DYYhda[Y[a¶fkmhd]lgjaY\]d;¶\a_gHjg[]kYd;anadqE]j[YfladYdJ][mjkg\]9h]dY[a¶f]feYl]jaY\]^YeadaY 27 la audiencia, se podría incurrir en una violación de derechos fundamentales y, en consecuencia, se podría provocar la nulidad de la sentencia en base al literal “c)” del art. 232 Pr.C.M. o sea por la infracción del derecho constitucional de defensa. En estos casos, el término de interposición del recurso de apelación concluye a las dieciséis horas (04.00 P.M.) del último día del plazo aplicándose aquí las reglas anteriormente expuestas relativas a la explicación e interpretación del cómputo del plazo para apelar de las sentencias interlocutorias pronunciadas en forma escrita y a la notificación por medio de telefacsímil. B. Procesos de violencia intrafamiliar Y en lo que respecta a las providencias que impongan medidas cautelares o de protección y las que absuelvan al denunciado en los procesos de violencia intrafamiliar, se debe estar a lo establecido en el inciso tercero del art. 32 LCVI, el cual dispone que “El recurso (de apelación) podrá interponerse de palabra o por escrito EN EL ACTO DE LA NOTIFICACIÓN o DENTRO DE LOS TRES DÍAS hábiles siguientes.” (lo escrito entre paréntesis y mayúsculas, fuera del texto legal).- Ello significa que tal medio de impugnación puede plantearse en el acto de la notificación, sea en forma oral o en forma escrita, o bien (en forma escrita) dentro de los tres días siguientes a la notificación y, como antes se dijo, ello no exime al apelante del cumplimiento de las demás exigencias legales de admisibilidad de la alzada, por ejemplo que el recurrente sea sujeto de la apelación, que indique los puntos que impugna de la decisión, que fundamente el recurso, que formule la petición en concreto y la resolución que pretende. LA SUPLETORIEDAD.- El inciso primero del art. 32 LCVI dispone que “Las resoluciones pronunciadas por el juez o jueza en las que se imponga a la persona agresora medidas preventivas cautelares o de protección, o se absuelva al denunciado o denunciada serán apelables ante las Cámaras de Familia, aunque sean pronunciadas por un juez de paz”. Es importante puntualizar de manera especial que, fuera de esos dos tipos de decisiones judiciales que cita el art. 32 LCVI, el recurso de apelación podría proceder contra otras clases de providencias dictadas en los procesos de violencia intrafamiliar y seguiría las reglas contempladas en la Ley Procesal de Familia y en el Código Procesal Civil y Mercantil, en virtud de su aplicación supletoria establecida en los arts. 44 LCVI y 20 Pr.C.M. o sea que podrían existir otras decisiones judiciales recurribles en apelación o, dicho de otra manera, no sería taxativo lo enunciado en el inciso primero del art. 32 LCVI en cuanto a decisiones alzables.Para el caso, a título de ejemplo, se nos ocurre que si a la audiencia preliminar celebrada en un proceso de violencia intrafamiliar (arts. 26 y 27 LCVI), no concu-