~~7_ _ _ _ _ _ _ _~_ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ : aaa______________________D a_ __ _- - . LI • qenlo Parece que los socbli'las estamos en e l ponrJerado justo medio. ~os atacan con la misma saña los extre· mistas de la derecha y de la izquierda. Los unos nos tachan de bárbaros, y los otros de excesivamente moderados. Para unos, queremos destr uir violenta me nte todo lo exis· tente; para otros, somos aliados de la burgue ía y traidores a la causa del proleta riado. E s ta coincidencia de conducta de reaccionarios y demagogos para con nosotros nos confirma en la raz6n de nuestr'a po ici6n. Estamos convencidos de que vamos por bu en camino y HO hemos de hacer caso de los que a derecha e izquierda nos incitan a abandon arlo. POI' el 4ue hemos trazado, y no por otro, se 1 egará seguramente a la tan ansiad a meta . No, no tienen razón nuestros enemigos; ni los que nos llaman aliados de la burgue ~ía, ni los que nos quieren confundir con los bolcheviques, ni los que nos dicen que no hacemos nada. Los que tal cosa afirman mien· ten, injurian, calumnian conscientemente; o son tan ignorantes, que desconocen lo más elemeutal del Socialismo y lo que es y lo que bace el P arlido SOCi¡ll ista. El Partido Socialista no favorece a la burguesía -s uposición imbécil-, sino que la c.ombate con má" eficacia que nadie, como lo prueba la copiosa legislación social que le ba sido arrancada, quizá la favorezc an más con esos movimientos esporádicos aquellos que el tildartie c:apolíticos» no les impide para aprovecbarae de los beneficios obtenidos mediante la intervención política; ni puede ser confundidos con el bolcheviquismo, porque rep ud ia los métodos terroristas, ni está durmiendo, pues bien notoria es su actuacci6n anticapitalista y s u labor de pi op:Jganda y de cultura obrera. Lo que el Part ido Socialista hace es defender los derecbos de los trabajadores, COllsel'var las mejoras logradas por la clase obrera en muchos años de penosa lucha y de sostener y acrecentar sus organizaciones, s u prensa, y, ante todo y sobre lodo, guardar incólume el tesoro eJe su prestigio moral, aunque otra cosa supongan adv ersarios caprichosos o desaprensivos , El colaborar en un Gobierno ge· nuinamente burgués es un sacrificio transitorio impuesto por las circuns· tancias políticas, no una traición a sus principios doctrioa les de clase. ¡Tal vez deseemos nosotros más 4ue nadie el salíl' cuanlo aules de él! ¡Quizá no se haya becho por no facilitar el triunfo a la reacción encarnada en partidos republi canos que no merecen nuestra confianza! ¡Antes que consentir una dictadura bUI'guesa impondríamos la nue tr,,: la proletaria! También porque 'aceptamos los Comités Paritarios se nos tacbó de colai..>oradores de la Di cta dura. Y sin embargo, obteníamos con ellos más beneficios pa ra la ciase obrera que los que se tildan de «verdaderos revolucionarios~ que cuando !:lS preciso arriesgar algo se esconden, como entonces se escondiero!". ~Ha. de lograr la oloso trabajadora su emanci , 'lC,ón ecoll6m ica por me· dio de la perpetraci6;) de hecb os vandálicos propios de las tribus salvajes? ¿Los (lue' tal bacen son más «revolucionar'jos. que nosotros'? ¿So· mos (cobardes~ como se nos moteja'? No. Lo que sucede es que tenemos un senLido clal'o de nue8tra re ponsabilidad y tan «valientes» demago· gos son en su mayoría elementos irresponsables y sin solvencia moral. No otro calificativo mert'ceu los que arr eslran al pueblo bambriento a motines sangl'i~ntcs que no con ' u Biblioteca Virtual de Castilla-La Mancha. Nueva Luz. 4/2/1933. ~oda e o cen a ningún fin moral ni material pr¡'¡ctico. Porque cualqllier líder obrero que disp HIga de U1l poco verb o y se 10 proponga, le es tan (:leil com o liar un cigarrillo, e limulando los in tintob 'f las ¡J3.sionos hl1man as, echal' la.~ masas a la culte, pero ~y conducirlas por e l camino de la victori a? ~Aca'o creen que si qu i8iéramos nos gmal'Ían a radicales'q Se les oye defender con tanto lesón el «frente único» que eualquier'a que no conozca la lIi .'loría del movimiento obrero e 'pañol, ~in duda alguna los cr~e a ojos cerrado!'. Pero nadie debe ignorar que todos esos elemenLos flleron activos militantes de las organizacione:o: fiociallsta¡:, de la!'l. r.uales tueron expuh;ados o se di",gr~garon por despecho Vara, al día 'iguiente, desde la acera de enfrente, levantar la bandera de unidad ¡;;indical. ¿,Hipócrítas? ¿Farsa n· le&~ El buen soldado de la causa del t rabajo personifica la co.nscienc ia, la honradez, el respeto bacia la ideo lohía profesada por el contrario. Esto fué lo que caracterizó al militaute sociali 'la el cual se abstuvo de imponer, sino qu e cont¡uistó adeptos por medio del convencimient0. ¿Pueden decir olro tanto lo que hicie lon a', uerl idos coneligionarios nu€.slros víctimas de sus fachorías y crimin ales atentados? ~Pueden ellos decir si algún camarada nuestro bizo lo propio? Pues esto es impro pio rle quienes profesan doc tri nas de solid aridad proletaria y se llaman idealistas avaoz·,do . Tgnora n el alma del socialism o sus enemigos. Decir, por ejemplo, que el socialismo conduce a la peor de las esclavitudes, y que es una utopía , sólo se le puede ocurrir a un cerebro ignaro. Proclamar ei fracaso del socialismo, cuando a ('jos vistos triunfa y se propR{"a por toda la tierra, es sentar p laz a de miopía intlileet ual. ~C6mo no ver qu e l sociali" mo se impo ne, pese a los parciales y transitorios regímenes contr~uios a su esen cia'e El ideal socialista triunfará plenamente. I~l genio del socialismo extiende sus alas p r el muudo entel'O. y a~í es natul'al que sea. Por Jue socialismo quiere decir más cultul'a, más bieneslar, organización soci al más justa, elevación del nivel espiritual del hombre, vida plena para todos, tipo más perfecto de civilización, Es decir, lo que la Humanidad busca y desea, lo que siempre ba COD liluido la mej0r aspiración bumana, el eterno ideal de justicia, paz y libertad, plasmado en el socia lismo, cuyo genio creador hará segu ir una esplendorosa civilildción-Ia civilizaci6n del Trabajo-, cuyos des· tellos ciegan ya los ojos de sus detra ctore!i, pobres defensores de esta pobre ci i1ización capitalist.a, d'>ca· dente, cendenada a desaparecer por imperfecta e injusta. Emiliano Rivera --------~.------------ Aviso al público NUEVA LUZ se vende en los quioscos de la Plaza de la República y calle del Seis de Junio, (esquina a Pí y Margall). ¡Au omovil·stas! 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J ,00 Ginés Bermúiez ........... . 1,00 Antonio García. , ......... . [,00 l ;enaro Fil03o ............ . 1,00 Eugenio Pintado ......... .. 1,00 Francisco Pintado ........ . 1,00 Luisa López .. ............ . 1,00 Manuel Buitra¡;o .......... . 1,00 Juan Condés .............•. 1,00 Benito Garda ............ . 1,00 José Alvarez .............. . 1,00 Facundo Peinado ......... . 1,00 Antonio Rodríguez ....... , . Manuel García. . ..... , ... . 1,5 0 J,OO Maria de los Angeles ...... . 1,00 JuanJosé García .......... . 1,00 Pedro Pintado ............ . 1,00 Carmelo Mart ín ... , ....... . 1,00 Manuel Roldán. , .......... . J ,00 Vicente Lorca ............ . 1,00 Juan jose Condés .......... . 0,5 0 MarÍana Ibáñez ........... .. Antonio Pintado .......... . 0,5° Francisca Díaz ........... , . 0,5 0 0,5 0 Timotea Romero. . . . . .. . .. Vicente Alvarez .......... .. 0,5 0 María del Carmen León .... . 0,5° Melitón Cañizares ......... . 0,5° Juana Sánchez Antequera . . . 0,5 0 0,50 Victoriano Laderas ........ ' Lorenzo Márquez. .. ... . .. 0,5 0 Encarnación Buitrago ...... . 0,50 Tomás Diaz .............. . 0,5° 0 , 50 Valeriano Simón ......... .. 0,50 Agustín López ............• 0,5 0 José Barrios ........ , ..... . Martín Gracia ........•.... 1,5 0 Jo,efa Merlo .......•....... 0,5 0 Carmen Castro ............ . 0,5 0 Antonio Alvarez ......... , . 0,5 0 Antonio Díaz Carrillo ...... . 0,5 0 Francisco Bellón ......... . 0,50 Marcelo García. . . . . .. . .. . 0,5 0 Manuel Sánchez ........... . 0,50 María Josefa Crespo ...•.... 0'5 0 Ramón Baeza ........•..... 0,50 1,00 Juan j. Garda y García ..... Antonio Bellón Villahermosa 0,50 1,00 Antonio Pintado León ..•.... Francisco Prieto .......... . 1,00 Antonio Gracia García ..... . 0,50 Ramón Torres Rodríguez ... . 0,5 0 Bias Garda Díaz .......... . 1,00 Cristino Mota Aragonés, ... . 1,00 Joaquín Lozano ... . ....... .. 0,5 0 Antonio Muñoz Villahermosa 1,00 Julián Prieto Pardo ........ . 0,50 Francisco López Merlo ..... '. 0,5 0 Rosario Aguado Perez, .... . 0,50 Antonio Garda Fernández .. . 0,50 Saturnino L ópez Fuentes ...• 0,50 Avelíno Navarro Arroyo .... 0,5 0 Francisco Filosu Sánchez .. " 0,50 SilverÍo Maroto ......•..... 0,5 0 Vicente Muñoz ...... , ..... . 0,50 Gabriel de la Torre .....•.• 0,50 Tuan de Dios López ....... .. 0,50 Juan Rodríguez Cerrillos, .. . 0,50 Sociedad de Empleados municipales (U. G. T.), ...•.. 10,00 Armando L 6pez ..... , ...... 1,00 Antonio jód l r ....•.....••. 0,50 Suma total. ....... . 575,90 Cansa ya ocuparse tanto de la Confederación Nacional del Trabajo, perO es necesario para a ireDI' !'u in terna descomposición y que Sil va de mentís a aquellos ¡,iod icalistas que ponen todas SUR energías en demostrar que la C. N. 'r. es una organización seria. La Confederación tiene un vicio de origen que la anula: su apoliticismo, y, como táctica, la violencia, que la destruye. Del apoliticismo hemos hablado y escrito ya lo suociente para que no bubiera que replicar más ; pero como los errores hay que repetirlos constantemente para que la opinión se convenza, vamos a volver sobre el mismo, pues 10 mel'ece, sobre todo, el interés de la falange de trabajadores que tiene en su seno la Confederación, para que no COIltinuen sirviendo de comparsas a unos cuantos profesionales d el pistolerismo a sueldo. ::3abemos todos que la C. N. T. se baila mediatizada por una ínfima minoría de sus elementos pertenecientes a la }i' ederaci6n Anarquista Internacional, basta el punto de que donde aparecen las tres iniciales de la Confederación, aparecen también las F. A. I. de la organización ácra ta y no ignoramos que estos cuantos hombres anarquistas se imponen entre la mayoría de los sindir.alisLas por el terror. El anarquismo tuvo su época, ya lejana, y fra casó, acaso, por exceso de liberalidad en su en su programa: la negaci6n del Estado, de lo da aut oridad, de toda disciplino, de t01a organización eociente; era el libre albedrío, el individualismo sin trahas, como en los tiempos precursoros a toda civilización, solo que, en vez de orientar los actos de cada . uno por el instinto salvaje, lendl'fan por fundamento la cultnra, una cultura sólida, con una edueaci6n extremada, sin egoismo, Sill pasiones, haoiendo del deber un sacerdocio; más imponiendo este estado de cosas excelso a fuerza de dinamita. Esta idea fracasó y no por descabellada en su~ fines, sino por utópica, por irrealizable lo menos en quinientos años. El sind ical ismo, que pal'ece máE. adaptable a nuestra época, está fundado sobre una base falsa que es, como hemos apuntado antes, el ser apolítico. Sin duda, cuando se fund6, quisieron hacer un arma recta e hiriente cual una Unión General de Trabajadores A TOOAS LAS SECCIONES Ponemos en conocimIento de todos nuestros compañeros y Secciones, que la U DiÓn General de l'rabaj ado· res de España, por acuerdo del Oo· mité nacional ultimamante celebrado, ha fijado su domicilio en la oalle Fernández de la Hoz, núm. 51 adonde debe remitirse en lo sucesivo toda la correspondencia, así como también los giros, que deberán ir a nomo bre del compañero Antonio Muñoz Giraldos. El teléfono de la Unión Ge neral de Trabajadores de España es el 43.040. Madrid. Hogamos a nuestros compañeros y Secciones tomen buena nota de cuanto anteriormente decimos y procuren cumplimentarlo. Por el Secretario adjunto, Antonio Muñoz. ¡Trabajadores: leed NUEVA LUZ! Quien ame los ideales redentores de la Humanidad; quien no quiera desertar de su deber dentro del ejército proletario; quien sienta honradamente los estímulos de la solidaridad y de la emanci pació n ,está. obligado a l'endir cada día su tributo a la educa- e~p l d¡.], creyendo t¡ue así las JU(I1(1'-1 entre el capital y el t,abajo se 1'1801verían flote~, e invpntnrf'n aqut'llfl de la «acción direcla~. La accióu directa ha causad') muchos estragos y muy pocos beneocios, El patrono qUI! tiene que tratar vis a vis con sus obreros, a quienes él c0usidera toda vía escla "OH, S8 resiste y si a ccede es con mala disposicitín de ánimo y dispuesto a todo, a todo menos a otorgar lJS mejoras que le sl¡licila n, y de aquí las infinitas buelgas con IH consiguiente pertubación de la industria y aun de la economfa de los miRmos hogares propietarios, la capitulación las represalias, etc., teniendo que apelar en casos múltiples a la mediación - «indirecta» - de gobierno, gobierno, gobernadores u otras autoridades. Recordemos que desde el cambio de régimen acá la Corlfederaci6n ha declarado un sinnúmero de huelgas y que ha fracasado en todas. Antes, con la dictadura, ni plantearlas. La Rp-pú blica no es culpable de sus desacier tos. Culptlble es en primer lugar, el apolilicismo y en segundo, la tend encia anarquista. Su actitud políLica ba de llevarle siempre a los mayores descalabros, tanto más cuanto aumente el virus revolucionario de que abora alardea, pues no pudie ndo tener jamás ni una sola autoridad rolítica de su sella; minis· troll, gobernl'dores, alcaldeB, concejales ... es 16gico que los que tales car gos ocupen, políticos del matiz que sea, ban de estar enfrente de la Confederación y solo la balagarán en los momentos en que les sea necesaria su fuelza. El Comité revolucionario, Macicí y desqués L arr oux, son tres ejemplos que corroboran lo que acabamos de decir. ~Ouándo ha de esperar, pues la C. N. T. a que el Poder le sea favo rable~ Nunca. Y mientras los anar'luistas mediaticen sus cuadros, me· nos. Irá cerno basta aquÍ, de fracaso en fracaso hasta que no queden más elemen tos que las tres letras C. ~. T. entrelazadas con las ,(4'. A. 1., que fatídicamenle recordarán babel' servido para causal' las v[ctimas a centenares, sembrar en el país la intranquilidad y decepcton!lr trabajadores, que política y sindicalmente no reaccionarán en su daa. A. Córdoba Caatro Santa Elena (J éo). ci6n de su espíritu, entol'úndose de la mal'c llU del movimiento obrero loca l y provincial. Es una vergüenza atrofiar el cerebro COIl las bebidas alcohólicas y luego cuando haya que enfrentarse con el patrono, en la lucha entablada. entre el capital yel trab<.,jo, se vea imposibilitado de defender sus derechos por falta de cultura. Por eso es imprescindible abandonar la taberna, restando el dinero que se dedica al vicio embrutecedor, en adquirir peri6:licos que ennoblezcan el espíritu, como NUE V A LUZ defensor de los intereses de la clase trabajadora. fa Iza dos Ideal Los más elegantes y econ6micos 14'50 pesetas par Para MUEBLES elegantes de solidez y ~arantía, la Casa González Loza y Cristal PI y MARGALL, núm. 7 MENDOZA, impresor . -Valdepeñas.