ECONOMÍA INTERNACIONAL N° 320, 1 de Agosto de 2006 RONDA DE DOHA: COLAPSO Y RÉQUIEM Después de cinco años de esfuerzos, fracasó el más amplio intento de liberalización del comercio mundial. El objetivo central de la negociación multilateral era reducir la pobreza y dar impulso al crecimiento económico mundial. situación geopolítica mundial, que concentra y distrae mucha atención y energía de las grandes potencias. Si hubiera que señalar a algún país como culpable del fracaso de las negociaciones, ese sería Estados Unidos, que es el miembro más poderoso de la OMC. EEUU tiene capacidad para empujar una negociación multilateral y fijar el marco de tiempo de la negociación, por la vigencia de la autoridad delegada por el Congreso al Presidente de Estados Unidos, que vence en el primer semestre del 2007. Lamentablemente, EE.UU. tiene elecciones parlamentarias este año y tanto el Partido Republicano como el Presidente Bush están pasando por un ciclo de debilidad. Las cifras de pérdida que implica la suspensión indefinida de la Ronda de Doha son gigantescas. Según el Banco Mundial, los beneficios que este intento liberalizador podría haber traído a lo las economías en desarrollo, incluido Chile, un país agrícola y con gran potencial alimentario y de desarrollo de los servicios, también incluidos en la Ronda, son incalculables. Los últimos intentos de salvar la Ronda de Doha tuvieron lugar en San Petersburgo, durante la reunión del G8, a nivel de presidentes y primeros ministros de los países desarrollados y luego en Ginebra, a nivel de un grupo selecto de los ministros que representan a los países más relevantes en la negociación comercial multilateral (India, Brasil, USA, Unión Europea, Japón y Australia). El sector agrícola de USA es fuerte políticamente y puede definir la elección, pero, a su vez, es clave en la negociación de Doha, por los subsidios agrícolas que es necesario reducir para obtener ofertas de las otras partes involucradas. En entrevista reciente, Alejandro Jara (chileno), Director Adjunto de la OMC, dice “que será prácticamente imposible llegar a un acuerdo antes de Diciembre, en la Ronda de Doha y ello La causa del fracaso ha sido la rigidez de los negociadores inducida, como de costumbre, por factores políticos nacionales y por la Informe preparado por: Francisco Garcés, Director del Centro de Economía Internacional, Libertad y Desarrollo Teléfono: (56 ) 2- 3774800 - Fax : (56) 2-2341893 - Email: fgarces@lyd.org 1 implica que no se va a estar dentro de los plazos permitidos por la ley de Estados Unidos, que dice que la notificación al Congreso para negociar un acuerdo comercial debe entregarse seis meses antes de que termine la Autoridad de Promoción Comercial al Presidente de USA”. los amplios mercados de los países ricos, que pudieron haber estado a su alcance con la liberalización comercial multilateral. Otros perdedores son los productores de productos agroindustriales, como Brasil, Chile y Australia, que pudieron haber ampliado sus mercados de exportación. Pascal Lamy, el experimentado director general de la Organización Mundial de Comercio (OMC), señaló que el fracaso de la Ronda de Doha enviaría una señal muy negativa para el futuro de la economía mundial, en medio del peligro del resurgimiento del proteccionismo. En suma, la suspensión indefinida de la Ronda de Doha es una gran oportunidad perdida, en términos de ingresos derivados del comercio, para los países más pobres, de empleos, de inversión externa directa y finalmente también de eficiencia global económica. Pero la indicación no es menos ominosa para la propia OMC, que después de la suspensión indefinida de la Ronda de Doha, inicia un período difícil, probablemente, el más difícil desde su creación, hace 11 años, en 1995. Después de este desenlace, queda abierta la puerta para vías menos eficientes y amplias de liberación comercial, como son las vías unilateral, bilateral y la regional. En este sentido, Pascal Lamy comentó, en una reunión de embajadores en Ginebra luego de la suspensión de la Ronda que “en esta reunión no hay ganadores ni perdedores, hoy sólo hay perdedores”. Ante esta situación, Chile debiera perseverar en la vía unilateral, bajando sus aranceles del 6% al 3%, en forma gradual, en una última etapa unilateral, que contribuiría a eliminar distorsiones económicas derivadas de un amplio e intenso esfuerzo de liberalización comercial bilateral. Sin embargo, fuera de la sala de reuniones de Ginebra sí hay ganadores y perdedores, bien perfilados. Así, por ejemplo, las ONG antiglobalización son claramente ganadoras, con la suspensión de la Ronda de Doha. Los agricultores subsidiados americanos son ganadores también y los políticos proteccionistas de la agricultura en países pobres son, asimismo, triunfadores en estas circunstancias. En el ámbito del Apec o del Pacífico de América del Sur, queda espacio para la liberalización comercial regional, ya sea a través de nuevos tratados o usando el Tratado de Libre Comercio P4 abierto, de Chile, Nueva Zelandia, Singapur y Brunei. Hay todavía espacio de liberalización comercial, incluso en la profundización de los tratados de libre comercio ya firmados, en operación o en negociación En cambio, son perdedores los países menos desarrollados, que no tendrán acceso a 2