para hacer la detección más efectiva. Es importante recalcar que durante el estudio de ultrasonido es posible implementar otras revisiones a través de éste mismo método para detectar además las pacientes en alto riesgo de tener un bebe con una malformación congénita y aquellas que pudieran presentar un parto prematuro, dos rubros que también influirían en disminuir la morbimortalidad neonatal El compromiso por atender las necesidades más urgentes en materia de salud debe estar por encima de partidos políticos, intereses de grupo o individuales, este texto representa un primer esfuerzo por analizar desde la máxima instancia legislativa de la nación el tema de la maternidad y las garantías de seguridad que debemos defender como legisladores comprometidos con los valores humanos tácitos e ineludibles. Por lo anteriormente expuesto y con fundamente presento a esta soberanía el siguiente: PROYECTO DE DECRETO ARTÍCULO ÚNICO.- Se reforma por modificación la fracción I del artículo 61 y por adición de un segundo párrafo al artículo 62, ambos de la Ley General de Salud, para quedar como sigue: LEY GENERAL DE SALUD Artículo 61.-… La atención materno-infantil tiene carácter prioritario y comprende, entre otras, las siguientes acciones: I. La atención integral de la mujer durante el embarazo, el parto y el puerperio, incluyendo la aplicación del tamiz prenatal y el ultrasonido obstétrico durante el primer trimestre de embarazo para detectar el desarrollo de preeclampsia/eclampsia; II. - V.… Artículo 62.- En los servicios de salud se promoverá la organización institucional de comités de prevención de la mortalidad materna e infantil, a efecto de conocer, sistematizar y evaluar el problema y adoptar las medidas conducentes. La detección del desarrollo de preeclampsia/eclampsia, se realizará mediante las pruebas a que se refiere la fracción I del artículo 61 de la presente Ley, debiéndose canalizar oportunamente a la paciente a instituciones de salud para su debido tratamiento. TRANSITORIO ÚNICO.- El presente Decreto entrará en vigor al día siguiente de su publicación en el Diario Oficial de la Federación. Dado en el Salón de Sesiones del Senado de la República, a los 4 días del mes de Noviembre de 2013. Senadora Cristina Díaz Salazar [1] Lineamiento Técnico de Prevención, Diagnóstico y Manejo de la Preeclampsia/Eclampsia. Secretaría de Salud. 3ª Edición Junio 2002.