La mujer como testimonio - Encuentro Nacional de Docentes

LA UNIVERSIDAD
por un nuevo humanismo
JUBILEO DE LOS DOCENTES UNIVERSITARIOS
II ENCUENTRO NACIONAL
DE DOCENTES UNIVERSITARIOS CATÓLICOS
Comisión N· 106 “ La Persona Metaprivilegiada de la Psicología “
Tema “ La Persona Humana: genealogía, biología, biografía.”
Autora Lic.Ana María Roveres de Raverta
Prof. Psicología de la Personalidad
Pontificia Universidad Católica Santa María de los
Buenos Aires.
Fecha Octubre de 2000
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ABSTRACT (Trabajo de 7 páginas)
LA MUJER COMO TESTIMONIO
Reflexiones sobre América latina
“ El niño es , para la madre , oneroso antes del parto, doloroso en el parto y gravoso
después del parto , por cuya circunstancia la unión legítima del hombre y la mujer se
llama matrimonio y no patrimonio “
Papa Gregorio IX ( Decretales, S. XI )
A partir de esta frase de Gregorio IX se intenta una aproximación al tema de la mujer.
Es un tema espinoso porque son tantas las imbricaciones ideológicas, sociales , políticas
e , incluso , económicas que medran a la sombra de este tema que cualquier afirmación
que pretenda llegar al núcleo esencial es ensalzada o agredida por interpretaciones , y no
pocas aprehensiones accidentales , que impiden afirmar a la mujer en sus auténticas
raíces ontológicas .
La sociedad es perfectible y esta posibilidad hay que buscarla en la integración
armónica de las funciones femeninas y masculinas , socialmente institucionlizadas, sin
más predominio que el que funcionalmente quepa establecer.
Esta igualdad ha de realizarse a través del desarrollo de las capacidades y características
peculiares del hombre y de la mujer , sin pretender llegar a una uniformidad que sería
destructora de la personalidad de cada uno.
“ Hay una profunda igualdad en cuanto a la dignidad y la participación activa del
Cuerpo de Cristo ya que todos , hombres y mujeres,tienen por condición la libertad y la
dignidad de los hijos de Dios “ ( cfr. Conc. Vaticano II , Const. Lumen gentium, 9).
Lic. Ana M. Roveres de Raverta
-Lic.Ana María Roveres de Raverta
Lic. en Psicología.
Profesora de Psicología de la Personalidad UCA ( Capital Federal)
Dirección : España 564 . Lomas de Zamora ( 1832 )
Tel.-Fax 4244-4312 . e-mail: jraverta@ciudad.com.ar
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LA MUJER COMO TESTIMONIO
Reflexiones sobre América Latina
“ El niño es para la madre , oneroso antes del parto , doloroso en el parto y
gravoso después del parto, por cuyas circunstancias , la unión legítima del
hombre y la mujer, se llama matrimonio y no patrimonio “
Papa Gregorio IX (Decretales, S. XI )
La caracterización de la mujer no es ,desde luego , uniforme ; hay grandes diferencias
aun dentro de un mismo país. Su condición universal es idéntica , es la de mujer y las
diferencias obedecen a procesos históricos y culturales particulares que dan un sello
distintivo a los aspectos psicológicos y psicosociales de la vida en una determinada
región . Una de las características sobresalientes del siglo XX, es la redefinición del
papel de la mujer en la sociedad contemporánea, es uno de los hechos más notables y
donde , desde luego ,está implicado su núcleo fundamental que es la familia.
Hubo acontecimientos que influyeron fuertemente , por ej. , las guerras mundiales que
provocaron la escasez de hombres en condiciones de trabajar y que amenazaron la
continuidad del proceso de industrialización que estaba en marcha , se hizo necesaria la
presencia de la mujer en las fábricas. A su vez , los cambios tecnológicos y culturales
transformaron a la familia de unidad de trabajo y subsistencia en unidad de consumo .
El tema de la mujer es muy espinoso. Son numerosas las imbricaciones ideológicas ,
sociales , políticas e , incluso, económicas que medran a la sombra de este tema ;
cualquier afirmación que pretenda llegar al núcleo esencial es ensalsada o agredida con
interpretaciones y no pocas aprehensiones accidentales que impiden afirmar a la mujer
en sus auténticas raíces ontológicas .
Una de las posiciones frente al problema es la sociologista, que se nutre del
pensamiento positivista , marxista y racionalista , que admite sólo influencias externas
en la conformación de la personalidad y la conducta humana , es el aprendizaje de los
condicionamientos económico-sociales los únicos determinantes a tener en cuenta. En
sus extremos llegan a afirmar que “la mayor esclavitud de la mujer es el matrimonio “ o
a negar el instinto maternal.
La otra posición es la tradición judeocristiana y grecorromana. Dice San Pablo “ No hay
judio ni griego, no hay varón ni hembra , porque todos sois uno en Cristo ...” ( Gal. 3,
28 ). Decía Aristóteles que todo desarrollo para ser verdadero , debe ser fiel a su
esencia. Es decir, en este enfoque se reconoce una naturaleza que es anterior al deseo o
condicionamiento humano , que hay que respetar.
Debemos buscar perfeccionar la naturaleza humana y no manipularla .La tarea es
descubrir aquellos aspectos substanciales del ser humano femenino .Parece interesante
considerar la existencia de un principio masculino y uno femenino .El masculino
privilegia el hacer sobre el contemplar , el derecho sobre la compasión , el concepto
sobre la vida . Vive luchando , y luchar quiere decir matar , disminuir la vida. El
femenino ,en cambio , es dar vida , centrar el interés en el ser humano concreto ,
economizar vidas. Sería aberrante suponer que estas cualidades pertenecen a uno u otro
sexo con exclusividad.
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Hasta hace unos años las palabras sexo y género se utilizaban como sinónimos en
ciencias sociales pero, actualmente , se denomina sexo alo biológicamente determinado
y relativamente invariable, y género a las características socialmente construídas que
constituyen la definición de lo femenino y masculino ,en distintas culturas. ( rasgos,
actitudes, sentimientos, conductas y valores ) .Por un lado , entonces, lo corporal y , por
el otro y totalmente disociado, lo psicológico y social, que es un producto exclusivo de
la influencia del ambiente. No es considerado lo individual ni el autodespliegue creativo
del ser humano , esto queda borrado. Este pensamiento tiene mucho peso en los niveles
de decisión gubernamentales e inspiran programas en los medios de comunicación ,
dirigidos a la mujer.
Estamos en una crisis al respecto; estar en crisis es estar desorientado ,no se sabe qué
pensar. Hoy cada mujer se pregunta a sí misma ¿ qué quiere decir ser mujer hoy?
Normalmente en otras épocas lo sabían o creían saberlo. Este cuestionamiento en que
se encuentra la mujer envuelve inmediatamente al hombre.
En épocas no tan remotas ,se partía de ciertos supuestos de lo femenino y de lo
masculino , de lo que se podía esperar o temer de un hombre o de una mujer, que no
eran necesariamente las mismas cosas . Algo se sabía , no todos eran imprevistos , lo
que hacía que la realidad fuese bastante confortable ,por lo menos en ese sentido . Hoy
en día los cambios y la desorientación resultante , hacen que tanto hombre y mujer
desconfíen uno del otro.Es difícil comportarse como hombre con una mujer que no
tiene claro quién es ella misma ( lo contrario vale también ).
La desorientación parte de la mujer con su condición de mujer, por más que su situación
personal haya mejorado.
Una de las causas , es la notable rapidez con que se han producido los cambios para la
mujer en comparación de lo que tomó para los hombres ( trabajo fuera de lo doméstico,
mayor educación , peso en lo político, etc ).
En el siglo XIX la mujer está en el mundo privado y el hombre entra al público. La
política , como la vemos hoy ( con campañas electorales, cargos por designación
popular, etc ) datan de ese siglo .
En el sigloXX ,con mayor educación, la mujer ha llegado a lugares que , antes , eran
exclusivamente masculinos y a los que se ha adaptado sin mucha resistencia . La forma
de los mismos era masculina y ella aún no le ha dado su propio estilo . Una de las tareas
del tercer milenio ,es ayudar a transformar ese mundo, no para que deje de ser
masculino y sea neutro , sino para enriquecerlo son lo que ella aporta .
Hoy todos , hombres y mujeres , están en un mundo que es público, competitivo, visual
por sobre todo , y se encuentra que fue un espejismo pensar que todo serían ganancias.
La tensión que se oserva es prueba de ello , hay que repensar las cosas para que haya un
lugar real y posible para que la familia estable desarrolle todas sus posibilidades ( dar y
recibir, contener y ser contenido ,etc. ) , una familia “ suficientemente buena”
extendiendo la expresión de D.Winnicot.
En el siglo XX también, ha habido un hecho muy importante , que hay que tener en
cuenta , la disociación entre la reproducción y la sexualidad .No digo que sean
independientes , ni separables , sino que están disociadas. Es un hecho biológico , pero
que no se origina en la biología sino en lo histórico –social . Este hecho , importante
por las derivaciones que supone , modifica todo el complejo entramado de proyectos de
hombres y mujeres.
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Digo complejo porque la realidad lo es y simplificarla impide entenderla .
Si bien nunca como en esta época hombres y mujeres se pueden acompañar en una
gama amplísima de áreas, a lo largo de la vida ., se observa empobrecimiento e
insatisfacción en sus relaciones. Se da, con frecuencia , una orientación hacia la
sexualidad automática, que se vive sin compromiso ni amor y , menos aún , con alegría.
La mujer se siente sola y el hombre parece replegado.
Se puede pensar que las relaciones humanas que se reducen a mecanismos reactivos e
impersonales , anulan la condición proyectiva de la vida e implican la anulación de las
auténticas posibilidades personales.
Se da una verdadera crisis de identidad.
En las sociedades que han alcanzado cierto nivel de desarrollo económico y cultural, el
tema es el de la igualdad entre los sexos y qué ubicación tiene la mujer respecto al
hombre y viceversa. En las sociedades en vías de desarrollo , como es el caso de
América Latina, el tema es como “liberar “a la mujer. Se parte de la premisa que ésta se
encuentra sojuzgada, maltratada y desvalorizada.Este es el problema que se ha
considerado enfocar desde hace 30 años en A.Latina por los gobiernos y organismos
internacionales.
Se debe hacer la salvedad que en nuestro país , junto con Uruguay, estos procesos se
dieron un tiempo antes y con características propias. Seguramente debido a la segunda
colonización de la Argentina desde fines del siglo pasado . La primera colonización fue
la española durante tres siglos, la segunda fue de toda Europa y Medio Oriente, que
aconteció en tres décadas. Lo cierto es que entre nosotros la participación de la mujer en
el trabajo formal ya era de un 40 % a principios de siglo , que en los años 60 la
matriculación de las niñas en los niveles primario y secundario era mayor que la de los
varones y que , en la actualidad, en el nivel universitario sucede lo mismo. Lo cual
permite afirmar que en los próximos años , el nivel de educación formal de la mujer va a
ser superior , en promedio, al de los hombres. Sus derechos cívicos fueron reconocidos
desde 1947 , la patria potestad compartida , es un hecho reciente. Una de las últimas
“conquistas “es el derecho al 30% de la representación parlamentaria que, en realidad,
parece ser un intento de controlar a la mujer. Lo válido es que la importancia que ha
adquirido la mujer en nuestra sociedad es de tal magnitud que hasta nuestros políticos ,
de la cofradía de la lista sábana, se han dado cuenta.
A partir de los años 70 se dice con respecto al resto de A.Latina que, si bien la
eliminación del subdesarrollo es un requisito indispensable para la plena emncipación
de la mujer, no elimina la discriminación que sufre , producto del arraigo de prejuicios y
tradiciones , pero también del bajo nivel educacional , técnico y cultural, que limita
grandemente el acceso e incorporación al trabajo.
Se enfocó la lógica del desarrollo en la dirección de producción de bienes y servicios .
Estas planificaciones fueron hechas con un fuerte centralismo y aún lo social se
subordinó a los objetivos del crecimiento económico. Desde luego , que todo
centralismo no contempla las aspiraciones y deseos de los seres humanos concretos .
Estos programas, desde luego, influyeron en la vida cotidiana de la mujer y la familia.
Se manejaron estos supuestos básicos , no del todo concientes, en lo que respecta a la
mujer :
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1) Si mejoramos la salud de la mujer- madre–mejoramos la de los hijos.
2) Si mejoramos la salud de la mujer –trabajadora- se incrementa la
productividad.
3) Si disminuimos el número de hijos , se facilita la integración al trabajo
remunerado.
El aumento de la matriculación en los colegios redujo la diferencia de valoración
respecto a los niños; dato curioso es que aumentó la deserción escolar de los varones.
Como si en compensación a una conducta social más activa de la mujer , se hubieran
distendido las responsabilidades y exigencias al varón.
Se implementaron programas de planificación familiar que, junto a la mayor
participación en el mundo del trabajo, produjo una disminución de la natalidad; de un
promedio de 6 hijos por mujer en los años 50 a 3,6 en los 90. El método instrumentado
fue el de los anticonceptivos orales, con los inconvenientes que acarrean-, se usó muy
poco el preservativo ( un 2% a diferencia del mundo desarrollado que utiliza el 14 %) .
Impresiona que se adopte la esterilizacion en un 36% de parejas como método
anticonceptivo, contra un 10% en los países desarrollados .
Hay abuso de tecnología médica con respecto a la mujer que es sometida , con mayor
frecuencia de la necesaria , a cesáreas e histerectomías.
El predominio del economicismo ( que es la deformación de lo económico ) agregado a
la burocratización ineficiente , transforman los medios ( ellos ) en fines en si mismos,
constituyendo verdaderos totalitarismos , con dilución de la responsabilidad, que afectan
tanto al hombre como a la mujer.
El ingreso al sistema productivo no disminuyó las responsabilidades de la mujer en el
hogar, su papel tradicional . El cuidado de los hijos , de los ancianos y de los enfermos,
sigue bajo la supervisión de la mujer . Es la mayor transmisora de la socialización y
culturalización de los niños . Es el principal agente de la atención primaria de la salud
en A. Latina , y lo hace gratuitamente.
La mujer es como el cemento que sostiene todas las actividades familiares y sociales. A
diferencia de los anglosajones, que en un 80% ubican a los ancianos en instituciones,
entre los latinos el 70% vive con su familia , especialmente con la hija mujer.Se ocupa
personalmente, en la mayoría de los casos, de la escolaridad de los hijos, del cuidado del
marido y de los padres cuando éstos se enferman, etc. La mayoría de los servicios
asistenciales y educacionales están en manos femeninas. Tal vez , su menor presencia
en los niveles de decisión , tenga un elemento prejuicioso , pero también se debe a su
menor nivel de instrucción. Según los estudios existentes la salud mental de la mujer de
A.Latina es bastante buena , a juzgar por su capacidad funcional . No padece más que
las europeas de trastornos psiquiátricos propios del embarazo y el puerperio, y los
intentos de suicidio son sensiblemente menores. Comparte la mayor incidencia de
depresiones 3/1con respecto al hombre, como es universal en occidente. En esto
confluyen tres factores: el climaterio , el envejecimiento de los padres de quienes se
ocupan y el “síndrome del nido vacío “ cuando los hijos crecen y están menos en sus
domicilios. Su expectativa de vida es superior a la del hombre, en cualquier edad. Este
muere por sus conductas de riesgo, especialmente accidentes, y enfermedades que
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tienen que ver con el stress y el consumo de tóxicos. El mayor número de consultas por
afecciones no mortales, desde la adolescencia en adelante, es de la mujer.
Debemos plantearnos que la relativa ubicación de la mujer con respecto al hombre se
presta a reflexiones en sí discutibles; muchas veces la situación, planteada desde antiguo
de devisión del trabajo, es compartida por ambos sexos, Esto es rechazado por las
tendencias más radicales de defensa de los derechos de la mujer, que lo presentan en
términos competitivos, de “guerra de los sexos”. Caen en la concepción de tratar lo que
esencialmente es igual y semejante, como idéntico. Es curioso que luego de insistir en
las condiciones alienantes del trabajo del hombre, se pretenda que eso sea bueno para la
mujer. Da la sensación que es una forma de planificarle la vida a la mujer por parte del
hombre. Se tiene a veces la impresión que las condiciones del trabajo, la
sobreestimulación de las medios de comunicación y la propaganda,que buscan efectos
rápidos y de corto alcance, tienden a eliminar el tiempo de reflexión, e intentan someter
a la mujer pasivamente a la moda.
Cuando proyectamos nuestra particular idea de la libertad sobre las demás épocas
históricas, encontramos que aparentemente no la tenían; en realidad, no tenían aquella a
que aspiramos, pero nosotros no tenemos la que ellos gozaban. No parece realista ver la
historia de la humanidad entera como un largo proceso destinado a producirnos a
nosotros mismos como culminación. Cada época es válida en sí misma. Trasladandose
esto al tema de la mujer encontramos lo mismo. Tendríamos que preguntarnos
seriamente quienes están hablando de la realidad de la mujer hoy en día. Dudo que
todos nos sintamos representados por quienes dicen defendernos.
Las mujeres de nuestra época gozan de mayor independencia, sin embargo las presiones
sociales no tradicionales, son fortísimas. Es conocida la imagen de la paloma de que
habla Kant. La paloma al volar siente la resistencia del aire que es una dificultad que
molesta su vuelo; la paloma no sabe que sin esa resistencia del aire, no podría volar: es
decir, se apoya en el aire que resiste; el aire que es sin duda una resistencia, es al mismo
tiempo aquello en que se apoya para batir sus alas y volar. Esto es característico de lo
social: son presiones, nos limitan, nos coartan, pero sólo apoyándonos en ellas adquiere
configuración nuestra vida. Sólo adquirimos fuerte identidad masculina o femenina en
relación con lo que compartimos y resistimos con el otro sexo. La mujer no se interpreta
sola, sino de acuerdo a la interpretación del hombre, esto no es teórico sino de carácter
práctico. Según se comporte el hombre respecto de la mujer, esta es la interpretación
que tiene de ella, y con ello se encuentra la mujer; se ve como en un espejo. Por
supuesto decimos lo mismo del hombre, que también se ve a sí mismo y en el espejo de
la mujer. Recordemos los versos de Antonio Machado:
Dicen que el hombre no es hombre
hasta que no oye su nombre
de labios de una mujer.
Puede ser.
Si bien reconocemos la importacia de los factores sociales, pensamos que ciertas
manifestaciones psíquicas femeninas son constantes, y sólo están sometidas a las
influencias culturales en el sentido de que a veces un aspecto, a veces otro, se
intensifica. Como dice H. Deutsch “La primitiva y femenina Autonoe, la fecunda
Deméter, Palas Ateneas sin madre, la Amazona andrógina, son creaciones de la fantasía
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mitológica; sin embargo, parece que han existido realmente en todas las sociedades.
Estos prototipos de la psique femenina se repiten constantemente, aunque siempre
diferente, de acuerdo a su cultura, su raza y al grado de desarrollo histórico de su
sociedad. La fachada puede cambiar, pero el núcleo femenino permanece invariable a
través de todas las tormentas”.
Loa logros de la mujer para llegar a la completa igualdad social serán beneficiosos para
ella y para la humanidad como un todo sólo sí, al mismo tiempo, logra una amplia
oportunidad para desarrollar su femineidad y su tendencia maternal.
El Papa Juan Pablo II lo expresa en la “ Carta del Papa a las mujeres “ con motivo de la
IV Conferencia Mundial sobre la Mujer que tuvo lugar en Pekin
“ Estoy convencido de que el secreto para recorrer libremente el camino del pleno
respeto a la identidad femenina no está solamente en la denuncia , aunque necesaria, de
las discriminaciones y de las injusticias, sino también y sobre todo en un eficaz e
ilustrado proyecto de promoción , que contemple todos los ámbitos de la vida femenina,
a partir de una renovada y universal toma de conciencia de la dignidad de la mujer”
Lic. Ana M.Roveres deRaverta
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