GESTION DE RECONOCIMIENTO Un activo intangible para las organizaciones modernas Por Carolina Perea, Comunicadora Organizacional - Colombia Existe un concepto equivocado de lo que es el reconocimiento y la motivación en el mundo empresarial, debido a que se considera que el buen trabajo forma parte de la obligación de cualquier trabajador y del compromiso que éste adquiere con la empresa en el momento de su contratación, por ende, se asume que es necesario felicitar a las personas cuando hacen bien sus labores. “El gran problema al interior de las organizaciones, es que la mayoría de éstas tiende a confundir lo que es el reconocimiento con la compensación. La gente no entiende bien el tema del reconocimiento, no sabe reconocerlo, y generalmente lo confunde”, afirmó Raciel Sosa, director de desarrollo para Great Place to Work Institute. En este sentido, algunas empresas consideran que el reconocimiento no es una parte fundamental dentro de sus prácticas de gestión, dado que las acciones de reconocimiento implican una inversión de tiempo y generan gastos adicionales para la compañía, por consiguiente prefieren mantener la creencia de que para lograr la satisfacción de sus trabajadores basta con brindarles buenos salarios. Esta creencia está totalmente alejada de la realidad, pues diversos estudios en Recursos Humanos han demostrado que el reconocimiento es una herramienta fundamental para motivar y evitar la deserción laboral en las organizaciones. Raúl Abad en el artículo, El Poder del Reconocimiento, señala que “para destacar y triunfar en nuestro competitivo mercado, debemos extraer el mayor potencial y talento de nuestros empleados. La mejor forma de lograrlo es ofreciendo un eficaz, sincero, público y frecuente reconocimiento al empleado para que nuestro mensaje llegue directo a su corazón”. Cuando una organización busca mejorar los indicadores de cultura y clima organizacional, debe tener presente, que más que salarios altos, los colaboradores necesitan sentir que son valorados por sus jefes o compañeros de trabajo, y que éstos reconocen sus buenas acciones y comportamientos en la organización, especialmente cuando llevan varios años trabajando en la misma. ¿Qué es el Reconocimiento? La Real Academia Española (RAE) define el término de reconocimiento como “La acción de distinguir a una cosa, una persona o una institución entre las demás como consecuencia de sus características. También sirve para expresar la gratitud que se experimenta como consecuencia de algún favor o beneficio”. Ricardo Pino, director de Alianzas de Centrum Católica, afirma que “El reconocimiento es parte de la felicitación que todo trabajador requiere recibir periódicamente. Nada motiva más que el éxito, y el reconocimiento es la consecuencia de este éxito. Por tanto, cuando un trabajador recibe un reconocimiento por lo que hace, mejora su desempeño laboral”. Hablar de reconocimiento, en ámbitos personales o laborales, implica sin lugar a dudas establecer la estrecha relación que existe entre la persona y su interacción con el mundo. Berkeley, máximo exponente del idealismo subjetivo, afirmó que “ser es ser percibido”, haciendo alusión a que las personas sienten que existen en la medida en que son percibidas por otras. En este sentido, se puede establecer que el reconocimiento se fundamenta en la percepción, es decir: percibir si quienes nos rodean, o con quienes nos relacionamos, perciben el valor que tenemos de nosotros mismos y actúan en concordancia con él. Un ejemplo: cuando estamos en una reunión social esperamos que las personas que están presentes reconozcan nuestra existencia a través del saludo y/o los aspectos propios de protocolo, como el estrechar nuestra mano o saludarnos de beso en la mejilla. Esto de acuerdo al nivel de confianza que se tenga, cuando esto no ocurre nos sentimos subvalorados, excluidos y por ende no respetados. En las organizaciones el reconocimiento se define como la respuesta dada por una compañía a los comportamientos, esfuerzos y logros alcanzados por los colaboradores. Estela Pereyra Baker1 señala que “[…] cuando un trabajador hace bien su trabajo, cumple con lo esperado y además hace esfuerzos extra, necesita que su jefe se lo haga notar a través de una felicitación un gesto amable o una atención”. ¿Qué Sucede Cuando Nos Reconocen la Buena Gestión? Alyne García Gamboa señala que cuando una organización reconoce el trabajo desempeñado por sus empleados eficazmente, este gesto refuerza las acciones y comportamientos que, la organización desea ver repetida por los trabajadores coincidiendo y alineándose perfectamente con la cultura y objetivos generales de la empresa. Cuando las organizaciones visibilizan la importancia de poner en marcha programas y planes de reconocimiento hacia sus trabajadores, crean un nuevo escenario laboral en el cual las personas se siente motivadas y apoyadas para continuar desempeñando un buen trabajo, generándose con esto, un fuerte sentido de compromiso y fidelidad hacia la organización. En la medida que el reconocimiento se asuma como una herramienta estratégica para las organizaciones, éstas lograrán alcanzar mejores niveles de productividad. Un estudio realizado por la firma Gallup, sobre reconocimiento al empleado, señala que, “Los lugares de trabajo más eficientes y eficaces, poseen una cosa en común, una cultura de reconocimiento”. Cuando un trabajador siente que sus acciones son reconocidas y valoradas por la organización, se esforzará por hacer un buen trabajo y se sentirá motivado para continuar laborando en la compañía. De allí la importancia que las organizaciones planeen eficientemente actividades y estrategias de acción que faciliten la identificación de los buenos resultados obtenidos por sus trabajadores, y a la vez, se realice una adecuada divulgación de dichos éxitos. ¿Cómo Generar Dinámicas de Reconocimiento Corporativas? Las acciones de reconocimiento hacia los trabajadores requieren de tiempo y dedicación, además de la identificación de las acciones y comportamientos que ameritan ser reconocidos. El primer paso para generar dinámicas de reconocimiento corporativas es la capacitación: Las acciones de reconocimiento pueden fallar debido a que las organizaciones no han desarrollado una adecuada cultura del reconocimiento a través de planes de inducción y re inducción para los líderes corporativos. No son pocas las organizaciones que no tienen certezas sobre el cómo se sienten realmente sus empleados. Por lo mismo las compañías muchas veces desconocen cómo deben validar estas buenas acciones, y cómo enfocar los esfuerzos para así permitir que los trabajadores laboren en ambientes de colaboración, respeto y reconocimiento. El segundo paso es la igualdad: Si un trabajador hace bien una labor, deberá recibir el mismo reconocimiento que los demás. Es de vital importancia reconocer el trabajo de todas las personas que se han esforzado por alcanzar el éxito de un proyecto. Lorena E. Blatto2 señala algunos tips para el desarrollo de buenas dinámicas de reconocimiento en el ámbito corporativo: El reconocimiento se debe hacer en el momento oportuno: No hace falta esperar a hacer una evaluación de desempeño para poder mostrar lo que se ha hecho bien. El reconocimiento tiene impacto cuando lo hacemos de manera inmediata, posterior a que se ha desarrollado el hecho a reconocer. Realizar acciones de reconocimiento, sólo si realmente se siente: Los trabajadores presienten cuando los elogios son reales o sólo por compromiso. No hacer del reconocimiento algo cotidiano: El reconocimiento sólo funciona cuando no es parte de lo habitual, en cuyo caso, pasa a ser sólo un protocolo. La sonrisa es importante: Si se felicita a un trabajador, él debe sentir que le transmiten alegría y orgullo por algo que hizo bien. Anécdotas Sobre el Reconocimiento3 Santiago. Jack Welch, ex presidente y CEO de General Electric, tenía una práctica poco habitual: acostumbraba enviar notas de felicitación de su puño y letra, a los empleados más destacados de su empresa. Las cartas eran sumamente valoradas por sus colaboradores. No por nada, eran escritas por el propio líder de la organización, y reconocían, personalizadamente, la labor efectuada. En sus 25 años a la cabeza de GE, el destacado hombre de negocios siempre tuvo algo claro: sabía lo importante que era reconocer el trabajo de sus empleados. Welch estaba seguro que si premiaba a los buenos colaboradores, obtendría la motivación necesaria para alcanzar las metas de la compañía. Durante la década de los 80, el empresario trabajó para convertir a GE en una compañía dinámica y competitiva. Disminuyó la burocracia y adoptó nuevos métodos de eficiencia. Una de sus mayores prácticas era despedir, todos los años, al 10% de los ejecutivos con peores resultados, y premiar al 20% más destacado. “Hay dos cosas que deseamos más que el sexo y el dinero: el elogio y el reconocimiento”. (Mary Kay Ash).