Formas para favorecer y desarrollar la memoria, y así garantizar el éxito académico Francisco Javier Rodríguez Laguía En el artículo “La memoria en el niño” hacemos un repaso de lo que entendemos por memoria, cómo influye en el razonamiento y el aprendizaje humano, qué tipos hay, estrategias principales para almacenar la información y un sinfín de apartados que van desde los procesos que intervienen en la memoria hasta las estrategias o mecanismos que utilizamos para favorecer la recuperación. En este nuevo artículo pretendemos profundizar en las tareas que desde casa podemos aplicar y tener en cuenta para facilitar y, si cabe, desarrollar una mejor capacidad mnemotécnica que redundará en una mejor capacidad de aprendizaje y por tanto aseguraremos el, a veces, tan ansiado éxito en los estudios. Recordemos que la memoria es la facultad o capacidad que poseemos los seres humanos mediante la cual podemos almacenar y retener los conocimientos que aprendemos, utilizando los procedimientos necesarios para ello como pueden ser el establecimiento de relaciones entre los conocimientos que ya tenemos y los nuevos que intentamos aprender, para así poder recordarlos y hacer uso de ellos cuando necesitemos en otras situaciones diferentes. La recuperación y/o recuerdo de lo estudiado/aprendido es un proceso dentro del aprendizaje en estrecha relación con la previa memorización de los contenidos a aprender. A no ser que la información a estudiar esté integrada por listas de palabras, datos, fechas, nombres..., difíciles de memorizar y recordar y se necesite del uso de recursos mnemotécnicos, la memorización, para que el recuerdo posterior pueda producirse de modo eficaz, ha de hacerse de una manera significativa, es decir, estableciendo criterios concretos para memorizar y recordar mejor, intentando relacionar el contenido nuevo con lo que ya sabemos, formando relaciones lógicas o causales en el material a aprender... Gracias a estos procedimientos para retener y memorizar la información, la recuperación del contenido aprendido será más fácil de realizar, recordando también por ello mayor cantidad de contenidos. La capacidad de memorizar puede DESARROLLARSE y por lo tanto aumentar de manera positiva teniendo en cuenta CUATRO ASPECTOS: la intensidad, repetición, asociación y descanso. a) Intensidad: la memoria precisa de dos condiciones: concentración y utilización de varios sentidos, especialmente vista y oído. La concentración es la consecuencia de una atención intensa. No se puede aprender si no se está atento. Para conseguir ambos aspectos es necesario: ▪ La actitud positiva ante el profesor y la asignatura. ▪ Una fuerte motivación (gusto y voluntad por el estudio). ▪ Una buena comprensión de lo estudiado. ▪ La ayuda de medios auxiliares que facilitan la comprensión: uso del diccionario, gráficos, esquemas. ▪ La actividad en el estudio. b) Repetición: lo que se repite se graba con más fuerza. Conviene estudiar repitiendo lo que se quiere aprender, dejarlo reposar, y, pasadas unas horas, realizar un nuevo repaso. Es muy útil el repaso antes de dormir y por la mañana. Con tres repasos en horas distintas se recuerda mejor que con diez repasos seguidos. c) Asociación: el aprendizaje se refuerza cuando la idea, el texto, se asocian al mayor número de imágenes y emociones posibles. Para lograrlo es preciso: ▪ Hacer que intervengan el mayor número de sentidos al estudiar: escribir, dibujar gráficos, consultar libros, mirar mapas, hacer esquemas. ▪ Recordar siempre las ideas por asociaciones lógicas: la mejor garantía del recuerdo es aprender la estructura lógica del texto. Hay que preguntar al texto: ¿quién?, ¿por qué?, ¿cuándo?, ¿cómo?, ¿dónde? respecto de las ideas del mismo. ▪ Asociar siempre las ideas a algún contexto que sea familiar: a otros contenidos ya dominados, a otros recuerdos personales, a lecturas, etc. d) Descanso: Para recordar hay que descansar. El estudio prolongado fatiga. Es conveniente hacer descansos de 5 o 10 minutos cada 45 0 50 minutos de estudio o simplemente cada vez que cambiamos de materia de estudio. Los RECURSOS MNEMOTÉCNICOS que desde casa podemos potenciar son, como la expresión bien indica, recursos o técnicas para hacer más fácil el aprendizaje de determinados contenidos, que de otra manera resultan más complicados de aprender. Los contenidos que pueden resultar más difíciles de memorizar son los siguientes: ▪ Acumulación de datos. ▪ Acumulación de fechas. ▪ Listas de conceptos o nombres. ▪ Listas que se prestan a confusión, etc. Los procedimientos más frecuentes son los que a continuación se detallan: a) Para retener una serie de datos, resulta muy efectivo formar una frase coherente o una pequeña historia con ellos. b) En una lista de palabras que hay que retener, se puede formar una frase con las sílabas o letras iniciales de la serie. c) Es posible aplicar la serie a una música conocida. d) Se pueden hacer versos con los datos que es preciso retener. e) Es un buen recurso sustituir las ideas por gráficos e ilustraciones que las representen. f) Resulta eficaz asociar mentalmente la imagen de la idea con la imagen de un objeto o lugar conocido y familiar, de forma que el recuerdo de esta imagen despierte el de la idea. Otros recursos mnemotécnicos utilizados para la memorización son los siguientes: a) Técnica de la visualización. La visualización consiste en ver o imaginar las palabras que vamos a memorizar. Para ello, podemos utilizar los cinco sentidos: ▪ Ver la imagen. ▪ Oír sus sonidos. ▪ Percibir su dureza, suavidad y temperatura. ▪ Su olor, sea agradable o no. b) Técnica de la asociación de imágenes Esta técnica consiste en crear dos imágenes mentales, una por cada palabra, y relacionarlas entre sí. (Esta técnica es empleada para memorizar parejas de palabras o conceptos). c) Técnica de la cadena de imágenes La técnica de la cadena de imágenes es prácticamente similar a la de la asociación. El objetivo, por tanto, es transformar los conceptos o palabras en imágenes. De lo que se trata es de relacionar en serie todos los conceptos que tengamos que memorizar. El procedimiento consiste en asociar la imagen de la primera palabra con la segunda, la segunda con la tercera, la tercera con la cuarta y así sucesivamente, hasta llegar a la última. d) Técnica de la historieta. La técnica de la historieta consiste en integrar los elementos conceptos o palabras que se van a intentar memorizar y retener, formando con ellos una imaginativa historia. Con esta técnica, al igual que en la de la cadena de imágenes, la evocación o recuerdo de un concepto lleva al siguiente, y por ello es muy importante añadirle a las imágenes acción y emoción. e) Técnica de los lugares (método “loci”) Esta es una de las técnicas memorísticas más antiguas que se conocen. Consiste en asociar la imagen del concepto o palabra que se quiere memorizar con la imagen de un recorrido o lugar que ha de ser lo más familiar posible para nosotros. Para terminar, podemos apuntar algunas sugerencias para los estudiantes que en casa debemos recordar colocando en el rincón de estudio modo de DIEZ PRINCIPIOS DE LA MEMORIA: A saber: 1.- Pon atención mientras estudias. 2.- Consigue información veraz y correcta a la primera. Las ideas falsas y malentendidos pueden hacer que luego te confundas. 3.- Asegúrate de que comprendes la totalidad de los materiales. Una prueba interesante es intentar explicar los contenidos a alguien que no lo entienda. 4.- Trata de ver la importancia de lo que aprendes. Observa que lo que aprendes es parte de un todo más grande. 5.- Involucra a tu ego, si es posible. Relaciona las tareas contigo mismo. ¿Te gusta el material que te proporciona el profesor? ¿Es importante para tu valoración personal aprender los contenidos? 6.- Asocia el material nuevo con material que ya conozcas. (Aunque parezca que lo que aprendes no tiene que ver nada con lo anterior, tal vez tengas que necesitarlo más tarde). 7.- Organiza el material de manera que lo puedas archivar adecuadamente en tu memoria. Si lo has organizado cuidadosamente, tal vez cuando solo recuerdes una parte, podrás deducir el resto del contenido. 8.- Si hay un procedimiento para hacer algo, divide y agrupa el procedimiento. La información se captura mejor como trozos pequeños. 9.- Refuerza lo que has aprendido mediante la repetición y el uso. No recordarás algo que no usas. 10.- Recita con frecuencia. En un estudio masivo del Dr. A.I. Gates, los estudiantes se dividieron en diferentes grupos. Un grupo usó el 100% de su tiempo en leer un artículo una y otra vez, mientras que el otro grupo usó el 80% de su tiempo en leer y el 20% en recitar el mismo artículo. Otros grupos leyeron y recitaron en proporciones diferentes. El grupo final usó sólo el 20% del tiempo en leer y el 80% en recitar, y este grupo consiguió claramente la puntuación más alta.