A propósito de la toma del pulso EN SINTERGETICA.

EL PULSO EN SINTERGÉTICA
Jorge Iván Carvajal Posada
A propósito de la toma del pulso EN SINTERGETICA.
Mitos y realidades.
1-1 Hacia una síntesis práctica de la toma del pulso en sintergética.
El pulso es un mínimo común denominador de muchas culturas médicas y ha sido
incorporado en la semiología occidental y tradicional como un valioso recurso para
el diagnóstico. Conocemos clásicamente
 Los pulsos chinos y ayurvédicos como una aproximación cualitativa al
balance energético del organismo;
 El pulso de Nogier o señal autónoma vascular, 1 que representa una
transición entre los pulsos cualitativos de las medicinas tradicionales y el
modelo cuantitativo de la medicina occidental.
 El modelo cuantitativo de la medicina occidental, en el que, más que
cualidades del pulso, se analizan propiedades externas como intensidad,
ritmo y frecuencia.
1-2 Modalidades del pulso en sintergética.
En la sintergética retomamos la integración de las concepciones cualitativas y
cuantitativas del pulso, el cual podemos utilizar clínicamente de cuatro maneras:
1- A través de la respuesta binaria si-no, o de reacción- ausencia de reacción,
que se registra con el método de la señal autónoma vascular descrito por
Paul Nogier
2- A través de un balance energético cuasi-cuantitativo que tiene en cuenta
tres posiciones del pulso radial en la región de la apófisis estiloides del
radio, descritas por la medicina tradicional china y la medicina tradicional
hindú. En este caso se hace abstracción de las descripciones relativas a la
cualidad misma del pulso, descrita en ambos sistemas médicos, para hacer
énfasis en la intensidad de la onda del pulso.2.
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Esta señal fue descrita inicialmente por Nogier como reflejo aurículo cardíaco o RAC, una analogía del
conocido reflejo óculo- cardíaco de tonalidad vagal. Algunos discípulos de Nogier le dieron el nombre de
R.A.N., sigla para reflejo auricular de Nogier. Las evidencias demostraron pronto sin embargo que no era
un reflejo, ni se presentaba sólo en el pabellón auricular sino que hacía parte de una señal de respuesta de
todo el revestimiento cutáneo. Esta señal que puede registrarse sobre todo el árbol arterial y
aparentemente está mediada por el sistema nerviosos autónomo fue denominada por los anglosajones
como VAS o vascular autonomic signal, sigla con la que sigue siendo conocida en el territorio de las
medicinas complementarias. Muchos años de práctica utilizando esta señal como instrumento
diagnóstico, nos han llevado a la hipótesis del cuerpo etérico como antena de captación y emisión de la
señal que detectamos en el árbol arterial.
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Registrada sobre la apófisis estiloides del radio, la onda del pulso es aparentemente reforzada por la
onda estacionaria que se forma de la interacción entre las ondas que se desplazan del corazón a la mano, a
través de la pared arterial, y las ondas que se reflejan desde los arcos arteriales palmares superficiales y
profundos.
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3- A través del registro del carácter rítmico, regular en el tiempo, cuya
alteración permite el diagnóstico de la oscilación..
4- Por la medida del grado de variación de la frecuencia basal pulso, como un
método cuantitativo de registro que permite el reconocimiento de
ambientes o alimentos productores de reacciones alérgicas.
I-3 Técnicas para la percepción del pulso.
En el caso del VAS se ha hecho un énfasis desmedido en la técnica de la toma de la
señal. Lo cierto es que la mejor técnica es simplemente aquella en la que un
observador puede registrar mejor los cambios en el patrón de la onda del pulso y
las restricciones sólo dificultan en última instancia la percepción de la señal del
pulso.
En la técnica habitual de la toma del VAS se emplea el pulgar izquierdo del
operador diestro sobre la arteria radial izquierda del paciente, lo cual permite
utilizar como receptor el hemisferio derecho, más sensitivo, y la representación
cortical del pulgar que tiene un área de la corteza prácticamente equivalente a la
del resto de la mano. Queda así libre la mano derecha para las maniobras de
exploración. Es de advertir que un observador entrenado estará en capacidad de
sentir esta respuesta autónoma sin la aparente interferencia de su propia
pulsación.
Las personas sensibles podrán captar este tipo de señal en si mismos, ya sea con la
propia señal del pulso a nivel radial, o captándola a nivel de las arterias
temporales en la región supra-auricular bilateral.
I-3-1 La pulsación del biocampo.
En los grupos, podemos rápidamente constatar cómo la señal se detecta
sincrónicamente si seguimos con atención a un instructor que nos comunique su
percepción de la señal ( lo cual en nuestra experiencia constituye una valiosa
herramienta para la sensibilización del operador a esta señal sutil ) En casos de
una sensibilidad más desarrollada, el terapeuta podrá llegar a notar que los
cambios en la pulsación de la arteria radial son simultáneos con los cambios en el
patrón de pulsación del campo energético de todo el organismo - el campo
bioplásmico. Lo anterior nos indica que la señal vascular es una expresión
localizada y particular de un fenómeno global, que involucra la respuesta de todo
el
bio-campo cuando entra en contacto con una señal significativa – es decir
con valor de información para el organismo-.( Entre nuestros indígenas paeces se
habla de la seña, una forma de codificar en el propio cuerpo la información
procedente del campo del paciente).
La percepción de un cambio en el patrón de pulsación global del bio- campo, puede
ser alcanzada mediante entrenamiento y probablemente tiene lugar en el nivel de
transición que llamamos el campo bioplásmico, un estado activado en el que los
electrones serían el sustrato portador de las señales biológicas.
Las arterias son bobinas y antenas.
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Para encontrar la enorme sensibilidad de la red vascular a señales biológicas,
debemos recordar que la estructura histológica de las arterias, con fibras
longitudinales y transversales y la circulación de elementos cargados, hierro y
diferentes iones en su interior, convierten a la red vascular en un complejo sistema
de bobinas electromagnéticas, con una alta sensibilidad a las variaciones en el
campo eléctrico y magnético circundante.
El sistema vascular, con su unidad funcional, el miocito, se comporta como el nivel
de distribución de materia y energía hacia todas las células. El adecuado estímulo
de esta enorme red evoca respuestas de la totalidad del organismo que, ante
pequeños estímulos, puede así generar grandes respuestas fisiológicas. El sistema
vascular es pues una antena que permite captar, magnificar y conducir débiles
señales electromagnéticas que, a su nivel, adquieren un gran. Valor terapéutico.
Como sistema binario, el VAS nos permite predecir la respuesta del organismo a un
estímulo determinado, y seleccionar entre múltiples señales posibles sólo aquellas
capaces de desencadenar una respuesta significativa para la restauración de la
salud - concebida ésta como integridad o conectividad armónica de todos los
componentes del sistema biológico-.
El VAS permite un análisis sencillo de la información que es codificada a través de
un sistema SI- NO, donde SI traduce una respuesta al pulso cuya implicación es que
el estímulo utilizado tiene un efecto significativo. (Que puede ser tanto positivo o
negativo según el tipo de organismo receptor). Una vez registrado el VAS + como
un cambio de intensidad en la onda del pulso, sabemos que hay un intercambio de
información con el estímulo. A partir de este hecho se han desarrollado métodos
sencillos para determinar la cualidad de esta respuesta, es decir si tal estímulo
interviene positiva o negativamente sobre uno u otro sistemas orgánicos.
I-4 Detección y significado de la señal autónoma vascular. VAS.
El VAS+ se asocia a un aumento transitorio de la señal del pulso, como respuesta a
una señal que genera un micro-estrés fisiológico. Nos indica que hay un
intercambio significativo de información con el organismo, el cual debe aún ser
descrito en su particularidad de reclamo, rechazo, toxicidad, aferencia, etc. Se
percibe como un rebote o aumento de la presión, sentida por el operador bajo la
pared de la arteria, que puede ser único o relativamente prolongado a lo largo de
un cierto número de pulsaciones, lo cual nos dará una información adicional sobre
la importancia fisiológica del fenómeno. Parece ser que esta sensación percibida
como si fuera sólo un fenómeno mecánico es básicamente un proceso de detección
y amplificación de una señal electromagnética a nivel de la bobina arterial, que en
la apófisis estiloides se hace más fácil de observar por dos razones :
1- Una, anatómica, por la evidente disposición superficial de la arteria que
puede ser comprimida contra la superficie ósea.
2- Una razón fisiológica. por la formación de una onda estacionaria a nivel de
la pared arterial formada por el encuentro de las ondas que vienen del
corazón y las que se devuelven después de rebotar sobre el arco arterial
palmar.
1-4-1 ¿Una señal radiestésica ? Arte y subjetividad en la toma del pulso.
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Sin lugar a dudas existe un factor subjetivo en la toma del pulso, que puede inducir
errores en la observación pero que agrega una dimensión de sensibilidad personal
que afina el pulso como una herramienta diagnóstica preciosa.
Podríamos concebir el pulso como un péndulo incorporado al paciente, caso en el
cual nuestro modelo del VAS se ubicaría en una posición intermedia entre la
observación objetiva y la radiestesia, en la cual es más importante el observador
que el péndulo( este amplifica las señales neuromusculares del operador o
radiestesista que percibe la señal y la transfiere amplificada desde el inconsciente
a través de reflejos neuromusuculares finos, que se magnifican al extremo de la
cuerda que sostiene el péndulo.)
No podemos negar que existe un modo de utilización radiestésica de la señal
autónoma vascular, lo cual no sólo no la hace menos valiosa por lo menos objetiva,
sino aún más útil, precisamente por la sutilidad y profundidad diagnóstica
normalmente agregada merced a este componente subjetivo. La percepción del
VAS no sólo es un asunto de técnica; se involucra de tal modo la sensibilidad
personal que podemos bien concebir la percepción de la señala autónoma vascular
como un arte.
I-5 Los tres niveles del pulso radial.
Por analogía con los pulsos ayurvédicos y chinos, tomamos - con un código de
lectura y significado diferente- las tres posiciones del pulso a nivel de la arteria
radial sobre la zona descrita de la apófisis estiloides del radio. Muchos años de
experiencia con los registros de los niveles energéticos, nos señalaron que una
análisis de la intensidad relativa de las distintas posiciones que los médicos
ayurvédicos asocian a Vatta, Pitta y Kapha, nos aporta una valiosa información
sobre tres aspectos fundamentales de la Sintergética: la cantidad, calidad y
distribución de la energía de un organismo dado.
Los pulsos distales a la apófisis estiloides y que denominaremos posición I o Vatta
se corresponden con el polo neurosensorial. Los medios, que se corresponden más
directamente con la parte oblicua o porción ascendente de la apófisis estiloides del
radio, corresponden al polo rítmico, o torácico, y los proximales a la misma
apófisis- en dirección del codo- se corresponden al polo metabólico- motriz - que
representa la zona infradiafragmática abdominal.
Conociendo estas representaciones básicas. se pueden realizar todo tipo de
analogías por correspondencia con la ley del tres, lo cual implica que estas
posiciones se asocian a los tres tipos de energía, notas, colores y principios básicos,
que se diversifican a través del cuaternario para conformar el siete ( expresión del
ternario y el cuaternario o la unión del espíritu y la materia. )
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1-6 Aplicaciones generales de la detección de los tres pulsos sobre la arteria
radial.
El conocimiento de estos tres pulsos nos permite realizar:
1- Un balance energético global.: Por convención la intensidad ideal del pulso
en una posición se cuantifica en tres cruces +++. De esta forma, el balance
ideal para cada lado es de 9, y el balance energético global ideal es de 18 .
Como norma general, un balance menor del 50 % es un gran obstáculo a la
terapéutica y nos habla de una depleción energética crónica,
frecuentemente asociado a una fuga de energía.
2- Un balance energético arriba abajo, abajo arriba Está representado por la
relación vatta / kapha.
3- Un balance energético izquierda- derecha, derecha- izquierdo, total y entre
los niveles simétricos vatta-vatta, pitta pitta, kapha- kapha.
4- Los llamados disbalances oblicuos en lo que hay un patrón de simetría
oblicua compensatoria . Ej kapha izquierdo +++ kapha derecho + vatta
izquierdo +++
vatta derecho +.
5- Las oscilaciones de intensidad nos permiten diagnosticar el fenómeno
frecuente de oscilación que constituye un gran obstáculo a la terapéutica y
representa en general una zona de distensión o aflojamiento de la red
etérica.
6- Las asimetrías que representan un aumento significativo de una de las
posiciones del pulso con relación a las demás sugiere el diagnóstico de
bloqueo.
La interpretación clínica y corrección de estos hallazgos será considerado más
detenidamente en los seminarios y talleres de formación en Sintergética.
Estas correlaciones nos permiten establecer por ejemplo si hay un déficit de
energía ancestral, caso en el cual se presenta una caída de Kapha - uno de los
eventos clínicos más frecuentes- También podemos reconocer un déficit de yin,
falso yang por déficit de yin, etc. Estos diagnósticos serán obtenidos por la
correlación entre los pulsos y la historia clínica.
I-7 El control de la eficacia terapéutica.
El tratamiento correcto por cualquier método ha de dar lugar a una significativa
mejoría en los patrones de intensidad y simetría de los distintas posiciones del
pulso, lo cual significa que este sistema es un valiosísimo recurso diagnóstico y de
control de la efectividad de los estímulos terapéuticos.
Tales características convierten a este sistema de medida en un valioso recurso
para la investigación de nuevos métodos terapéuticos. En general hemos
observado una gran correlación entre las mejorías significativas del pulso y los
resultados clínicos satisfactorios.
I-8 Otros métodos de utilización del pulso.
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Consisten en el monitoreo de la frecuencia del pulso al momento de levantarse y
varias veces al día para observar la variación de la frecuencia basal. Es un valioso
recurso para la detección de alergenos y nocicepciones de tipo ambiental, dado
que siempre desencadenan una significativa variación de la frecuencia basal.
En caso de una frecuencia elevada al momento de levantarse nos hace sospechar
un alergeno en el cuarto o la respuesta patológica a una exposición
electromagnética. <la elevación de la frecuencia basal después de la ingesta de
alimentos nos lleva a sospechar la presencia de un alergeno. En ambos casos se
emprende una búsqueda sistemática con la ayuda del mismo registro de la
frecuencia del pulso, el cual puede ser llevado por el mismo paciente.
Resumen
El registro manual del pulso es una herramienta de diagnóstico utilizado por todos
los sistemas médicos del mundo.
Las medicinas tradicionales del mundo incluyen un modelo cualitativo del pulso,
de relativa complejidad para nuestra visión occidental.
La medicina moderna occidental incluye un modelo cuantitativo basado en el
análisis de la intensidad y la frecuencia
La Sintergética utiliza un modelo cualitativo- cuantitativo en el que se involucran
los dos métodos, tendido en cuenta las posiciones relativas del pulso y su
intensidad. Este código de lectura da una idea global de la cantidad, la calidad y la
circulación de la energía en el organismo y sirve a la vez como un control del efecto
terapéutico.
El VAS es un sistema binario SI-NO que permite evaluar analógicamente el
probable efecto de microinformaciones sobre los sistemas biológicos.
Las informaciones proporcionadas por el pulso deben ser contextualizadas en el
marco mayor de otros signos semiológicos y la historia clínica para que adquieran
su pleno significado clínico.
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