XXXIII Congreso Internacional de Fe y Alegría “La Pedagogía de la Educación Popular en Fe y Alegría” Aportes de Fe y Alegría – Argentina para la elaboración del Documento Base del Congreso Recogiendo los aportes de las reflexiones de nuestros Centros Educativos y Promocionales, en una reunión del Equipo Nacional de FyA Argentina hemos definido algunos puntos como aporte nacional a la revisión del Documento Base para el Congreso de Asunción “La Pedagogía de la Educación Popular”, redactado por Pérez Esclarín. Los equipos locales han puesto el acento en lo positivo de la motivación en la mística de FyA, en ideas como “pedagogía de la fecundidad” y “pedagogía para la realización plena de las personas y la construcción de la comunidad”. Insisten en algunos puntos a profundizar que iremos detallando en el informe. Agradecemos y felicitamos a Antonio Pérez Esclarín por el esfuerzo realizado y el importante aporte de poder contar con un texto disparador para el debate previo y en el mismo Congreso. Hemos intentado centrarnos en lo que debería entrar en el documento, más que en la redacción del mismo, si bien hacemos unas observaciones y nos parece que habría que revisar el estilo. Nos parece imprescindible tener en cuenta que este Congreso debe servir como un paso fundante para ir elaborando esa pedagogía de la EP propia de FyA, pero que no se puede pretender alcanzar niveles de definición demasiado rígidos. El tiempo y el proceso de ida y vuelta con todas las instancias de FyA permitirá ir perfilando más claramente los consensos y los puntos en debate. Para elaborar las características de la Pedagogía Ignaciana se precisó de un trabajoso camino de varios años. 1 - En el Documento Base (de aquí en adelante DB), observamos un fuerte acento en el aspecto de la mística de FyA, en la pedagogía del amor y del servicio (N° 13), en la formación del corazón (N° 26). Pensamos que estos son elementos esenciales de nuestra forma de actuar y de nuestro estilo de presencia y, por tanto, no pueden estar ausentes en un documento de este tipo, pero convendría revisar la manera de presentarlo o aclarar más la relación entre lo motivacional y lo pedagógico, por ejemplo en las citas del P. Vélaz, que pueden quedarse demasiado en lo primero. 2 – También se hace una enumeración de una serie de principios pedagógicos (N° 16) recogidos de los documentos y prácticas de FyA. A partir de allí, se podría hacer un trabajo más sistemático de los puntos clave de la EP en FyA: el tema del poder y el empoderamiento, la novedad de la multialfabetización, el modo de procesar la planificación, la disciplina y otros aspectos de la pedagogía clásica desde el ángulo de la EP, etc. Un equipo local remarcó la necesidad de explicitar mejor en la práctica pedagógica el tema del empoderamiento. 3 – Se ensaya una clasificación de las características que tendría la pedagogía en FyA (del N° 25 en adelante) a partir del concepto de “vitalidad”: afectiva, ético-social, intelectual, etc. Nos parece muy acertada la expresión de “vitalidad integral” (N° 24) o pedagogía integral en consonancia con la definición de Fe y Alegría. Puntos en debate a incluir: 4 – Si la Educación Popular es primariamente una praxis reflexionada, parecería necesario que el documento asumiera los rasgos de esa práctica multifacética acumulada en estos 47 años de existencia del Movimiento. Comprendemos la dificultad que esto implica, sin embargo, pese a que se lo menciona en el N° 16 no da la impresión de que sea el elemento central para la elaboración del DB. La necesidad de sistematizar y reflexionar sus prácticas desde la EP es uno de los aspectos resaltados por los equipos locales. 5 – En todo el DB el lenguaje parte de lo que debería ser la pedagogía de FyA, afirmándola como lo que es, “la pedagogía de FyA es...”. Quizás ayudaría reconocer la multiplicidad de prácticas y los límites de la realidad de nuestra acción en este aspecto. 6 – Ese lenguaje supone también que hay unanimidad o un consenso básico respecto a esas definiciones y nos parece que recién nos estamos aproximando a plantear el problema. Parecería útil pasar con una actitud más abierta al tema de las concepciones teóricas.. 7 - Si la pedagogía tiene sus propios criterios y metodologías y en EP se considera fundamental el aporte que trae el educando desde su contexto social, económico y cultural, ¿cuál es la vinculación de la pedagogía con las otras ciencias, especialmente las humanas (sociología, sicología, política, etc.)? ¿Qué criterios de lectura de la realidad y de la misma ciencia se plantean desde la EP en FyA para no acabar en mero subjetivismo? Y, por otra parte, ¿cuáles son los aportes de las otras ciencias para analizar lo pedagógico? Uno de los centros educativos planteaba como problema cómo evitar la descontextualización del aprendizaje de su entorno socio-cultural. Algunas notas a la redacción actual: - Hay numerosas citas de autores o escuelas que implican juicios de valor categóricos (por ejemplo, sobre la escuela piagetiana en el N° 6) o menciones a otros (todo el N° 8) sin que se especifiquen sus aportes o las críticas que se les pueden hacer. Teniendo en cuenta que se trata de un documento institucional normativo u orientador para el conjunto de FyA, convendría evitar las alusiones tan 2 directas a controversias académicas de escuelas ya que es posible que otros educadores de FyA, dentro del mismo espíritu del Movimiento, pueden válidamente no compartir esas valoraciones. - Tener cuidado con las expresiones como sobrepolitización o ideologización referidas al período de surgimiento de la EP (N° 1) como motivo principal del descuido de la sistematización y reflexión pedagógica; FyA siempre se consideró EP y tampoco hizo esa reflexión pedagógica, pero no por esos motivos. En muchos casos el peso estaba más en el activismo. Paulo Freire presenta una pedagogía altamente politizada, pero con fuerte énfasis en la reflexión pedagógica. - En los N° 34 en adelante, se analiza el aspecto ético-social, pero no se mencionan los ejes señalados en la introducción como claves en la EP: el análisis de la realidad, el modo de incluir la realidad socio-política en la enseñanza, la voluntad de participación y empoderamiento en la sociedad como búsqueda de transformación de las estructuras. Se queda en el nivel ético personal y comunitario. - Convendría evitar las citas demasiado largas, por ejemplo las del P. Vélaz (N° 13, 32 y 64) o la de Torres (N° 53). También parece excesivo el espacio dedicado al tema de los campamentos (N° 64); alcanzaría con una mención explicada. Buenos Aires, 27 de septiembre de 2002 Juan Luis Moyano, S.J. Director Nacional Fe y Alegría Argentina. 3