EN PORTADA NO A LA GUERRA NON A GUERRA GUERRARIK EZ! NO A LA GUERRA NO A LA GUERRA NON A GUERRA GUERRARIK NO A LA GUERRARIK EZ! NO A LA GUERRA NO A LA GUERRA NON A GUERRA GUERRARIK EZ! NO A LA GUERRA NO A LA GUE El pasado 15 de febrero, se produjo una movilización mundial sin precedentes Buscando la paz, rechazando la guerra Varios millones de personas se manifestaron el 15 de febrero en todo el mundo en la batalla más dura que jamás se haya conocido en muchos lugares, rechazando una guerra absurda a la que algunos, empezando por el Presidente Bush (y continuando por los Aznar, Blair y Berlusconi), nos quieren llevar. Ciudades como Nueva York, Londres, Atenas, Madrid, Barcelona, París, Berlín, Melbourne, Méjico DF y otras muchas más fueron testigos de un sentir generalizado que recorre el planeta en estos días, aunque algunos sigan haciendo oídos sordos U na sordera que no atiende al clamor popular ha tomado cuerpo en nuestro país, ya que el Presidente Aznar no quiere o no sabe oír ese rechazo a la guerra contra Irak de la inmensa mayoría de los ciudadanos para los que tiene que gobernar, según mandato de las urnas. En este sentido, España sigue apoyando, junto al Reino Unido, la aventura de una guerra en el Golfo, a pesar de que la ONU sigue siendo partidaria de dar más tiempo a los inspectores. absoluto, al no contar con el respaldo de la diplomacia internacional, se le han unido escasos países y las consecuencias para todo el mundo pueden ser de tal calibre que el enfrentamiento puede acabar haciendo retroceder a la economía mundial a cotas insospechadas, tras lo cual necesitaremos muchos años para la recuperación. Y el mundo no puede permitirse estos desaguisados, máxime cuando millones de seres humanos no tienen cubiertas las necesidades más elementales para una existencia digna. Madrid vivió en esa fecha del día 15 una de las mayores manifestaciones de su historia, superior incluso a otras que tuvieron lugar frente a hechos como el asesinato de los abogados laboralistas de Atocha, el entierro del Alcalde Tierno Galván, el asalto al Congreso del 23-F o la muerte de Miguel Ángel Blanco. Lo mismo ocurrió en Barcelona y en otra multitud de ciudades españolas (ver en el cuadro adjunto la relación de asistentes a las realizadas en nuestro país) que abarrotaron sus calles, para decirle al Gobierno que no somos partidarios de sus propósitos bélicos. Es posible que Estados Unidos controle tras el desenlace el petróleo en esta parte del mundo, e imponga las reglas del juego, algo que no resultaría nuevo. Lo que ya resulta más difícil es predecir hasta qué punto estarán dispuestos a aguantar los más de mil millones de musulmanes de todo el mundo. Acabar con la dictadura de Sadam Husein por esa vía, sin buscar otras posibles, que existen, puede acabar siendo el principio del fin de una paz planetaria tan necesaria como deseada y útil. Aunque algunos no lo crean. Y ello, porque aparte del rechazo que produce cualquier guerra, la que nos augura el Presidente norteamericano (con la complacencia y la complicidad activa del Gobierno de España) entra dentro del sin sentido más 4 Desde UGT queremos dar las gracias a todos y cada uno de los ciudadanos y ciudadanas que participaron en esta masiva movilización mundial a favor de la Paz y, especialmente, a los más de seis millones ochocientas mil personas que participaron en las 79 manifestaciones desarrolladas en España y que a continuación detallamos, con indicación del número aproximado de asistentes a cada una de ellas: Almadén (200), La Gomera (300), Lepe (300), Piedrabuena (300), Salobreña (350), Hierro (500), Ceuta (500), Tortosa (600), Villafranca de los Barros (1.000), León (1.000, el día 14), Vinaroz (1.000), Medina del Campo (1.000) Fuerteventura (1.000), Alcázar de San Juan (1.500), Aranda de Duero (2.000), Badajoz (3.500), Soria (4.000), Puertollano (4.000), Lanzarote (4.000), Ibiza (4.000), Cuenca (5.000), Huesca (5.000), Avila (5.000), Melilla (5.000), Motril (5.000), La Palma (5.000), Guadalajara (6.000), Gandía (6.000), Menorca (8.000), Palencia (10.000), Teruel (10.000), Lugo (12.000), Algeciras (15.000), Segovia (15.000), Ferrol (15.000), Ponferrada (15.000), Toledo (15.000), Tarragona (15.000), San Sebastián (16.000), Burgos (16.000), Vitoria (18.000), Almería (20.000), Lleida (20.000), Elche (20.000), Huelva (20.000), Ciudad Real (20.000), Jaén (20.000), Pamplona (20.000), Zamora (20.000), Castellón (25.000), Ourense (25.000), Albacete (30.000), Santiago de Compostela (35.000), A Coruña (35.000, Santander (35.000), Pontevedra (40.000), Salamanca (40.000), Girona (40.000), Logroño (50.000), Palma de Mallorca (50.000), Tenerife (60.000), Murcia (60.000), Alicante (60.000), Cádiz (70.000), Málaga (70.000), Córdoba (75.000), Las Palmas de G.C. (100.000), Valladolid (30.000 el día 15 y 80.000 el día 16), Granada (150.000), Bilbao (160.000), Vigo (200.000), Oviedo (200.000), Sevilla (250.000), Zaragoza (400.000), Valencia (500.000), Barcelona (1.500.000) y Madrid (2.000.000) unión Nº 205 EN PORTADA NO A LA GUERRA NO A LA GUERRA NON A GUERRA GUERRARIK EZ! NO A LA GUERRA NO A LA GUERRA NON A GUERRA GUERRA A NON A GUERRA GUERRARIK EZ! NO A LA GUERRA NO A LA GUERRA NON A GUERRA GUERRARIK EZ! NO A LA GUERRA A continuación se reproduce el Manifiesto firmado por UGT, Comisiones Obreras, Izquierda Unida, Partido Socialista Obrero Español y diversas organizaciones sociales, convocando a la ciudadanía de nuestro país a La ciudadanía española está mayoritariamente en contra de una guerra en Irak, más aún si ésta es decidida unilateralmente por el Gobierno de EEUU. Resulta inmoral hacer sufrir más a un pueblo castigado por diez años de embargo, cuyos efectos han recaído sobre millones de inocentes, y sometido a un régimen dictatorial. No es justa una guerra que se presenta como único medio para acabar con las armas de destrucción masiva que los inspectores de Naciones Unidas no han encontrado hasta el momento, o para restablecer la democracia, pero que, en realidad, pretende garantizar el control del petróleo y reordenar una región en función de los intereses económicos y políticos de EEUU. Creemos que una solución política y no violenta debe ser negociada en el marco de las Naciones Unidas. La comunidad internacional y sus legítimos organismos representativos deben actuar siempre basados en criterios claros y sin rastro alguno de oportunismo político o económico. Igualmente, no podemos permitir que la comunidad internacional sea mantenida en calidad de rehén de un solo Estado. Estamos firmemente convencidos del papel que la ONU debe ejercer como instrumento fundamental para regular las relaciones y conflictos entre Estados. La Organización de Naciones Unidas no debe ser sólo la encargada de decidir el uso legal de la fuerza, sino que ante todo debe ser garante de la paz. Reforzar su credibilidad nos lleva a reclamar la aplicación de todas sus resoluciones, también las referidas a Palestina, Israel y al Sahara Occidental. Es insostenible, desde un punto de vista político y moral, que haya disunión Nº 205 participar masivamente en las manifestaciones convocadas para el 15 de febrero (como así ocurrió) y que fue presentado en rueda de prensa, el día 11 de febrero, en la sede de nuestro Sindicato: tintos criterios a la hora de exigir el cumplimiento de las resoluciones de las Naciones Unidas. Expresamos nuestra oposición a cualquier acción militar unilateral y creemos que avalar un ataque preventivo no estaría en concordancia con el Derecho Internacional, no ayudaría a combatir el terrorismo internacional y puede, sin embargo, llevar a una crisis más profunda, involucrando a otros países de Oriente Medio. En cualquier caso, la paz y la seguridad del mundo estarían gravemente amenazadas. NO A LA IMPLICACIÓN DE ESPAÑA EN EL CONFLICTO La ciudadanía se opone a que España se implique en el conflicto colaborando necesariamente en el ataque a Irak, mucho más aún si es comprometiendo recursos humanos y materiales. La subordinación del gobierno español a la administración Bush, rechazable en sí misma, hace un flaco favor a la Europa que queremos construir y a los valores que representa. Rompe y debilita una política exterior europea común hoy más que nunca necesaria. Porque esta guerra no es justa y carece de legitimidad, porque contribuye a reforzar el autoritarismo y erosiona nuestros derechos y libertades, la implicación española es inaceptable. Por último, expresamos nuestra solidaridad y apoyo con aquellas fuerzas que luchan por un cambio democrático y pacífico en Irak. Denunciamos el papel que se pretender asignar a las organizaciones humanitarias que, tras haber sido ignoradas durante todo el proceso, silenciando sus críticas y demandas, están siendo ya reclamadas para participar en la ayuda humanitaria que se prepara para paliar los previsibles desastres tras la devastación bélica. Si no paramos la guerra podríamos encontrarnos ante uno de los mayores éxodos de refugiados de la historia, no solamente de ciudadanos iraquíes sino incluso de habitantes de los países limítrofes que se verán igualmente afectados por el conflicto y el posterior cambio del “statu-quo” de la región, y en especial ante un éxodo masivo de ciudadanos palestinos deportados de los territorios ocupados. Únicamente sabemos que ACNUR habla de más de 600.000 refugiados en los primeros días de conflicto. Llamamos a todos y a todas los ciudadanos y ciudadanas a que manifiesten su repulsa a la guerra y su rotunda oposición al respaldo del Gobierno a la política belicista de la administración Bush, participando en toda España en las manifestaciones que se han convocado el 15 de febrero, junto con muchos millones de ciudadanos y ciudadanas europeos que lo harán en la Jornada Europea por la Paz, y en cuantas movilizaciones se convoquen de forma unitaria. Además como muestra de rechazo a la guerra, invitamos a todos y todas los ciudadanos y ciudadanas a que participen en la actividad denominada “balcones por la paz”, colgando de cada balcón o ventana una sábana blanca. POR MUY DECIDIDA QUE ESTÉ, ESTA GUERRA SE DEBE PARAR 5