¿El hombre de conocimiento en una realidad no ordinaria? Un concepto un tanto difícil de entender, esto debido a los diferentes factores que intervienen en el conocimiento a través del aprendizaje de lo no ordinario, algo que podría resultar inexplicable para nuestros esquemas mentales, pero no para la sabiduría antigua que trasmite el maestro Don Juan. La descripción lógica del mundo realista en el cual nos encontramos de una manera cotidiana es cambiada radicalmente por las enseñanzas de Don Juan en las cuales las experiencias más comunes podrían ser conocimientos vitales en la vida de un hombre de conocimiento. Y esto es lo que trata de explicar el autor Carlos Castaneda, narrando cada una de sus experiencias con la mayor legitimidad posible, intentando describir lo que ve y lo que siente a partir de una realidad total mente diferente a la que uno podría observar. En este ensayo se tratara de enfatizar y dar a entender los puntos de vista de este autor. Por medio de la crítica constructuctiva obviamente intentando argumentar cada una de sus experiencias y la manera “poco lógica” en la que se podría describir y sobre todo los procedimientos para poder llegar a estas experiencias de una forma tangible. Algo que me resulta un tanto confuso es la descripción que nos da Octavio paz. En su prólogo. Ya que surge la pregunta de que si es antropología oh ficción literaria. La “Antropología” es una ciencia social que estudia al ser humano de una forma integral. Para abarcar la materia de su estudio, la Antropología recurre a herramientas y conocimientos producidos por las ciencias naturales y otras ciencias sociales.1 Más en la forma en la se relatan las experiencias de Carlos con cada uno de sus encuentros con Don Juan, uno se pone en desacuerdo en cuanto a la descripción que este autor maneja en este libro de un tipo de diario, más como una novela ficticia con descripciones de una forma etnográfica ya que esta es un método de investigación que consiste en observar las prácticas culturales de 1 http://rae.es/recursos/diccionarios/drae, consultado, 30/11/2013. los grupos humanos y sobre todo poder participar en ellas para poder contrastar lo que la gente dice y lo que hace. Por el tipo de redacción y contenido más que nada yo lo manejo de esta manera. Por primera instancia cabe mencionar lo poco realista que me resultan sus experiencias, claro tomando en cuenta las capacidades fisiológicas que se encuentran afectadas por ingerir este tipo de hierbas, que resultan ser alucinógenas y sobretodo poco saludables para las personas según el parecer, de uno, aunque estas se encuentren como parte del conocimiento de esta cultura llamada “Yaqui”. Siendo sincero me causa cierta afición intentar, dar la explicación de una manera concreta sobre estas experiencias, pero la verdad me ha resultado un tanto difícil explicarlas y sobretodo manejarlas en una forma coherente, que me resulte como la parte real de estas alucinaciones que son relacionadas raramente con un tipo de creencias dentro de esta cultura y sobre todo la idea de tomarlas como enseñanzas para formar un hombre de conocimiento. Más que conocimiento específico, científico, argumentado y palpable uno toma estas enseñanzas como creencias, impartidas como en cualquier otra cultura, pero el caso aquí es que el autor se encuentra realizando estudios sobre las plantas alucinógenas y como es que son utilizadas por estas culturas que por buena o mala fortuna, encontró a este maestro “yaqui” llamado Don Juan. En la cual esta investigación que principal mente está basada en la argumentación del hecho, de usar este tipo de hierbas naturales, para inducirse en un estado de trance para poder llegar a un nivel óptimo de conocimiento de uno mismo, se convierte en más bien la experiencia de empezar a tratar con la brujería y por ello en un mundo ficticio basado en la fe, las creencias y la magia, claro es obvio que cada ser humano tenga que creer en algo y por ende poder depositar su fe en ello, y esta cultura de yaquis con la cual tropieza Carlos, le da la creencia de algo intangible pero tan tangible al mismo tiempo que inclusive durante el desarrollo de este texto, Carlos maneja que él, en algunas ocasiones no tiene la capacidad de poder creer y sobre todo explicar lo sucedido en su experiencia como en este caso podría ser el “volar”, que el volar está limitado para el humano a no ser, de hacer uso de algún aparato oh de la tecnología para ello, como lo son los aviones. Pero los yaquis, “vuelan con toloache” conocido como la hierba del diablo. Esto se me hace gracioso, pero siento que sería una experiencia grata, pero a la vez mala por ingerir estas yerbas para poder lograrlo. Comenzare esto intentando explicar el por qué es que esta historia se genera en los años 60. Y el por qué, es que un estudiante, de la universidad de California, los Ángeles, se encuentra realizando diversos viajes en el suroeste, para recabar información sobre las plantas medicinales, usadas por los indios de la zona. Así que hay que recalcar en el contexto de los años 60’. Recordando en lo que es México y los estados unidos americanos, se encontraban en un periodo de revolución de los esquemas de pensamiento en la población joven principalmente, que era caracterizada por la anarquía no violenta y la preocupación del medio ambiente, entonces la cultura joven “así llamada” estaba con estilos psicodélicos, inspirados, principalmente por el uso de hierbas alucinógenas como el peyote y la datura. De las cuales curiosamente Carlos como estudiante de antropología se decide a investigar, no se menciona que Carlos fuese un “hippie”, si no que pudo estar influenciado por esta parte cultural para empezar esta investigación que lo lleva con este indio yaqui, en Sonora. Los yaquis se encontraban en lo que es Arizona y Sonora no muy lejos de los Ángeles, California en donde Carlos estudiaba antropología. En la frontera de México con Arizona se encontraba una de estas, entonces famosas líneas de autobuses “geyhound” en donde Carlos se encontraba con su guía el cual propicio a este encuentro con Don Juan, hay algo que en verdad se me hace incoherente por que se encuentra escrito en el texto que Castaneda se encontraba haciendo una investigación sobre el peyote y las daturas, y cuando charla con Don Juan, le hace mención que él, no tiene ningún conocimiento sobre el peyote. Lo cual considero sumamente ilógico, nadie sale al mundo en busca de algo sin conocer aunque sea la mínima parte de lo que está buscando. Luego de un año de buscar a Don Juan y su conocimiento, este decide tomar a Carlos como su aprendiz y darle el regalo del conocimiento, como a él le fue otorgado por su maestro oh benefactor como él lo hace llamar. En esta sección del texto se comienza a notar la critica a lo desconocido por parte de Carlos y esto es más que obvio ya que cualquier persona cuando se enfrenta a situaciones totalmente cotidianas, pero vistas con otra perspectiva, que en verdad resultan poco creíbles, es normal que uno maneje cierto nivel de precaución en cuanto a estas prácticas. Por lo tanto en cierto sentido el uso de los alucinógenos resulta ser una visión de la realidad, es decir, que la realidad argumentada y sostenida por percepciones tangibles limitadas por los sentidos, se vuelven totalmente inútiles en este caso, aquí los sentidos representan la unidad mínima de este conocimiento ya que inclusive Carlos habla más de sus percepciones subjetivas psicológicas que tuvo sobre sus experiencias. Así, él pone en duda el concepto de realidad y menciona que la realidad consiste en simples “descripciones del mundo”, que nosotros mismos generamos de algún modo. Más adelante Carlos terminara aceptando hasta cierto nivel, estas experiencias como parte de algo no ordinario dentro de la realidad. Las enseñanzas de Don Juan no se limitan a la práctica con las plantas alucinógenas, sino que también se refiere a las enseñanzas pragmáticas que forman parte de la lingüística que estudia la relación del lenguaje con el hablante y el oyente y con el contexto en que se realiza la comunicación de los procesos, es decir, cómo recoger las plantas, cómo tratarlas, los procesos de ingestión etc. aquí es donde se observa un proceso de ritualismo, al realizar estas tareas de un modo específico, que todos los procesos deben ser realizados de una forma y en un orden, muchas veces, el advierte que se corre peligro en caso de no llevar a cabo el ritual correctamente. A lo que prosigo con la siguiente cita del mismo libro: “El poder reside en el tipo de conocimiento que uno posee. ¿Qué sentido tiene conocer cosas inútiles? Eso no nos prepara para nuestro inevitable encuentro con lo desconocido (…)” Una de las primeras experiencias que nos expresa Carlos Castañeda es la del confort, es demostrada de una forma poco inusual pero muy sencilla de entender al grado de estar buscando literalmente un lugar en donde sentirse bien, el confort es aquello que produce bienestar y comodidades. Cualquier sensación agradable o desagradable que sienta el ser humano, le impide concentrarse en lo que tiene que hacer. La mejor sensación global durante la actividad es la de no sentir nada, indiferencia frente al ambiente. La segunda de sus experiencias narradas fue la primera vez ingirió el peyote el cual era ridículamente al parecer de uno llamarlo “mezcalito”, lo cual menciono que le causo sensaciones anestésicas en la parte bucal, en lo que refiere los labios y la lengua, posteriormente a la falta de capacidad periférica ocular, los mareos, la sed, la incoordinación, y por último la pérdida total de la parte objetiva del conocimiento, para pasar a un conocimiento o experiencia subjetiva inducida por este alucinógeno. Por mi parte decidí investigar sobre estos efectos, para poder argumentarlos de una forma más clara y resulta ser que encontré el por qué es llamado mezcalito. Principal mente se conoce que el peyote es parte de la familia de las cactáceas y este es reconocido por su contenido de alcaloides psicoactivos, entre ellos la mezcalina, principal sustancia responsable de sus efectos psicodélicos, así que por esta sustancia es que es llamado mezcalino o mezcalito. Los efectos del peyote duran entre 10 horas y 3 días. A las 4 horas se experimentan síntomas. El peyote puede afectar el juicio, que pueden incluir confusión, ansiedad y pánico. En raras ocasiones, los usuarios pueden experimentar episodios recurrentes, con objetos y o animales transformándolos en alucinaciones, imaginarias. Por lo cual diría uno, fue el encuentro con mezcalito en forma de un perro, y que casualmente se encontraba un perro en esa habitación por lo cual vuelvo a dudar de su experiencia con mezcalito. En algunos casos al igual que todos los alucinógenos, puede causar desórdenes mentales y causar síntomas esquizofrénicos en personas con una predisposición a cuadros psicóticos. Entre los efectos físicos que puede ocasionar están: Náuseas, Sensación de aumento del pulso (también la presión sanguínea), Exceso de saliva, Dilatación de las pupilas, Visión borrosa, Temblores e Incoordinación. Entonces se deduce que efectivamente todos sus síntomas fueron causados por esta sustancia “mezcalina” y que todos sus efectos se encuentran clasificados como normales dentro de la ingesta del peyote, y que no fueron causados por un aliado o por ente desconocido llamado “mezcalito” al querer conocer a Carlos como, nefastamente mencionan las creencias y conocimientos de Don Juan. Otra de sus experiencias fue con la datura, toloache o hierba del diablo, que con esta resulta que se pueden hacer diversos tónicos y rituales con cada una de las partes de la planta como es la brujería de las lagartijas, volverse un animago, o un animal cualquiera e inclusive volar. Principalmente Don Juan, hace mención de que la hierba del diablo, es un aliado poderoso pero peligroso, tanto que podría llegar a matar, si es que no se trata debidamente, y con esta se pueden crear un sinfín de brujerías eficaces y sobre todo para los llamados diableros. Explicare la brujería de las lagartijas. Carlos menciona, que para llevar a cabo esta brujería, que funciona para saber los chismes y rumores que “crees” que hablan de ti o que necesitarías saber en caso de ser requerido, buscar dos lagartijas, y torturarlas físicamente cosiéndole a una la boca y a la otra los ojos, utilizando un ungüento especial, después de haber ingerido un tónico preparado con las semillas de la hierba del diablo y unas raíces. Y en caso de que las lagartijas escaparan, era el hecho de no poder adivinar el contexto de las demás personas de tu alrededor. La hierba del diablo, es una planta venenosa cosmopolita, de la familia de las solanáceas naturalizada en zonas templadas de todo el mundo, Entre las sustancias constituyentes características se encuentran alcaloides tropánicos, que en pequeñas cantidades son tóxicos o estupefacientes, como la atropina, la hiosciamina y la escopolamina, caracterizados por provocar reacciones anticolinérgicas en dosis pequeñas, y por causar el síndrome atropínico o incluso la muerte en cantidades mayores. Suele confundirse con el toloatzin o toloache mexicano. A sí creo que es más entendible que mate a las personas cuando la tratas de usar de aliado, en la brujería se utiliza para atajarlo se suda en un comal, se machaca o se hierve la planta con polvo de cal, se unta calientita y se venda, esto al untarlo sobre las lagartijas para intentar predecir el futuro en el cual menciona, que si las lagartija no se marchan es que te ayudaran a predecir el futuro; mentira si las lagartijas no se van es por están anestesiadas por untarles la antropina en sima. Y esto debido a que la piel de los lagartos tienen poros escamosos más amplios, que se vinculan con sus torrentes sanguíneos de una manera más rápida por otra parte la, hierba del diablo produce síntomas neurotóxicos, que posterior mente producen un envenenamiento la cantidad oh dosis considerada como mortal para un ser humano es de cinco gramos. Esta hierba produce síntomas que varían en cuanto a la cantidad ingerida como son, alucinaciones intensas, pérdida de memoria, baja de presión arterial y sobre todo trastorno de licantropía clínica. Lo cual explica cómo es que los yaquis se transforman en animales. Pero esto no es masque un efecto producido por ingerir esta hierba del diablo. Tras seis años de aprendizaje con Don Juan, Carlos decide retomar su trabajo como estudiante de antropología anunciándole a Don Juan que dejaría sus enseñanzas por un tiempo, esto lo tomo de una manera pacífica, solamente que ya no vería a Carlos como su alumno sino como su amigo, al grado inclusive de mencionarle que le habían hurtado el alma a este y ayudarlo a recuperarla, y esto sería como una de las ultimas enseñanzas de este elocuente maestro. Como podemos observar en este texto, se encuentran aspectos de la diversidad de una cosmovisión, una forma de ver el mundo, costumbres, creencias. Las cuales forman parte de una cultura, a pesar de que mi postura es objetiva y cuantificable, ante los hechos narrados de estos personajes. Creo que actual mente tenemos a estas culturas en una discriminación, porque hemos perdido, la capacidad, de asombro de otras perspectivas que no sean objetivas. Para uno cada cultura tiene su forma de ver el mundo y está por lo tanto tiene un conocimiento y está más que claro en el mismo título del libro, las “ENSEÑANZAS” de Don Juan. De manera personal, este libro no fue de mi total agrado, admitiendo que el aprendizaje narrado por Carlos no es significativo para mí, como para él lo pudo ser, hacer uso de estas hierbas. En otras palabras quiero dar a entender, que estoy en desacuerdo en que tengas un aprendizaje significativo “mediante la dependencia de los alucinógenos” pero quiero aclarar que, conocer otra cultura, es un crecimiento de conocimiento, cultural y sobre todo perspectiva de uno mismo. . . Referencias • Las enseñanzas de don juan por Carlos Castaneda. • Diccionario de la real academia española. http://rae.es/recursos/diccionarios/drae • Biblioteca digital de la medicina tradicional mexicana. http://www.medicinatradicionalmexicana.unam.mx/flora2.php?l=4&t=Hierba %20del%20diablo&po=mazahua&id=6514&clave_region=17