61 62 CAPÍTULO 3.1: RECOLECCIÓN MANUAL DE FRUTA DE LOS ÁRBOLES 3.1.1.- Introducción En las premisas de este trabajo se dijo que “sólo habrá avances definitivos cuando el olivar sea considerado como un auténtico árbol frutal de invierno”. En este sentido, utilizando la experiencia en la recolección de fruta de otros árboles, y aplicándola con las características específicas del olivar, se pueden hacer rápidos progresos y evitar caer en los mismos errores (Porras et al, 1999). En cualquier plantación de árboles frutales cuando se recoge manualmente la fruta, los pasos que siguen los obreros son los siguientes: • • • • • Localización de los frutos. Selección de los que se van a recolectar. Arranque de los frutos. Colocación en pequeños contenedores. Agrupamiento para su manejo. • La localización y la selección se hace según criterios de tamaño, firmeza y color. • Los frutos, una vez arrancados, se depositan en una bolsa, un cubo o una cesta que normalmente se vacía en un contenedor en el que son transportados. Se deben depositar los primeros frutos a mano en el fondo para evitar que se dañen. Cada vez se tiende más a agrupar la fruta de los pequeños contenedores en otros grandes, que se manejan con carretillas elevadoras en la finca y son transportados en camiones. Su eficacia es tan grande que se usan tanto en recolección manual como en recolección mecanizada. El manejo de grandes contenedores ha originado una amplia gama de equipos mecánicos pequeños, baratos y de alta eficacia. 63 Figura 3.1.1..- Distribución de contenedores en la parcela. En cualquier caso, la recolección manual de fruta de los árboles se debe enfocar de forma que el producto tenga un alto nivel de calidad y un precio reducido, para lo cual debe ser cuidadosamente estudiada. Para ello han de tenerse en cuenta las operaciones previas a la recolección, tales como preparación de suelos, reducción de tamaño de los árboles y podas adecuadas, además de facilitar las faenas de limpieza, envasado y transporte. La poda adecuada de árboles facilita el acceso con las escaleras y mejora la eficacia de trabajo. Cuando con la poda se permite la existencia de ramas principales que crecen hacia arriba y hacia fuera desde el tronco, y se eliminan las ramas altas por encima del alcance del trabajador subido a una escalera, el rendimiento es mayor. Lógicamente la pericia y experiencia de los trabajadores es fundamental, sobre todo en los sistemas de recolección manual, y la forma de contratación tiene notable influencia en los costes de producción. En aceituna, debido a su tamaño, no se practica el proceso de recolección descrito, pues se recoge “a hecho”, es decir de una sola pasada. En la recolección de aceituna de mesa, se usan bolsas de recolectar, denominadas macacos, que llevan una correa para el hombro que ayuda al trabajador a soportar el peso lo más cómodamente posible y le permite la máxima libertad de movimientos. Su diseño se adapta al cuerpo del 64 trabajador y permite llenarla desde ambos lados reduciendo así los desplazamientos de la mano. Los cubos de recolectar, que en aceituna nunca se han utilizado, son adecuados para frutos que se dañan fácilmente, pues los protege de daños una vez que están dentro de él. 3.1.2.- Sistemas para ayuda a la recolección manual Los sistemas que ayudan a separar la fruta de la planta han recibido una atención importante en la mayoría de los cultivos de frutales. En algunos cultivos arbóreos de frutales se han desarrollado máquinas de ayuda a la recolección, que realizan una o más de las operaciones siguientes: • • • • • Situar al obrero con un fácil acceso a los frutos. Ayudar al trabajador a arrancar los frutos. Reducir la fatiga. Reducir la monotonía del trabajo. Eliminar el acarreo de los frutos. Los objetivos fundamentales de las máquinas de ayuda a la recolección son incrementar la productividad, hacer el trabajo más fácil y mejorar la ergonomía (Keppner et al, 1980). En el diseño de estas máquinas el conocimiento de la distribución de los frutos en los árboles es de gran ayuda. En la fruticultura arbórea mundial la recolección con escalera está disminuyendo cada año, al mismo tiempo que la mano de obra disponible disminuye, y se estima que las máquinas para ayuda pueden llegar a ser el único método aceptable para recolectar frutos para el mercado de consumo en fresco con precios aceptables. 65 Las limitaciones más importantes en la utilización de ayudas mecánicas se basan en que el trabajador no siempre acepta su uso y en la falta de uniformidad en la distribución de los frutos en el árbol. Además, las cosechas poco abundantes requieren excesivo tiempo de movimiento de la máquina, lo que origina mucho tiempo muerto y, consecuentemente, un incremento notable del coste de producción, ya que las máquinas diseñadas para transportar a un solo trabajador representan una alta inversión, difícil de justificar económicamente, y requieren un considerable tamaño de explotación. Estos posicionadores son generalmente autopropulsados, controlados por el propio trabajador, y capaces de proporcionar un posicionamiento tridimensional. Figura 3.1.2.- Transportador de un sólo trabajador Las máquinas diseñadas para transportar varios trabajadores están limitadas por la velocidad de trabajo del obrero más lento o por una mala distribución de la cantidad de frutos en el área de alcance de un sólo trabajador. Generalmente utilizan un chasis de cuatro ruedas, y en algunos casos permiten el movimiento horizontal de los trabajadores hacia dentro y hacia fuera de los árboles, además de un movimiento de avance de todo el conjunto de la máquina. Otras permiten al trabajador desplazarse por una plataforma, o bien por unas escaleras, y algunas permiten su movimiento sobre brazos giratorios. 66 Figura 3.1.3.- Transportador de varios trabajadores. • Tanto útiles para ayuda al arranque de la fruta, como vehículos para un solo individuo se han ensayado en olivar. Ninguno de ellos ha tenido aceptación a nivel comercial, en el primer caso por no sentirse los obreros cómodos al usarlos y en el segundo porque la máquina, aunque técnicamente es muy avanzada, su precio y la distribución de la aceituna es el olivo han condicionado su desarrollo. Ha habido intentos para su implantación comercial dotando al ususario de un peine vareador con el que aumentar su rendimiento. A pesar de la comodidad y del mayor rendimiento, no se han impuesto, ya que los métodos de recolección manual, fundamentalmente el vareo, son más rentables. Figura 3.1.4.- Útil para arranque manual y carrito individual. Los métodos de recolección manual más empleados en la recolección de aceituna del olivo son el ordeño y el vareo (Porras et al, 1980). • El sistema de ordeño es el único empleado en la recolección de aceituna de mesa, aunque es usado también en algunas comarcas para la de aceite. El operario, desde el suelo o con escaleras, toma los frutos y los deposita en un recipiente que lleva colgado sobre el pecho. 67 Una vez lleno lo vacía en un depósito o caja de unos 20-30 Kg de capacidad, común para varios operarios. Cuando se trata de aceituna para aceite, el ordeño es menos esmerado, ya que no hay peligro de producir daños al fruto. Entonces el operario desliza la mano entreabierta por los ramos cargados de fruto dejando caer éste sobre lienzos o redes de material plástico colocados extendidos previamente bajo los árboles. Figura 3.1.5.- Recolección de aceituna por ordeño. • El sistema de vareo es el método más frecuentemente utilizado. El operario, provisto de una vara cuya longitud oscila, según zonas, desde uno hasta tres e incluso cuatro metros, golpea los ramones del árbol procurando, cuando se hace bien, que el golpe incida lateralmente a las zonas fructíferas, con el fin de no causar daño en ellas, aunque a veces la cantidad de ramos del año existentes sobre el olivo, que deberían ser los portadores de frutos de la cosecha del año siguiente, queda tan reducida que ésta se puede ver seriamente afectada. Figura 3.1.6.- Recolección de aceituna por vareo. 68 El fruto derribado se recoge en lienzos o mallas extendidos bajo los olivos de forma que ocupan una superficie superior a la zona de goteo del árbol. Estas mallas se pliegan convenientemente y se vierte su contenido en cajas, sacos o espuertas (Porras et al, 1999). Minutos/Kg aceituna El tiempo necesario para la recolección de un kilogramo de aceituna disminuye notablemente en relación directa con el aumento de producción, si bien dicha relación no es lineal sino que se ajusta a los diagramas representados en la figura siguiente. 8 6 4 Vareo 2 Ordeño 0 0 5 10 15 20 25 30 35 40 Cosecha (Kg/árbol) Figura 3.1.7.- Rendimiento de la mano de obra en ordeño y en vareo. Aunque el vareo no es causa fundamental, puede asegurarse que aumenta la tendencia a la vecería o alternancia de producción. El concepto de vecería se refiere a la alternancia que en años sucesivos presenta la cosecha pasando de alta a baja. Es un fenómeno muy difundido entre frutales que afecta parcialmente al olivo ya que, aunque se dice que tras una gran cosecha al año siguiente el árbol descansa, la vecería no es total. La alternancia en la producción tiene consecuencias negativas en la economía del olivarero, ya que la baja cosecha invita poco a hacer los cuidados culturales necesarios para mejorar la siguiente cosecha, con lo que puede entrar en una desgraciada dinámica. La insuficiencia en la nutrición incide aumentando la vecería, por lo cual una fertilización complementaria los años de gran cosecha y las 69 operaciones culturales destinadas a reducir el consumo de sustancias de reserva, tales como aclareo y poda, son aconsejables. 70