“LIBERTAD DE EXPRESION. SU EJERCICIO EN MEDIOS PUBLICOS” La Constitución Española, recoge en su articulo 20, el derecho a expresar y difundir libremente los pensamientos, ideas y opiniones mediante la palabra, el escrito o cualquier otro medio de reproducción. Mediante la libertad de expresión, se viene a consagrar por tanto, el derecho a comunicar o recibir libremente información veraz, representado por la formación y existencia de una opinión pública libre. El valor preponderante de las libertades del artículo 20 de la Constitución Española sólo puede ser apreciado y protegido cuando aquellas se ejerciten en conexión con asuntos que son de interés general, por las materias a que se refieren y por las personas que en ellos intervienen. El conflicto o colisión entre este derecho y la libertad de expresión se explica porque ni siquiera los derechos fundamentales gozan de un carácter absoluto, siendo así que el propio derecho al honor se encuentra limitado por los también fundamentales a opinar e informar libremente. La persona afectada por la información, puede usar el llamado derecho de rectificación, regulado en la LO 2/1984, de 26 marzo, consistente en la facultad otorgada a toda persona, natural o jurídica, de "rectificar la información difundida, por cualquier medio de comunicación social, de hechos que le aludan, que considere inexactos y cuya divulgación pueda causarle perjuicio". 1 Cuando la pretendida ofensa se produce en un estado de confrontación o incluso crispación política, supuestos de tensión o conflicto laboral, sindical o deportivo, la jurisprudencia ha destacado la debilidad de la protección del derecho al honor en los supuestos de crítica política. Si se persigue suministrar información sobre hechos, la protección constitucional se extiende únicamente a la información veraz. Cuando los titulares al derecho al honor son personas públicas ó de relevancia pública, vienen por ello obligados a soportar un cierto riesgo de que sus derechos subjetivos de la personalidad resulten afectados por opiniones e informaciones, partiendo del dicho interés general y de la relevancia pública de la información y de que ésta sea, conforme a los cánones de dicha profesionalidad informativa, comprobada y contrastada, conforme a los cánones más elementales de la profesión. Ultimamente se vienen utilizando otros medios para la comisión de estos hechos. Por los medios de comunicación, conocemos cómo jóvenes, sobre todo, graban imágenes en situaciones que pueden afectar a la intimidad de las personas, y posteriormente, la distribuyen a través de mensajes. De especial interés por la trascendencia que tienen, son los delitos cometidos por personas o profesionales que, formando parte de un foro, utilizan la página web que el foro tiene para que, sus asociados puedan verter sus opiniones, enfocado siempre desde el plano o punto de vista profesional. Se establecen en la legislación, las obligaciones y responsabilidades de los prestadores de servicios que 2 realicen actividades de intermediación como las de transmisión, copia, alojamiento y localización de datos en la red. Se contempla asimismo, la posibilidad de elaboración de códigos de conductas voluntarias, por parte de las corporaciones o asociaciones y que podrán tratar sobre los procedimientos para la detección y retirada de contenidos ilícitos y la protección de los destinatarios frente al envío por vía electrónica de comunicaciones comerciales no solicitadas, así como sobre los procedimientos extrajudiciales para la resolución de los conflictos que surjan por la prestación de los servicios de la sociedad de la información. 3