UN BOSQUE PETRIFICADO Quizas el mas interesante de los hallazgos de vegetales fosiles en Cuba sea el de la finca en su tiempo conocida como <Caridad del Chorrillm>, en Ia region surcentral de Camaguey. La version sabre Ia existencia de este bosque petrificado corria entre el campesinado de la region, basta que llego a oidos del inquieto naturalista el sacerdote 115 escolapio Pia Galtes, quien realiz6 las primer as investigaciones e n la localidad, alia por 1909 y 1911. Alli encontro troncos, ramas y raices petrificadas, pero ningun fruto, hoja o flor, de lo que se deriva una gran dificultad a la hora de realizar Ia determinacion correcta del vegetal. Para resolver este problema reunio una gran cantidad de troncos de arboles de Ia flora actual, y se dedico a comparar minuciosamente las fibras y dibujos d e Ia madera. A menudo quedo perplejo par Ia gran s imilitud entre unos y otros. Con el procedimiento indicado identific6 57 especies arboreas, entre las cuales resaltan el guano prieta, Ia palm a cana, el corojo, el coco, Ia palma barrigona, Ia pa lma r eal, Ia guas ima, Ia majagua, Ia caoba, y algunas otras formas que incluyen arboles propios de las areas costeras. I nvestigaciones posteriores realizadas por otro escolapio, Modesto Galofre, revelaron que muchas de las determinaciones de Pia Galtes son incorrectas. Hasta hoy no se h!l-n realizado nuevas investigaciones de esta flora, pero h an s ido localizadas dos nuevas regiones con est os fosiles, Ia Sierra de Maraguan en Camagi.i.ey, y Ia Sierra Maestra en Santiago de Cuba. En Ia actualidad Ia finca «Caridad del Ch orrillo» se con oce con el nombre de «La Estrella>>, y alii vive Ia familia que atendi6 a Pio Galti~s durante sus investigaciones. Los restos de troncos petrificados se en cuentran en una pequeii.a colina cuyo substrata lo con stituyen ar eniscas y calizas del Eoceno. En el suelo, arrancados par el arado, se encuentran numerosos fragmen tos 'de troncos y ramas de arboles, totalmente silicificados, pero conservando el aspecto de la madera (Fig. 67). Fig. 67. Tronco silicificado de El Chorrillo, Camagliey, perteneciente a Ia coleccion del Pio Galtes, conservada e n el Museo Felipe Poey de Ia Academia de Ciencias de Cuba. Ejemplo de fosilizaci6 n por sustituci6n molecula a molecula de Ia materia organics. Abundan los troncos de palmas, y algunos ejemplares tienen hasta 4 m de largo. Segun tod as las aparie ncias, se trata de una flora muy moderna, probable- 116 ' . mente pleistocenica, com par a ble con Ia que h oy crece ei:L esta localidad. Como ocur r e e n las condiciones tropicales humedas, los troncos recien corta dos esta ban por complete corroidos por los microorganis mos, yes de esperar que e n breve n o sean otra cosa q ue h umus. S in embargo, en ninguno de los troncos fos iles se observan h uellas de put re faccion bacterian a. Cerca de Ia cima de la colin a encontramos una t r inch era que nos revela Ia clave par a descifrar las cau sa s de Ia petrificaci6n de los arboles. En ella aparece una capa de se dimentos are no- gravosos del Ple istocene que, por s us ca ract eristicas, nos indica que se acum ul6 dura nte una fu erte crecida de las agua s de un rio que corre cer ca . En compaiiia de l ca mpesino J oaquin Rodriguez Maya, profunda conocedor de la zona y afic ionado a las cie ncias nat urales, visitamos una nue va localidad dist ante poco mas de 10 Inn, sit uada en Ia fmca La Clotilde. En este Iugar predominan los restos de arboles robustos. lo contrario a La Estrella donde son mas comunes los troncos de pa lmas. Cerca del camino h ay un tronco silicificado de un os 8 m de largo, cuyo diametro varia entre 1, 5 y 1 m e ntre el nacimie nto de las raices y las primeras ramas. Est e he rmoso ejemplar se conser va en el lugar donde otro- · ra fue derribado. Y de aqui surge la primera cuestion: i.Derribado por que? Pues, es m uy probable que estos ar boles y palm as hayan sido tumbados por rafagas de viento huraca nad o que les arran caron s us ramas, h ojas y fr utos, lo que nos explica la ausencia de estos ultimos en las localidades estudiadas. La hip6tesis de l huracan es t ambien valida para explicar las causas de la crecida de los rios, que con la fuer za de sus aguas tran spor taron a bunda ntes materiales are no-gr avosos y fa ngo, que se acumu la ron e n remansos y ensenadas, o sim plemente donde Ia presencia de t roncos derribados por el suelo redujo Ia ve· locidad de Ia corrient e. De esta maner a, en e l transcurso de u nos pocos dias, Ia ant igua forest.a quedar la derribada y cubierta por !iedirnen tos ar eno- gra vosos y fa ngo. gracias a Ia accion de un fuerte huracan semejante al Flora. En estas condiciones s urgio la pr imera premisa pa ra la conservaci6n de las part es bla ndas de los vegetales: su e nterramiento. Posteriormente las aguas subterraneas impregnaron tanto los t roncos co mo los sedimentos, y come nzo e l intercam bio de s us tancia molecula a molecula. La silice de lm; sedimentos paso a s ustituir a las mole culas orga nicas, y e n e l transcurso de unos milenios se form6 el bosque petr ificado de El Chorrillo. Mas recientement e la region se levant6 y las aguas pluvia les fueron lavando los a ntiguos sedimentos, dej ando a l descubierto los troncos fosil izados. Cierto dia de principios de siglo, con s u hacha, un cam pes ino anonimo sa c6 chispas a l pre tender cor tar uno de estos troncos, descubriim dolos para la cie ncia . E n el fu turo sera necesario continuar est udia ndo est os fos iles, y e n gener al, los problemas de Ia flora pret tirit a de Cu ba, que has ta a hor a no ha recibido toda Ia a t encion que merece. Pa ra dar por te r m in ado est e capitulo ofrecemos a! lector u na serie de ejemplos de los fos iles mas caracterist icos encont r ados e n las rocas cu banas, co mo un complernento a Ia Tabla 8 IFigs. 68 a 77). 117