la música marcial a través de los grandes compositores/13

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CULTURA
LA MÚSICA MARCIAL A TRAVÉS
DE LOS GRANDES COMPOSITORES/13
que escucha la ópera patriótica
de Glinka “La vida por el zar”
(1). A partir de aquí decide entregarse al análisis y a la composición de obras relacionadas con
el folclore y la Historia de su
amada Patria, Rusia, con objeto
de crear una escuela y un estilo
nacio­nales.
Danzas eslavas.
EL “GRUPO DE LOS CINCO”
La invasión de Rusia por el
ejército napoleónico y su posterior derrota en la batalla de
Borodino en 1812, enciende en
el pueblo ruso la llama del nacionalismo que prende en todos los
ámbitos de la vida social y de la
cultura, incluido el de la música.
En este último, la figura de
Mihail Ivanovich Glinka (18041858) es capital, ya que sienta
las bases de la música nacionalista rusa y acomete el estudio
de sus obras tradicionales, convirtiéndose en el faro o guía de
los compositores que seguirán
sus enseñanzas.
El primero de ellos es Mily
Alekseyevich Balakiref (1837-
1910), en cual reúne en su entorno a un grupo de oficiales del
Ejército y la Armada, estudiosos
y amantes de la música, con los
que forma el llamado “Grupo de
los Cinco” (autodenominado
“Grupo Poderoso”) integrado
por Alexander Porfiryevich
Borodin (1833-1887), Médico
Militar; César Antonovich Cui
(1835-1918), Teniente General de
Ingenieros; Modest Petrovich
Mussorgsky (1839-1881), Capitán
de la Guardia Imperial; y Nicolai Andreievich Rimsky-Korsakof (1844-1908), Oficial de la
Marina de Guerra.
La pasión de Balakiref (compositor, director de orquesta y
pianista) por la música tradicional rusa surge en el momento en
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El “Grupo de los Cinco”, unido por lazos de amistad y camaradería nacidos de la convivencia
en las unidades y círculos castrenses y musicales, comparte
los ideales de su mentor Balakiref, emprendiendo la patriótica y
titánica labor de sacar a la superficie la vena musical de un filón
inagotable enterrado en las entrañas de la tradición popular y, al
mismo tiempo, elevar a las más
altas cimas la música rusa, aprisionada por los moldes estéticos
de Italia y Alemania.
A través de una breve semblanza de Balakiref y sus discípulos, que llegaron a ser grandes
compositores de proyección
internacional, veremos que a
todos ellos les une un nexo espiritual de amor a su tierra natal,
a su cultura, a sus tradiciones y
a su Historia, que reflejan en sus
obras de música, más patriótica
e, incluso, revolucionaria, que
militar en el sentido utilitario e
institucional de la palabra.
CULTURA
BALAKIREF
Nacido en Nizhny-Novgorod
en 1837, a los catorce años era
ya pianista y director de la
orquesta privada del conde
Oulybychen. En 1855 conoce a
Glinka y decide seguir sus pasos
para crear una escuela musical
nacional. Entre 1857 y 1862 forma el citado “Grupo de los Cinco”. Al mismo tiempo, funda con
el director de coros Iomakine
una escuela gratuita de música
donde se fragua el germen de la
música nacionalista rusa. Durante muchos años asumió la dirección de la Capilla Imperial de
San Petersburgo; asimismo dirigió varias agrupaciones corales
y orquestales.
En sus obras profundiza en la
temática épica, legendaria e histórica; en este sentido destaca el
poema sinfónico “Rusia” (188287), escrito para la inauguración
en 1862 de un monumento conmemorativo del milenario del
Estado ruso. Esta composición
evoca las tres principales épocas
de la Historia de Rusia: la pagana, la de formación de los gobiernos populares y la del Imperio
moscovita. El poema viene a ser
un fresco épico y patriótico que
refleja las glorias, los triunfos y
las derrotas del pueblo ruso.
En esta misma línea compone
el “Himno al Zar”, las “Canciones épicas rusas” y el poema
sinfónico “Islamey”, inspirado
en las gestas guerreras de sus
antepasados tártaros. Obviamente, de estos repertorios citamos
solamente aquellas obras relacionadas con la milicia, el mundo
de las armas y los hechos históricos de carácter bélico y, o,
revolucionario, es decir, los pertenecientes a la música marcial.
Coincidiendo con alguno de
sus compañeros del “Grupo de
los Cinco”, también Balakiref
presta atención a nuestra Patria,
escribiendo la “Obertura sobre
un tema de marcha española”
(1857), su primera obra orquestal, basada en el drama que
describe el enfrentamiento de
Oriente y Occidente, relacionado
con la expulsión de los moros de
España al término de la Reconquista. Son también dignas de
recordar la “Serenata” y “Melodía”, españolas, así como la
transcripción de la “Jota aragonesa”, de Glinka.
por su segundo movimiento, en
el cual el prestíssimo tiene cierta similitud con la obra homónima de Beethoven –la 3ª Sinfonía– e, incluso, con la 7ª (2). En
el cuarto movimiento de la sinfonía que comentamos se escucha una fanfarria militar análoga
a la que figura al principio de la
obra.
La Sinfonía nº 2, en si menor
llamada “Épica”, comienza con
un motivo a cargo de las trompas, en este caso de guerra, que
se repite a lo largo de toda la
obra. El primer movimiento está
inspirado en la imagen de una
reunión de guerreros del siglo
BORODIN
De la antigua y noble familia
de los príncipes de Imeretinsky,
nace en San Petersburgo en 1834.
Estudia medicina quirúrgica
obteniendo el título de cirujano
en 1856 y dos año más tarde es
nombrado profesor ayudante del
Hospital Militar de su ciudad
natal. En este campo destaca por
su labro al frente de la Escuela
de Medicina para mujeres, fundada por él, que dirigió hasta el
final de su vida.
Dentro del “Grupo de los
Cinco”, Borodin está considerado, por sus trabajos, como representante de la música de cámara
y sinfónica. Esta última forma
se ve enriquecida por sus tres
sinfonías, la última inacabada.
La Sinfonía nº 1, en mi bemol
mayor, fue calificada por Mussorgsky como la “Heroica rusa”
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Borodin.
CULTURA
Museo en Moscú.
XI y el canto de los “bayans” o
trovadores que cantan las gestas
heroicas contra los tártaros. El
estilo orientalizante que se desprende de gran parte de las obras
del “Grupo de los Cinco” se
perfila en el andante del segundo movimiento y ya, por último,
en el allegro final del cuarto
movimiento retornan los aires
marciales del primero, evocándonos algunos pasajes de la ópera “El Príncipe Igor”.
Esta última obra, junto al
boceto sinfónico “En las estepas
del Asia Central”, han sido las
que han alcanzado mayores cotas
de popularidad, hallándose incluidas en la mayor parte de los
repertorios musicales de nuestras
bandas militares y civiles.
“El Príncipe Igor”, ópera en
cuatro actos con libreto de Wladimiro Stasoff (3), fue estrenada
en el Teatro Mariinski de San
Petersburgo el 4 de noviembre
de 1890. El argumento se sitúa
en 1185, en que los rusos combaten con un pueblo nómada de
origen tártaro, los polovetsianos,
sufriendo a manos de ellos una
grave derrota. Igor, jefe del ejército ruso, y su hijo Wladimir
caen prisioneros del khan polovetsiano Kontechack pero, tras
una serie de vicisitudes, el príncipe logra escapar y nuevamente
asume el mando de sus territorios y de sus tropas.
De toda la ópera las danzas
polovetsianas, con las que concluye el segundo acto, son conocidas a nivel internacional y su
música, coral e instrumental, se
ha utilizado miles de veces para
evocar escenas de amor y de
guerra del lejano Oriente.
NOTAS
El estreno de “La vida del
Zar”, melodrama en cinco actos
con libreto del barón G. F. Rozen,
tuvo lugar el 9 de diciembre de
1836 en el Teatro Imperial de
San Petersburgo. Al margen de
los valores propios de esta ópera,
su mayor importancia, en nuestra
opinión, radica en el hecho de
que sirvió de modelo, en ciertos
aspectos, para las obras posteriores de Borodin, Mussorgsky
y Rimsky-Korsakof.
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1. En relación con el tema pueden consultarse los artículos
sobre “El género sinfónico
en la música militar” (I) y
(II), publicados en la revista
“Cuadernos de Encuentro”
del Club de Opinión Encuentros, correspondiente a los
números 97 y 98 de Otoño
y Verano de 2009. Sede de
la editorial: c/Santovenia 19.
28008 MADRID.
2. El argumento de “El Príncipe Igor” está basado en un
poema anónimo de la Edad
Media que da cuenta de las
campañas militares del mencionado príncipe.
BIBLIOGRAFÍA
CONSULTADA
* EINSTEIN, Alfred. “La música
en la época romántica”. Alianza
Editorial. Alianza Música. 1986,
pág. 352.
* GROUT, J. Donald y PALISCA,
V. Claude. “Historia de la música occidental, 2”. Alianza Editorial. Alianza Música. 1992,
pág. 917.
* NONELL, Darmen. “Músicos
nacionalistas rusos: Los Cinco”.
Editorial S.A.E.T.A. Madrid.
1948, pág. 192.
* TRANCHEFORT, FrançoiseRené. “Guía de la música sinfónica”. Alianza Editorial. Madrid.
1989, pág. 1318.
* LA ÓPERA. Enciclopedia del
Arte Lírico. Aguilar. Madrid.
1981, pág. 514.
Antonio Mena Calvo
Comandante de Infantería (R)
Académico Correspondiente de la Real
Academia de Bellas Artes y Ciencias
Históricas de Toledo
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