U NIVERSIDAD S ANTO T OMÁS disciplinas, sino por lo que suelen denominar el currículum oculto que tiene la universidad; es decir, el campus universitario, los baños de la universidad, la relación profesor-estudiante, la biblioteca, los corredores; gran parte de la tragedia humana de la juventud no se juega en el salón, se juega en un corredor. En los Andes lo denominamos: en los salones “duermes”, en los salones que se han puesto únicamente para que los estudiantes estén, porque es mejor que estén allí y no en los cafés que hay en torno a las universidades. En otras palabras, que la formación humana tiene que ver con el hábitat, tiene que ver con el medio en el que se mueve el estudiante, con el bienestar universitario. Recuerden ustedes que en griego antiguo “ethos” significaba marranera. Cuando el marrano se mueve en la cochera, le da la forma al barro; y cuando el sol calienta el barro y lo seca, la cochera tiene la forma que le dio el marrano con su movimiento. Dicho coloquialmente, el marrano tiene la cochera que se merece. Pensando en la formación, yo me pregunto si no debiéramos decir: “Nosotros tenemos la universidad que nos merecemos”. Porque la universidad no es el edificio, sino el entramado de relaciones que se dan en estos campos, y ese entramado de relaciones cualifica el ser del estudiante, pero también el ser del profesor. Los estudiantes se forman entre sí, nos forman a nosotros y nosotros lo formamos y es en esa red de interacciones en donde se conjuga un hábitat, una forma de vida que puede ser enriquecedora para el estudiante o puede ser empobrecedora para toda su vida. Dicho de otra manera, la formación humana, entendiendo por formación crecer en humanidad, exige que haya un ámbito en donde sea posible crecer y, por eso, la mejor metodología para efectos de la formación integral tiene que ver con la contaminación. Contaminar al estudiante en los valores, en el ansia de libertad, en el sentido de la dignidad, en la necesidad de ser ético ante una sociedad corrompida con monumentos; y eso se arregla con testimonios. Entonces el punto central, en términos del compromiso del docente 14