Violencia doméstica –Gragea 4 La organización y el funcionamiento de la interacción violenta. - En las entregas anteriores progresamos en las definiciones de violencia, particularmente de violencia doméstica y sus tipos, y reflexionamos sobre los múltiples factores que contribuyen a que determinadas personas, en un determinado contexto, generen una interacción violenta. Corresponde ahora analizar la forma en que se organiza, funciona y pervive esta interacción. Para ello nos basaremos fundamentalmente en el análisis sistémico que en torno al tema realizan Reynaldo Perrone y Martine Nannini. Estos autores proponen dos formas de organización relacional de la violencia, que ilustra lo multiforme de este fenómeno: 1) La interacción violenta que se produce desde una relación asimétrica, que se la define como violencia castigo; 2) La interacción violenta que se produce desde una relación simétrica, que se la define como violencia agresión. Clásicamente se ha definido a las personas implicadas en una interacción violenta como “victima” y “victimario”. Estos autores proponen hablar de los “actores” de la violencia, en donde es posible distinguir “emisores” de la violencia (al referirse a los que la manifiesta con hechos o actos) y “receptores” de la violencia (aquellos que la reciben). Son “participantes” de la violencia aquellas otras personas que se encuentran presentes en el momento de la interacción violenta. Tanto en una forma como en la otra, la violencia se organiza en una serie de secuencias circulares y de mensajes repetitivos intercambiados entre varios protagonistas, de forma que se conforma una especie de “escena” donde los actores y participantes acuerdan un determinado “guión” en torno al cual se configura la relación violenta. Esta suerte de acuerdo inconsciente, este marco relacional integrado por mensajes verbales y no verbales que va construyendo la interacción violenta, se denomina “consenso implícito rígido”. “Es difícil sostener que este acuerdo responda a la voluntad de pelearse. Se trata más bien de una trampa relacional, donde la violencia aparece como una necesidad de mantener el equilibrio entre cada uno de ellos y los otros”. Este acuerdo se construye entre dos y esta cimentado en las historias personales de cada integrante y apoyado en una muy baja autoestima de cada uno. El consenso implícito rígido comprende tres aspectos: 1. Aspecto espacial: es el lugar donde se admite que ocurra la interacción violenta, separando lo privado de lo público, lo individual de lo colectivo. Ejemplo: ocurre en el dormitorio, en el interior de la casa, en ausencia de los niños, o en presencia de los niños. enviado1a de Andrea © EviMed 2009Documento Página 3 Natalia Fontes Peombo. La organización y el funcionamiento de la interacción violenta. - ¿Cómo sigue María? No ha logrado bajar de peso... Si doctor ya sé. Mi marido me recuerda que estoy gorda a cada momento. El es el único que trabaja en casa, y dice que yo lo único que hago es comer. Pero eso no es así María... usted se encarga de la casa sola, lleva a los niños a la escuela, les cocina, usted hace mucho por su familia. De hecho hace tanto por ellos que no se está ocupando de usted. ¿Pudo empezar el gimnasio? No, no he tenido tiempo, y además Juan me dice que quedo ridícula con las calzas... Título titulo - Violencia doméstica –Gragea 4 2. Aspecto temporal: se refiere a los momentos “ritualizados” en los que es muy probable que irrumpa la violencia. Ejemplo: al regreso del trabajo, durante la cena, al realizar la tarea escolar. 3. Aspecto temático: se refiere al contenido en la comunicación que genera la interacción violenta. Ejemplo: el reconocimiento profesional, el trabajo, el dinero, la familia de origen, entre otros. Como fue mencionado previamente, estos tres aspectos del consenso implícito rígido tienen una fuerte carga emocional y están relacionados con la historia personal de cada actor de la violencia y la historia de su interacción. Finalmente es necesario reflexionar sobre que aspecto de la comunicación dispara finalmente el pasaje al acto. Se refiere a mensajes verbales, no verbales o paraverbales que amenazan con romper con el equilibrio previo (simétrico o asimétrico). El ciclo de la violencia descrito para la violencia contra la mujer es un modelo explicativo de cómo esa secuencia circular y repetitiva sucede en el marco de una relación asimétrica o violencia castigo. En este marco de no reconocimiento del otro como sujeto de derecho, alternan periodos de relativa calma con otros de agresión. En términos generales se identifica una etapa de generación de tensiones donde la interacción comienza a deteriorarse con manifestaciones de insultos, amenazas, disconformidad. El monto de la tensión va creciendo hasta que se dispara la agresión, que puede ser física contra la mujer o contra objetos o puede consistir en insultos o amenazas de igual grado de daño. Posteriormente a esta etapa sobreviene un clima de incomodidad por parte de ambos, de sentimientos contradictorios y de justificación de la agresión por parte del emisor de la violencia que no visualiza su responsabilidad en la acción y la desplaza hacia ella o terceros. Si la mujer permanece distante y persiste en no ignorar lo que sucedió, sobreviene la etapa de la luna de miel, donde el emisor de la violencia se muestra dispuesto a cambiar, a no retirar la agresión y puede en algunos casos adoptar conductas compensatorias (regalos entre otros). En otros casos la actitud distante de la mujer genera amenazas de graves represalias si abandona la relación. En ambos casos el resultado final es la persistencia de la relación que a pesar de la luna de miel sigue siendo asimétrica y que cíclicamente reitera estas etapas, pero que cada vez está más deteriorada y donde cada nuevo episodio de agresión puede llegar a ser más grave. En relaciones asimétricas de tipo violencia castigo pero caracterizadas principalmente por el maltrato psicológico o emocional, muchas veces no se observa este patrón cíclico sino que la desvalorización del otro adquiere una modalidad más continua. Finalmente resta por desarrollar brevemente el modo de funcionamiento de una interacción simétrica del tipo violencia agresión. En términos generales no se diferencia demasiado del ciclo de la violencia descrito previamente, con la especificidad de que se trata de una relación donde el poder (no necesariamente solo la fuerza física) es manejada por ambas partes en igualdad de condiciones. En estos casos luego de que se dispara la agresión, existe una pausa complementaria de similares características a la “luna de miel” citada, donde finalmente y por un tiempo ambos adoptan una modalidad de interacción no violenta. No obstante y a diferencia de las relaciones asimétricas, los actores de la violencia agresión son conscientes de lo incongruente de sus actos violentos, persiste en ambos un reconocimiento del otro como sujeto, tiene mejor pronóstico y las secuelas posteriores son limitadas. El modelo organizacional de la violencia en sus distintas formas nos permite entender mejor la forma en que las personas integran y mantienen estas interacciones. El conocimiento del mismo nos permitirá construir estrategias generales de abordaje, que comenzaremos a analizar en la próxima entrega. enviado2a de Andrea © EviMed 2009Documento Página 3 Natalia Fontes Peombo. Violencia doméstica –Gragea 4 Responsable: Dra. Diana Domenech Octubre 2009 enviado3a de Andrea © EviMed 2009Documento Página 3 Natalia Fontes Peombo. La organización y el funcionamiento de la interacción violenta. 1. Perrone R, Nannini M. Organización relacional de la violencia. En: Violencia y abusos sexuales en la familia: un abordaje sistémico y comunicacional. 2ª ed. Buenos Aires, Paidós, 2007. pp. 65-74. 2. Uruguay. Ministerio de Salud Pública. Dirección General de Salud. Programa Nacional Prioritario Salud de la Mujer y Género. Abordaje a situaciones de violencia doméstica hacia la mujer: guía de procedimientos en el primer nivel de atención de salud. Montevideo, 2006. Acceso el 26 de setiembre de 2009. Disponible gratuitamente en: http://www.msp.gub.uy/andocasociado.aspx?571,12014Q Título titulo Fuentes: