Ponencia presentada ante la Comisión de Educación y Cultura de la Legislatura Municipal de Humacao Buenas tardes, Honorable Sr. Edgardo Fontánez, Presidente de la Legislatura Municipal de Humacao, miembros de la distinguida Comisión de Educación y Cultura, amigas y amigos todos. Mi nombre es Félix Báez Neris y comparezco ante esta audiencia como Presidente del Centro Cultural Dra. Antonia Sáez. “Dicen que toma un minuto encontrar a una persona especial, una hora para apreciarla, un día para amarla, pero una vida entera para olvidarla.” Traigo ante su atención la figura de la ilustre Petra Zenón. La ocasión es oportuna para recordar a esta figura cimera del pueblo de Humacao. Al recordarla nos contagiaremos con la magia de su recuerdo. Los seres maravillosos tienen la capacidad de prender una luz imperecedera en los corazones de las personas que tocan. La admiración de estos seres tan especiales se da en parte porque se convierten en regalos vitales que atesora la memoria colectiva de un pueblo. Son bálsamos y guías para nosotros los que tenemos la responsabilidad de encausar de alguna manera un trabajo social y cultural. En nuestras faenas nos quejamos muchas veces hasta el cansancio por las dificultades que encontramos en el camino. Pero sólo basta evocar la memoria de algunas de nuestras figuras cimeras para insuflarnos de valor y arrojo para continuar la misión. Como cuestión de hecho solamente en el mes de abril abrigamos el recuerdo y la gesta de figuras gigantes como Águedo Mojica Marrero y don Santiago Z. Maunez. Además, celebramos los logros de nuestro humanista del año, el dilecto artista Osiris Delgado Mercado. 1 Esta mañana nos ocupa la privilegiada ocasión de alumbrarnos con el recuerdo de un ser de luz que irradia e ilumina la memoria colectiva de nuestro pueblo. Una que estuvo dotada de un temple y voluntad extraordinaria. Llevó con gentileza su vocación como un escudo liberador sembrando, formando y encausando la vida de tantas almas de buenos puertorriqueños. A Petra le tocó vivir una época muy difícil donde la mayor parte de la población vivía en una situación de subsistencia. Para un estudio más detallado de ese cuadro difícil que vivió el pueblo, les sugiero que revisen la lectura obligada del libro del entrañable amigo Salvador Abreu, titulado Apuntes para la historia de Humacao. Para la mujer la situación resultó ser todavía más cuesta arriba. La sociedad prácticamente la relegaba al desempeño de las tareas domésticas. Traigo a la atención estos hechos históricos porque fue el escenario en que vivió Petra. Ella supo levantarse ante situaciones adversas que le impuso la época. Pero como les indiqué Petra venía predestinada para iluminar a su pueblo. No tuve el privilegio de conocerla de cerca, pero si llegué a verla a la distancia cuando visitaba el pueblo. Su figura era imponente con aureola de dilecta maestra. Ante su presencia se respiraba sapiencia, inteligencia iluminada. Caminaba despacio, segura y abriendo camino al andar. Hay seres que con una mirada te tocan para siempre y así fue mi experiencia con Petra. Aprendí a apreciarla y a quererla a través de los ojos de tantos buenos amigos que me privilegian con su amistad. Hombres y mujeres que con tan sólo mencionar su nombre se les llenan los ojos de profundo amor. Comparto con ustedes una semblanza de doña Petra Zenón que me resulta muy amena e interesante. Les recuerdo que la misma está disponible en nuestro portal del Centro Cultural en la Internet. 2 Dice así su semblanza: La maestra Petra Zenón nació en el pueblo de Humacao a principios del pasado siglo XX y respetando sus propias palabras “no importa la fecha”. Fueron sus padres don Francisco Zenón Cox y doña Juana Rivas. Escuchen lo que ella misma nos dijo: “Mi verdadero nombre es Fredeswinda, pero por razones de abreviatura, me llaman Petra Zenón Rivas. De joven y de mayor, bien lo sabe Dios, que he podido vencer muchos obstáculos anteponiéndoles a mi fe y buenos sentimientos. He conocido la abundancia y la escasez, ambas me han demostrado que vivimos para mucho más que para ganar dinero. En Humacao, a los 17 años, inicié mi profesión de maestra en la escuela rural. Al cabo del tiempo terminé mi Bachillerato en Pedagogía para enseñar Ciencias Sociales en la escuela secundaria. Jamás enseñé esa asignatura porque el Departamento de Instrucción, en aquel tiempo y luego de Educación más reciente, me envió una licencia como maestra de inglés, el segundo idioma de mi hogar. He enseñado la lectura y escritura de éste idioma desde el segundo grado hasta el cuarto año de la escuela superior en donde leíamos y analizábamos los clásicos como Shakespeare además de la gramática formal. Trabajando en la Escuela Superior Ana Roqué, en Humacao, organicé un coro que deleitó a muchos en la municipalidad y fuera de ella. Entre los integrantes se encontraban la hoy compositora Nilda Ginorio y mi hija la reconocida cantante Lucy Fabery, ya que me había casado con el excelente violinista humacaeño Rafael Fabery. Más tarde me asignaron a dirigir la escuela de Pasto Viejo, uno de los barrios de Humacao. Allí desarrollé muchas actividades; concursos de 3 poesías y oratoria; día de pista y campo, exhibiciones de trabajos realizados por los estudiantes, organización de grupos musicales y de clubes de Español, Matemáticas, Inglés y Ciencias. Con la ayuda de todos se construyó un nuevo salón de Artes Industriales. ¡Cuántos logros! Trasladada a Río Piedras, se me asignó la Escuela Superior Medardo Carazo en Trujillo Alto, en donde tuve que cambiar toda la organización porque no se ajustaba a las necesidades de los estudiantes. El Departamento respaldó totalmente esa directriz. Inicié la labor con trescientos estudiantes estableciendo los cursos General y Comercial, enriqueciendo el currículo con: Educación Física, Electrónica, Música Instrumental, Coro, Patrulla Aérea Civil, Artes Industriales y Agricultura Mecanizada. Organicé además, la primera escuela nocturna para adultos, e inicié trámites para la construcción de la nueva escuela superior, en donde tuve la honda satisfacción de trabajar cuando fue entregada. Esta escuela recibió el reconocimiento del pueblo y del Departamento de Instrucción (ahora Educación). En Trujillo Alto me jubilé pero he continuado brindando mis conocimientos y ayudas a todos aquellos que me los han solicitado. Aunque he vivido lejos de mi querido Humacao, he sido una fiel colaboradora de la Asociación de Humacaeños Ausentes en diversos aspectos. Modestamente he traído ante ustedes varios aspectos de mi vida, existencia que he gozado al llevar a otros la luz de la enseñanza a sus mentes, y tranquilidad a sus conciencias. Si volviera a nacer, empezaría a luchar por los niños y la juventud que tanto necesitan, y son la razón de nuestro ser.” 4 Es por las razones expuestas aquí que recomendamos a esta honorable Legislatura Municipal de Humacao que honre la memoria de Petra Zenón designado la Escuela del barrio Antón Ruiz con su ilustre nombre. Muchas gracias Humacao, Puerto Rico 14 de mayo de 2007 5