Ficha Técnica #4 Igualdad de Género en la Prevención del SIDA: ¿Por qué se necesitan opciones preventivas especiales para las mujeres? El VIH/SIDA se está convirtiendo rápidamente en una epidemia femenina. Cada día, aproximadamente 14.000 personas resultan infectadas con el VIH. La mitad son mujeres. En el 2003, el 58% de los 26,6 millones de personas viviendo con el VIH/SIDA en África Sub-sahariana eran mujeres; la mayoría tenían solo un modo de exposición al VIH – la relación sexual con sus parejas. En África, las mujeres jóvenes (15-24) tienen 2,5 veces más probabilidades que los hombres jóvenes de ser seropositivos. Entre los jóvenes menores de 20 años que viven en ciertos países de África y del Caribe, las niñas tienen 6 veces más probabilidades de contraer el virus que los niños. En Asia y Rusia, donde las cifras de infección del VIH están aumentando rápidamente, un tercio de todas las nuevas infecciones suceden en mujeres. En los EE.UU. y Canadá esta cifra alcanza el 25%. Las mujeres son biológicamente más vulnerables a la infección y a sus consecuencias. Las mujeres tienen al menos el doble de probabilidades que los hombres de contraer VIH a través de una relación sexual no protegida. Tras la penetración, durante horas, las membranas de la vagina están expuestas a fluidos infecciosos. Por esta razón, las mujeres más jóvenes tienen un mayor riesgo, ya que su cuello uterino es todavía inmaduro, más vulnerable al daño y por lo tanto, a la infección. En el caso de las mujeres, con frecuencia, las infecciones de transmisión sexual (ITS) no se detectan y, por lo tanto, no se tratan. Las ITS aumentan la vulnerabilidad de las mujeres frente al VIH y, cuando no son tratadas, pueden provocar infertilidad, embarazos ectópicos (tubáricos), mortalidad infantil o cáncer cervical. La desigualdad de género impide que muchas mujeres puedan protegerse. Millones de mujeres carecen del poder económico y del apoyo social para insistir en el uso de medidas preventivas del VIH, tales como los preservativos, la abstinencia o la monogamia mutua. El uso de preservativos masculinos o femeninos requiere al menos una cooperación tácita, cuando no una participación directa, de la pareja masculina de la mujer. El riesgo a contraer VIH aumenta rápidamente entre niñas adolescentes debido a su vulnerabilidad física y a su susceptibilidad frente a la violación, el matrimonio forzado, el tráfico, la dependencia económica y la coacción. La violencia, la coacción y la dependencia económica ponen a millones de mujeres de todas las edades en una situación de falta de poder para ‘negociar’el uso del preservativo o para abandonar a sus parejas, quienes las ponen en situación de riesgo de contraer VIH. Millones de mujeres viven en sociedades que no les permiten ningún papel en la toma de decisiones en relación al sexo, disculpan la infidelidad masculina y les asignan la carga de la vergüenza y el estigma que van asociados a una enfermedad infecciosa. La creciente desigualdad económica y el deterioro de las redes de apoyo social llevan a muchas mujeres a la práctica del sexo comercial para poder mantener a sus familias Muchas mujeres desean quedarse embarazadas – por razones propias y/o para poder adquirir un estatus y una seguridad que en muchas sociedades solo se pueden conseguir a través de la maternidad. Debido a que los preservativos son anticonceptivos, muchas mujeres se encuentran ante la difícil elección entre tener hijos o protegerse frente al VIH. Las estrategias para la prevención del VIH deben responder a las necesidades y vulnerabilidades de las mujeres. Las mujeres necesitan educación, oportunidades económicas y apoyo social. Las mujeres necesitan igualdad de género para que puedan proteger su salud y sus derechos. Campaña Global por los Microbicidas. Marzo 2006. Reproducción alentada. Para obtener información contactar a: info@global-campaign.org Actualizaciones disponibles en: www.global-campaign.org/EU-SPdownload.htm Las mujeres necesitan herramientas que les resulten más fácil controlar para prevenir el VIH y las ITS. Las mujeres necesitan microbicidas. ¿Qué son los microbicidas (mī-KRO′-bĭ-sīdz)? Los "microbicidas" son productos de aplicación tópica diseñados para ayudar a prevenir la transmisión sexual. Un microbicida puede producirse de distintas maneras, incluyendo geles, cremas, supositorios, películas o como una esponja o anillo que va desprendiendo el ingrediente activo a lo largo del tiempo. ¿Un microbicida terminaría con la necesidad de usar preservativos? No. Los microbicidas por si solos probablemente nunca serán tan efectivos como los preservativos usados de forma adecuada. De todas formas, ofrecerán una protección ulterior a los que usan los preservativos y una alternativa preventiva real para aquellos que no pueden o no quieren usarlos. Investigadores han demostrado que, incluso si el 20% de las mujeres que viven en los 73 países más pobres usaran un microbicida que fuera un 60% efectivo en la mitad de sus relaciones sexuales en las que no se utilizan preservativos, 2.5 millones de infecciones de VIH podrían evitarse a lo largo de tres años. ¿Que ocurre si una mujer quiere quedarse embarazada? Algunos de los microbicidas bajo investigación previenen el embarazo y otros no. Se necesitan microbicidas contraceptivos (“doble acción”) para prevenir el embarazo y la enfermedad y microbicidas no anticonceptivos que permitan a las mujeres proteger su salud y al mismo tiempo tener hijos. Ello no es posible con los preservativos. ¿Se beneficiarían también los hombres de los microbicidas? A través del uso de un microbicida de doble acción (que deshabilite el VIH en el semen y en las secreciones vaginales), las mujeres que son seropositivas podrían ayudar a proteger a sus parejas de la infección de VIH. También puede que sea posible la creación de microbicidas que puedan usarse por vía rectal, la seguridad y efectividad de un microbicida de uso rectal debe establecerse de forma separada. Se están iniciando estudios sobre la seguridad rectal de ciertos potenciales microbicidas. ¿Quién está llevando a cabo la investigación y el desarrollo de los microbicidas? Aparentemente, toda la investigación hecha hasta el momento sobre los microbicidas ha sido llevada a cabo por instituciones académicas y sin ánimo de lucro o pequeñas empresas biotecnológicas. Los estudios se financian a través de fundaciones benéficas y donaciones de los gobiernos. Estos fondos públicos también se usan para apoyar la ciencia básica, estudios sobre comportamientos sociales y la infraestructura para ensayos clínicos que contribuyen a la investigación y al desarrollo de los microbicidas. Las grandes compañías farmacéuticas no han invertido de forma significativa en este campo, principalmente porque los microbicidas son un ‘bien de salud publica’ que traería enormes beneficios para la sociedad pero con pocos incentivos económicos para la investigación privada. ¿Por qué necesitamos microbicidas si eventualmente tendremos una vacuna para el VIH? Ninguna estrategia o tecnología puede acabar por si sola con la pandemia del SIDA. Necesitamos de las estrategias preventivas existentes – cambio de comportamiento, asesoramiento y pruebas voluntarias, acceso a jeringas y agujas limpias, diagnóstico de ITS y su tratamiento, un amplio acceso a preservativos masculinos y femeninos, anti-retrovirales, etc. – así como nuevas herramientas tales como los microbicidas y las vacunas. Una vez desarrolladas, estas nuevas tecnologías responderán a necesidades específicas, poniendo directamente en manos de las mujeres distintas opciones preventivas. ¿Por qué los microbicidas no están disponibles todavía? Los científicos han identificado más de dos docenas de productos y están probándolos para descubrir cuales podrían ser seguros y efectivos para uso frecuente. Desafortunadamente, la falta de suficientes fondos públicos no les permite llevar a cabo su investigación de manera eficiente. Conseguir que un microbicida seguro y efectivo llegue a las estanterías en un futuro próximo no depende tanto de la velocidad del progreso científico como del incremento del nivel de fondos para apoyar la investigación, el desarrollo y el acceso. Si queremos microbicidas, tenemos que reclamar suficientes fondos públicos para poder desarrollarlos sin más tardanza. La Campaña Global por los Microbicidas es una amplia coalición internacional de organizaciones que trabajan para acelerar el acceso a nuevas alternativas preventivas de VIH. Visite nuestra página web: www.global-campaign.org o contáctenos en: Global Campaign Europe, 98 Rue du Trône (7th Floor), 1050 Brussels, Belgium Email: ameijer@path.org Tel: +32 2507 1229 Fax: +32 2507 1222