COLECCIÓN BICENTENARIO. El "Conjunto Graneros" lanza nuevo CD "Valses de Chile" "El vals se aguachó y se quedó para siempre en Chile " Un millar de conjuntos cultivan nuestro folclor. "Hay que ver con qué fuerza y perseverancia". Foto:El Mercurio "Diablo y coqueto" fue sentenciado el vals cuando llegó. La Iglesia protestó -mire que bailar tomaditos de la mano y tan cerca hombre y mujer-, pero hoy acompaña cuanta celebración existe. El nuevo CD es parte del proyecto "Próceres de la Patria", en proceso de aprobación ministerial para ser entregado a todos los colegios del país. -------------------------------------------------------------------------------MAITE ARMENDÁRIZ AZCÁRATE Después de cada rodeo, cumpleaños o funeral, en medio de un bautizo las parejas salen a la pista: el hombre toma a la mujer por la cintura y medio agachadito comienzan con sus un, dos, tres. Algunas veces, y dependiendo de las copas, el varón suele poner su cabeza en el hombro de su pareja, pero ella bien derecha y sin mirarlo lo sigue para un lado y otro. El vals llegó a Chile ocho décadas después de la cueca, y los chilenos le abrieron sus puertas y también sus ventanas. Lo vistieron y peinaron de campesinas, de pampina, de mineros, de pescadores, de patagónicos y nortinos. Si bien llegó acompañado de mazurcas, polkas y hasta con la cueca, se encopetó en los salones de alta alcurnia santiaguina y ciudades como La Serena y Concepción. El vals fue el único que no pasó de moda, "se le llamó 'valse' y se encariñó con la familia chilena", asegura Miguel Gutiérrez Lazo, director y creador del "Conjunto Graneros", que esta semana lanzó un álbum con los más tradicionales valses "aguachados" en esta tierra. "Hoy junto a nuestro baile nacional son las únicas danzas vigentes que tenemos en nuestro folklore, están metidas en el alma y espíritu de la identidad nacional". El nuevo CD "Valses de Chile" se suma a las 27 producciones editadas en los 41 años de vida de este tradicional conjunto chileno. Soplo de cantoras En esta selección de 10 nuevos temas recientemente grabados hay para todos las ocasiones. Algunos fueron aprendidos de antiguas cantoras, mujeres que desde su niñez vio guitarra en mano Miguel Gutiérrez: "Hay varios títulos inspirados en el amor; están también los llamados 'valses de medio pelo', como 'Elisa' o 'Las niñas de España", incluye el valse pueblerino como 'Tu sonrisa angelical', o del litoral: 'Las gaviotas de dulce canto' y, por supuesto, un infaltable valse de bodas": "Jovencito, ¿dónde estás? Darte un beso quiero yo No lo pidas, no lo pidas Que en tus labios moriré"... Las expresiones que aquí se presentan son las más populares del valle central del país, agrega el musicólogo, quien también fundó hace 31 años el conjunto infantil "Los Grillitos", en el corazón de la ilustre localidad de Graneros. "Tenemos versiones de valses salidas de fuentes inspiradoras rurales y pueblerinas, mezcla que sé que se da mucho en los pueblitos chicos de nuestro territorio, por ejemplo, 'Una niña está en mi huerto', con que comienza el álbum, es una versión temática del amor y en lo rítmico musical inspirada en las antiguas serenatas de balcones con un contrapunto de voces entre varones y damas, acompañadas por instrumentos como mandolinas, guitarras, violines y acordeón". Pero también las diferentas temáticas del valse, recuerda Gutiérrez, hablan de costumbres cotidianas y prácticas tradicionales, como las nacidas bajo el alero de la religiosidad popular. En este rubro destaca "Patroncita de la Compañía", con versos en que se le habla a la Santísima Virgen Purísima de Concepción, cuyo templo de veneración está en la Villa La Compañía, ubicado a 5 kilómetros de Graneros. El maestro recuerda que cada 8 de diciembre la Patroncita convoca a todas las familias rurales católicas del valle de Cachapoal. "¿Adónde vas?, ¿adónde voy? A pagar manda contigo voy... Prometeros, peregrinos Mujeres, hombres de fe Llegan a ti, Virgen pura Para bailar y cantar ¿Adónde vas?, ¿adónde voy?...". Los integrantes de este conjunto son parte de esas vivencias, y en este tema expresan sus sentimientos de cariño, de respeto por ella. Desde su nacimiento, el "Conjunto Graneros" -como la agrupación infantil "Los Grillitos"- está bajo su manto protector. "Por eso nos ha ido tan bien", dice convencido su director, "somos personas de fe". CD "Valses de Chile" Conjunto Graneros Dirigido por Miguel Gutiérrez Lazo. "Fue el primer baile de pareja enlazada" Como la mayor parte de nuestro folklore, el vals llegó a Chile en partitura desde París, donde esmerados profesores de baile se encargaban de imponer lo que se bailaba en las ciudades europeas y latinoamericanas. Al cabo de poco tiempo, los valses, polkas, mazurkas y cuadrillas que llegaban de París eran diseminados, desde grandes y pequeños salones, hacia las calles y el campo. De este modo, el resto de la población los hacía suyos, les ponía letra y los dotaba de ropajes y denominaciones distintas. A partir de 1810, el vals comenzó a difundirse por América del Sur en medio de grandes censuras de la Iglesia, debido a que era el primer baile de pareja enlazada que llegaba al salón. En Chile, el vals circulaba por una variedad de espacios sociales, siendo habitual no sólo en el salón de la ciudad y la casona del campo, sino que en retretas, casas de canto, y en el repertorio de estudiantinas, orquestas de señoritas, conjuntos de huasos, y cantoras campesinas. Al perder vigencia el salón como espacio social y artístico, el vals continuó desarrollándose desde la oralidad, la partitura y el disco, manteniendo su vigencia en Chile en distintos ámbitos musicales. En los valses con letra, se destacan tres temáticas principales: la lírico-amorosa, con un refinado uso del lenguaje, como en "La batelera"; la toponímica, en honor a puertos chilenos, como "La joya del Pacífico", de Víctor Acosta; y la social, como en "Corazón de escarcha", de Críspulo Gándara. Compartiendo la pista de baile con el tango y el foxtrot en la ciudad, y con la cueca y el corrido en el campo, el vals constituirá la pervivencia europea más persistente y fructífera en la música popular chilena del siglo veinte. Juan Pablo González, musicólogo del Instituto de Música de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Próceres de la patria Hoy en Chile existen alrededor de un millar de agrupaciones musicales que cultivan el folclore nacional. Son conjuntos en que participan entre 10 a 30 integrantes que gustan del rescate y la difusión de las tradiciones chilenas. En este marco destaca el trabajo de recopilación, investigación y creación que han desarrollado el Conjunto Graneros y Los Grillitos. Ambas agrupaciones fundadas y dirigidas por Miguel Gutiérrez se han adherido a la celebración del bicentenario formando una colección llamada "Próceres de la patria", donde integran e involucran el cultivo del folclore a la historia nacional. Reúne los álbumes "Albores de la patria", "Símbolos patrios", "Gabriela chilena", "Grandes autores y compositores chilenos", a los que se les agregan los recién editados "Valses de Chile" y "Padres de la patria". Este último CD es interpretado por Los Grillitos, conjunto que desde su fundación, hace 29 años, ha formado alrededor de 4 mil integrantes y hoy reúne a 45 niños de 4 a 15 años. Se trata de un trabajo que evoca a cuatro grandes próceres de la independencia nacional. De este modo, al ritmo de cielitos, sajurianas y chapecaos (baile lúdico campesino), las voces de estos pequeños artistas entonan canciones fáciles de memorizar. Algunas evocan grandes hitos como el arribo del Ejército Libertador y su posterior encuentro con la Virgen del Carmen en Maipú. En este material los niños le cantan a Bernardo O'Higgins, José Miguel Carrera, Manuel Rodríguez y Diego Portales. La biografía de cada prócer ha sido enriquecida con danzas de la época y los juegos infantiles que han nacido de las propias vivencias de los pequeños que en su mayoría sigue su enseñanza escolar en el Colegio Graneros. Establecimiento particular subvencionado, también creado hace cuatro décadas por Miguel Gutiérrez, en cuyo proyecto educativo es asesorado por su hermano Claudio, profesor de amplia experiencia, y en lo musical por José, otro de estos hermanos folcloristas de tomo y lomo. Están convencidos de que esta recopilación de seis CD centrados en el concepto "Próceres de la patria" encierra valores necesarios de transmitir en la familia y en la escuela. En ese espíritu han presentado este material al Ministerio de Educación para su análisis y aprobación final con el propósito de que pueda ser repartido y utilizado en todos los establecimientos educacionales del país.