del hijo, porque a nadie se le podía privar de su calidad de

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FERDINANDO CASADIEGOS CÁCERES
del hijo, porque a nadie se le podía privar de su calidad de heredero contra su
voluntad; esta condición de fondo, exigida desde la época clásica, no debió
existir al principio, si se admite que la emancipación se había creado desde luego,
a título de pena, contra el hijo para privarlo de los derechos de familia.
Anastasio permitió al padre emancipar a su hijo ausente, si tenía un rescripto
especial Imperial apud acta judicis; esta emancipación anastasiana se generalizó
más tarde.
Por último, JUSTINIANO decidió que la emancipación se hiciera mediante una
simple declaración ante el magistrado y se dio a esta nueva forma, el nombre de
emancipación justiniana. Se subentendía siempre un contrato de fiducia que
reportaba al padre los derechos de tutela y sucesión.
En principio el padre era libre de emancipar o no al hijo que tenía bajo su
potestad; sin embargo, el hijo podía exigir a veces su emancipación, de la propia
manera que el adrogado impúber, si llegado a la pubertad, probaba que la
adrogación le era perjudicial; y a este caso puede agregarse el del hijo maltratado
o la hija corrompida por su padre.
El hijo emancipado venía a ser sui juris, pero sufría una mínima capitis deminutio;
salía de su familia y perdía todos sus derechos de agnación; sus derechos de
cognación los conservaba lo mismo que su peculio, siempre que su padre no se
lo retirara expresamente. El pretor le dio derecho a la sucesión de su padre y de
sus ascendientes paternos, a título de bonnorum possessor. La emancipación
no tenía efecto sino con respecto al emancipado, porque sus hijos nacidos o
concebidos quedaban bajo la potestad del padre de familia. En principio la
emancipación era irrevocable; sin embargo, Constantino decidió que podía
resolverse por causa de la ingratitud del emancipado, pues las ventajas sucedidas
paulatinamente a éste último hacían que la emancipación se considerara como un
favor para el hijo.
9. LA TUTELA
Institución mediante la cual se establece sobre un persona libre un poder o
potestad debido a que dicha persona, por la edad, no puede comportarse
ante la ley con actos que le permitan expresar su libre voluntad (quien no se
puede defender por sí mismo y no tiene quién lo proteja). Vis ac potestas in
capite libero ad tuendum qui propter aetatem se defendere nequit, jure civili
data ac permissa.
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