no de combatir con toda dureza cualquier intento de perturbar la paz y el orden en España, es decir, hablando en plata y de cara a la oposición democrática : cualquier intento de sacudir los principios del no democrático sistema español. Arias Navarro, como ya lo hicieran antes antes que él sus antecesores en el cargo, el propio Franco y el asesinado almirante Luis Carrero Blanco, excluyó también para el futuro cualquier actividad política que no tuviese lugar en el marco del Movimiento Nacional y en conformidad con sus principios, y amenazó con todo el peso de las leyes españolas a aquellos trabajadores, que no encuentren en los sindicatos falangistas, juntos con los empresarios, los canales adecuados para imponer sus reivindicaciones de aumentos de salarios y mejores condiciones laborales. A los 34 millones de españoles, el jefe de Gobierno nombrado por Franco dirigió el llamamiento de sumarse voluntariamente al Movimiento Nacional. De otra forma, permanecerían para siempre fuera de la legalidad. Y a esto, Arias Navarro lo llamó "participación política". "El régimen está abierto para todos", opinó Arias Navarro, que al mismo tiempo recusó como "maximalistas" a aquellos que rechazan radicalmente el régimen y que quieren sustituirlo por una democracia parlamentaria. Habló de minorías terroristas y subversivas, que "con su odio qui er en destruir la paz de Franco". Con ello también se refería a aquellos miembros de la oposición y trabajadores, que son condenados a penas de hasta 20 años de cárcel por luchar con medios pacíficos por la libertad de asociación política y sindicatos independientes. Arias Navarro calificó a España de Estado social de Derecho, aunque se detiene a trabaJadores porque éstos se declaran en huelga. Sin embargo, no han quedado decepcionadas en su esperanza aquellas familias políticas del régimen franquista, que instan a una apertura del sistema, para que puedan participar, a la muerte de Franco, de un trozo del pastel nacional, que les disputan los ultras. Para ellas habló Arias Navarro ante las Cortes, cuando prometió una mayor participación de los españoles en la vida política del país, anunciando con grandes aplausos de los procuradores una ley sobre asociaciones políticas del Movimiento Nacional. Para estos círculos del régimen de Franco, que aplaudían entusiasmados, Arias Navarro es hoy una esperanza. (... ) Un "cambio" impuesto por las circuunstancias "Newsweek", 25.2.1974 (Nueva York). Carlos Arias Navarro, en un tiempo el duro jefe de policía de España. nunca ha sido conocido como liberal. Cuando fue nombrado presidente del Gobierno en diciembre pasado, tras el espectacular asesinato de Luis Carrero Blanco, fue considerado por muchos como exponente más rígido que su predecesor ·dcl ala derecha. Pero Arias, plenamente consciente de la extendida intranquilidad que ha agitado a su país en años recientes, ha decidido por lo visto que ha llegado el momento de un cambio. (... ) Como era de esperar, Arias ha puesto en claro que no tenía la intención de convertir a España en una auténtica democracia. Más bien,· el presidente del Gobierno ha intentado aflojar algo las riendas sobre la sociedad española en anticipación del tránsito de la dictadura de Franco a una forma menos autocrática de monarquía.( ... ) · Al régimen franquista con Arias Navarro no le faltarán ocasiones de demostrar sus buenas intenciones "Frankfurter Allgemeine Zeitung", 13.2.1974 (Francfort/M) Madrid, 12 febrero (Wha.).- (... ) El amplio tratamiento de los problemas internos sugiere que Arias Navarro sabe perfectamente dónde radican las tareas más urgentes de su Gobierno. Más duros son los pasajes relativos al orden público: sin embargo, podría esperarse que el Gobierno distinga más exactamente entre terrorismo y la lucha con métodos pacíficos: entre acciones violentas y la actuación en parte todavía ilegal en España por mayores libertades políticas y sindicales. Para ello no