Arte colonial del siglo XIX Introducción. La pintura en Venezuela en el siglo XIX tenía una relación muy estrecha con los estilos artísticos europeos de la época: el neoclasicismo, romanticismo, naturalismo y realismo, influenciada por una formación de tipo académica en donde lo que importaba era la fiel representación del objeto. Queriendo romper con los nexos de esta tradición, surgen los nuevos artistas que presentaremos a continuación. Cristóbal Rojas. Nació un Cúa, Estado Miranda, el 15 de enero de 1860 y el 8 de noviembre fallece a la edad de 30 años. Cristóbal Rojas perteneció y se vio influenciado por el grupo de pintores que mantuvo en Francia los valores del academicismo que se negaba a reconocer tendencias como el impresionismo. En su temática dramática, los efectos de claroscuro, el sentimiento dramático, el conocimiento sobre la luz y la imitación a la escuela holandesa fueron las inclinaciones que impregnaron su talento y obras; como La lectora, La dama del balcón, Mujer vistiéndose, La muerte de Girardot, La miseria, El plazo vencido, La primera y última comunión, Dante y Beatriz, algunas naturalezas muertas. Martín Tovar y Tovar. Nació en Caracas el 10 de febrero de 1827. Muere el 17 de diciembre de 1902 en Caracas. Se dice que fue el pintor mejor formado de su época. Influenciado por pintores neoclásicos franceses cambia el naturalismo y el rumbo provinciano con una producción épica desconocida. Realizó retratos que poseen una gran fuerza expresiva de casi todos los próceres de conocemos de la independencia, introduciéndose en una de las tendencias más importantes de la pintura venezolana del siglo XX: el paisajismo y la agrupación de figuras de forma armónica. Algunas de sus obras son: Anita Tovar de Zuloaga, Josefina Gil de Zamora, Antonio Tovar, Soublette, La forma del acta de la independencia, La batalla de Carabobo. 1 Cristóbal Rojas: Primera y ultima comunión Cristóbal Rojas: Autorretrato con sombrero rojo Martín Tovar y Tovar: Anita Tovar de Zuloaga Martín Tovar y Tovar: Escenas de La batalla de Carabobo Conclusión. Después de tanto tiempo utilizando el anonimato, los pintores venezolanos se atreven a reconocer sus obras y colocan sus firmas en maravillosas pinturas que hoy son tan importantes en nuestro país como el recordar a esos grandes artistas que imprimieron en Latinoamérica un estilo propio completamente independiente al adoptado después de la colonización por Europa, haciendo dar la razón al talento, creatividad y conocimiento del arte que tenemos en esta parte del mundo, Venezuela. 2