En memoria de los inmigrantes fallecidos en el Mediterráneo Textos utilizados en el acto, Jaén, 29 de abril de 2015 1º. Texto de Antiguo Testamento (Génesis 12, 1-5. “Sal de tu tierra”) El Señor dijo a Abrán: —Sal de tu tierra nativa y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré. 12,2: Haré de ti un gran pueblo, te bendeciré, haré famoso tu nombre, y servirá de bendición. 12,3: Bendeciré a los que te bendigan, maldeciré a los que te maldigan. Con tu nombre se bendecirán todas las familias del mundo. 12,4: Abrán marchó, como le había dicho el Señor, y con él marchó Lot. Abrán tenía setenta y cinco años cuando salió de Jarán. 12,5: Abrán llevó consigo a Saray, su mujer; a Lot, su sobrino; todo lo que había adquirido y todos los esclavos que había ganado en Jarán. Salieron en dirección de Canaán y llegaron a la tierra de Canaán. 2ª Texto.Corán. Abraham, Ibrahim… El Padre de las Grandes Religiones fue emigrante. Buscó una Tierra Nueva, que hiciera feliz a su gente, que diera futuro a su familia, que diera esperanza a un pueblo. Se arriesgó, aunque en ello le fuera la Vida, y sintió que esa llamada venía de Dios. Cuántos se están embarcando hoy para dejar su Tierra en busca de una Tierra Prometida en tantos países del Mundo. Todos somos llamados a mejorar la vida nuestra y de nuestros semejantes. Todos somos emigrantes como Abrahán, Ibrahim… Unos porque se ven forzados a hacerlo, otros porque no podemos quedarnos encerrados en nuestras seguridades y rechazar así al que viene. La Vida es un camino y una búsqueda… Sintámonos unidos en este Camino, porque tod@s buscamos un mismo destino. Canto de la AZHAN por parte de Musulmán 3º Texto de tradición oriental. Del Poeta y místico indio, Tagore Dedicado a los niños y niñas que viajan solos, pequeños, que incluso nacen en los barcos y en las pateras que cruzan los mares. Que ajenos al peligro siguen jugando, que encuentran la muerte, y en otras un futuro; donación de amor de tantas madres que al menos quieren que la esperanza de sus hijos dé sentido a la entrega de sus vidas. Los niños En la última playa del mundo los niños se reúnen. El infinito azul está a su lado, al alcance de sus manos. En la orilla del mundo, más allá de la luna, los niños se reúnen, y ríen, gritan y bailan entre una nube de oro. Con la arena rosa, dorada, violeta -en el alba, al medio día, por la tarde- edifican sus casas volanderas. Y juegan con las menudas conchas vacías. Y con las hojas secas aparejan sus barcas y, sonriendo, las echan al insondable mar. Los niños juegan en la ribera del mundo, más allá del cielo. No saben navegar, ni saben lanzar las redes. Los niños pescadores de perlas se hunden en el mar y, al alba, los mercaderes se hacen a la vela; los niños entretanto acumulan guijarros de colores y luego, sonriendo, los dispersan. No buscan tesoros escondidos, ni saben echar las redes. Sube la marea, con su ancha risa, y la playa, sonríe con su pálido resplandor. Las ondas en que habita la muerte cantan para los niños baladas sin sentido, como canta una madre que mece la cuna de su hijo. La ola baila y juega con los niños y la playa sonríe con su pálido resplandor. En la última ribera del mundo los niños se reúnen. Pasa la tempestad por el cielo solitario, zozobran los navíos en el océano sin caminos, anda la muerte, anda la muerte, y los niños juegan, entre una nube de oro. En la orilla del mundo, más allá de la luna, los niños se reúnen en inmensa asamblea de risas y de danzas y de juegos y de cantos. 4º. Del Evangelio (tradición cristiana) Para los cristianos, la acogida y el cuidado al inmigrante, al enfermo, al encarcelado, al hambriento… al que sufre… es un encuentro con el mismo Dios que emigra, que enferma, que es encarcelado y pasa hambre. Siendo Europa, continente de raíces cristianas, cuna de los derechos humanos, no se entiende esta indiferencia ante las personas que sufren, esta falta de solidaridad y justicia y esta muestra de egoísmo. Elevemos las palabras del Evangelio a nuestros gobernantes, para recordarles que como pueblo no nos representan y que las leyes migratorias que imponen no responden a nuestro verdadero sentir. DEL EVANGELIO DE SAN MATEO 25,31: Cuando el Hijo del Hombre llegue con majestad, acompañado de todos sus ángeles, se sentará en su trono de gloria 25,32: y ante él comparecerán todas las naciones. Él separará a unos de otros, como un pastor separa las ovejas de las cabras.25,33: Colocará a las ovejas a su derecha y a las cabras a su izquierda. 25,34: Entonces el rey dirá a los de la derecha: Venid, benditos de mi Padre, a heredar el reino preparado para vosotros desde la creación del mundo. 25,35: Porque tuve hambre y me disteis de comer, tuve sed y me disteis de beber, era inmigrante y me acogisteis,25,36: estaba desnudo y me vestisteis, estaba enfermo y me visitasteis, estaba encarcelado y vinisteis a verme. 25,37: Los justos le responderán: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento y te alimentamos, sediento y te dimos de beber, 25,38: inmigrante y te recibimos, desnudo y te vestimos?25,39: ¿Cuándo te vimos enfermo o encarcelado y fuimos a visitarte? 25,40: El rey les contestará: Os aseguro que lo que hayáis hecho a uno solo de estos mis hermanos menores, a mí me lo hicisteis. 25,41: Después dirá a los de su izquierda: Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el Diablo y sus ángeles. 25,42: Porque tuve hambre y no me disteis de comer, tuve sed y no me disteis de beber, 25,43: era inmigrante y no me acogisteis, estaba desnudo y no me vestisteis, estaba enfermo y encarcelado y no me visitasteis. 25,44: Ellos replicarán: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento o sediento, inmigrante o desnudo, enfermo o encarcelado y no te socorrimos?. 25,45: Él responderá: Os aseguro que lo que no hicisteis a uno de estos más pequeños no me lo hicisteis a mí.