GUIA DE HISTORIA DEL ARTE IMPRESIONISMO, POSTIMPRESIONISMO Y VANGUARDIAS 5º AÑO DISEÑO INDUSTRIAL PROFESOR RICARDO SOCOLSKY INTRODUCCIÓN El mundo de la cultura y particularmente del arte es especialmente sensible a los cambios que se producen en la sociedad. Estos cambios son políticos, económicos, sociales e impactan en la vida de las personas tanto en lo cotidiano como en todo aquello que tiene que ver con las manifestaciones culturales, o sea, los gustos, las modas, las formas de comunicación. Situarse en cada época, en cada sitio, nos ubica en el contexto y así nos da una idea del porqué de las transformaciones. A mediados del siglo 19, Europa se sacudía al compás de la revolución industrial, proceso transformador de una fuerza tremenda, que impactaba en todos los aspectos de la vida. Como habíamos visto anteriormente, la revolución francesa puso en el tapete la cuestión humana, los derechos, la búsqueda de un equilibrio social y esto produjo el surgimiento de movimientos sociales como el socialismo y el comunismo. Estas ideas tuvieron su correspondencia con grupos artísticos que apoyaron y produjeron obras con una impronta social. A este grupo de escritores y pintores los llamaremos realistas o naturalistas. En cuanto a lo literario, los temas sociales, la pobreza, la marginalidad, la lucha por salir del pozo, la sed de justicia o el retrato de las condiciones de vida imperantes en los sectores menos favorecidos eran los temas preferidos. Emile Zola, Víctor Hugo, Charles Dickens, por nombrar algunos escritores, fueron los que reflejaron bien estas tendencias, y en las artes plásticas se destacará Gustave Courbet, quien se dedica tanto a los paisajes rurales como a reflejar situaciones de la vida diaria, los pueblerinos, los trabajadores…Otros artistas destacados son los que pertenecieron a la llamada escuela de Barbizon, por ejemplo: Millet, T. Rousseau, Corot. Y destacamos la labor como caricaturista y crítico de la sociedad H. Daumier. Entonces llegarán los impresionistas, de quienes se habla a continuación, luego sus herederos, los llamados postimpresionistas, quienes continuarán y modificarán las propuestas de sus precedentes dando lugar a las llamadas vanguardias. Una vanguardia es una expresión cultural que refleja los cambios de su tiempo histórico, que avanza expandiendo los límites conocidos, que provoca, revoluciona, moviliza. Que confronta con las visiones conservadoras. Las vanguardias han sido y son absolutamente necesarias para crecer, y crecer a veces no es ni cómodo ni agradable, como no es agradable mirarse en el espejo y no ver siempre lo que uno cree que es sino lo que verdaderamente es. IMPRESIONISMO El Impresionismo designa un movimiento pictórico compuesto por una serie de artistas, que se asociaron en algunos momentos determinados al coincidir algunos de sus planteamientos estéticos, pero que no constituyeron una escuela propiamente dicha, ya que esta asociación fue intermitente, conservando siempre cada artista su fuerte carácter individual. De todos modos hay una serie de principios que son comunes a todos ellos. Las características del movimiento son, en primer lugar, el gusto por el paisaje. Éste procede directamente de los paisajistas franceses Corot y la Escuela de Barbizon, ya que parece que aunque las preocupaciones de los impresionistas se relacionan directamente con las de Constable y Turner, no se ha demostrado la relación directa entre ellos. La práctica generalizada del paisaje de los impresionistas dio lugar a importantes consecuencias, como la implantación definitiva de la pintura a “plein air”, al aire libre, y la fijación del interés en los aspectos más efímeros y fugaces de la naturaleza, el mar, el cielo, las nubes, el sol, etc. Otra de ellas fue la ejecución de series, en un intento por captar lo fugaz, los destellos de la luz y del color, como auténticos protagonistas del cuadro y además el desdén por los sistemas académicos de composición, predominando en ellas la asimetría. La proyección hacia los lugares abiertos les permite además, trabajar con la luz natural y con los colores puros, sin mezclar. La segunda característica reseñable del Impresionismo es el realismo, la captación de trozos de vida, el intento de aprehender el mundo visible tal como se ve, es decir en su fugacidad (lo cual lo entronca con la fotografía). La tercera es la técnica empleada. Así en cuanto al color conocen las teorías de la descomposición de la luz al pasar por un espacio prismático. Se apasionan con los descubrimientos de Rood y Chevreuil que dan la razón de manera científica a los postulados de Delacroix acerca de los colores primarios y complementarios. Los colores primarios asociados entre sí de dos en dos dan como resultado el complementario del tercero, pero lo que van a hacer los maestros impresionistas es que en vez de que los colores se fundan en la paleta y en el pincel, colocan los primarios próximos entre sí, para que sea el ojo del espectador el que los confunda y se cree en su retina el complementario. Además según la ley de los contrastes simultáneos de Chevreuil, los colores difunden una orla del complementario (así el blanco opuesto al rojo, parece reverdecer), lo que permite crear contrastes cromáticos. Así, si en la pintura tradicional los colores se mezclaban de forma indiscriminada en la paleta, los impresionistas pintaban con colores puros, y los mezclaron directamente en el cuadro, mediante una sutil técnica de juego de colores primarios y complementarios, para que sea el ojo del espectador el que genere el color resultante. Es una de las esencias de la pintura impresionista, dando como resultado una paleta de colores clara, muy luminosa, imprescindible para pintar al aire libre. Las sombras dejan de ser oscuras y se reducen a espacios coloreados con los colores complementarios (luces amarillas/sombras violetas), desapareciendo los contrastes del claroscuro. Con esta manera de concebirlas, no usan el negro para las mismas, ya que éstas en la realidad nunca lo son, y las pinceladas son pequeñas con forma de coma, descartándose la forma “dibujada”, contorneada, dejando que se fundan todas las partes del cuadro creando así una sensación de atmósfera. Los principales exponentes del Impresionismo fueron: E. Manet, quien con sus pinturas El almuerzo sobre la hierba y Olympia, llamó la atención de los jóvenes artistas franceses que estaban investigando las nuevas tendencias, Claude Monet, líder del movimiento, pintor de paisajes, P. Renoir, gran retratista y pintor de mujeres, C. Pissarro, A. Sisley, E. Degas, quien pintó bailarinas, caballos y prostitutas, pero hay muchos artistas más y muy buenos. POSTIMPRESIONISMO El postimpresionismo es un término histórico – artístico que se aplica a los estilos pictóricos de finales del siglo XIX. Varios artistas partiendo del impresionismo derivan hacia una pintura personal, teniendo como principales características la recuperación de la importancia del dibujo y la preocupación por captar no sólo la luz sino también la expresividad de las cosas y de las personas iluminadas. El Postimpresionismo es importante en la historia del arte porque abre con sus innovadoras propuestas el camino de la renovación pictórica que trajeron los movimientos artísticos de vanguardia. Movimientos como el Fauvismo, Cubismo o Expresionismo recibieron la influencia de los artistas Postimpresionistas. El impresionismo, con su afán por captar la luz del natural, había ido disolviendo las formas en su ambiente y todos los elementos del cuadro habían ido perdiendo volumen, dibujo y sentido del espacio. En los últimos años del XIX y principios del XX nos encontramos con unos pintores que partiendo del impresionismo, derivan hacia una pintura personal que anuncian algunos de los movimientos pictóricos más importantes del siglo XX. Su trascendencia para la evolución del arte es, si cabe, mayor que la de los pintores impresionistas. Algunas características generales son: - Interés por la construcción de la forma, el dibujo y la expresividad de los objetos y figuras humanas. - Conciliación entre efecto volumétrico (conculcado por el fulgor luminoso impresionista que casi había desmaterializado las formas) y el gusto puramente estético (Cézanne). - Concepción del cuadro a base de cuerpos rigurosamente geométricos (Cézanne). - Empleo de colores contrastantes para definir los planos y formas. - Efectos pictóricos basados en búsquedas estructurales, espaciales y cromáticas. - Utilización de colores puros con gran carga emotiva (Van Gogh) y modulados (Gauguin)). - Creaciones imaginativas a base de pinceladas cursivas que intentan expresar la angustia y el desconsuelo interior (V. Gogh). - Interés por lo exótico (Gauguin) y los bajos fondos (Toulouse-Lautrec). - Creación de composiciones simplificadas y estáticas, buscando la armonía de las masas cromáticas encerradas en perfiles bien ceñidos (Gauguin). INFLUENCIAS - De los impresionistas, el gusto por los contrastes de colores en Cézanne.- De Rubens, de los neoimpresionistas y de la estampa japonesa, el rico cromatismo, los colores puros y la cursividad fluyente de las formas en V. Gogh- De las culturas exóticas de Oceanía, el primitivismo en Gauguin. Los pintores postimpresionistas Paul Gauguin(1848-1903). Se inicia en el impresionismo con Pissarro; deja una vida confortable, familia, mujer e hijos y se instala pobremente en París y Bretaña y después se traslada a Tahití, donde pinta sus series de mujeres tahitianas. Destaca por el uso tan expresivo que hace del color con tonos fuertes, vivos y muchas veces arbitrarios que dispone en grandes planos delimitados por ritmos lineales curvos. Tiene dos temas preferentes: el mundo exótico de Tahití y el "primitivismo" de Bretaña. Su obra es preferente del simbolismo y su sentido del color influirá en los fauvistas y expresionistas. Renuncia a la perspectiva, suprime el modelado y las sombras e identifica la sensación de plano igual que en las pinturas japonesas. Paul Cézanne( 1839-1906). En su pintura se recupera el volumen gracias a la geometría, el dibujo y la definición de las formas mediante pinceladas que han sido llamadas constructivas; todo esto sin renunciar al color de gran intensidad mediante los contrastes y las sombras coloreadas. En sus cuadros se potencia el primer plano y realiza pequeñas distorsiones fruto de la utilización de más de un punto de vista (bodegones). Su pintura es el punto de arranque del cubismo y ha influido en coloristas como Matisse. Los jugadores de cartas, la montaña de Santa Vitoria.. Van Gogh(1853-1890). Se establece en Arlés entusiasmado por la luz de la Provenza pinta figuras y paisajes de formas serpenteantes y flamígeras que traducen su fuego interior. Es un apasionado del color como vehículo para expresar las frecuentes depresiones y angustias que padeció. Su pincelada es muy característica, sinuosa, cursiva y espesa; los colores son a veces agresivos con contrastes no frecuentes- amarillo sobre naranja-. Abre las puertas al expresionismo del XX. Autorretrato, Noche estrellada, La siembra,... Toulouse-Lautrec(1860-1901). Nos refleja el ambiente de los salones nocturnos: bailarinas, cantantes y prostitutas son sus modelos. En su técnica el dibujo, la captación del movimiento y la carga irónica y caricaturesca es esencial. Fue el impulsor del cartel. En sus obras, destaca: Moulin Rouge. Naturaleza muerta con pañería, jarro y frutero (1893-1894) de Paul Cézanne El postimpresionismo era tanto una extensión del impresionismo como un rechazo a sus limitaciones. Los postimpresionistas continuaron utilizando colores vivos, una aplicación compacta de la pintura, pinceladas distinguibles y temas de la vida real, pero intentaron llevar más emoción y expresión a su pintura. Aunque a menudo exponían juntos, no se trataba de un movimiento cohesionado. Trabajan en áreas geográficas distantes entre sí, van Gogh en Arlés, Cézanne en Aix-en-Provence. Sus formas más exageradas y el uso del color, estructura y líneas prepararon el terreno para los estilos que seguirían más adelante del siglo XX, como el fauvismo o el cubismo. El crítico de arte y pintor Robert Fry fue el primero en el utilizar el término "postimpresionismo" cuando en 1910 organizó una exposición en las Grafton Galleries de Londres titulada Manet and the Post-Impressionists, en la que los protagonistas más destacados fueron Cézanne, Gauguin y Van Gogh, por entonces ya todos ellos fallecidos. Con el postimpresionismo se creó un nuevo tipo de artista, el genio individual que vive de su arte, la personalidad creadora que plasma su psicología en el cuadro, gracias a su trazo singular, al color personal, y a la recuperación de las formas y las estructuras, pero con una nueva lectura. El color se hace representativo y subjetivo, no objetivo. Se representa el color con que se ve el alma de las cosas. La realidad se interpreta según la visión personal del genio creador. Los pintores huyen de París buscando el primitivismo del arte, aunque esta ciudad sigue siendo el centro del arte mundial. Estos nuevos impresionistas tienen una visión particular de su pintura, que les aleja del impresionismo clásico. Casi todos estos autores serán, durante un tiempo, impresionistas, pero lo superarán dando soluciones personales. Muchos de ellos están en el origen de las vanguardias históricas. Puntillismo También denominado Neoimpresionismo o Divisionismo. Fue la derivación y recuperación del impresionismo , siendo sus principales promotores los pintores franceses Paul Signac y Georges Seurat. Tomando como punto de partida los trabajos de Eugenio Chevreul, hacia finales del siglo XIX y comienzos del siglo XX, se desarrolló esta experiencia que pretendía instaurar un nuevo modo de plantear el tratamiento del color, sustituyendo la mezcla de los pigmentos en la paleta por el empleo de puntos o toques separados para que la mezcla se efectuara en la retina. Según Signac (en su famoso libro De Eugenio Delacroix al Neoimpresionismo, 1899) el proceso conducente al Puntillismo se inició con Delacroix, el cual “al repudiar toda tinta plana y mediante la degradación, el contraste y la mezcla óptica, logró, con los elementos en parte rebajados de que dispuso, una intensidad máxima cuya armonía está garantizada por la aplicación sistemática de las leyes que rigen el color”. El impresionismo “al poner en su paleta solamente los colores puros obtiene un resultado mucho más luminoso y colorido que el de Delacroix, pero disminuye su intensidad por las mezclas pigmentarias ensuciadas y reduce la armonía al aplicar solamente en forma intermitente e irregular las leyes que rigen el color”. Finalmente, el Neoimpresionismo “por la supresión de toda mezcla sucia, por el empleo exclusivo de la mezcla óptica de los colores puros, por la división metódica y la observación de la teoría científica de los colores, garantiza un máximo de luminosidad, de colorido y de armonía, que todavía no se había alcanzado”. Resulta claro, pues, que el Puntillismo fue un intento para sincronizar las técnicas pictóricas don los descubrimientos de la ciencia óptica. VANGUARDIAS FAUVISMO Fue Louis Vauxcelles el que bautizó el nuevo movimiento como Fauvismo, escribió el artículo "Donatello entre las fieras" con motivo de lo visto en el Salón de Otoño de 1905. Ellos recibieron el epíteto con gran honor, ya que se sentían ante todo unas fieras del color. Son "animales" pero con instinto sosegado a la hora de pintar. Para hablar de los orígenes, tenemos que recordar a Gauguin y a Van Gogh, ya que ellos, huyendo del Impresionismo apostaban por obras intensamente coloreadas. Es revelador el consejo de Gauguin al hablar de la importancia del color puro: "...¿Esta sombra es más bien azul?, píntela de azul marino, ¿Las hojas son rojas?, póngale bermellón..." . Son palabras que constituyen este nuevo modo de ver, o mejor, de entender la vida. Es por ello que el Fauvismo no se interese por la introducción de nuevos temas, se tratan los géneros de siempre: el retrato, el paisaje, interiores de vivienda, naturalezas muertas... . El Fauvismo no debe entenderse como movimiento hermético, sino como un estallar estético y sentimental. El Fauvismo es un estado de espíritu ligado a las circunstancias del momento. Se rechaza la existencia de un método riguroso, en pro de una libertad total ante la naturaleza. La primacía del color obliga a la forma a ser más expresiva que fiel a la realidad. El pintor fauve establece una patética comunión con la naturaleza, rechaza convencionalismos y descubre un lenguaje personal para alcanzar el máximo objetivo, la unión de arte y vida. El artista es un Demiurgo, o un nuevo dios que moldea su obra, la crea según un principio generador asimilable a la naturaleza. Esta liberación fauvista no tiene que ser entendida como desorden, rechazo de disciplinas o ignorancia, pues la libertad no se reclama hasta que se tiene plena conciencia de haber alcanzado los medios necesarios. Antes de lanzarse a la aventura de la innovación se aprende la técnica. Otra de las características del Fauvismo es el gusto por el arte africano-negro y la influencia que éste ejerció en las obras. Se sabe como Maurice Vlaminck admiraba profundamente las máscaras procedentes de la Costa de Marfil. Este gusto por "lo otro" se generaliza en un ambiente que cada vez camina más hacia la vanguardia. El arte de los pueblos primitivos no es imitativo, sino que plantea un evidente alejamiento de las formas naturalistas para tender a la esquematización. Posteriormente esta influencia sería seguida del Cubismo, basta recordar las "Señoritas de Avignon" de Picasso. No se debe olvidar la influencia de Cézanne. Podemos nombrar a Matisse como el representante más puro de la tendencia, seguido de André Derain. Cada artista adapta el color a su forma de vida. Este es el caso de artistas como Dufy, Friesz, Braque, Rouault, Van Donguen... . La obra de Rouault debe relacionarse con el Expresionismo por sus contenidos de proclamas de fe y de acusación, sus obras están dominadas por un íntimo impulso dominado por el drama y por el fervor cristiano. Friesz apuesta por la sensualidad de temperamento, Van Donguen por la exageración, Braque se verá seriamente influido por el Cubismo... . El Fauvismo constituyó un momento extraordinario por la integración de artistas de tan diferente origen y carácter. Por lo general los fauves franceses no se detienen en investigaciones psicológicas o sociales, mientras que los alemanes otorgan un contenido más sentimental a sus videncias. Mientras que la fecha de 1905 puede considerarse como la de un Fauvismo puro, la de 1907 responde al desbordamiento de otros planteamientos. EXPRESIONISMO El Expresionismo es una corriente artística que busca la expresión de los sentimientos y las emociones del autor más que la representación de la realidad objetiva. Revela el lado pesimista de la vida generado por las circunstancias históricas del momento. La cara oculta de la modernización, la alineación, el aislamiento, la masificación, se hizo patente en las grandes ciudades y los artistas, creyeron que debían captar los sentimientos más íntimos del ser humano. La angustia existencial es el principal motor de su estética. El fin es potenciar el impacto emocional del espectador distorsionando y exagerando los temas. Representan las emociones sin preocuparse de la realidad externa, sino de la naturaleza interna y de las impresiones que despierta en el observador. La fuerza psicológica y expresiva se plasma a través de los colores fuertes y puros, las formas retorcidas y la composición agresiva. No importa ni la luz ni la perspectiva, que se altera intencionadamente. La obra de arte expresionista presenta una escena dramática, una tragedia interior. De aquí que los personajes que aparecen más que seres humanos concretos reproduzcan tipos. El primitivismo de las esculturas y máscaras de África y Oceanía también supuso para los artistas una gran fuente de inspiración. Precedentes del Expresionismo Encontramos algunas raíces del Expresionismo en las pinturas negras de Goya, que rompe con las convicciones con las que se representaban las anatomías para sumergirse en el mundo interior. Sin embargo, los referentes inmediatos son Van Gogh y Gaugin, tanto por la técnica como por la profundidad psicológica. Otro grupo de gran influencia es el simbolismo, entendido como la búsqueda en la cual el artista, limitando la pintura objetiva, concreta los sentimientos, los estados del alma, los miedos subjetivos, las fantasías y los sueños. El Expresionismo se inicia con un periodo preliminar representado por el belga Ensor y el noruego Munch. Ensor (1860-1949) Ensor pinta desfiles fantasmales de personajes enmascarados y caricaturescos. La máscara se convierte en la expresión de lo amenazador y lo desconocido que refleja la ironía sobre la condición humana. El asombro de la cámara de Wouse, La máscara y la muerte. Edvard Munch (1863-1944) El estímulo más importante lo encuentra Munch en las imágenes simplificadas de las obras de Gaugain, que le servirán para transmitir la angustia y la soledad. Vivió angustiado, tuvo problemas psíquicos y esos sentimientos son los que volcará en su pintura. En él la expresión surge como resultado de su vida atormentada. Siente predilección por la figura humana y las relaciones personales. Le obsesiona la impotencia del ser humano ante la muerte y la identifica con la mujer. Tiene una visión negativa de la vida, de la indefensión, de la soledad humana y del sexo. El grito es la expresión de su miedo personal, pero en este cuadro Munch logra expresar el desfallecimiento del hombre ante una realidad cada vez más compleja y confusa. Expresionismo Alemán El movimiento expresionista se desarrolló principalmente en Alemania. Die Brücke ( El Puente) En 1905 se constituye en Drede el grupo Die Brücke (El Puente), coetáneo al movimiento fauvista francés. Mientras los fauves se movían por intereses meramente plásticos cuyos temas eran intrascendentes, los alemanes, con una técnica similar en cuanto a la intensidad de las siluetas y las masas cromáticas, prefiriendo los tonos oscuros, difieren por la plasmación de las angustias interiores del hombre y sus preocupaciones existenciales. En el grupo Die Brücke, influido por Munich, destacan Nolde y Kirchner. Son artistas comprometidos con la situación social y política de su tiempo. Kirchner intenta demostrar con su paleta estridente y sus trazos angulosos los oscuros deseos que laten en el fondo de los seres humanos. Mujer del busto desnudo con sombrero. Nolde conseguirá pintar la desnudez de las almas humanas. Bailarinas de las velas, Susana y los viejos. Der Blaue Reiter ( El Jinete Azul) El grupo Der Blaue Reiter se formó en Munich en 1911, recibió una importante aportación internacional sobre todo del cubismo y el futurismo, ya que lo integraron numerosos artistas extranjeros. Además del alemán Franz Marc, encontramos al ruso Kandinsky, al suizo Klee, a August Macke y a Gabriel Münter entre otros. El arte del Jinete azul es más exquisito, subjetivo y espiritual que el de Die Brücke. Les importa más el cómo de la representación que el qué. Los artistas creían que el significado y el sentido de cada cuadro están en manos del propio espectador. El artista da forma a la emotividad en su obra y a su vez el cuadro causa en quien lo observa determinados sentimientos. Sus componentes evolucionarán rápidamente a formas abstractas, como es el caso de Kandinsky. La representación del objeto en sus pinturas es secundaria, ya que la belleza residía en la riqueza cromática y en la simplificación formal. Paul Klee perteneció al Jinete Azul, pero seguiría su propio camino alejándose de dicho movimiento. Quiere despojar las cosas de todo formalismo. Su mundo surge de su propia realidad interior. Parte de su obra es abstracta, aunque conserva en general cierta referencia al objeto. Mantiene el vínculo con la realidad acercándose a ella por vía simbólica. Frutas en fondo azul, en el estilo de Bach son algunas de sus obras. La Primera Guerra Mundial destruye el grupo, pero el Expresionismo no se extingue, al contrario, los desastres y la crueldad de la guerra incita a otros artistas a traducir el dolor provocado. El austriaco Oscar Kokoschka (1886-1980) con su personalidad vigorosa, busca la expresión a través de la pasta y el color. En La noria del viento trasciende lo puramente figurativo y anecdótico para expresar contenidos interiores a través de sus composiciones. En La tempestad plasma al artista y a la mujer amada y refleja la perduración de la pasión amorosa en medio de circunstancias adversas. En Francia, Roault es un ejemplo de cómo se puede pasar del fauvismo al Expresionismo sin cambiar los aspectos formales, simplemente con un cambio en la concepción. Chagall y Modigliani formaron parte del grupo expresionista de la llamada Escuela de París. El italiano Modigliani destaca por sus obras humanas alargadas y nostálgicas que recuerdan al Greco. Nueva Objetividad Movimiento pictórico alemán de los primeros años de la década de 1920 que forma parte del realismo social satírico. A raíz de una exposición celebrada en 1925 con el título "Nueva Objetividad, pintura alemana desde el Expresionismo", el director de la Kunsthalle de Mannheim, G. F. Hartlaub, otorga este nombre al grupo. Las dos figuras sobresalientes del movimiento son Otto Dix y George Grosz, artistas que quieren provocar al público por medio de una figuración distante, fría y con imágenes chocantes. Para ello aprovechan los logros del fotomontaje dadaísta, utilizan algunos recursos del futurismo, como la combinación simultánea de varias visiones, y toman del cubismo la fragmentación de las formas. La preocupación por el mensaje que quieren transmitir prima sobre la forma. Otros artistas menores del movimiento fueron Heinrich Davringhausen, Georg Scholz y Alexander Kanoldt. La nueva objetividad se disipa en los años treinta. EL CUBISMO El cubismo es el movimiento más significativo y transcendente de la historia de la pintura occidental desde el Renacimiento, por lo que tiene de ruptura con la estética clásica, el concepto de belleza y las nuevas formas de observar la naturaleza. Su visión del arte es tan radicalmente diferente que conmocionó todo el mundo del arte. A partir del cubismo, el concepto de arte y de belleza cambia radicalmente, nada se podrá hacer igual, y las obras anteriores se mirarán de otra forma. Picasso está en el origen de la creación del cubismo y es su representante pictórico más destacado. Pero también es su inventor teórico, junto con Georges Braque y Juan Gris. Sus planteamientos son totalmente inéditos en el arte. Crea un nuevo lenguaje pictórico y estético que implica una nueva relación entre el espectador y la obra de arte. El espectador no se puede quedar contemplando sin más la obra, sino que debe reconstruirla en su mente para poder comprenderla. La pintura es algo mental, el espectador interpreta la realidad según las pautas que da la obra y se convierte en artista, en creador. La nueva estética se desliga completamente de la interpretación o la semejanza con la naturaleza, lo que significa que la obra de arte tiene valor en sí misma, como medio de expresión de ideas. Esta desvinculación de la naturaleza se consigue a través de la descomposición de la figura en sus partes mínimas, y pintadas de forma geométrica. Esta descomposición no es casual, sino que está muy estudiada y calculada, para permitir la recomposición mental de la figura. El cubismo es un arte creado, es un nuevo lenguaje y una nueva estética, un replanteamiento integral de la pintura y las artes plásticas. Hasta el momento, ni los más radicales fovistas se habían atrevido a romper con el lenguaje convencional y sensitivo que representaba, en mayor o menor grado, la naturaleza, desde los tiempos griegos. Pero el cubismo rompe con todo eso; es un arte mental no sólo en las formas sino en la concepción de la obra. Para comprender un cuadro hay que pensarlo. Hará un replanteamiento de la obra de arte, de lo que son las formas, de la luz, la perspectiva, el movimiento, el volumen, el espacio, el color, etc. Todo ello exige del espectador un esfuerzo mental para reconstruir la figura, que no se observa a simple vista. En el cubismo no es el color, sino la línea la que crea la figura y compone el cuadro. Sus obras no son producto de la casualidad sino de un proceso de creación meditado y consciente. El cubismo se pregunta, también, por los problemas del volumen y del espacio. Su ruptura con la tradición renacentista e impresionista es total, y busca un nuevo espacio pictórico para sus formas. Una de las características del cubismo es su representación en blanco y negro, consecuencia de su desvinculación con la naturaleza e influido por la fotografía, para facilitar la lectura del cuadro. El cubismo se preocupa por la representación del movimiento y por lo tanto del tiempo: de la cuarta dimensión. El tiempo cobra un nuevo significado tras la teoría de la relatividad de Einstein . El cuadro cubista pretende representar, al mismo tiempo, todas las formas posibles de ver una figura, esto implica que el espectador está obligado a mover los ojos para recomponer la figura. El color ceniza, el blanco y el negro, ayudan a la reconstrucción del cuadro. La cuarta dimensión está en la mente humana, vemos el mundo con movimiento, con el paso del tiempo, y eso es lo que pretende captar el cuadro cubista. Etapas del cubismo En el cubismo se distinguen, tradicionalmente, tres etapas o estilos: cezaniano, analítico y sintético. El cubismo cezaniano se caracteriza por sus formas identificables, que son reducidas a formas geométricas puras. Se trata más de un protocubismo que una nueva estética. El cubismo analítico se caracteriza por la descomposición de la forma y de las figuras en múltiples partes, todas ellas geométricas. Su objeto es conocerlas, examinarlas y ordenarlas por separado. Es el cubismo más puro y el de más difícil comprensión. Es la auténtica la estética cubista, la creadora del nuevo lenguaje. El cubismo sintético se caracteriza por potenciar las partes más significativas de la figura, reduciéndola a sus formas geométricas más puras. No es un cubismo simplificador, pero sí de más fácil lectura. Está altamente estructurado y se potencian las partes más significativas, o que se quiere resaltar. Tras la época clásica del cubismo aparecen tres escuelas: la Sección Áurea (o Sección de Oro), que pretenderá llevar las matemáticas a la pintura de manera consciente, tanto en los ritmos como en las proporciones de la descomposición cubista; el orfismo es el cubismo colorista, un tanto evocador de sueños extraños, está muy cerca de la abstracción pura; y por último está el purismo de la Bauhaus que reaccionó contra los excesos del cubismo y vuelven a las formas simples y analíticas. Del cubismo surge una nueva técnica pictórica: el collage, al pegar en los cuadro trozos de realidad que facilitan su lectura, también la inventa Picasso. Con el collage la palabra impresa entra a formar parte de la obra de arte. Pero el cubismo es, ante todo, la estética que da el paso definitivo hacia la abstracción pura. Los cubistas Pablo Ruiz Picasso (1881-1973) es la gran figura central del cubismo, y uno de los grandes genios del arte universal. Su obra artística es muy extensa pero su nombre estará siempre ligado al cubismo como su creador y su máximo representante. En 1907 pinta Las señoritas de Aviñón, cuadro que marca el comienzo del cubismo. Otros cuadros cubistas son Mujer sentada en un sillón, Mujer del abanico, Cabeza de mujer, La muchacha de la mandolina, El aficionado, y El Guernica. Georges Braque (1882-1963) es el otro gran creador del cubismo, más intelectual que Picasso. Se mantiene siempre fiel a la estética cubista. Son características sus naturalezas muertas: Naturaleza muerta en mesa de árbol, Casas en el estanque, El hombre del violín, Violín y jarra, La mesa del músico. Juan Gris (1887-1927) es el tercer gran cubista. Sus composiciones tienen una firme estructura y un ritmo armonioso. Su cubismo es, fundamentalmente, sintético y coloreado. Comienza a poner a sus obras títulos intranscendentes. Composición, El fumador, Las tazas de té, La celosía, Vaso y paquete de tabaco, El lavabo. Otros artistas destacados vinculados al cubismo fueron: Marcel Duchamp, Fernand Leger, que se caracteriza por dar volumen a los planos, Kasimir Malévich y Piet Mondrian. Muchos de estos pintores evolucionarían hacia la abstracción pura y serán más conocidos por esa obra, lo que demuestra la vinculación del cubismo con la abstracción pura. FUTURISMO La ciudad se levanta, de U. Boccioni Características Movimiento artístico italiano de vanguardia fundado por el poeta Marinetti, quien en 20 de febrero de 1909 publicó en el periódico Le Figaro de París su Manifiesto, que tuvo su continuidad en otra serie de manifiestos ya de autoría colectiva. El futurismo es el primer movimiento artístico que se organiza como tal, se reconoce y se define a través del Manifiesto Futurista. Se busca el escándalo, se admira la velocidad y la tecnología, las señas de identidad del mundo moderno y pretende romper con el pasado. Nada del pasado merece la pena ser conservado. Condenan a los museos, a los que considera como cementerios. Pretenden, y valoran, la originalidad, por encima de todo. Fue un movimiento que intentó abarcar todas las artes: la poesía, el teatro, la prosa, la música, la pintura, la escultura, la arquitectura, la fotografía y el cine (arte nuevo al que tanto se parecen algunas pinturas futuristas). Y naturalmente la política. Marinetti se vinculó al fascismo en 1919, representando el lado moderno del arte del régimen mussolininiano. Efectivamente, el Futurismo no se desarrolló hasta que un grupo de artistas firmaron el día 11 de febrero del año siguiente en Milán el Manifiesto de los pintores futuristas, seguido del Manifiesto técnico y otros. Entre los firmantes estaban los artistas Umberto Boccioni, Carlo Carrà, Luigi Russolo, Gino Severini y Giacomo Balla. En 1914 el arquitecto Antonio Sant'Elia redactó el Manifiesto de la Arquitectura futurista. Sus obras se caracterizan por el color y las formas geométricas, y la representación del movimiento y la velocidad, para ello representan los objetos sucesivamente, pintándolos en varias posiciones, o emborronándolos, un código que se ha popularizado en los cómic y los dibujos animados. Tienden a utilizar colores puros. El futurismo llegará a la abstracción a través del rayonismo. Tiene aspiraciones de ruptura total con el pasado, con lo burgués y académico, con la tradición y la belleza clásica y exalta las máquinas, la velocidad y la violencia. Estas ideas permiten que en su desarrollo encontremos desde posiciones anarquizantes hasta las claramente fascistas. El futurismo procede directamente del cubismo, incluso los primeros cuadros, son de pleno derecho, cubistas, pero evolucionan rápidamente hacia una estética diferenciada, debido a su obsesión por representar la velocidad. El dinamismo, la líneas quebradas, las composiciones diagonales y, en pintura, un fuerte colorido, son sus características principales. En arquitectura Sant'Elia defiende un urbanismo nuevo, con ciudades parecidas a máquinas, en las que predominen las líneas oblicuas y elípticas. Los futuristas Umberto Boccioni (1882-1916) que es, además, el teórico del movimiento. Intenta representar los estados anímicos y el movimiento. Dinamismo de un ciclista, Dinamismo de una cabeza de hombre, Dinamismo de una cabeza de mujer, La ciudad que crece, Estados del alma: los que se van. Carlo Carrà (1881-1966) quedará fascinado por la tecnología y los espectáculos nocturnos. Penélope, Ídolo hermafrodita, Lo que me dijo el tranvía. Luigi Russolo (1885-1947) fue el que más se acercó a la abstracción. Perfume, La música, Recuerdos de una noche. Giacomo Balla (1871-1957) es el más fiel representante del futurismo. Investigó los problemas de la luz y el color. Los ritmos del arco, Dinamismo de un perro con correa, Niña corriendo en un balcón, Vuelo de golondrinas, Lámpara eléctrica. ARTE ABSTRACTO El arte abstracto es un movimiento artístico que surgió alrededor de 1910 y cuyo propósito es prescindir de todos los elementos figurativos, para así concentrar la fuerza expresiva en formas y colores sin ninguna relación con la realidad visual. Pintura En la pintura abstracta, la obra de arte se convierte en una realidad autónoma, sin conexión con la naturaleza y, como consecuencia, ya no se representa hombres, paisajes, casas o flores, sino simplemente combinaciones de colores que intentan expresar la necesidad interior. Una de las características principales de la pintura abstracta es el uso de un lenguaje sin forma y la libertad cromática. El ruso Wasily Kandinsky es el artista que impulsa la pintura no figurativa en Munich, a principios del siglo XX. “En el campo pictórico, una mancha redonda puede ser más significativa que una figura humana”, señala el pintor. Para él, el elemento interior determina la obra de arte. En 1921 Kandinsky se traslada a Berlín dónde se incorpora a la escuela de diseño, arte y arquitectura de la Bauhaus. En esta escuela se encuentra otro de los artistas destacados en la pintura abstracta, el suizo Paul Klee. El maestro explicaba en sus clases y en sus escritos cómo los elementos gráficos (el punto, la línea, el plano y el espacio) adquieren significado mediante una descarga de energía dentro de la mente del artista. Escultura A lo largo del siglo XX ha habido muchos artistas plásticos que han pasado por la abstracción. La escultura abstracta persigue los mismos fines que la pintura abstracta. Hans (Jean) Arp, pintor y escultor francoalemán es uno de los máximos exponentes de este tipo de escultura. Arp aplicaba las formas de sus pinturas en un arte de tres dimensiones, desarrollando una iconografía de formas orgánicas conocida como escultura biomórfica, en la que se trata de representar lo orgánico como principio formativo de la realidad. Otro de los escultores que se fija en la abstracción es Naum Gabo Pevsner, con obras como “Columna desarrollada” o “La columna de la paz”, dónde cuatro ángeles desean materializar el espacio. El artista español Eduardo Chillida fue otro de ellos. Representante de la abstracción plena, Chillida abandonó sus estudios de arquitectura para esculpir bloques enormes de hierro en los que parece haber representado el punto de unión entre la arquitectura y la escultura. Características El arte abstracto deja de considerar justificada la necesidad de la representación figurativa y tiende a sustituirla por un lenguaje visual autónomo, dotado de sus propias significaciones. Este lenguaje se ha elaborado a partir de las experiencias fauvistas y expresionistas, que exaltan la fuerza del color y desembocan en la llamada abstracción lírica o informalismo, o bien a partir de la estructuración cubista, que da lugar a las diferentes abstracciones geométricas y constructivas. La abstracción pura, o no figurativa, es, probablemente, el culmen ideal del arte. En el fondo, toda representación artística es una abstracción de la realidad, y la abstracción pura prescinde de todo elemento que vincule la obra de arte con el mundo natural, para quedarse exclusivamente con la idea: con el concepto y la belleza. La abstracción pura se enfrentó, y se enfrenta, a la incomprensión de la sociedad mucho más que los más radicales provocadores, y es que no tenía referentes históricos, era algo totalmente nuevo y opuesto al concepto de arte surgido en el Renacimiento, e incluso en la Antigüedad clásica. Se trata de un movimiento que simplifica las formas hasta perderlas, y quedarse en el color y las formas más puras. Incluso se va a prescindir del título, para que no haya referencias con la realidad. La obra de arte debe ser bella por sí misma, como objeto. El concepto de belleza y de obra de arte ha cambiado definitivamente. A pesar de la reticencia inicial, el arte abstracto triunfa definitivamente después de la segunda guerra mundial y hoy forma parte de la iconografía habitual, aunque de manera disfrazada. Abstracción Lírica Kandinsky, Otoño en Bavaria-1908. La obra de Vasily Kandinsky ilustra la llamada abstracción lírica. Llegó, entre 1910 y 1912, a una abstracción impregnada de sentimiento, idealmente representativa de las aspiraciones de los artistas del grupo expresionista de Múnich: Der Blaue Reiter, del que él mismo formaba parte. Kandinsky es el gran teórico del arte abstracto. Escribe De lo espiritual en el arte, donde expone sus ideas. Es una auténtica reflexión sobre el arte, lo que es el arte y lo que es la obra de arte, y una declaración de principios. Su pintura está destinada a despertar la emoción en el espectador, en el que deben actuar sólo los sentimientos, pone a sus cuadros títulos abstractos, intrascendentes, actitud que imitarán, frecuentemente, los demás pintores. Puntas de arco, En alto, Lírica, Impresión V, Improvisación, Juicio universal; Amarillo, rojo, azul. Paul Klee (1879-1940) tiene un carácter más simbólico. Transforma las figuras hasta hacerlas irreconocibles. El niño en el paisaje, Composición, En el gris de la noche, Puerto y veleros. En Francia, Robert Delaunay elaboró, desde 1912, a partir de las teorías de Chevreul sobre el contraste simultáneo de los colores, sus Ventanas y sus primeras Formas circulares cósmicas abstractas, mientras que Frank Kupka exponía en el Salón de Otoño de 1912 Amorfa, Fuga de dos colores y en 1913 Planos verticales azules y rojos. En la misma época, en Rusia, Mijaíl Larionov y Natalia Goncharova llevaron hasta la abstracción pura su método de transcripción del fenómeno luminoso, al que denominaron rayonismo. Abstracción Geométrica La abstracción de Piet Mondrian se elaboró a partir de la retícula cubista, a la que progresivamente redujo a trazos horizontales y verticales que encierran planos de color puro. Por su simplificación, el lenguaje del neoplasticismo, nombre que dio a su doctrina artística, satisfacía las exigencias de universalidad del artista (véase De Stijl). En Francia, la abstracción de Fernand Léger (Contrastes de forme, 1913–1914) y la de Picabia (Udnie, 1913) utilizaron formas cubistas sin renunciar a la intensidad cromática. En Rusia, tras haber sido el principal representante del cubo-futurismo, Kasimir Malevich rompió radicalmente con todas las viejas concepciones del arte al pintar en 1915 Carré noir dando lugar al suprematismo. Paralelamente, Vladimir Tatlin creó con sus relieves abstractos una de las primeras formulaciones de lo que se llamaría el constructivismo. Alexandr Rodchenko, tras haber pintado sus tres monocromos (Amarillo puro, Azul puro, Rojo puro, 1918), y El Lissitzky, aprovecharon su conocimiento de la forma para ir avanzando hacia una concepción utilitaria del arte que triunfó también en la Bauhaus en Alemania bajo el impulso de artistas como László Moholy-Nagy o Josef Albers. Neoplasticismo Piet Mondrian El Neoplasticismo es una corriente artística impulsada por Piet Mondrian en 1917 que proponía despojar al arte de todo elemento accesorio en un intento de llegar a la esencia a través de un lenguaje plástico objetivo y, como consecuencia, universal. Junto con Theo van Doesburg fundó la revista De Stijl, principal órgano de difusión del movimiento, en cuyo primer número apareció publicado el manifiesto neoplasticista. Las teorías de Mondrian, que tienen su origen en las obras cubistas de Georges Braque y Picasso y en la teosofía, reivindican un proceso de abstracción progresiva en virtud del cual las formas se irían reduciendo a líneas rectas horizontales y verticales, y los colores al negro, el blanco, el gris y los tres primarios. Entre sus principales representantes se encontraban, además de Van Doesburg, el pintor Wilmos Huszár, el escultor Georges Vantongerloo y los arquitectos Jacobus Johannes Pieter Oud y Gerrit Thomas Rietveld, entre otros. El excesivo rigor de las propuestas de Mondrian provocó violentas críticas tanto dentro como fuera de su círculo de adeptos. No obstante, el neoplasticismo está considerado, junto con el suprematismo de Maliévich, el origen de la abstracción geométrica. Van Doesburg fue la personalidad más activa del grupo, pues era a la vez pintor, escultor, arquitecto, poeta y novelista. El dinamismo geométrico de las líneas y los planos de las pinturas de Mondrian alejado de cualquier intención de simetría, encuentra su correlato en la descomposición elementarista de los polémicos "Ritmo de líneas negras", proyectos de Rietveld y van Eesteren, así como Piet Mondrian en la vibración plástica del café-cabaret Aubette de van Doesburg. La influencia del movimiento neoplástico se hizo sentir en la Bauhaus, con la cual había una fuerte corriente de intercambios. De hecho, la etapa berlinesa de Mies van der Rohe, antes de su exilio en Estados Unidos, está fuertemente signada por la experiencia neoplástica. Tanto su serie de proyectos de casas con patios como el célebre Monumento a Rosa Luxemburgo registran esa impronta estética. Pero la culminación de la manera neoplástica de Mies van der Rohe la constituye sin lugar a dudas el magnífico Pabellón Alemán de la Exposición de Barcelona, en el cual el elementarismo centrífugo y a la vez sereno de los planos fugando hacia el espacio y desdibujando las nociones de espacio interior y exterior alcanzan un grado de síntesis no superado. CONSTRUCTIVISMO El constructivismo fue un movimiento artístico y arquitectónico que surgió en Rusia en 1914 y se hizo especialmente presente después de la Revolución de Octubre y que responde a las premisas de la construcción del sistema socialista. Se puede decir que el Constructivismo se origina como respuesta al caos que se vivía en esos años de conflicto. Se caracteriza por ser muy abstracto, recurriendo a figuraciones geométricas para la representación de los objetos de sus obras. Su fundador es el escultor y pintor ruso Vladimir Tatlin. La funcionalidad debía de ser aplicada porque se ,creía importante que el arte debía e ser algo para que la gente lo entendiera, y con diferentes tipos de utilidades para la sociedad; por lo que Tatlin hizo una fusión de diseños y sus construcciones, llegando a ser un diseñador poderoso, en donde sus productos llegaron a formar un nuevo orden estético. En el Constructivismo, por tratarse de un movimiento en el que predominaba lo tridimensional, se destaca mucho lo que es la escultura, la arquitectura y el diseño industrial en sí, en donde se recurría a la elaboración de los productos con materiales modernos utilizando líneas puras para reforzar la naciente estética del funcionalismo. Otros artistas de la corriente son El Lissizky (por su estilo en fotografía), Stepanova (con sus diseños textiles) y Rodchenko. Es importante mencionar que una de las máximas expresiones de éste movimiento ha sido el “Monumento a la III Internacional”, obra realizada por Tatlín, que responde a ese espíritu constructor del modelo socialista y que aspiraba a ser la sede del Komintern. Este estilo supuso la recuperación de diversas corrientes anteriores y coexistentes (dadaísmo, futurismo, cubismo...) y la unión artística de diseño, teatro, cine, moda y artes gráficas. Se sitúa a los artistas de ésta época, con un nuevo rol, por el hecho de retomar las formas de las que solemos rodearnos, y crear nuevas obras. Tatlin pasa de los bajorrelieves a unos metales más profundos, hasta llegar a sus llamados "Contrarrelieves", que son formas de metal para ser colgadas. Es también una de las figuras clave en la reorganización de las instituciones artísticas en el Estado Soviético. Pronto se da cuenta de que el arte no cubre las necesidades del momento, y decide acercarse más a los problemas cotidianos y de nivel social. Dicha idea se ve bloqueada por la escasez de medios y materiales. Esto les hace diferentes al diseño moderno europeo. Como todo movimiento, este tuvo diferentes etapas en las que se dividió, pero esencialmente se trata de defender los ideales del utilitarismo, la funcionalidad y abstracción; aunque su momento más brillante se remonta a las tres primeras décadas de este siglo. La emergencia revolucionaria se vio ciertamente plasmada en las artes y tuvo en el constructivismo su expresión más sobresaliente. El referente inicial del movimiento está en las primeras investigaciones sobre soporte escultórico que realiza Tatlin influido por el cubismo de Picasso, que contempla en París en 1913 y 1914. La consecuencia inmediata, a su vuelta a Rusia, es la construcción de una serie de maquetas en madera, metal, cartón y vidrio, sin referencia posible al entorno objetivo. Desaparece lo anecdótico en busca de la pureza del arte y adquieren protagonismo las formas geométricas y el espacio frente a la masa. El resultado es un conjunto de fuerzas dinámicas en tensión e interdependientes que se definen como constructivistas. Rodtchenko se une a las exploraciones escultóricas abstractas de Tatlin en 1916, Gabo y Pevsner lo hacen en 1917, mientras Exter y Popova se incorporan con la pintura. El constructivismo toma carta de naturaleza en el contexto de la Rusia postrevolucionaria; pero el sistema político impone el sentido práctico. La palabra "constructivismo" parece que se empieza a utilizar por vez primera cuando Gabo y Pevsner publican el Manifiesto realista (1920), que inicia la separación del movimiento en dos tendencias. Una de carácter utilitario, liderada por Tatlin, que entiende la labor del artista al servicio de la revolución en el campo de la ingeniería y el diseño, y otra de naturaleza estética que defiende la libertad de creación y llega a Europa en 1921 y 1922, cuando los dos autores del manifiesto se instalan en Berlín y París, respectivamente. En 1922 se celebra la "Primera Exposición" en Berlín, una muestra de origen ruso en la Galería Van Diemen y diversas revistas europeas difunden los principios del constructivismo ruso. Moholy-Nagy los introduce en la Bauhaus y los plasma en su obra teórica y práctica de los años treinta. Durante esta década se percibe la influencia del movimiento en "Cercle et Carré" -fundado por quien es hoy la figura más importante del constructivismo en América Latina: Joaquín Torres-García- y en "Abstraction-Création", y al final de ella muchos artistas marchan a Inglaterra. Para entonces las ideas del constructivismo son muy cercanas a las del suprematismo y la abstracción espiritual. El suprematismo o la supremacía de la nada Kasimir Malévich (Kiev, 1878 - Leningrado, 1935), excepcional pintor vanguardista ruso, es el padre de la corriente artística denominada suprematismo. El suprematismo es una corriente que aspira a "la supremacía de la nada" (en palabras del propio artista) o a la representación del mundo sin objetos. La trayectoria artística de Malévich es muy amplia y rica en tendencias (corrientes estéticas) en continua transformación. - Suprematismo: Es a través del suprematismo donde se produce la enigmática victoria de la abstracción sobre la representación. Malevich continuará en la senda del suprematismo hasta el 1927. Malévich con su célebre "Cuadro negro" (1915) consiguió erradicar la figuración, la forma, el color, la perspectiva y cualquier otro recurso de la representación. En su continuo camino hacia la abstracción, el pintor ucraniano, descubrió el suprematismo siempre en un continuo crecimiento artístico en su apuesta más arriesgada de la búsqueda de la nada. Malevich experimentó con todos los ismos franceses e incluso inventó algunos movimientos propios como el algoismo (el collage cubofuturista) hasta alcanzar la abstracción absoluta del suprematismo. Pero bajo la represión estalinista, Malevich volvió a representar figuras: Campesinos sin rostro y cuerpos mutilados. El dramatismo era un elemento muy presente en la política de la época. BAUHAUS (1919-1933) Escuela superior alemana fundada por Walter Gropius y que constituye uno de los proyectos pedagógicos más importantes de la historia por su carácter vanguardista, de avanzada, influyendo hasta hoy en los estilos y la estética mundial. La enseñanza en la Bauhaus y sus profesores. La pedagogía se dividía en tres partes: Primera parte:Durante seis meses, el aprendiz se adaptaba a los talleres de la Bauhaus y descubría sus preferencias gracias a la convivencia con los artistas formaban parte de ella. Trabajaba con piedra, madera, metal, barro, vidrio, colorantes y tejidos, mientras se le enseñaba dibujo y modelado. En este tiempo, se aplicaba un curso obligatorio denominado Vorkurs, donde se investigaba los principales componentes del idioma visual en textura, color, forma, contorno y materiales. Esto llegó a conocerse más tarde como "Método Bauhaus". Segunda parte: Entraba a los talleres y recibía una instrucción práctica y formal por tres años. Más adelante, pasaba su examen de artista. A través de esto, se elegían a los estudiantes más destacados. Tercera parte: Los que fueron seleccionados recibían cursos prácticos en las fábricas y salían bajo el título de arquitecto. Pintura, escultura, diseño de muebles, carpintería, trabajo en hierro y cristal, tejido, alfarería, grafismo artístico, pintura mural, escenificación, danza, teatro, tipografía y la arquitectura eran los distintos tópicos que se impartían en la institución. Esta Escuela tuvo diversos docentes. Todos eran de distintas profesiones: pintores, escultores, arquitectos, urbanistas, tipógrafos, grabadores, tejedores y artesanos. Algunos de ellos fueron: Johannes Itten (quien realizó el curso preparatorio y el centro del proyecto pedagógico), Lyonel Feininger, Georg Muche, Paul Klee, Josef Albers, Hinnerk Scheper, Lazlo Moholy-Nagy, Herbert Bayer, Gerhard Marcks, Oskar Schlemmer, Lothar Schreyer, Wassily Kandinsky, Joost Schmidt, Marcel Breuer, Gunta Stölz-Stadler, Theo Van Doesburg, Gyorgy Kepes, Anni Albers, Ludwig Hilberseimer, Ludwig Miës van der Rohe y el propio Gropius. Gracias a la influencia de estas personalidades, los alumnos creaban objetos de la vida cotidiana como sillas, camas, armarios de cocina, prototipos de kioscos publicitarios, servicios de té y café en metal, lámparas y tejidos con dibujos abstractos. Posteriormente, se publicaban catálogos en el que se mostraban dichos productos y eran vendidos a las industrias. Características de la Bauhaus Este movimiento estaba influenciado por diferentes corrientes como el Constructivismo ruso, Suprematismo, Expresionismo y Neoplasticismo. "El estilo de la Bauhaus se caracterizó por la ausencia de ornamentación en los diseños, incluso en las fachadas, así como por la armonía entre la función y los medios artísticos y técnicos de elaboración." En 1925 se alzó una serie de edificaciones de forma rectangular, con base en hormigón y cristal -la cual fue diseñada por el primer director de la Escuela-. Ya para aquel entonces, se inclinó más hacia el funcionalismo. La expresión de la belleza y conveniencia de los materiales básicos sin adorno se volvieron cada vez más frecuentes en el estilo de este movimiento. En cuanto a la tipografía, es funcional-constructiva. Se manejó el círculo, el cuadrado y el triángulo y se utilizaron los 3 colores primarios como base. Las direcciones horizontales y verticales surgen con mucha frecuencia. Los textos se diferencian de forma tipográfica. Se resaltan palabras con colores de fondo o una fotografía impresa en un color no realista. Se colocan textos breves en un ángulo de 90º, algo totalmente nuevo. Máximos representantes y sus obras Han sido diversos artistas que han formado parte de la Bauhaus. Los máximos representantes son Gropius y Miës van der Rohe. Walter Gropius llevó a cabo varios proyectos, incluyendo su obra maestra: El edificio de la Bauhaus en Dessau, el cual tenía una "planta asimétrica, con pabellones situados a diferentes alturas y predominio de ventanas horizontales, uno de los puntos de referencia de la arquitectura racionalista". Esta obra comenzó en 1925 y fue inaugurado en diciembre de 1926. Otras obras que realizó fue la reconstrucción del Teatro Municipal de Jena junto con Meyer, la edificación de la Academia de Filosofía de la Universidadde Erlangen, la Urbanización cercana a Karlsruhe, la Casa Sommerfeld en Berlín, el Monumento Memoria Víctimas Golpe Estadode Kapp, la Casa Auerbach en Jena, las Casas de los Maestros de la Bauhaus en Dessau, la Colonia Törten, la Oficina de Empleo, entre otros. En cuanto a Ludwing Miës van der Rohe, en 1929 -un año antes de tomar el cargo en la Escuela- había edificado su máxima obra: El Pabellón Nacional de Alemania en la ExposiciónInternacional de Barcelona. Había sido elegido por el GobiernoAlemán para llevar a cabo el proyecto. Se trataba de un salón protocolar con base en vidrio, travertino y distintos tipos de mármol con el fin de alojar la recepción oficial dirigida por el rey Alfonso XIII junto a las autoridades germanas. Otras de sus obras son: la Casa Tugendhat en Brno (actual República Checa), el Proyecto Club de golf en Krefeld (Alemania), el Proyecto Casa Gericke en Berlín, el Apartamento para Soltero, la Casa Lemcke, el edificio administrativo para la industriade la seda, la Casa Hermann Lange, la Silla de Barcelona y mucho más. Además, participó en la Exposición Berlinesa de Edificios celebrada en la capital alemana. Conclusión La Bauhaus influyó poderosamente en la Arquitectura Moderna, a tal grado de marcar la pauta. Simultáneamente, se creó una nueva estética. Sentó las bases normativas y patrones de lo que hoy conocemos como diseño industrial y gráfico; puede decirse que antes de la existencia de la Bauhaus estas dos profesiones no existían tal y como fueron concebidos dentro de esta escuela. Personalidades como Le Corbusier y Frank Lloyd Wright fueron inspirados por este movimiento y plasmaron sus obras en Europa y EEUU. Estas dos personas, junto con Gropius y Miës van der Rohe son considerados como padres de la Arquitectura Moderna y sus hermosas edificaciones siguen asombrando al mundo entero hasta la fecha. Dadaísmo El Dadaísmo fue una vanguardia – movimiento artístico y/o político que guiaba la cultura de sus tiempos – que surgió en el año de 1916 en Zurich con el objetivo de oponerse a cualquier tipo de equilibrio y racionalidad. Nació casi de forma anárquica para romper con lo tradicional. El propósito verdadero del dadaísmo era denunciar, protestar y generar polémica en torno a la Primera Guerra Mundial y sus seguidores lo hacían resaltando el ilógico y el absurdo, estimulando lo espontaneo y combinando elementos como el pesimismo, el nihilismo, la ironía y la falta de creencia absoluta en las cosas para emitir su mensaje casi desaforado. A principio el dadaísmo no tenía una característica especifica una vez que era basada en el acaso, pero quizás el poema aleatorio y el “ready made” – manifiesto artista de Marcel Duchamp que elevaba a categoría de arte objetos ya hechos como una rueda de bicicleta, por ejemplo – sean dos formas de arte que definen bien el movimiento. Montajes, artes plásticas, fotografía, música y teatro también encuentran su faceta dadaísta. El dadaísmo sirvió de inspiración para el nacimiento de otros importantes movimientos do siglo XX, como el Surrealismo, Arte Conceptual, Pop Art y el Expresionismo Abstracto. Los artistas mas relevantes del dadaísmo son André Breton, Philippe Soupault, Tristan Tzara, Marcel Duchamp, Hans Arp, Francis Picabia, Max Ernst, Man Ray, Kurt Schwitters, Raoul Hausmann, Guillaume Apollinaire, Hugo Ball, Theo van Doesburg, Johannes Baader, Arthur Cravan, Jean Crotti, George Grosz, Emmy Hennings, Richard Huelsenbeck,Marcel Janco, Clement Pansaers, Hannah Hoch, Hans Richter y Sophie Täuber. SURREALISMO El surrealismo, o superrealismo, es un movimiento artístico y literario que nace en Francia hacia 1920. Surge como un intento de reacción positiva frente a la destrucción llevada a cabo por los dadaístas. Los contactos entre André Breton y el movimiento Dadá fueron continuos hasta que en 1922 Breton y Picabia se separaron del dadaísmo de Tzara. Sin embargo puede decirse que el punto de partida del movimiento de Breton fue el dadaísmo en los momentos últimos de su trayectoria, cuando empezó a sentirse la necesidad de reorientarlo. Se ha descrito como la creación de la irracionalidad, los sueños y los instintos como motivo de inspiración para el artista, por lo que podemos encontrar antecedentes inmediatos del surrealismo en los caprichos de Goya, en la interpretación de los sueños y el psicoanálisis de Sigmund Freud, y en el arte de los niños, los locos y los primitivos aborígenes. Pero también a lo largo del arte occidental, en las figuras fantásticas medievales, en el Bosco y, por supuesto, en la pintura metafísica de De Chirico. Características El Surrealismo es conocido como el movimiento de lo irracional y lo inconsciente en el arte de las vanguardias históricas. El órgano portavoz del movimiento fue la revista Litterature dirigida por un grupo de poetas (André Breton, Louis Aragon y Paul Éluard) fundada en 1919. Estos poetas adoptaron la palabra surrealismo para definir un método de escritura simultánea con el que estaban experimentando: «...Surrealismo: Puro automatismo psíquico, por medio del cual se intenta expresar, verbalmente o por escrito, o de cualquier otro modo, el proceso real del pensamiento. El dictado del pensamiento, libre de cualquier control de la razón, independiente de preocupaciones morales o estéticas...» Tal fue la definición del término dada por los propios Bretón y Soupault en el primer Manifiesto Surrealista fechado en 1924. Surgió por tanto como movimiento literario en el que pintura y escultura eran concebidas como consecuencias plásticas de la poesía. De entre ellos, Bretón, que era también psiquiatra, había estudiado las teorías de Freud sobre el inconsciente, que le llevaron a elaborar la poética surrealista basada en el inconsciente como lugar generador continuo de imágenes que se podían sacar a la esfera del arte por medio de un ejercicio mental en el que la conciencia no intervenga y cuyo proceso de transcripción debería ser automático. Fruto de esta época es Los campos magnéticos que publicó en 1921. Bretón publicó en 1928 El Surrealismo y la pintura donde definió la estética surrealista; para Bretón, el inconsciente es la región del intelecto donde el ser humano no objetiviza la realidad sino que forma un todo con ella; el arte, en esa esfera, por tanto no es representación sino comunicación vital directa del individuo con el todo. Se concede también una gran importancia al sueño, donde las relaciones e imágenes inconexas se hacen más sólidas cuanto más ilógicas. Para los surrealistas la obra nace del automatismo puro, del dictado del pensamiento subconsciente con exclusión de todo control ejercido por la razón, al margen de cualquier preocupación moral o estética. Lo erótico está permanentemente presente, hasta el escándalo. Este ha sido un tema poco tratado en la historia del arte. Al contrario que otros movimientos, el surrealismo no crea una estética uniforme y se debate entre la abstracción y el hiperrealismo formal. Aunque la mayoría de sus adherentes están influidos por el hiperrealismo de Dalí. A partir de 1925 surgen actitudes políticas y sociales dentro del Surrealismo, provocadas por el estallido de la guerra de Marruecos; se producen entonces los primeros contactos con los comunistas que culminarían en 1925 con la adhesión al partido comunista por parte de Bretón y todo el movimiento surrealista. Entre 1925 y 1930 aparece un nuevo periódico titulado El Surrealismo al servicio de la Revolución en cuyo primer número Aragón, Buñuel, Dalí, Elouard, Max Ernst, Yves Tanguy, y Tzara entre otros, se declaran partidarios de Bretón. Por su parte Arp y Miró, aunque no compartían la decisión política tomada por Bretón, continuaban participando con interés en la exposiciones surrealistas. Poco después se incorporaron Magritte (1930), Masson (1931), Giacometti y Brauner en 1933 y también Matta (que conoce a Bretón en 1937 por mediación de Dalí) y Lam; el movimiento se hizo internacional apareciendo grupos surrealistas en los Estados Unidos, Dinamarca, Londres, Checoslovaquia y Japón. Las disputas continuaron a través de los años, entre aquellos surrealistas que no veían por qué habían de ser comunistas y concebían el surrealismo como un movimiento puramente artístico y los más adeptos a Bretón. En 1929 Bretón publica el Segundo manifiesto surrealista en el que condenó entre otros intelectuales a los artistas Masson y Picabia; en 1936 expulsó a Dalí por sus tendencias fascistas y a Paul Éluard. En 1938 Bretón, apartándose de la ortodoxia soviética, firma en México junto con Trostki y Diego Rivera el Manifiesto por una Arte Revolucionario Independiente. El Surrealismo tomó del Dadaísmo algunas técnicas de fotografía y cinematografía así como la fabricación de objetos. Extendieron el principio del collage al asamblaje de objetos incongruentes como en los poemas visibles de Max Ernst. Este último inventó el frottage (dibujos compuestos por el roce de superficies rugosas contra el papel o el lienzo) y lo aplicó en grandes obras como Historia Natural pintado en París en 1926. Otra de las nuevas actividades creadas por el surrealismo fue la llamada cadáver exquisito, en la cual varios artistas dibujaban las distintas partes de una figura sin ver lo que el anterior había hecho pasándose el papel doblado. Las criaturas resultantes pudieron servir de inspiración a Miró. El Surrealismo penetró la actividad de muchos artistas europeos y americanos en distintas épocas. Picasso se alió con el movimiento surrealista en 1925; Bretón declaraba este acercamiento de Picasso calificándolo de «...surrealista dentro del cubismo...» Se consideran surrealistas sus obras del período Dinard (1928-1930), en que Picasso combina lo monstruoso y lo sublime en la composición de figuras medio máquinas medio monstruos de aspecto gigantesco y a veces terrorífico. Esta monumentalidad surrealista de Picasso puede ponerse en paralelo con la de Henry Moore. En 1938 tuvo lugar en París la Exposición internacional del Surrealismo que marcó el apogeo de este movimiento antes de la guerra. Participaron entre otros, Marcel Duchamp, Arp, Dalí, Ernst, Masson, Man Ray, Domínguez y Meret Oppenheim. La exposición ofreció al público sobre todo una excelente muestra de lo que el surrealismo había producido en la fabricación de objetos. Con el estallido de la Segunda Guerra Mundial, los surrealistas se dispersan, algunos de ellos (Bretón, Ernst, Masson) abandonan París y se trasladan a los Estados Unidos donde siembran el germen para los futuros movimientos americanos de posguerra (expresionismo abstracto y Pop Art). El surrealismo se cultivó en literatura, pintura o cinematografía (por ejemplo: Un perro andaluz (1928), de Buñuel y Dalí). Los pintores surrealistas Salvador Dalí (1904-1989) es el más escandaloso, extravagante y exhibicionista de todo el grupo. Sus cuadros presentan figuras imposibles, fruto de su imaginación y de su prodigioso virtuosismo para dibujar. Evocación a la aparición de Lenin, Nacida del deseo líquido, Sueño, Impresión de África, Canibalismo otoñal, La persistencia de la memoria, Premonición de la guerra civil, La última cena. Joan Miró (1893-1983) fue para Bretón el más surrealista de todos, por su automatismo psíquico puro. Su surrealismo se desenvuelve entre las primeras obras donde explora sus sueños y fantasías infantiles (El Campo labrado), las obras donde el automatismo es predominante (Nacimiento del Mundo) y las obras en que desarrolla su lenguaje de signos y formas biomorfas (Personaje lanzando una piedra). Miró es el máximo representante del surrealismo abstracto. Sus cuadros están llenos de poesía. Pinta con colores puros y tintas planas. Sus imágenes son simples, con pocos trazos, a la manera de los niños. Personajes de noche, El bello pájaro descifra lo desconocido a una pareja de enamorados, Naturaleza muerta con zapato viejo, Mano agarrando a un pájaro, La estatua, Personaje lanzando una piedra, Mujeres y pájaro al claro de luna, Noche y día (mural para la UNESCO). Max Ernst (1891-1976) logra visiones sorprendentes, propias de la ciencia ficción. Utiliza la técnica del frottage, que consistente en frotar un lápiz sobre un papel apoyado en una superficie irregular. Katharina ondulada, La primera palabra límpida, Napoleón en el desierto, Tentación de san Antonio. René Magritte (1898-1967) provoca el choque emotivo del color aplicado a formas realistas puestas en lugares y momentos inverosímiles, y en contrasentido. Magritte dotó al surrealismo de una carga conceptual basada en el juego de imágenes ambiguas y su significado denotado a través de palabras poniendo en cuestión la relación entre un objeto pintado y el real. El imperio de la luz, Manía de grandezas, El uso de la palabra, La buenaventura, Noche de Pisa, Tiempo pasado, El demonio encantado, El Siglo de las Luces. Jean Arp combina las técnicas de automatismo y las oníricas en la misma obra desarrollando una iconografía de formas orgánicas que se ha dado en llamar escultura biomórfica, en la que se trata de representar lo orgánico como principio formativo de la realidad. Yves Tanguy (1900-1955) presenta sus sueños desligados de toda referencia a la realidad. Emplea para ello una técnica académica. Unos transparentes, Días de lentitud, La multiplicación de los arcos. Marc Chagall (1887-1985) presenta en sus cuadros hechos sacados de la realidad pero dentro de un ambiente ensoñador. Sus figuras vuelan sobre el paisaje. Utiliza colores y figuras muy sencillas. Doble retrato con vasos de vino, Guerra, El paseo. Paul Delvaux carga a sus obras de un espeso erotismo basado en su carácter de extrañamiento en los espacios de De Chirico.