esporas haya un verdadero período de reposo o fase duradera intermedia. Hasta la madurez, generalmente la esporofita se desarrolla dentro del vientre del arquegonio y casi siempre más o menos hundida e n la gametófita, en la cual vive como parásita. En algunas Hepáticas, especialmente en los Anthoceros, tiene mucha clorofila y hasta e s t o mas, pero no puede vivir independientemente de la gametófita; en la mayor parte de las especies la clorofila es muy escasa o nula en toda la esporofita, y su vida al llegar al completo desarrollo esefímera. Por estas razones se consideraba antes a la esporofita como un órgano de la gametófita; y por resultar de la fecundación de la o o s fera se la llamó fruto, y aun esta denominación se conserva en el lenguaje ordinario y se llama fructificada a la Hepática que tiene esporogonios. La esporofita, al contrario que la gametófita, es ortotropa, tiene simetría radiada, por más que en algunas la dehiscencia se hace sólopor dos hendiduras, y hay otras, como la cápsula de las Pellias y Frullanias, que muestran alguna bilateralidad: en las primeras las cuatro valvas de la cápsula no son exactamente iguales, pero sí cada una con la del lado opuesto, y en las segundas existe en el extremo inferior de dos hendiduras opuestas un grupo de células oscuras que no hay en las otras dos hendiduras. Las partes de que se compone la gametófita son la cápsula que encierra las esporas y los elaterios, y el pedicelo con su pie* Todas estas partes pueden dejar de formarse, atrofiarse o reabsorberse a poco de formadas, menos las esporas, que son la finalidad d e la esporofita. Cápsula. La cápsula es generalmente redondeada, pequeña, pocas v e c e s de más de un milímetro de ancho, de color castaño más o menos oscuro en la madurez, color que depende en parte de las paredes y en parte de la masa de esporas y elaterios: en la Reboulia, p o r ejemplo, tiene un ligero matiz verdoso, porque las paredes tienen clorofila, y en las Pellias el color verdoso es debido a las esporas verdes que se transparentan al través de las pardas paredes de la cápsula. Unas veces es esférica, a menudo ovoidea o elipsoidal (figuras 70 y 71), y pocas veces tan alargada que merezca llamarse cilín-