INICIATIVA CON PROYECTO DE DECRETO POR EL QUE SE REFORMA EL ARTÍCULO 115, FRACCIÓN IV DE LA LEY GENERAL DE SALUD, EN MATERIA DE ACIDOS GRASOS TRANS, GRASAS MONO Y POLINSATURADAS, AZÚCARES Y SODIO POR PORCIÓN. La que suscribe, MARÍA CRISTINA DÍAZ SALAZAR, Senadora de la República de la LXII Legislatura del H. Congreso de la Unión, integrante del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional y del Partido Verde Ecologista de México, con fundamento en lo dispuesto por el artículo 71, fracción II, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, así como en los artículos 8, numeral 1, fracción 1; 164, numeral 1; 169 y demás relativos del Reglamento del Senado de la República, someto a la consideración de esta Honorable Asamblea la siguiente INICIATIVA CON PROYECTO DE DECRETO POR EL QUE SE REFORMA EL ARTÍCULO 115, FRACCIÓN IV DE LA LEY GENERAL DE SALUD, EN MATERIA DE ACIDOS GRASOS TRANS, GRASAS MONO Y POLINSATURADAS, AZÚCARES Y SODIO POR PORCIÓN, de conformidad con la siguiente: EXPOSICIÓN DE MOTIVOS Estudios recientes informan que a nivel mundial, anualmente, 17.5 millones de personas fallecen a causa de enfermedades cardiovasculares; atrás de esta consecuencia están la obesidad y la diabetes mellitus. Estos dos últimos padecimientos son a su vez resultados de múltiples factores tales como la globalización, la urbanización, los cambios culturales y de estilo de vida, la genética de las poblaciones y la sobreoferta alimentaria hipercalórica. En México el escenario es bastante preocupante; en personas de 65 años o más las enfermedades cardiovasculares son la primer causa de muerte seguida por la diabetes mellitus. Entre los 45 y 64 años, la diabetes mellitus es la primer causa de muerte y en tercer lugar están las enfermedades cardiovasculares. Es bien sabido que 80% de los enfermos con diabetes muere de problemas cardiovasculares. Estos dos padecimientos, por consecuencia, afectan a un grupo fuerte de la población económicamente activa; el crecimiento de estos padecimientos en México los convierte en amenazas serias al desarrollo económico de nuestro país que además obligarán a derivar y un mayor presupuesto en la atención de las complicaciones de estos padecimientos. ENSANUT 2012 ha identificado que en adultos mexicanos, el sobrepeso y la obesidad están presentes en 3 de cada 4 mexicanos (71.4%); estas personas enfrentarán como principales complicaciones a la diabetes y los problemas cardiovasculares. A nivel mundial se han tomado acciones para contener el desarrollo de estos padecimientos y de sus consecuencias. Muchas de estas acciones ya han demostrado detener las consecuencias de estos padecimientos. Una de las áreas de oportunidad deriva de la evidencia científica de que el consumo de ácidos grasos trans producidos y utilizados por la industria de alimentos es un factor de riesgo contundente en el desarrollo de enfermedades cardiovasculares. Brevemente, los ácidos grasos trans son grasas insaturadas que contienen uno o más enlaces dobles en configuración trans. Estos se encuentran en forma natural en alimentos derivados de rumiantes pero también pueden ser producidos industrialmente al realizar la hidrogenización parcial de los aceites vegetales. En la industria de los alimentos estos ácidos grasos son utilizados para aumentar el tiempo de vida o el buen aspecto de los alimentos en los estantes o mostradores. La relevancia de estos compuestos en la salud pública es el que están identificados como un factor de riesgo independiente para el desarrollo de enfermedades cardiovasculares al aumentar el colesterol de baja densidad, disminuir el colesterol de alta densidad, producir resistencia a la insulina, promover inflamación sistémica y disfunción endotelial. Estudios científicos han demostrado que en aquellos países en los que se ha restringido la utilización de ácidos grasos trans en la elaboración de alimentos ha sido posible encontrar resultados satisfactorios a corto y largo plazo. Entre las acciones realizadas en estos países se encuentran el solicitar voluntariamente a la industria el reformular sus productos conteniendo una menor concentración de estos compuestos, generar recomendaciones nutricionales en cuando al consumo de ácidos grasos trans y sus efectos adversos en la salud, notificación en las etiquetas de los alimentos del contenido de ácidos grasos trans, aumentar la producción de alternativas saludables para la sustitución de grasas trans y, por último, la reducción obligatoria del contenido de grasas trans en los alimentos. En México, la legislación actúale exige que en el etiquetado de alimentos se notifique la cantidad de grasas trans que contiene; sin embargo, no existe una restricción sobre la cantidad máxima permitida de estos compuestos por ración o porción de servicio del alimento. Así mismo, no hay ninguna legislación sobre la cantidad máxima a permitir en la elaboración de alimentos en sitios donde se venden alimentos preparados, tal como los restaurantes. La regulación precisa de las cantidades máximas permitidas a utilizar en los alimentos, a través de una Norma Oficial Mexicana, es la acción que se requiere para asegurar un beneficio en la salud para la población Mexicana. Por lo anteriormente expuesto y fundado someto a la consideraciónde esta soberanía el siguiente: PROYECTO DE DECRETO Decreto por el que se reforma el artículo 115 fracción IV de la Ley General de Salud, para quedar como sigue: Artículo 115… I… II… III… IV. Normar el valor nutritivo y características de la alimentación en establecimientos de servicios colectivos y en alimentos y bebidas no alcohólicas, estableciendo las cantidades máximas que deben contener deácidos grasos trans, grasas mono y polinsaturadas, azúcares y sodio por porción. TRANSITORIO PRIMERO.- El presente Decreto entrará en vigor al día siguiente de su publicación en el Diario Oficial de la Federación. Dado en el Salón de Sesiones de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, el día 7 de mayo de 2014. SENADORA CRISTINA DÍAZ SALAZAR