Santiago 24 de agosto de 2011 I- N° 487/2011 CARTA A LAS JEFATURAS DEL S.I.I. Con motivo del Paro Nacional convocado por la CUT y la ANEF, convocatoria a la cual adherimos, hemos visto como los Ministros del Gobierno del Presidente Piñera han sostenido un discurso que busca amedrentar a los trabajadores y a la ciudadanía en el ejercicio de su legítimo derecho a expresar sus aspiraciones y demandas. Así como los estudiantes han sido mal tratados y vapuleados por el gobierno y los medios de comunicación afines, así también han querido tergiversar las demandas que fundan las bases de las movilizaciones convocadas por la organización sindical. La ANEF ha hecho un llamado a los funcionarios públicos a sumarse al petitorio por un nuevo estatuto administrativo, incentivo al retiro y fin a las prácticas antisindicales, entre otras. Contrario a la conducción democrática de un país y en abierta oposición a la libertad de expresión y los derechos sindicales, el Gobierno ha emitido la instrucción a los Jefes de Servicio de fotografiar, tomar declaraciones a testigos, visitar intempestivamente varias veces en el día los puestos de trabajo y levantar actas que denuncien a aquellos funcionarios y colegas que participen del Paro Nacional. Con indignación denunciamos que esta medida de coerción es una muestra más de un gobierno que no ha sabido tener conducción y busca conseguirla mediante la represión y la delación. En la construcción de un Servicio de excelencia, sus funcionarias y funcionarios y los dirigentes hemos sido artífices del proceso modernizador, en el que la defensa de la carrera funcionaria y la estabilidad laboral han sido una lucha permanente y guía de nuestro accionar. La lucha ha sido transversal y en cada una de las conquistas las Jefaturas, de todos los niveles, han sido también beneficiadas, recibiendo cada una de las ganancias de las movilizaciones. Así también, al momento de discutir sobre la Alta Dirección Pública los gremios defendimos férreamente la necesidad que los Directores Regionales fueran funcionarios de carrera, en particular fiscalizadores, que garantizaran el buen cumplimiento de la Misión del Servicio y el principio de probidad, evitando el potencial conflicto de intereses cuando un cargo de esta naturaleza queda en las manos de un privado. Con la misma claridad con que se defendió el cargo de los Directores Regionales hoy requerimos que los jefes de grupo y departamento, en un marco de respeto a los derechos sindicales y laborales, y frente a estas nuevas instrucciones propias de organismos de inteligencia del pasado, actúen con lealtad frente a sus colaboradores directos, quienes han demostrado una y otra vez un compromiso absoluto con esta institución. Es evidente que hoy la situación es más grave aún, porque mediante éstas instrucciones se ponen de manifiesto prácticas antisindicales que han caracterizado el actuar de este gobierno, incitando con ellas a la delación y la denuncia entre los mismos compañeros de trabajo, dando paso a la ruptura total de las confianzas y el clima laboral que tanto ha costado construir. Cabe recordar que con el informe de respuesta del Director del SII a la Corte de Apelaciones, ante los Recursos de Protección de AFIICH Y ANEIICH, ya se produjo una profunda lesión a la unidad de los funcionarios, poniendo la carga de la responsabilidad de la aplicación de los descuentos sobre las jefaturas. La amenaza y el amedrentamiento del gobierno frente al movimiento social y sindical que vive nuestro país es un camino errado que las autoridades persisten en profundizar. Pero pretender que los jefes actúen como fuerzas policíacas al interior de los servicios públicos es aun más grave. Por eso, llamamos a todos nuestros asociados que detentan cargos de jefaturas a negarse a ejercer estas funciones, teniendo presente que como servidores del Estado formamos parte de una administración pública cuya responsabilidad es servir a la ciudadanía y no a los gobiernos de turno. DIRECTIVA NACIONAL AFIICH