Requisitos técnicos Llevar a cabo un proyecto de digitalización significa establecer un equilibrio entre las necesidades de los usuarios reales y potenciales, la infraestructura tecnológica utilizada por el proyecto y los recursos financieros y humanos disponibles. Además, las posibilidades de las estaciones de trabajo y dispositivos de captura de imágenes (escáneres o cámaras digitales, sistemas operativos, memoria interna, almacenamiento, calidad de visualización, capacidad de las redes y velocidad) deben estar claras antes de iniciar el proyecto así como los medios para presentar los datos de las imágenes a los usuarios. El análisis de las necesidades técnicas de un proyecto de digitalización se lleva a cabo por lo general en el marco de un proyecto piloto o estudio. Este proporciona al proyecto la posibilidad de investigar a pequeña escala la viabilidad de realizar sus planes o de introducir la tecnología digital en una biblioteca o en un archivo si se trata del primer proyecto de digitalización de la institución. Las necesidades técnicas se centran fundamentalmente en el hardware y en el software. Aunque cualquier lista de requisitos mínimos se queda casi inmediatamente obsoleta y además debe ser bastante general, el siguiente paquete básico debería ser suficiente para llevar a cabo un proyecto de digitalización a un nivel básico: • • • • • • Un PC de nivel normal con mínimo de memoria de acceso aleatorio (RAM) dos veces mayor que la recomendada para los requisitos de oficina habituales. El procesado de imágenes necesita mucha memoria y largos retrasos afectan negativamente a la productividad Un CD-Writer, periférico esencial para copiar el producto digital en CD-ROMs, discos exteriores y DVD-R, especialmente si el espacio de almacenamiento representa un problema o si está prevista la venta de los discos. Un modem o una tarjeta de red Ethernet para el acceso interno. Un escáner de bandeja plana A3 ópticamente capaz de una resolución de 600 ppp (ppi) o superior. Los escáneres de bandeja plana menores de A4 no permiten capturar las dimensiones completas de documentos de tamaño folio de los que se componen muchas colecciones archivísticas. Un adaptador de transparencias es otro extra opcional útil para la captura de materiales basados en película y negativos de cristal en grandes formatos. Se necesita una impresora de oficina en blanco y negro (600 ppp) si las impresiones se utilizan para el control de calidad. Si las imágenes se imprimen para la venta se requerirá una impresora en color de calidad fotográfica de alta resolución. La adquisición de un equipo también deberá incorporar un contrato de mantenimiento por un mínimo de tres años y, si es posible, por cinco. Por lo general, se considera que después de tres años el equipo requerirá una actualización y después de cinco será obsoleto y necesitará ser sustituido. La selección del software debería basarse en una seria consideración de soluciones de código abierto (es decir, disponibles públicamente). Los requisitos del software de imagen deberían basarse fundamentalmente en facilitar formatos de archivo normalizados como TIFF y JPEG. Las herramientas muy elaboradas de gráficos deben utilizarse prudentemente para preservar la integridad del archivo.