DIRECCIÓN DE REVISIÓN Y DOCTRINA 1.- DEPENDENCIA: 2.- TIPO DE DOCTRINA: 3.- TEMA: DERECHO PENAL SUSTANTIVO INSTIGADOR 4.- MÁXIMA ES INSTIGADOR AQUÉL QUE MEDIANTE UNA INFLUENCIA PSÍQUICA, CREA DETERMINA EN OTRA PERSONA UNA RESOLUCIÓN CRIMINAL O ÁNIMO DELICTIVO. O 5.- CONTENIDO 5.1.- NÚMERO DE ESCRITO 5.2.- FECHA: DRD-11-338-2012 29/11/2012 5.3.- RESUMEN (…) Además de lo anterior, este Despacho pudo notar que en el Capítulo V del escrito acusatorio los representantes del Ministerio Público afirmaron que el ciudadano M R participó en los hechos investigados, en condición de instigador. En Venezuela, la instigación -como forma de participación criminal- ha sido prevista en el artículo 83 del Código Penal, en el cual se establece lo siguiente: “Cuando varias personas concurren a la ejecución de un hecho punible, cada uno de los perpetradores y de los cooperadores inmediatos queda sujeto a la pena correspondiente al hecho perpetrado. En la misma pena incurre el que ha determinado a otro a cometer el hecho” (Negrillas nuestras). En el derecho comparado, la figura de la instigación o determinación ha sido denominada también inducción; y conforme a lo explicado por Santiago Mir Puig: “Inducción es la causación objetiva y subjetivamente imputable, mediante un influjo psíquico en otro, de la resolución y realización por parte de éste de un tipo de autoría doloso e imprudente”8. Habida cuenta de ello, es instigador aquél que mediante una influencia psíquica, crea o determina en otra persona una resolución criminal o ánimo delictivo. Según este autor español, ese influjo puede consistir en “un consejo, una solicitud, una provocación (…).”, lo fundamental es que ésta sea suficiente y adecuada para sustentar la imputación objetiva, es decir, que efectivamente conlleve a la causación de la resolución criminal. (…) Ahora bien, a tenor de lo señalado por los representantes del Ministerio Público en el acto conclusivo examinado, el ciudadano M R determinó a otros sujetos para dar muerte al ciudadano J N, a cambio del pago de un precio. Tal afirmación se fundamentó en la supuesta existencia de un plan diseñado 8 MIR PUIG, Santiago: Derecho Penal. Parte General. 7° edición. B de F Ltda. Buenos Aires, 2004. Pág. 403. por éste para dar muerte a la víctima, y la promesa o pago de un precio a dichas personas, con el objeto de llevarlo a cabo. Pese a ello, no se desprende de los recaudos remitidos que -antes de interponer el escrito acusatoriose haya logrado individualizar a las personas que intervinieron en la ejecución del delito de Homicidio investigado en este caso; ni se evidencia la existencia de fundamentos suficientes para aseverar que la muerte del ciudadano J N efectivamente devino de ese supuesto plan ideado por el ciudadano M R en su contra. Debe advertirse que la participación9 es una modalidad accesoria de responsabilidad penal, se trata de una intervención en un hecho ajeno, y por tanto, del ejercicio de una posición secundaria (respecto al autor). Explica Mir Puig que “El inductor a homicidio no <mata>, no realiza el tipo de homicidio, sino sólo el tipo de inducción al homicidio, que consiste en determinar a otro que <mate>”. Como consecuencia de ello, debía establecerse de manera clara y objetiva la existencia de esa relación de accesoriedad que debe existir entre la supuesta conducta ejercida por el ciudadano M R, y el autor del hecho. El no haber precisado quién ejecutó el delito de Homicidio en contra del ciudadano J N, a nuestro juicio comporta un obstáculo para esclarecer si efectivamente el ciudadano M R ejerció algún acto destinado a influenciar la psiquis del autor del hecho en aras de materializar su ejecución; y -de ser el caso- si dicho influjo resultó ser o no idóneo y eficaz. Creemos que para atribuir al ciudadano M R la supuesta inducción ejercida por éste sobre el autor del delito de Homicidio cometido en contra del ciudadano J N, debió profundizarse la actividad indagatoria, para lograr individualizar a todos los que concurrieron en la ejecución del hecho punible y recabar elementos objetivos suficientes, no sólo para corroborar la hipótesis de la representación Fiscal, sino además para sustentar la acusación formulada. 9 En este caso, en condición de instigador.