Nace en Buenos Aires, Argentina (1973). Diseñador gráfico. En el 1998, se inicia en el campo de la ilustración colaborando con el diario El clarín. Luego le siguen publicaciones de varios países como Times, Rolling Stone, The New York Times y La voz de Galicia. Incursiona en la literatura infantil como ilustrador, y luego publica libros de su autoría que han sido traducidos a varios idiomas que incluyen el japonés y el alemán. Resaltan El diario del capitán Arsenio, considerado el mejor libro para niños del año por Zena Sutherland Award en la Universidad de Chicago del 2006, y El brujo, el horrible y el libro rojo de los hechizos destacado de ALIJA en 2007 por sus ilustraciones. Para acceder al texto que ha escrito para GRETEL y más información, haga clic aquí. PABLO BERNASCONI El Máster en Libros y Literatura para niños y jóvenes tiene el honor de contar con Pablo Bernasconi como escritor e ilustrador invitado de este mes. Pablo Bernasconi nace en Buenos Aires (Argentina) en 1973. Se recibe como Diseñador gráfico en la Universidad de Buenos Aires, donde se dedicó seis años a la docencia y como jefe de trabajos prácticos de diseño. Su incursión en el mundo de la ilustración es en 1998 con en el diario El Clarín, donde además diseñó tapas para algunos de sus suplementos. Sus ilustraciones fueron cobrando importancia, y calando en grandes publicaciones periódicas del mundo que aún lo publican, entre las que se suman Rolling Stone, The New York Times, The Wall Street Journal en Estados Unidos; The Times en Inglaterra; y La voz de Galicia y el Diario de León en España. Sus imágenes también sirvieron de acompañamiento para algunas obras infantiles de autores importantes como María Elena Walsh y Gustavo Roldán. Hasta la fecha, ha publicado ocho libros para niños en los que hace no sólo de autor sino también de ilustrador, así como dos para adultos. Algunos de ellos, merecedores de reconocimientos, entre los que destacamos El diario del capitán Arsenio, considerado el mejor libro para niños del año por Zena Sutherland Award en la Universidad de Chicago del 2006, y El brujo, el horrible y el libro rojo de los hechizos destacado de ALIJA en 2007 por sus ilustraciones. Sus libros han sido traducidos en más de ocho países, donde se incluyen destinos como Alemania y Japón. Texto de Pablo Bernasconi para GRETEL Mi relación con la literatura infantil comienza de chico, como debe ser. Leyendo, admirando, preguntando y sorprendiéndome. Creo que la mejor manera de ingresar en este mundo, sino la única, es confiando en el placer enorme que nos produce leer y creer. En mi infancia no se conseguían, al menos en Argentina, demasiados títulos para chicos; acabábamos de salir de una dictadura sangrienta y la mayoría de los autores que valían la pena habían sido censurados o expulsados del país junto con su material. Por lo que me tocó relacionarme con lo primero que encontré, que fue la historieta. Y fue en este espacio donde descubrí por primera vez el placer de leer por placer. El hambre de historias y personajes, de amistades con seres de papel. Mafalda se ocupó de atraparme para siempre con su inteligencia y acidez. Creo que nunca tuve mucha afinidad con textos naif o inocentes, en parte por la imprudente noción de literatura infantil que se inculcaba en esa época, en parte gracias a Mafalda. Sus personajes y sus historias nos acercaban, con juicio, crítica y sagacidad, temas y debates que nuestra sociedad se debía desde hace mucho, nos contaba tanto de personajes reales y arquetípicos de nuestro mundo cotidiano, como del pensamiento filosófico universal. Mafalda sobre todo, logró acercar generaciones desde el pensamiento crítico. Abuelos, padres, hijos y nietos disfrutando del mismo momento junto al libro. Supongo que fue tan marcada esta iniciación, que desde entonces no concibo otra manera de leer, dibujar o escribir. Luego de mi paso por la facultad, donde estudié Diseño Gráfico y di clases de diseño varios años más, pude de a poco encausar una carrera alrededor de puntos que consideraba vitales, sobre la forma de expresar y comunicar. Tengo una relación más calculada que romántica con mis piezas, en donde no dejo demasiado espacio a la espontaneidad, y si a la construcción paulatina y minuciosa del contenido, de la idea. Cuando trabajo con ilustraciones, procuro rodearme de alternativas extensas en discurso, intento contribuir desde cada elemento, textura o trazo. Y extiendo esta premisa cuando trabajo como autor integral de un libro. Es decir, desde el texto, la ilustración, el diseño, y sobre todo, la idea. Creo fundamental la solidez de la idea, y es por eso que dedico la mayor parte del tiempo a pulirla cerrarla lo mejor posible, madurando su construcción durante el tiempo que sea necesario. Mi trabajo se divide entre ilustraciones para medios (diarios y revistas), en donde los tiempos son acelerados e implacables, y mis libros, en donde los tiempos quedan irremediablemente vinculados a mi paciencia, y a mi pasión. Hubo libros que tardé años en terminar, como Retratos y Bifocal, y otros en donde los procesos fueron más acelerados y vertiginosos, como El zoo de Joaquin, o El Diario del Capitán Arsenio. En general, para mis libros infantiles, intento consolidad historias que me son afines, ya sea por experiencias que viví o gustos que me rodean y me empujan, o directamente, ambos. En el caso del Diario del Capitán Arsenio, por ejemplo, confluyen ambas formas. Mi padre, además de ingeniero es piloto desde su juventud, por lo que toda mi infancia estuve rodeado de pilotos, aviones, aeródromos, y claro, accidentes. Tanta fue la influencia en este particular mundo que yo mismo me convertí en piloto a los 16 años. El diario del Capitán Arsenio supone un personaje que vivió alrededor del año 1800 y que intenta, desde su precario conocimiento y accesos a materiales, construir la máquina de volar, antes por supuesto de los Hermanos Right, Otto Lilienthal y Calder. Utilizo entonces no sólo mis conocimientos sobre el tema, sino también lenguaje, elementos, anécdotas, historia, y sobre todo, folklore. Considero que parte de el sello de cada autor es debido al folklore que supo añadir en su material. El Capitán Arsenio tiene mucho del argentino, del sudamericano. Golpeado por todos lados pero a su manera, invencible. Otro libro donde pude describir temáticas allegadas al folklore nacional fue Excesos y exageraciones. Ya desde el título tenemos una idea cabal de lo que va a suceder dentro de este libro conformado por relatos ilustrados. Son pequeñas historias, textos breves y densos de sentido, que devuelven de alguna manera momentos que me tocaron vivir en mi país. Sucesos que de por sí ya suenan exagerados, son los que colecciono y reelaboro para completar este libro: Zapaterías que tragan señoras, monstruos de lagos que aparecen sólo en temporada alta de turismo, señores muy preocupados por sus músculos y no por sus intelectos, Magos en busca de magia legítima que supere cualquier truco, etc. La razón del libro son historias exageradas, dentro de un país exagerado. Considero a la imagen, la ilustración, como parte indiscutible ligada a la narración, en igual proporción que el texto, y a veces mucho más. En este libro experimento con esto y trato de comprobar que ambos elementos deben convivir y ayudarse el uno al otro para multiplicar el sentido esencial del proyecto, que es solidificar la idea, crear un nuevo monstruo simbólico que me transporte inmediatamente y sin escalas cada una de las historias. Hablando de técnicas plásticas, de sintaxis visual, tengo varias maneras de acercarme a la imagen. La más usual, es el collage. Me resulta muy efectivo como manera de contar y multiplicar ideas, como forma genuina de experimentar considerando a la vez, imagen y concepto. De todos modos, me gusta desplazarme lo más posible de mi registro gráfico, e innovar con formas que me metan en problemas. Considero que si bien uno puede sentirse a gusto con determinada técnica, y hacer efectivo cada minuto que dedica a desarrollarla, es prudente no acostumbrarse demasiado, como para volverla rutinaria o previsible. A veces, con pequeñas inclusiones desde otras herramientas, podemos llegar a resultados sorprendentes si estamos dispuestos a superar y aprovechar los accidentes. La acuarela, por ejemplo, no es una técnica que yo pueda ni sepa utilizar bien. Sin embargo, en ciertas ocasiones me es extremadamente útil justamente para acercarme un poco al caos, al desgobierno, a la mancha con propia iniciativa. Recuerdo un retrato que hice de Tom Waits, donde usé acuarela y tinta. Para este personaje me fue increíblemente útil, a pesar de lo flexible que terminó siendo el resultado. Reconozco que mi pericia técnica no es la misma ante diferentes herramientas, pero considero que si la expresión se logra y el resultado se comprende, se amortiza el resultado. Creo en la relación física del artista y sus herramientas. El lápiz y el papel, por obsoleto que suene, sigue siendo a mi criterio la mejor manera de encontrarse con las ideas. Me es casi imposible avanzar en un proyecto si no lo construyo en simultáneo en una hoja, si no solidifico las ideas en forma de mamarracho. Más allá de la calidad estética de estos bocetos, la espontaneidad química de las ideas se verifica cuando las decantamos en un proceso de bocetado. Esto me sucede como ilustrador, pero también me pasa como escritor. Para llegar a construir una historia, desde la palabra, necesito trabajar de la misma manera. Anotando y borrando, avanzando y retrocediendo, probando y componiendo. Creo que uno tiene que aprender a escucharse para llegar a buen puerto. Aprender a autoeditarse, a olfatear y discernir entre una buena idea y una mediocre. Creo que nuestra profesión se nutre de diferentes estímulos, formas, métodos, y personalidades, pero estoy convencido que uno no puede avanzar sólo en base al talento, sino a la perseverancia. Ya lo dijo Picasso: “La inspiración existe, pero tiene que encontrarte trabajando” Pablo Bernasconi BIBLIOGRAFÍA de Pablo Bernasconi en el Centro de Documentación del Banco del libro. UN CUENTO POR DONDE PASA EL VIENTO / Cecilia Pisos; Ilust: Pablo Bernasconi .-- 1ra. ed .-Buenos Aires (Argentina) : Sudamericana, 2004.-- 32 p. 23 cm; il, color; original; Español.-- (Primera Sudamericana : Puercoespín) ISBN 950-07-2467-7 EXCESOS Y EXAGERACIONES / Pablo Bernasconi; Ilust: Pablo Bernasconi .-- 1ra. ed .-- Buenos Aires (Argentina) : Sudamericana, 2008.-- 48 p. 27 cm; il, color; Original; Español.-- (Sudamericana infantil Especiales) ISBN 978-950-07-2923-9 Postulado en Los Mejores: 2009 DE PEQUEÑECES Y ESTAMPILLERIAS / María Elena Walsh; Luis María Pescetti; Silvia Shujer; Ricardo Mariño; Ilust: Claudia Legnazzi; Pablo Bernasconi; Mariano Grassi; Daniel Roldán .-- 1ra. .-Buenos Aires (Argentina) : Correo Oficial de la República de Argentina, 2008.-- 52 p. 18 cm; il, color; Original; Español ISBN 978-987-24449-0-7 Postulado en Los Mejores: 2010 EL DIARIO DEL CAPITAN ARSENIO: LA MAQUINA DE VOLAR / Pablo Bernasconi; Ilust: Pablo Bernasconi .-- 2da. ed .-- Buenos Aires (Argentina) : Sudamericana, 2007.-- 32 p. 27 cm; il, color; Original; Español.-- (Primera Sudamericana) ISBN 978-950-07-2806-5 Postulado en Los Mejores: 2010