DICTAMEN 52 DICTAMEN Nº. 52/2008, de 26 de marzo.* Expediente relativo a recurso extraordinario de revisión interpuesto por D. X, contra la resolución de la Consejera de Justicia y Protección Ciudadana, de 28 de noviembre de 2007 por la que se desestimaba el recurso de alzada interpuesto contra la resolución del Delegado Provincial de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha en Ciudad Real, mediante la que se le imponía una sanción por incumplimiento de la normativa en materia de horario de cierre de los establecimientos. ANTECEDENTES Como consecuencia de la denuncia presentada por funcionarios del Cuerpo de la Policía Local y previa la instrucción del correspondiente procedimiento sancionador, el Delegado Provincial en funciones de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha en Ciudad Real dictó resolución mediante la que se acordó “SANCIONAR a X, con multa de 300,50 Euros, como responsable de la comisión de infracción de carácter LEVE, de lo dispuesto por la normativa de Horario de Cierre antes especificada”. Esta resolución fue recurrida por el interesado, siendo desestimado su recurso por la Consejera de Justicia y Protección Ciudadana. Contra la resolución del recurso de alzada, D. X presentó el 4 de febrero de 2008, un recurso extraordinario de revisión fundamentando el mismo en que al dictar el acto que se recurre se había incurrido en un error de hecho en el cómputo del plazo de caducidad del procedimiento administrativo. EXTRACTO DE LA DOCTRINA El recurso de revisión se fundamenta en la causa primera del artículo 118.1, de la Ley 30/1992, de 26 de noviembre. A su tenor, puede interponerse el recurso extraordinario de revisión cuando al dictar un acto “se hubiera incurrido en error de hecho, que resulte de los propios documentos incorporados al expediente”. La doctrina ha venido afirmando que de la propia dicción del precepto es posible deducir que para poder apreciar la concurrencia de esta circunstancia será preciso que se cumplan los siguientes requisitos: que la Administración autora del acto haya padecido un error de hecho, y que el error se derive de los propios documentos incorporados al expediente al dictar el acto cuya revisión se insta. Va de suyo que el error de hecho padecido debe ser imputado a la Administración autora del acto administrativo, como se deduce de la propia expresión del artículo 118.1 1ª “que al dictarlos se hubiera incurrido [...]”. El error de hecho se ha definido por el Tribunal Supremo como aquél que es independiente de cualquier opción o criterio que pueda sustentarse en orden a la calificación jurídica de la figura, situación, etc. En idéntico sentido, el Consejo de Estado ha indicado que * Ponente: Inmaculada González de Lara y Ponte 1 Dictámenes Consejo Consultivo Castilla-La Mancha.- 2008 ha de tratarse de una realidad independiente de cualquier opinión, criterio particular o calificación (Dictamen 4388/1998, de 26 de noviembre) en que el error de hecho se haya producido, no pudiendo estimarse cuando se manifieste envuelto en una apreciación de concepto o en que se exija una operación de calificación jurídica (Sentencias de 20 de julio de 1984, Ar. RJ 4247; de 5 de noviembre de 1985, Ar. RJ 5542). En similar sentido se han expresado otros órganos jurisdiccionales al afirmar que el error de hecho es aquél que versa sobre un suceso, cosa o dato, que configura una realidad independiente de toda opinión criterio particular o calificación jurídica, por cuanto ha de excluirse del concepto todo lo que requiera explicación, razonamiento o demostración y, muy especialmente, cuanto se refiere a cuestiones de derecho, análisis y valoración jurídica de los hechos o interpretación de normas legales, supuesto éste último que ha configurado el supuesto antagónico del error de hecho, es decir, el error de derecho (Sentencia de la Audiencia Nacional de 13 de junio de 1995, Ar. JT 726). Se contraponen así los errores de hecho a los de derecho, que se derivan de las distintas interpretaciones de las Leyes y demás disposiciones de carácter general (Sentencia del Tribunal Supremo de 6 de febrero de 1975, Ar. RJ 515). Asimismo, el Tribunal Supremo ha destacado que el error de hecho ha de referirse a los presupuestos fácticos determinantes de la decisión administrativa (Sentencia del Tribunal Supremo de 16 de julio de 1992, Ar. RJ 6228). En cuanto al segundo de los requisitos o exigencias señalados anteriormente, su dicción literal obliga a que el error resulte de documentos que obren en el expediente, lo cual significa que, de existir el error de hecho que se alega, ha de aparecer, manifestarse y comprobarse en éstos de modo que proceda su rectificación, por cuanto el dato exacto no se llevó (debiendo hacerse) a la resolución impugnada, a tenor de los propios fundamentos de ésta. No se trata por tanto de discutir éstos, sino de poner de manifiesto el error de hecho a tenor de los documentos del expediente. En el presente supuesto, el recurrente alega que ha existido un error en lo que se refiere al cómputo del plazo de caducidad establecido en el artículo 42.5 c) de la Ley 30/1992, de 26 de noviembre, según el cual “El transcurso del plazo máximo legal para resolver un procedimiento y notificar la resolución se podrá suspender en los siguientes casos: [...] c) Cuando deban solicitarse informes que sean preceptivos y determinantes del contenido de la resolución a órgano de la misma o distinta Administración, por el tiempo que medie entre la petición, que deberá comunicarse a los interesados, y la recepción del informe, que igualmente deberá ser comunicada a los mismos. Este plazo de suspensión no podrá exceder en ningún caso de tres meses”. Como se desprende de la imputación que se efectúa por el interesado, el error que se imputa a la resolución de la Consejera de Justicia y de Protección Ciudadana se refiere a la forma de computar el plazo de suspensión, este es, se trataría, en su caso, de un error de interpretación o aplicación del citado precepto pero no de un error de hecho. DICTAMEN Que procede desestimar el recurso extraordinario de revisión interpuesto por D. X contra la resolución de la Consejera de Justicia y Protección Ciudadana, de 28 de noviembre 2 DICTAMEN 52 de 2007, por la que se resolvió el recurso de alzada interpuesto contra la resolución del Delegado Provincial de la Junta de Comunidades en Castilla-La Mancha de 18 de julio de 2007, mediante la que se impuso al recurrente una sanción de 300,50 euros por incumplimiento de la normativa de horario de cierre de establecimientos públicos. 3 Dictámenes Consejo Consultivo Castilla-La Mancha.- 2008 4 DICTAMEN 52 5