Capítulo 4 El verbo ser: usos prescriptivos e innovadores 4.1 Presentación del capítulo El verbo ser al igual que estar, tiene la posibilidad de usarse tanto en funciones atributivas como en funciones predicativas, como se mencionó en el capítulo 2. En los resultados de este estudio es notoria la alta frecuencia de aparición de ser en las conversaciones de los hispanohablantes, que duplica la correspondiente al verbo estar. En este capítulo presento los resultados del análisis sintáctico de las construcciones con el verbo ser. En él describo y clasifico las construcciones con ser identificadas en el corpus, detallo las principales características de una construcción predicativa y de una construcción atributiva con este verbo. Por último, analizo todos aquellos usos en los que el verbo ser presenta un comportamiento innovador. 4.2 El verbo ser en el corpus En el corpus de esta investigación se registraron 209 construcciones en las cuales los hablantes hicieron uso del verbo copulativo ser. Como se mencionó en el apartado anterior, ser presenta más del doble de apariciones que el verbo estar, suceso motivado posiblemente porque el verbo estar no acepta atributos de cualquier tipo, debido a que, como afirma Hernández (1996:206), la forma estar aún conserva parte de su significado estativo. El total de las apariciones (209) fueron y clasificadas en grupos dependiendo del tipo de atributo con el que se combinan. Los resultados se presentan en el cuadro 6: 52 Cuadro 6. Tipos de predicación con el verbo ser Ser copulativo Ser predicativo Total 56% (117) 44% (92) 209 Como se explicó en el capítulo 2, los adjetivos, adverbios y las preposiciones pueden ser atributos tanto de ser como de estar; sin embargo, estar no admite como atributos a sustantivos. En el corpus, ser más sustantivo es el tipo de construcción que presenta un mayor número de ocurrencias al registrar 62 oraciones de este tipo. Al igual que con el verbo estar, en el corpus se localizaron construcciones con ser que forman parte de las denominadas expresiones rutinarias, es decir, frases en las que el verbo ser está presente, mas no está siendo usado con la función copulativa que corresponde a este verbo; expresiones como así es son empleadas por el hablante para mantener el estatus de participante activo en la conversación o para dar a entender que está comprendiendo y siguiendo el tema o idea que le exponen. Las denominadas expresiones rutinarias que aparecen en este corpus, no están contabilizadas dentro de las 209 apariciones del verbo ser (cuadro 6) ya que no se les consideraron necesarias para el análisis de esta investigación, debido a que no cumple una función atributiva ni predicativa. 4.2.1 Usos atributivos del verbo ser Según la gramática tradicional, una de las características principales de ser que lo diferencia de estar es el hecho de que ser atribuye al sujeto una cualidad que, independientemente de las circunstancias, será válida en cualquier momento. Esas características y cualidades son expresadas por ser copulativo, siendo ésta el tipo de 53 construcción más común y más frecuente encontrada en los datos de esta investigación al presentar 117 ocurrencias. En el cuadro 7 podemos ver los resultados cuantitativos del análisis de los recursos de codificación utilizados para expresar los usos atributivos de ser. Como podemos apreciar, el recurso más frecuente fue la frase adjetiva que cubrió el 47% de los casos. Cuadro 7. Usos atributivos del verbo ser: recursos de codificación Ser + adj Ser + adv Ser + prep Ser + sust Ser + conj Total (nexo) 47.8% (56) 10.2% (12) 1.7% (2) 37.6% (44) 2.5% (3) 117 Ser copulativo generalmente tiene como atributo a un sintagma adjetival. El hablante en este tipo de construcciones describe física y anímicamente a personas, cosas, sucesos, etcétera, así también, puede expresar características y ciertos estados considerados como permanentes de los sujetos. En el corpus de esta investigación se pudo constatar la frecuencia del uso copulativo de ser, ejemplificado en (58). (58) Participante 4: tiene ocho años, es muy inteligente, es sobrina de mi nuera. En (58) vemos que el verbo ser en es muy inteligente, describe una característica interna del sujeto tácito en la oración; inteligente es un adjetivo calificativo que funciona como atributo del verbo ser formando una construcción plenamente copulativa, esto es, en la que la predicación expresa características externas o internas del sujeto. Como se mencionó anteriormente en el ejemplo (58), una construcción con el verbo ser más adjetivo describe una cualidad inherente del sujeto –en este caso la característica inteligente siempre estará presente en el sujeto, no es algo temporal–, por lo que esa afirmación será válida para 54 ese sujeto en cualquier momento de su vida, función propia del copulativo ser. Por esa razón, el ejemplo (58) es un uso copulativo tradicional del verbo ser. Otro uso normativo de ser atributivo lo encontramos en el ejemplo (59): (59) Participante 1: resulta que… el viejito se enojó, porque ahí no decía a la derecha a la izquierda o lo que tú quieras, nada, el viejo ahí nomás parado. ¡Me vio con unos ojos! y luego me quiso mover ¡yo ni cuenta me di! y mi hijo… ¿qué hiciste con él, hijito? Participante 2: le agarré la mano al señor, sí pues… porque ya la quería mover, y le llegué a agarrar la mano, ey, perate, perate, le digo, con palabras, no hay necesidad de tocar, le digo, no hay necesidad de tocar… Participante 3: es que despiertas pasiones con el viejito. Participante 1: ¡no, pero si hubiera sido uno buenote! pero era un cascarrabias, yo creo que estaba enojado con la mujer. En el anterior ejemplo, el participante 1 expresó características tanto físicas como internas de un sujeto, primero menciona ¡…pero si hubiera sido uno buenote! Lo que da a entender que el sujeto físicamente era lo contrario de lo que se pudiera considerar como ‘buenote’, esto es, el hablante hizo una clasificación del sujeto y lo incluyó en el grupo donde están las personas que no son ‘buenotes’; de ahí que el uso del verbo ser en ese contexto sea el esperado. Después, a ese mismo sujeto el hablante lo describe como un cascarrabias, le atribuye una característica a la personalidad del sujeto, la cual no suele ser una característica temporal o accidental sino habitual y parte de la forma de ser del individuo, por lo que este uso del copulativo ser es también un uso prototípico del verbo ser en construcciones atributivas. Siguiendo con los usos prescriptivos de ser, como Regueiro (2008) explica, los usos copulativos de ser son diversos, esto es, aparte de atribuir características a los referentes de 55 los sustantivos, también los usamos cuando queremos indicar la procedencia de algo, la nacionalidad de una persona, o para indicar la pertenencia a un grupo social, político o religioso. Al respecto, en el corpus de este trabajo encontramos múltiples construcciones de ser copulativo que corresponden a este tipo de descripción, como el de indicar la pertenencia a un grupo religioso ilustrada en el ejemplo (60), en el que el verbo ser indica la pertenencia del sujeto los amigos de Joaco al grupo religioso conocido comúnmente como ‘testigos de Jehová’: (60) Participante 5: han de ser amigos del Joaco, eran de los... no sé si eran testigos de Jehová o algo así. En (60) tenemos un uso prescriptivo del verbo ser expresando la pertenencia de las personas referidas a un grupo religioso, testigos de Jehová; generalmente, este tipo de atribución no es conocida como una característica temporal sino permanente, inherente, del sujeto. Este es un caso de combinación del verbo ser no con adjetivo, sino con sustantivo, posibilidad de las construcciones atributivas de este verbo como vimos en el capítulo 2. En el ejemplo (61) presentamos otra construcción de ser en la que al igual que en (60), se expresa la pertenencia de una persona –el papa Benedicto–, en este caso, a un grupo social e ideológico conocido como ‘nazis’: (61) Participante 2: no, o sea, todo mundo salió, no es que se, se llenaron todos la cabeza, hasta los católicos, todo mundo salió de que era un nazi que anda gastando dinero, un montonal de cosas, repetían todo lo que decían. El caso de (61) es un ejemplo de ser como atributivo prescriptivo, ya que la pertenencia de una entidad, el sujeto, a un grupo político, social o religioso es sólo expresada por medio de ser. En los datos bajo estudio, existe también otro tipo de 56 información que se manifiesta con esta cópula, como el origen o nacionalidad del sujeto. Un ejemplo de este uso es el del ejemplo (62): (62) Participante 5: no, cuando venía él (papa Juan Pablo II), México se hacía uno y algo que estuvo, que estuvo bonito que dijo Benedicto, fue, dice con razón dice, Juan Pablo Segundo decía que él era mexicano, porque pues sintió lo cálido de, de... sí, o sea, dice con razón, decía. En (62) se presenta el copulativo ser más el adjetivo mexicano que funciona como indicador de la nacionalidad del sujeto. Si bien no es una realidad que el sujeto Juan Pablo II era de origen mexicano, en la conversación se aludía al hecho de que él se consideraba así por el cariño que la gente de México le expresaba, por lo que él afirmaba que era mexicano. El ser mexicano, peruano, argentino, etc., son indicadores de la nacionalidad de cada persona y también son rasgos inherentes de cada persona, y como se mencionó en el capítulo 2 de esta investigación, el verbo ser cumple la función de expresar características inherentes y permanentes del sujeto, por lo que el ejemplo (62) es otro uso prototípico del verbo ser en construcciones atributivas. 4.2.2 Usos locativos o predicativos del verbo ser Existe una alta aparición en el habla de los hispanohablantes de los usos copulativos de ser, pues lo utilizamos en gran medida para emitir juicios, para expresar status sociales, para preguntar o indicar la profesión de una persona, entre muchos usos más. Sin embargo, aunque el uso copulativo puede ser el más frecuente, no es el único de este verbo; ser tiene también función predicativa, la cual localiza acontecimientos en el tiempo y en el espacio, pero solamente acontecimientos o eventos, no localiza personas, ni objetos porque esa es la función de estar predicativos. Regueiro (2008), expone diversas funciones de ser en 57 construcciones predicativas; se utiliza para preguntar y decir cantidades y precios, para preguntar y decir la hora, así como también para expresar causas y el modo en el que se da algún acontecimiento. En el corpus de este trabajo se encontraron 92 construcciones de ser predicativo; en el cuadro 8 podemos ver los resultados cuantitativos del análisis de los recursos de codificación utilizados para expresar estos usos predicativos encontrados en el corpus. Como podemos apreciar, el recurso más frecuente fue la conjunción, con un total de 34 apariciones: Cuadro 8. Usos predicativos del verbo ser: recursos de codificación Ser + adv Ser + prep Ser + sust Ser + conj Ser + pron Total 4.3% (4) 92 (nexo) 23.9% (22) 16.3% (15) 18.4% (17) 36.9% (34) En (63) se presenta un ejemplo de localización. En este caso, el hablante está ubicando un acontecimiento en el tiempo: (63) Participante 2: ¡uta! le digo yo, ¿hoy es el día del retén compadre? Me dice ¿por qué? le digo, porque ya van cinco y no y no y no he llegado ni a Caborca. En este ejemplo se habla de algo considerado como un evento; el día del retén. El hablante pregunta por la localización de un suceso en el tiempo, esto es, pregunta si ese día es el día del retén, haciendo la analogía con algún día festivo como el 16 de septiembre donde es notoria la presencia de una gran cantidad de banderas mexicanas que utilizan para adornar tanto carros como casas, análogamente, debido a que en la carretera se topó con muchos retenes, el hablante preguntó a uno de ellos si era “el día del retén”. 58 En (63) no se pudo haber empleado estar en función predicativa debido a que como lo afirma Fernández (2009:2366) la única restricción selectiva que impone estar predicativo es que su sujeto no puede referirse a un evento o acontecimiento, de manera que las expresiones de localización en el tiempo y en el espacio en las que el sujeto sea un evento, sólo serán compatibles con ser predicativo. Para ver más claro el uso de ser predicativo en el ejemplo (63), se puede cambiar el orden de la oración quedando de la manera ejemplificada en (64a). Debido a que el día del retén es considerado nombre de un evento, el verbo copulativo ser es el único que puede utilizarse para predicar acerca de la localización de este acontecimiento en el tiempo. Sería agramatical enunciar una oración como la de (64b): (64) a. ¿el día del retén es hoy? b. *¿el día del retén está hoy? De igual manera, en (65) presento otro ejemplo de construcción locativa con ser en la que se ubica un evento en el tiempo: (65) Participante 4: lo malo es que a mí se me apareció, en serio ahí andaba en el pasillo de la casa, pero bueno, eso ya hace mucho tiempo, ¿verdad? Participante 6: y a mí nunca me ha tocado nada, gracias a Dios. Participante 1: no, qué chingaos, tú siempre andas dormido. Participante 6: pero ¿fue en la tarde o en la noche? Participante 6: para más o menos seguir dormido a esa hora. En la construcción del ejemplo (65) los participantes hablaban sobre un suceso que le ocurrió a uno de ellos, el cual narra que, tiempo atrás, sucedió algo paranormal en su casa, la aparición de un fantasma. La aparición de un fantasma no es considerada como una acción, más bien es considerado como un suceso fuera de lo común que tiene cierto inicio, 59 transcurre y tiene un fin; por tal motivo, para expresar la localización de ese suceso o evento en el tiempo, el uso del verbo ser es el esperado. Como se mencionó en el marco teórico de esta investigación, citando a Regueiro (2008), existen casos en los que el verbo ser predicativo tiene la función de indicar cantidades ya sea monetarias como en el ejemplo (66a) o cantidades en cuanto a recorrido de distancias como en el ejemplo (66b). (66) a. Participante 1: o sea, si fueran 260 mil pesos pero son dólares, son cerca de 3, 4 millones de pesos. b. Participante 3: y el cuatro de octubre van caminan desde ahí, de la gasolinera el Gallo hasta donde está San Francisco, en la carretera pues. Son como treinta kilómetros. El resultado del análisis del corpus permitió constatar la alta frecuencia de aparición de ser predicativo para expresar causas o razones, 34 en total. Estas construcciones están constituidas generalmente por el verbo ser más nexo. Un ejemplo de una construcción en la que ser exhibe este comportamiento es el de (67): (67) Participante 5: como dos y pico también, lo que pasa es que ustedes llegaron como dos horas y media antes que nosotros. En (67) el hablante está explicando el motivo por el cual en cierto evento situado en el pasado, él tardó más tiempo que los demás participantes en la conversación, para poder entrar al lugar donde se realizaba dicho evento. Otro caso similar al anterior en cuanto a que el verbo ser más nexo cumple la función de expresar causa es el del ejemplo (68): (68) Participante 5: ¡la nieve qué rica! Participante 2: un anuncio de nieve. Participante 4: yo también voltié y dije: "¿pues qué pasó?" Participante 2: está en la tele. 60 Participante 5: estoy viendo la nieve de garrafa, es que duró mucho tiempo así detenida. En (68) el participante 5 explica por qué, de pronto, en la conversación hizo mención de que la nieve se ve muy rica, y como aparentemente no había ninguna nieve ni estaban hablando de nieves, les pareció extraño a los demás participantes que hiciera tal comentario; es por eso que el participante 5 explica que hizo ese comentario porque en la televisión pasaron un anuncio de nieve. Otro de los usos de ser predicativo es el de preguntar por fechas y horas. En el corpus se encontraron algunas construcciones de este tipo, una de ellas es el del siguiente ejemplo: (69) Participante 1: pues ahí se anda arreglando ¿qué horas son eh? Participante 3: ¿estás viva, Carmelita? Participante 7: me estoy poniendo ya... el sudario. Participante 3: ¿a poco así va ir con eso con eso todo eso? ¿Sí? Los usos y funciones tanto de ser copulativo como de ser predicativo que se han descrito en este apartado, son casos que corresponden a lo que la bibliografía ha referido como los usos que aquí llamamos prescriptivos. En el corpus encontramos también construcciones que implican funciones no regulares de este verbo, las cuales abordamos en el siguiente apartado. 4. 3 Usos innovadores del verbo ser En las construcciones de ser documentadas en el corpus de este trabajo, encontramos tres usos que suponen un uso innovador de este verbo. Basándonos en el concepto de 61 innovación explicado en el capitulo 2, en este trabajo se registró una construcción innovadora con ser que involucra un adverbio y dos que involucran un adjetivo. En (70) se presenta el caso de la innovación que involucra el adverbio antes. El verbo ser registrado en la construcción no constituye un uso atributivo, ni predicativo de este verbo, sino que corresponde a la función predicativa propia del verbo estar: (70) Participante 1: ¿ya lo quitaron el retén que estaba ahí? entre Mochis… ¿cómo se llamaba? el… el… Participante 2: ya… no hay nada. Participante 2: había uno de unos soldados muy bonito que tenían hasta guarnición militar y todo, ya no, ya no hay nada. Participante 4: el Desengaño que le decían. Participante 2: ya no hay nada mijo. Participante 4: era antes de llegar a Mochis pues. En esta construcción, el verbo esperado sería estar predicativo, ya que tiene la función de ubicar algo, ya sea persona, objeto o lugar en el espacio. Mencionábamos anteriormente que ser predicativo también tiene la capacidad de expresar localización pero solamente de evento o acontecimiento. En el ejemplo (70), el sujeto de la oración, el retén, está tácito; si lo incorporáramos obtendríamos la oración el retén era antes de llegar a Mochis, la cual permite constatar que el verbo ser en copretérito empleado en este ejemplo (70) no corresponde a la predicación de localización en el espacio del sujeto retén; la construcción esperada en esta construcción sería: el retén estaba antes de llegar a Mochis. En esta construcción, el sujeto de la oración es el retén, el cual según el DRAE (2012) hace referencia a un puesto fijo o móvil para vigilar o controlar cualquier actividad. Por ello, es muy probable que esa característica del retén, el cual en ocasiones puede ser 62 “móvil”, sea la razón por la cual se haya suscitado la sustitución de estar por ser en este contexto. Como se explicó en el capítulo 2, el verbo ser en construcciones predicativas se utiliza para ubicar eventos que poseen dinamicidad y movimiento, esto es, eventos que tienen un punto de inicio, un desarrollo y un final. Por tanto, se infiere que los eventos no son inmóviles, ni se pueden ubicar en un punto exacto del espacio. Si bien, en este caso, el sustantivo retén alude a la ubicación de un puesto fijo de soldados, en donde inclusive había viviendas, guarniciones, etcétera, los hablantes tienen el conocimiento de que el sustantivo retén no siempre alude a puestos fijos, sabemos que estos grupos de seguridad normalmente están cambiándose de ubicación como estrategia de vigilancia. Ese concepto del sustantivo retén como un grupo de policías o soldados que pueden estar en un lugar distinto cada día, pudo haber sido lo que llevara al hablante a emplear el verbo ser en lugar de estar al relacionar al sustantivo retén con un evento dinámico. El uso de ser en este contexto es considerado un uso innovador porque el retén no es un acontecimiento; es un sustantivo colectivo que tiene como referente a un grupo de soldados, y lo que se trataba de expresar era la ubicación de este grupo de seguridad que aunque generalmente no tengan un puesto fijo, en el momento en el que deciden colocarse en un lugar, ya podemos expresar la zona geográfica en la que se ubican, y esa localización puede ser expresada únicamente por medio del verbo estar. Los datos analizados indican que el ámbito más propicio para la aparición de usos innovadores de los verbos ser y estar es el de las construcciones donde el atributo del verbo es un adjetivo. En el caso de ser, en este corpus se registraron 2 usos innovadores que involucran adjetivos, uno de ellos es el que se muestra en el ejemplo (71): 63 (71) Participante 4: me estaba platicando el otro día una amiga, que fue su hijo a Alemania y este, y yo ya le había hablado de la Virgen ¿no? que era una Virgen muy bonita, y este, y el muchacho tenía miedo de irse solo, pues, y dicen que él pensaba que le podía pasar algo malo, y dice que le rezaba a la Virgen (…) y nunca le pasó nada. Participante 1: no, pero esa es... pesada, pesada para eso. Según Gutiérrez Araus (2005:103), algunos adjetivos cambian de significado dependiendo del verbo copulativo con el que se esté usando. En el caso del ejemplo (71), la interpretación que le demos al adjetivo pesado, dependerá del verbo copulativo que lo acompañe; de esta manera, no es lo mismo decir el pianista de ese grupo está pesado, a el pianista de ese grupo es pesado. Cuando usamos el verbo estar nos referimos a que ese pianista es muy buen músico. Por otro lado, cuando usamos el verbo ser hay dos opciones: podemos estar haciendo referencia al sentido literal del verbo, es decir, el músico es pesado refiriéndose a la cantidad de peso en su cuerpo, o bien, podemos dar a entender que es pesado en cuanto a su personalidad, es pesado podría entenderse como es grosero. En la innovación ejemplificada en (71) sucede lo mismo; el hablante, en lugar de decir que la Virgen está pesada, emplea el verbo copulativo ser, diciendo que la Virgen es pesada. El tema de la conversación donde se produjo la innovación se centra en describir las cualidades de la Virgen; ellos aseguraban que la Virgen es muy buena realizando milagros y protegiendo a la gente que cree en ella. Haciendo referencia a esa cualidad, el participante 1 emite la construcción esa es pesada para eso, en relación con los milagros y a la protección que la Virgen brinda a sus creyentes. Si analizáramos esa misma construcción, sacándola totalmente del contexto y sin tener antecedentes del tema de conversación, se interpretaría como la descripción física de algo con un peso excesivo para 64 cierta cosa o asunto. Por lo tanto, según lo que quería expresar el hablante, el verbo utilizado en este caso debió ser el copulativo estar. El análisis presentado coincide con el de De Jonge (1993:102) y el de Gutiérrez (1994:143) en lo que concierne a que el ámbito que propicia un uso más frecuente de formas innovadoras es la categoría adjetiva, utilizada constantemente para clasificar y describir entidades, razón que puede llevar a los hablantes a relacionar a los adjetivos con una posibilidad implícita de cambio y estados variables en la misma persona o de un sujeto a otro. Esa cualidad de los adjetivos de expresar características internas o externas que pueden ser variables a lo largo de la vida de un sujeto, o variables de un sujeto a otro, se podría considerar como el principal motivo por lo cual las innovaciones se presentan más en el contexto de adjetivo. Esta variación en la cualidad de los adjetivos es lo que puede llevar al hablante a no ver tan claro en qué contexto, según la gramática tradicional, se debe insertar el verbo ser y en qué contexto se debe insertar el verbo estar. Además del ejemplo (71) arriba descrito, nos encontramos con otro uso innovador con ser más adjetivo en el corpus (72); si bien, no se trata de un adjetivo prototípico–inicia con una preposición, en blanco y negro–, la frase preposicional tiene un comportamiento plenamente calificativo: (72) Participante 1: éste es el mio y éste es el de tu mamá, mira… Participante 6: qué bonita. Participante 1: mira son iguales, nomás que el mío nunca se puso a color, fue en blanco y negro. Participante: el ojiverde, que es el único ojiverde que ve pa' abajo. En (72), el participante 1 narraba un suceso cuya causa el hablante desconocía. Explicó que él, hacía unos días, había pasado, vía bluetooth, a dos celulares, una misma 65 foto que era la imagen de la cara de Jesucristo a color, con el fin de poner esa imagen en la pantalla del celular como imagen de fondo. Uno era el celular perteneciente a dicho hablante y el otro celular era el de su esposa; lo curioso para él era que en el de su esposa se pasó la imagen a color, igual que la original, pero en el de él la imagen apareció no a color, sino en blanco y negro. Entonces le mostraba los dos celulares a su hijo, enseñándole las dos fotos. La innovación en este caso la hace el verbo ser en pasado perfectivo. El hablante utiliza el verbo fue para decir que su foto no se pasó a color sino en blanco y negro; si bien la discordancia de la marca de tiempo en el verbo muy probablemente se deba a que la acción de pasar la foto fue en el pasado, la utilización del verbo ser en lugar de estar no se explica de la misma manera. La imagen en ese momento se encontraba en blanco y negro, esto es, se estaba describiendo una característica condicionada por algo o simplemente accidental, por lo que lo esperado sería estar, el verbo prototípico en este tipo de construcciones, debido a que se está comparando esa foto con la misma foto pero en otro estado, a color, el cual, por alguna razón, en el otro celular está en blanco y negro. Al hacer uso del verbo ser estamos describiendo una característica inherente al sujeto de la oración, lo cual, en este contexto no es a lo que se alude. 4.4 Cierre del capítulo En los datos bajo análisis se registraron 117 construcciones atributivas y 92 construcciones predicativas del verbo ser. Ser copulativo generalmente se acompañó de un sintagma adjetival, ya que en este tipo de construcciones se describe física y psíquicamente al sujeto del verbo. En el corpus se registraron usos de ser atributivo expresando 66 características permanentes de los sujetos así como usos que indican la procedencia del sujeto, la nacionalidad de una persona, la pertenencia a un grupo social, político o religioso. En el caso del uso predicativo del verbo ser registrado en el corpus, encontramos construcciones en las que esta forma verbal cumple la función de expresar localización de eventos en el tiempo y espacio, y también es utilizada para señalar cantidades y procedencia de entidades sujeto. Así como construcciones en las que ser predicativo expresa causa o razón de alguna circunstancia, indica el modo en el que suceden los eventos y es utilizado para preguntar por fechas y horas. En cuanto a los usos innovadores, en el total de las construcciones de ser documentadas en el corpus de este trabajo, encontramos tres que suponen un uso innovador, una de esas construcciones innovadoras con ser involucra un adverbio y dos involucran un adjetivo. En las construcciones con adjetivos la extensión semántica de ser es a expensas de estar, y en la construcción que involucra un adverbio, la extensión semántica de ser es a expensas de otro tipo de verbo como tener o padecer. Es de señalar que, anterior a este trabajo, no existía investigación en la que se documentara algún tipo de comportamiento innovador del verbo ser, es por eso que este trabajo es considerado como un aporte a la descripción de la evolución histórica del verbo ser en el español, en este caso, en la variedad hermosillense. 67