LOS DESPLAZADOS LA MAYOR VIOLACION DE LOS DERECHOS HUMANOS EN AMERICA1 Humberto Tobón y Tobón2 El desplazamiento es una estrategia de guerra que la utilizan los actores del conflicto colombiano: guerrillas, narcotraficantes y autodefensas. Así se desprende de todos los análisis realizados por los organismos nacionales e internacionales que trabajan con este tema El propósito de cada uno de estos actores es apoderarse del territorio, bien para fortalecer su posición geoestratégica en la guerra o para explotar sembrados de coca o amapola. Los que sufren los efectos de esta estrategia perversa son las familias campesinas que deben abandonar sus tierras por las amenazas de muerte, las tomas armadas, los homicidios selectivos, las desapariciones y el reclutamiento de jóvenes. Pero no son únicamente los campesinos los que están siendo desplazados. También se ha vuelto común que la gente que vive en las áreas urbanas deba salir de los pueblos en largas caravanas ante la inminencia de un ataque armado o como efecto de la destrucción de los centros poblados. Quienes son desplazados internos por la violencia coinciden en afirmar que cada uno de los actores, especialmente guerrilleros y paramilitares, los utilizan como escudos y posteriormente son acusados de ser auxiliadores de alguno de los bandos. Por esa razón viven en la mayor incertidumbre y tratan de mantenerse al margen del conflicto, pero las circunstancias hacen que sea imposible no ser utilizados por unos y otros. Adicionalmente, es palpable que la acción de estos grupos al margen de la ley se hace expedita ante el abandono casi generalizado en que el Estado tiene a esas poblaciones que son blanco de ataques y origen de los desplazamientos. La inversión pública es insignificante y en cerca de trescientos municipios no se conoce la presencia de la fuerza pública. Por lo tanto, las responsabilidades propias del Estado son asumidas por guerrilleros o paramilitares que tratan de ganar el territorio e imponer su ley. El desplazamiento forzado interno en Colombia es el más grande suceso de violación al derecho humanitario en toda América, según lo describen los especialistas. En 2000 se presentaron 1.315 eventos de desplazamiento, lo que quiere decir que diariamente ocurrieron 4 hechos. Se afectaron 128.843 personas que correspondían a 26.107 hogares, según cifras de la Red de Solidaridad, que en otras palabras significa que cada día hubo 352 desplazados, o sea, 15 cada hora. Las causas del desplazamiento forzado tienen que ver en un 53 por ciento por amenazas generalizadas, el 19 por ciento por enfrentamientos armados, el 15 por ciento por masacres, y el 5 por ciento por tomas a municipios. El 58 por ciento de los desplazamientos son responsabilidad de las autodefensas según las cifras que maneja el gobierno colombiano, mientras que la guerrilla es responsable en el 11 por ciento de los hechos. 1 2 Columna Opinión Libre. proyectosint@telesat.com.co Abril de 2003 Comunicador Social y Economista. Especializado en Finanzas y Educación Ambiental También se sabe que el 31 por ciento de la ocurrencia de estos eventos se debe a la acción combinada de varios actores armados. Según estudios realizados por el Sistema de Estimaciones del Desplazamiento Forzado, un enfrentamiento armado desplaza a 185 personas, una toma a 176, una masacre a 175, las amenazas generalizadas a 89, los ataques indiscriminados a 52 y la amenaza específica a 10 personas. El mayor número de eventos armados lo realiza la guerrilla con el 43 por ciento, mientras la autodefensas propician el 34 por ciento de las acciones. Sin embargo, en cada acto de la guerrilla se desplazan 24 personas en promedio, mientras que en el que cometen los paramilitares el desplazamiento afecta a 154 personas. La Red de Solidaridad Social revela en sus cifras que en el año 2000 se produjo el retorno de 47.328 personas que componen 9.692 hogares en 231 eventos que se produjeron en 138 municipios de 29 departamentos. Así mismo, se reubicaron 2.835 personas en 43 municipios de 20 departamentos. Teniendo como base las cifras gubernamentales, en 2000 permanecían 78.670 personas desplazadas, una cifra bastante baja si se compara con los reportes que hacen los alcaldes de los municipios donde llegan los desplazados. Las cifras que exhiben los diferentes organismos son tan disímiles que no es posible una ponderación y menos un acuerdo interinstitucional, lo que dificulta la toma de decisiones por parte del gobierno. La Red de Solidaridad Social cuenta 240.000 desplazados entre 1995 y 2000. En ese mismo periodo, la Consultoría para los Derechos Humanos y los Desplazados –Codhes- asegura que hubo dos millones de desplazados. El Conpes 3057-99 indica que entre 1995 y 1999 los desplazados sumaron 400.000. Por su lado, la Conferencia Episcopal Colombia dice que entre 1998 y 2000 el desplazamiento afectó a 47.000 personas. Las razones que explican esas abultadas diferencias tienen que ver con los distintos tipos de metodologías que se utilizan para efectuar las investigaciones; la movilización permanente de los desplazados; su dispersión; la aplicación de distintos conceptos para considerar a una persona desplazada; la necesaria anotación en los libros oficiales para ser reconocidos; los tiempos diferentes que se toman para recoger la información; y los sitios en que se hacen las investigaciones. Lo único que podría superar esta dificultad es la realización de un Censo Nacional de Población, que permita incluir preguntas relacionadas con el desplazamiento, donde se determinen los sitios de huida y los lugares de llegada. Pero como Colombia no tiene aprobado aun efectuar el Censo, las decisiones gubernamentales, privadas y de cooperación internacional sobre el tema del desplazamiento seguirán teniendo la incertidumbre de si realmente son eficientes sus programas y cubren a todas las personas afectadas por este fenómeno de violencia.