Experiencia A - Blogs de Cátedras de la UNLP

ENTREVISTADO ¨A¨
Edad: 41 años
Año en que se recibió: 1989
Lugar de procedencia: La Matanza
Lugar de residencia actual y desempeño laboral: La Matanza
Ámbito Laboral: empleo
Desde el punto de vista de la intervención, yo venía trabajando y tenía experiencias desde el vínculo voluntario,
por ejemplo desde algunas villas y asentamientos del gran Bs As, había trabajado en apoyo escolar en lo que
era la villa Domingo Millán, en el límite con Villa Lugano en capita federal. Y después también trabajé vinculado
a un sindicato de la zona oeste, que una vez que me recibí, me propusieron dirigirles el centro de formación
profesional que este sindicato tenía en La Matanza
Ahí me encontré en los primeros dilemas de intervención, yo era el director del centro, no intervenía
directamente con la población, pero sí intervenía en la línea estratégica de la oferta educativa de la formación
para el trabajo teniendo en cuenta cual era la institución de origen, que era un sindicato metal-mecánico
(UOM), y también teniendo en cuenta el contexto. En ese momento formar a ese tipo de empleados era formar
para engrosar el ejercito de desempleados. En oferta formativa había cursos que eran más orientados a la
metal-mecánica como tornería, fresadores, en los cuales no se anotaba prácticamente nadie. Ahí es donde uno
veía el juego. Porque esta institución se regía más allá del sindicato, también por los lineamientos de la
dirección de adultos y profesional de la Dirección General de Escuelas de la provincia de Bs As. Entonces había
que cubrir matrícula, era muy problemático en aquellos cursos donde no se visualizaba el campo laboral de
inserción, que venía en franca destrucción. Y ahí uno también, desde el punto de vista de la intervención tenía
que hacerle ver esto a la UOM que quería formar futuros trabajadores metal-mecánico, pero que en realidad
ese sector estaba en franca caída. Pasó de casi 15.000 o 18.000 trabajadores en la zona a menos de 5.000. Uno
veía que se empezaban a destruir los lazos de socialización a partir de la pérdida del empleo.
En ese centro estuve hasta principios del año 2002, y paralelamente en el año 2000 empecé a trabajar en el
servicio social de San Cayetano. Acá tienen la oficina de empleo más antigua del país, creada en 1970 y que
intermedia laboralmente con sectores populares. Tenia formación para el trabajo, pero adecuado a sectores
populares, fundamentalmente a jefas de familia en especializaciones como servicio doméstico. Pero planteado
desde una perspectiva de profesionalización del oficio y no como servidumbre que va a trabajar a una casa de
familia.
A los 2 meses se fue el coordinador del servicio, y los curas me proponen a mí coordinar el servicio. Me hice
cargo de un servicio social de una magnitud bastante importante y con distintas complejidades, ya sea desde el
punto de vista de la población que atendía o desde el punto de vista interno. Acá coordinaba y trabajaba con
un equipo de profesionales sociales y convenios con el Ministerio de Trabajo. Teníamos todo lo referido a
oficinas de empleo, donde generalmente iban mujeres jefas de familia en búsqueda de inserción laboral, cuya
principal inserción era el servicio doméstico. Se empezó a plantear qué es lo que se podía hacer para
profesionalizar esta actividad, entonces se empezaron a generar cursos de formación donde se trataba de
vincular a las personas con las tareas de servicio doméstico desde el punto de vista de jerarquización, derecho,
manipulación de tecnología que tal vez en sus casas no tenían (lavarropa automático, microondas,
computadora etc). Se brindaban talleres de orientación laboral teniendo en cuenta la historia laboral de las
personas, y trabajábamos también con changarines que pedían empleo. Teníamos el conflicto de que venían
los empleadores en búsqueda de empleados y los paraban en la puerta diciéndoles que no entraran porque
estaba todo arreglado.
En el año 2003 me voy al Ministerio de Trabajo de la Nación. Al principio entré al programa de servicios de
empleo que el ministerio intentaba promover, se trabajaba con los servicios de empleo privados y públicos y lo
que se hace es una intermediación entre la oferta laboral y la demanda de trabajo. Por lo tanto paso de un
ambiente trabajo más localizado a otro nivel que es el de la macrogestión. Luego paso a un programa de
promoción del empleo que tenía una fuerte impronta de desarrollo local articulado fundamentalmente con
actores locales, principalmente el municipio. En ese ámbito en principio coordiné la región de Cuyo. No
trabajábamos directamente con las personas pero nuestra acción tenía como destinatario final las personas
con problemas de empleo. Nuestro primer actor de intervención eran los municipios porque son los municipios
los saben qué es lo que está pasando en su territorio en lo que refiere a la problemática de empleo y jugar
líneas de acción que intervengan en la problemática. Y dentro del ámbito del ministerio pasé a una gerencia de
empleo y capacitación laboral que es uno de los brazos territoriales del ministerio para aplicación de políticas.
Soy gerente de empleo y capacitación laboral y coordino un equipo diverso que tiene 9 municipios. Y yo lo que
hago como gerente es intervenir a nivel local con las líneas de políticas que fija, crea o promueve el ministerio
de trabajo a nivel central. Entonces tengo la gestión del programa jefes de hogar, del programa PEC, tengo la
línea de políticas activas de empleo, las oficinas de empleo, programa sectoriales de calificación, programas de
promoción del empleo a nivel territorial y tenemos también todo lo que es supervisión y seguimiento de los
convenios que el ministerio hace con las contrapartes locales de distintos programas, para el cumplimiento de
los mismos.