RECONOCIMIENTO DE INOCENCIA. LA COPIA CERTIFICADA DE ACTUACIONES DE CARÁCTER JUDICIAL RELATIVAS A LAS DECLARACIONES TESTIMONIALES Y CAREOS CELEBRADOS POR DETERMINADAS PERSONAS ANTE UN ÓRGANO JURISDICCIONAL, NO CONSTITUYEN LA PRUEBA DE UN DOCUMENTO PÚBLICO QUE PUEDA INVALIDAR LA SENTENCIA CONDENATORIA. Novena Época. Tribunales Colegiados de Circuito El artículo 560, fracción II, del Código Federal de Procedimientos Penales establece que procede el reconocimiento de inocencia del sentenciado, si después de la sentencia aparecieren documentos públicos que invaliden la prueba en que se haya fundado aquélla o las presentadas al jurado y que sirvieron de base a la acusación y al veredicto. De esa manera, si el sentenciado al tratar de acreditar tal solicitud, con fundamento en el artículo en comento, ofrece copias certificadas relativas a diligencias de carácter judicial, en las que diversas personas emitieron su declaración en un proceso penal o se carearon con otras, ello no constituye una prueba documental de carácter público, pues sólo hace prueba plena de que ante el órgano jurisdiccional que certificó, emitieron su declaración determinadas personas al tenor de las manifestaciones vertidas, pero en forma alguna puede demostrar que lo afirmado por los testificadores es la verdad jurídica; en consecuencia, ante la inexistencia de un documento público suficiente para invalidar las pruebas que sustentaron la sentencia condenatoria, lo procedente es declarar infundada la solicitud de reconocimiento de inocencia. PRIMER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA PENAL DEL SEGUNDO CIRCUITO. Reconocimiento de inocencia 14/2002. 7 de noviembre de 2002. Unanimidad de votos. Ponente: Jorge Luis Silva Banda. Secretario: Raúl Valerio Ramírez.