Boletín Digital Nº26 FEDERACIÓN ARGENTINA DE EMPLEADOS DE COMERCIOS Y SERVICIOS SECRETARÍA DE ESTUDIOS Y ESTADÍSTICAS (SEyE) ENERO DE 2013 EVOLUCIÓN DE LA ACTIVIDAD ECONÓMICA • LA ECONOMÍA MUNDIAL MOSTRÓ EN 2012 UN BAJO RENDIMIENTO Y SE ESPERA QUE 2013 ESTE DESEMPEÑO MEJORE SÓLO LEVEMENTE. ESTO ES RESULTADO DEL IMPACTO QUE LA CRISIS ECONÓMICA DE LOS PAÍSES CENTRALES, GENERÓ TERMINOS DE DESACELERACIÓN MUNDIAL DEL RITMO DE CRECIMIENTO ECONÓMICO. EN ESTE MARCO, SE CALCULA QUE LA EVOLUCIÓN DE LA ACTIVIDAD ECONÓMICA MUNDIAL GIRARÁ EN TORNO AL 3%. • LAS PERSPECTIVAS ECONÓMICAS DE AMÉRICA LATINA PARA 2013 SERÁN POSITIVAS, PERO SUJETAS A LA INCERTIDUMBRE Y LA VOLATILIDAD EN LA QUE SE ENCUENTRA EL CONTEXTO EXTERNO MUNDIAL. DESPUÉS DE CASI UNA DÉCADA DE EXPANSIÓN CONTINUA, ÚNICAMENTE INTERRUMPIDA DURANTE 2009, LAS PROYECCIONES MÁS RECIENTES DE LA CEPAL INDICAN QUE EL PRODUCTO BRUTO INTERNO (PBI) REGIONAL CRECERÁ EN TORNO AL 4,0%. • ARGENTINA, EN ESTE MARCO, SE HALLA EN CONDICIONES DE CRECER y RESOLVER LOS POTENCIALES IMPACTOS DEL SECTOR EXTERNO A TRAVÉS DE LA RECUPERACION DE LAS EXPORTACIONES y EL DESARROLLO E IMPULSO DEL MERCADO INTERNO CON MEDIDAS ACTIVAS. ESTOS FACTORES HACEN QUE LAS ESTIMACIONES DEL BCRA SEAN DE UN CRECIMIENTO EN TORNO AL 4,6% ANUAL. EVOLUCIÓN DEL PRODUCTO BRUTO INTERNO Fuente: BCRA en base a FMI e INDEC – e: estimado p: proyectado EL MUNDO La economía mundial mostró en 2012 un bajo rendimiento y se espera que 2013 este desempeño mejore sólo levemente. Esto es resultado del impacto que la crisis económica de los países centrales (con recesión o crecimiento exiguo; con depresión de la demanda interna -por altos índices de desocupación, problemas financieros de las familias y de las empresas- y con políticas del sector público de ajuste fiscal), generaron en la forma de desaceleración mundial del ritmo de crecimiento económico. Las principales economías del mundo no tendrán el desempeño esperado para una recuperación plena. Se estima que Estados Unidos y Japón lograrán un crecimiento bajo pero algo superior al de 2012; en tanto que la recesión extendida en Europa terminaría en casi un crecimiento nulo en 2013 (o incluso en una profundización del decrecimiento). Sin embargo, los índices de crecimiento mundial seguirán siendo positivos gracias al comportamiento de los países en desarrollo, aunque éstos también mostrarían a un grado moderado de crecimiento. En este marco, se calcula que en el año 2013 el desempeño de los índices de evolución de la actividad económica mundial girará en torno al 3%. Ahora bien, mientras que no se anticipan nuevos eventos críticos que profundicen la crisis económica iniciada a fines de 2008, el nivel de incertidumbre sobre la evolución del desempeño económico del mundo se mantiene alto. En 2013, Europa, continuará debatiéndose en torno a resolver la crisis de deuda, la fragilidad del sistema financiero y el crecimiento económico. Adicionalmente, si bien la economía de Estados Unidos crece a tasas más altas que la Unión Europea, la consolidación económica de su desempeño aún es débil y persiste el riesgo de una contracción fiscal fuerte en 2013. A este bajo crecimiento del mundo desarrollado se suma cierta desaceleración de las economías de China e India, que han sido un motor importante para el crecimiento mundial, en particular para América Latina. En este marco, los principales países a los que la Argentina exporta, sostienen estimaciones de desempeño económico para 2013 de crecimiento por encima del promedio mundial, del 3,6%. En Brasil, por caso, se espera un crecimiento del 3,8%, asociado básicamente al aumento de la demanda interna (motorizada por decisiones de promoción del consumo y la inversión). Por otro lado, en China, se espera que crezca a ritmo similar al de 2012, con una suba del 8% anual. Si aparecieran otros factores o condiciones adversas no previstas, el desempeño de las economías emergentes podría verse afectado. Pero, tanto Brasil como China tienen aún margen de acción amplio para la implementación de políticas contracíclicas no restrictivas de estímulo económico que, como lo vinieron haciendo en la profundización de la crisis internacional, serían su manera de apuntalar su crecimiento y no afectar el desempeño esperado para sus socios comerciales, como es el caso de la Argentina. EVOLUCIÓN DEL PRODUCTO BRUTO INTERNO PARA EL MUNDO, LA ARGENTINA y SUS PRINCIPALES SOCIOS COMERCIALES Fuente: BCRA en base a FMI y FE – e: estimado p: proyectado *Países que recogen el 80% de las exportaciones argentinas. AMÉRICA LATINA Durante 2012, el crecimiento económico de América Latina se desaceleró acumulando una expansión general anual estimada del 3,2%. El consumo privado fue el principal motor del crecimiento, gracias a la favorable evolución de los mercados laborales y la expansión del crédito y, en algunos casos, de las remesas. Además, el dinamismo de la inversión, sobre todo en el área de la construcción, y las exportaciones netas incidieron en la moderación de la desaceleración. Sin embargo, en general, el comercio exterior ha sido el principal canal por el cual la debilidad de la economía mundial influyó en el desempeño económico de América Latina y el Caribe, y ha habido una tendencia a la disminución de los precios de la mayoría de los principales bienes básicos de exportación y un marcado enfriamiento de la demanda externa, sobre todo de Europa y Asia (CEPAL, 2012). La región sufrió en 2012 un deterioro en los términos de intercambio y las relaciones de cuenta corriente aunque moderados, producto del deterioro de la balanza comercial. En 2013 el desempeño económico dependerá fuertemente de la recuperación de las economías de los países centrales y al comportamiento de China, pero también dependerá de la capacidad de respuesta de cada país de la región individual y colectivamente. Así, el escenario de base para la evolución económica es común para todos los países, pero implica perspectivas diferenciadas, principalmente asociada al comportamiento de China y Europa y las relaciones comerciales que cada país de la región tiene con estos principales motores de la economía mundial. En efecto, por un lado, el comportamiento económico y las relaciones comerciales de China ha afectado más a los países de América del Sur que son exportadores de los productos básicos que ha demandado esa economía, y este efecto podría aumentar, especialmente en el caso de los minerales y metales, si se reflejara en una menor contribución de la inversión al crecimiento en ese país. Sin embargo, la mayor parte de los países de América del Sur cuentan con cierto espacio fiscal que podría revertir el efecto contractivo de la menor demanda externa, al menos durante 2013. Asimismo, la recesión en Europa ha tenido un mayor impacto en algunas economías de América del Sur, como el Brasil, Chile y Uruguay, además de favorecer cierta inestabilidad de los mercados financieros; pero con políticas contracíclicas y macro prudenciales, estos países también podrían reducir, transitoriamente, la incidencia de estos factores externos negativos. En ese sentido, la mayoría de los países de la región está realizando un esfuerzo integrado en el ámbito de la política monetaria, cambiaria y macro prudencial para reducir los efectos de la volatilidad financiera internacional. Sin embargo, si fracasan los procesos políticos dirigidos a resolver los problemas bancarios, financieros y fiscales en los países desarrollados, y China no creciera como se lo espera, podría contemplarse otro escenario de fuerte contracción y de consecuencias similares a la gran recesión de 2009 que, de combinarse con un alza aguda del precio del petróleo, empeoraría seriamente el panorama previsto aun cuando hubiera cierta capacidad de respuesta contracíclica por parte de la mayoría de los países de la región. A pesar del contexto mundial, y a pesar de cierta tendencia de desaceleración, gran parte de los países de la región sostienen su dinamismo y crecimiento. Es que el deterioro de la economía internacional tras la crisis de 2009 se tradujo en una desaceleración de la actividad económica en América Latina. El crecimiento moderado de 2012 se ha mantenido gracias a la expansión del consumo, aunque en aquellos países con mayor dinamismo también ha habido aportes de la inversión (especialmente en la construcción) y, en un grupo muy reducido, de las exportaciones netas, a pesar de la contracción del comercio mundial. Como resultado de ello, numerosos países tuvieron en 2012 tasas de crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI) similares o levemente inferiores a las de 2011. Este crecimiento de entre un 3,5 y un 5,5%, basado principalmente en el consumo y, en menor medida, en la inversión, se ha reflejado en una mayor actividad de los sectores no transables, como el comercio interno y la construcción, y en un menor dinamismo de sectores transables como la industria. Sin embargo, Argentina y Brasil, que tienen un peso considerable en el PBI ponderado de la región, tuvieron una tasa de crecimiento bastante menor que la del resto, lo que explicaría en gran medida la reducción de la tasa de crecimiento de la región en 2012, del 3,2%, en contraste con la tasa del 4,3% registrada en 2011 Para 2013 se espera una tasa de crecimiento levemente menor en la mayoría de los países sudamericanos, más dependientes de las exportaciones de productos básicos a China, y un crecimiento similar al del año anterior en el resto. Sin embargo, en el caso de Argentina y Brasil, después del marcado descenso de la actividad en 2012, se prevé cierta recuperación en 2013, que contribuiría en gran parte al aumento de la tasa de crecimiento de la región previsto para ese año, de un 4,0%, superior al 3,2% de 2012. ARGENTINA EVOLUCIÓN DEL PRODUCTO BRUTO INTERNO ARGENTINO Fuente: INDEC. SEyE en base a INDEC y BCRA. 2012: estimada; 2013:proyectada El desempeño económico argentino recuperará dinámica en 2013 gracias a la expansión del consumo interno (demanda interna), el crecimiento de las exportaciones (demanda externa) y el buen desempeño del campo y la cosecha agrícola. Por ello, se proyecta un crecimiento de la economía del 4,6% para 2013, más que duplicando la tasa estimada de crecimiento para 2012 del 2%. Todos los sectores de la economía se beneficiarían de este crecimiento, abonando a la recuperación de la senda del dinamismo. Los referentes de este proceso serán la industria y el sector agropecuario. Así, mientras que las ramas industriales asociadas a la exportación (como la automotriz y el de las metálicas básicas) se beneficiarían del dinamismo económico esperado en Brasil, el resto de las actividades industriales lo harían por el aumento de la demanda interna. Así también, la construcción respondería empujando la demanda interna con el impulso que recibirá la obra pública y al impacto del programa vigente de créditos destinados a la construcción de viviendas (Pro.Cre.Ar.). Estas estimaciones sobre la industria tendrían lugar en el marco de una producción agrícola excelente. En efecto, y en relación al ciclo anterior, la campaña 2012/13 experimentaría un crecimiento cercano al 20% con incrementos en los volúmenes de las cosechas de maíz y de soja que lograrían ubicarse fácilmente en el mercado externo. En un escenario que supone que las cotizaciones internacionales de las materias primas se mantengan en los actuales niveles elevados y dado que los cambios en la estructura productiva son necesariamente graduales, se proyecta una trayectoria para los precios internos similar a la observada durante el corriente año. Para 2013 se estima que tanto las exportaciones como las importaciones cobren dinamismo. El superávit comercial resultaría similar al de 2012, superando por doce años consecutivos los US$10.000 millones. Las exportaciones de bienes aumentarían 13% respecto de 2012, influidas por los mayores saldos agrícolas y como resultado de la recuperación de la demanda de nuestros principales socios comerciales, particularmente de Brasil. Las importaciones también se incrementarían —principalmente los insumos para la producción local y la inversión— de manera consistente con las proyecciones del desempeño de la actividad económica interna. El crecimiento económico argentino promovería aumentos en el nivel de empleo. Los sectores productores de servicios se mantendrán como los principales generadores de empleo el año próximo, en tanto que la ocupación en los rubros productores de bienes cobrará mayor dinamismo a partir del repunte esperado de las actividades vinculadas al sector agropecuario y a la construcción. Por esto se espera que la participación de los asalariados en el ingreso nacional continúe en ascenso. La suba de la masa salarial y las políticas de ingresos darán sustento a un consumo más elevado de las familias y el incremento del gasto de los hogares. En efecto, las políticas de distribución del ingreso persistirán durante el año 2013, por lo que se prevé una suba de la participación de la población de menores recursos en el ingreso total y en la potenciación del consumo interno. Asimismo, las políticas de promoción al crédito productivo propiciarán el aumento de la inversión, en especial como resultado del incremento en el gasto de equipamiento, componente de la demanda agregada que se espera registre la recuperación más pronunciada. Así, se alcanzaría una tasa de inversión que en promedio se ubicaría en torno a 24% del PBI, superior a la de 2012. El consumo seguirá creciendo con firmeza y contribuirá con más de las dos terceras partes al aumento del Producto. Fuentes: BCRA, (2012). Objetivos y planes de Banco Central. Buenos Aires: Banco Central de la República Argentina. CEPAL (2012). Perspectivas Económicas de América Latina 2013. DEV / CEPAL. SEyE (2010). Informe de Actualización: Nivel de Actividad. Boletín Digital N°13. Buenos Aires: FAECYS. SEyE (2011). Evolución de la Actividad Económica. Boletín Digital N°16. Buenos Aires: FAECYS. FEDERACIÓN ARGENTINA DE EMPLEADOS DE COMERCIOS Y SERVICIOS INFORMACIÓN DE CONTACTO SEyE - Secretaría de Estudios y Estadísticas Secretario Miguel Ángel Santellán Julio A. Roca 644 - 4to Piso - CP 1067 Tel. 011-4343-2783 ó 4342-5486 Correo electrónico: secestadisticas@faecys.org.ar Página Web: www.faecys.org.ar