EFICACIA PROBATORIA DEL INSTRUMENTO Y PRESUNCIÓN DE

Anuncio
EFICACIA PROBATORIA DEL INSTRUMENTO Y PRESUNCIÓN DE AUTENTICIDAD Por: Luis Vargas H. 1.-­‐ AUTENTICACIÓN Esta es la consecuencia del ordenamiento legal, es una fórmula de garantía, el documento auténtico no debe estar sujeto a discusión por que se tiene por veraz, por lo que goza de la presunción de certeza que la ha ce que se imponga, ante las partes y frente a terceros para protección de la paz social y de las relaciones jurídicas, sien do el Estado el supremo guardián del orden jurídico, protector del derecho. Es un acto jurídico, propio de su autor, por lo que “autenticación” es el acto de atribuir un hecho al autor o quien lo realizó valiéndose de la percepción sensorial directa del autenticante, para el proceso autenticado; quien es el depositario de la verdad en virtud de la función competente que desempeña (otorgada por el Estado) imponiendo el poder coactivo del Estado sobre la certeza del hecho autenticado para todos. Neri en la obra citada, dice: “La autenticación consiste en afirmar una relación jurídica, o una declaración de verdad o notoriedad, o de contingencia, deducida sensorialmente por el notario en un proceso previo de identidad y capacidad subjetiva y de exactitud objetiva”. La autenticación llama a la idea de “fehacencia”; es decir, cumplimiento de la ley y certeza de la declaración del instrumento y de su contenido, y esta “fehacencia” debe ser comprobada y declarada por autoridad pública competente autenticadora para que sea percibida por todos como verdad con certeza pues tiene el mérito justamente de la autenticación; es decir, por sí solos hacen prueba de su contenido, porque el documento auténtico pone de relieve la veracidad jurídica de los hechos que acredita. 2.-­‐ EFICACIA PROBATORIA El segundo inciso del Art. 16 del Código Civil, al referirse a la autenticidad, di ce que la autenticidad se probará según las re glas establecidas en el Código de Procedimiento Ci vil y también señala que la autenticidad se refiere “al hecho de haber sido realmente otorga os y autorizados por las personas y de la manera que tales instrumentos se expresan”. 2.1. EFICACIA PROBATORIA DE LOS INSTRUMENTOS PRIVADOS Cabe señalar que los Arts. 1716 del Código Civil y 164 del Código de Procedimiento Civil, consideran como sinónimos al instrumento público y al instrumento auténtico, y como dice, el maestro Dr. Wladimiro Villalba, esto es “inconveniente”; yo diría que es impropio porque como dice el mismo maestro, “puesto que si bien todo instrumento público, por ser tal, es auténtico; es to no priva para que también los instrumentos privados sean auténticos”, porque como ya señalamos lo AU TÉN TI CO quiere decir que es un acto propio del autor y de la definición de instrumento privado que nos trae el Art. 191 del C. P. C., se infiere que el instrumento privado también es auténtico, aunque no se lo ha ya realizado ante persona autorizada y es auténtico porque aunque privado tiene un autor particular, lo que no está es simplemente autenticado por autoridad competente o celebrado ante esta autoridad. El instrumento público según el Art. 1717 del Código Civil ha ce ple na fe en cuan to al hecho de haberse otorga do y su fecha, pero no en cuanto a la verdad de las declaraciones que en él hayan hecho los interesados. En esta parte no hace plena fe si no contra los declarantes. Las obligaciones y descargos contenidos en él hacen plena prueba respecto de los otorgantes y de las personas a quienes se transfieran dichas obligaciones y descargos por título universal o singular”. Esta misma disposición vuelve a repetirse en el Art. 166 del Código de Procedimiento Ci vil, el Art. 164 del C.P.C. y el Art. 1716 del Código Ci vil, definen al instrumento público como el “autorizado con las solemnidades legales por el competente empleado”, y por otra parte el Art. 165 del Código de Procedimiento Civil nos dice cuándo hacen fe y constituyen prueba los instrumentos públicos o sea todos los instrumentos autorizados en debida forma por las personas en cargadas de los asuntos correspondientes a su cargo o empleo. Analizando el Art. 165 del Código de Procedimiento Civil, todos los instrumentos públicos hacen fe y constituyen prueba cuando están autorizados en debida forma por los competentes funcionarios; gozan entonces de la creencia pública, de ple na fe, hasta tanto no sean declarados falsos por una sentencia ejecutoriada. Pero los instrumentos públicos hacen fe en general contra todos, aún contra terceros en dos puntos: 1.-­‐ En cuan to al hecho de haberse otorgado y, 2.-­‐ Su fecha, por disposición del Art. 166 del C.P.C. Pero ¿qué significa “haberse otorgado”? Ello implica que ha ce fe sobre: a) La “autenticidad” del instrumento público que a su vez implica que tiene un autor cierto, indubitado, autenticado por la capacidad fedataria del funcionario público que actuó dentro de sus capacidades de su función, porque además debe hacer un juicio de capacidad, porque el funcionario público no sería tal si no fuera responsable de juzgar, antes de aceptar el requerimiento, la capacidad de cada uno de los comparecientes que es un presupuesto indispensable de la actividad documentadora y el juicio de capacidad es para cada compareciente que formula el notario, se articula en razón de la naturaleza del acto de la índole del negocio, y además implica una fe de conocimiento que es la individualización de los otorgantes, basado en la convicción racional que adquiere por los medios que estime adecuados, actuando con prudencia y cautela; y, b.-­‐ Sobre el hecho de que se cumplió el acto o contrato que efectivamente se realizó la declaración de voluntad es que van a generar efectos jurídicos, certeza que da la capacidad de dar fe pública del funcionario. Sobre la fecha de su otorgamiento, prueban por su pro pio contenido, la eficacia probatoria de la fecha en que se otorgó el instrumento, porque emana de un dador de fe pública. En lo dispuesto por el Art. 166 del C.P.C., existe una presunción de verdad sobre las dos aseveraciones; esto es, una presunción legal, que puede ser destruida previo juicio con prueba en contrario, y mediante una sentencia ejecutoriada. 2.4. MERITO PROBATORIO DEL INSTRUMENTO PÚBLICO El instrumento público no prueba, contra terceros, la verdad de las declaraciones hechas por los interesados. El mérito probatorio de los documentos públicos no se limita, respeto de terceros, a solo el hecho de haberse otorgado y su fecha; cuando, precisamente, si la ley exige el que consten en ellos ciertos actos y contratos, es para que puedan justificarse, por ese medio y contra toda persona, así los derechos como las obligaciones constituidas, respectivamente, a favor o en contra de los otorgantes. 2.-­‐5 En definitiva el instrumento público goza de plena fe tratándose de los hechos cumplidos por el funcionario público, o pasados en su presencia, no así las enunciaciones o afirmaciones sobre la verdad de las declaraciones que en el instrumento público hayan hecho los interesados. En esta parte solo hace fe, contra los declarantes u otorgantes y de las personas a quienes se transfieren dichas obligaciones y descargos. Argentino Neri dice: que las “certificaciones de autenticidad de un hecho o acto se limitan a exteriorizar la verdad o certeza de lo que el notario actuante observa por sus sentidos. Por lo tanto, podríamos decir que la fe pública no es un sinónimo de verdad absoluta en todo lo que dice el instrumento público, pues lo que hace el notario es realizar una representación de las declaraciones de la voluntad y las partes pueden falsear la verdad por error o deliberadamente, pero sí se puede decir que es sinónimo de verdad en la parte que constituye la re presentación de la autoridad fedataria esto es en la parte en la que el notario autoriza con los elementos objetivos de certeza tales como los comparecientes y su capacidad contractual, la fecha y el hecho de en efecto haberse otorgado el acto notarial. 
Descargar