Nuevos antecedentes sobre el uso de los durmientes de hormigón Boletín ICPA N° 93, mayo – junio 1983 El tránsito de trenes más veloces y pesados y la economía de la explotación exigen, entre otros requisitos esenciales, la mejora de la infraestructura ferroviaria y la reducción de su costo de mantenimiento. El perfeccionamiento y desarrollo que registra el durmiente de hormigón significa una positiva contribución para alcanzar esos objetivos. Tanto más cuando se hace uso de la vía moderna, constituida por largos rieles soldados apoyados sobre durmientes de hormigón. Una de las características de este durmiente consiste en que, por su mayor peso, contribuye en forma positiva, a mejorar la estabilidad de la vía. Pero no es propósito de esta nota insisitir en las ventajas propias del durmiente de hormigón, sino referirse a actividades de reciente data, que señalan en forma por demás elocuente sus ventajas. Recientemente publicado en la Revista de Obras Públicas de España, en el que se hace la crónica de un Simposio sobre ¨Técnicas avanzadas de proyecto, construcción y conservación de vía ¨ realizado en Madrid durante los días 24,25 y 26 de noviembre de 1981, al que concurrieron los más destacados especialistas en vías ferroviarias a nivel mundial, se consigna literalmente el siguiente párrado: ¨Se ha constatado que los procesos evolutivos de oerfeccionamiento de las traviesas de hormigón han alcanzado su culminación, como lo muestra su extensión mundial e incorporación en redes que, en principio, se mostraron reticentes ¨. De la crónica de ese simposio también interesa destacar los avances de un programa de investigación para diseñar un sistema para tráfico mixto, válido hasta 350 km/h en servicio de pasajeros y evaluar su rentabilidad frente a medios alternativos, como la levitación magnética. En la literatura técnica reciente se registran algunos trabajos de reacondicionamiento que confirman los criterios expuestos. Entre ellos, la renovación de 92 km de vías entre Redondela y Santiago de Compostela, España, dentro de un plan de modernización, cuya tarea principal consistió en reemplazar los rieles existentes de 45 kg/m y 12 m de longitud, por otros de 54 kg/m soldados entre sí, en tramos de 288 m de longitud y los durmientes de madera por durmientes de hormigón tipo R 5, unidos por perfil de acero de sección especial. En la obra recosntruida, cuyas modificaciones de mayor vuelo son las consignadas en el párrafo anterior, se consiguió aumentar la velocidad media en 20 km/h y disminuir el tiempo de viaje en 40 minutos, así como mayor comodidad y seguridad en el tránsito. En otro artículo se informa sobre la inauguración del tren de gran velocidad (TGV) París – Lyon realizado a fines de setiembre de 1981. Este tren, considerado el más rápido del muindo, que puede superar los 400 km/h, establecerá un puente ferroviario entre París y Lyon, cuya velocidad de crucero será de 260 km/h. Sobre esta magnífica obra este Boletín publicó una nota al iniciarse su construcción en la que informaba sobre notables adelantos técnicos, entre los cuales se comentaba que se había adoptado para la infraestructura, la vía soldada apoyada sobre durmientes de hormigón. Las aplicaciones del durmiente de hormigón también registran antecedentes recientes en América. En EEUU, por ejemplo, el Corps of Engineers realizó una serie de ensayos en el verano de 1980 para determinar la posibilidad de convertir una antigua vía férrea montada sobre durmientes de madera instalada en un túnel, con espacio limitado, en una vía moderna, de alta velocidad constituida por durmientes de hormigón, unidos a la solera de hormigón del viejo túnel, sin que la vía debiera ponerse fuera de servicio durante más de 12 horas diarias. La unión entre los nuevos durmientes y la solera de hormigón del viejo túnel, de 100 años de antigüedad, se llevó a cabo por intermedio de una capa de hormigón polímero cuyo comportamiento era, en realidad, el motivo de esta investigación, cuyos resultados fueron muy favorables. En un ejemplar de una publicación de la Associacao Brasileira de Cimento Portland (ABCP) se informa que al finalizar el año 1984 estará construida la primera etapa del tren metropolitano de Porto Alegre, que une la capital de Río Grande del Sur con Sapucaia do Sul. El tren correrá sobre una infraestructura de 26 700 m de longitud constituida por rieles RT – 27 de 57 kg/m de peso, soldados y asentados sobre durmientes de hormigón y balasto de piedra partida. En el mismo ejemplar la ABCP informa que en el FC Victoria Minas existen tramos experimentales de vía permanente en los que se encuentran en observación, desde 1975, algunos tipos de durmientes de hormigón, cuyas designaciones figuran en el Boletín citado.