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población, hubiera revelado buen tino y mayor previsión, evitando graves perjuicios y los inconvenientes nacidos de tan fundadas como imprescindibles incompatibilidades. Si no era asequible la completa independencia del Jardin Zoológico, pudo y
debió agregarse á la Escuela práctica de Agricultura, entonces
establecida en Aranjuez, y posteriormente trasladada á la Florida, cerca de Madrid, porque es obvio y generalmente sabido, que
pertenece á la ciencia agronómica todo cuanto atañe á la mejora
y adquisición de los animales domésticos.
Consideró oportuno el Gobierno hacer en el Museo de Ciencias
ciertas reformas administrativas, que se creian necesarias para
el mejor orden del Gabinete de Historia Natural y del Jardin
Botánico, dirigidos durante muchos" años por el profesor Graells,
acreditado zoólogo que habia demostrado en repetidas ocasiones
su celo científico. El antiguo director del Museo de Ciencias
Naturales dejó de serlo en 23 de Abril de 1867, y le sucedió un
Comisario regio con amplias facultades, el cual informó y propuso cuanto le pareció conveniente acerca de la marcha administrativa del establecimiento, y sobre su nueva organización , previa consulta de la Junta facultativa en lo propiamente
científico, dando todo ello por resultado la formación, de un
nuevo Reglamento, que fué aprobado por Real decreto del 10 de
Junio de 1868. Era jefe superior inmediato del Museo de Ciencias Naturales el Comisario regio con independencia del Rectorado en lo gubernativo y económico, siendo elegido por el
Gobierno entre los individuos del Consejo de Instrucción pública;
y se le confirieron numerosas atribuciones, limitando mucho en
lo económico las de los directores destinados á las secciones
constituidas por el Gabinete de Historia Natural, Jardin Botánico y Jardin Zoológico, que se conservaba, sometiéndolo á
prudentes prescripciones, sugeridas por la experiencia y encaminadas á evitar en lo posible ciertos abusos más ó menos trascendentales. Nombráronse los respectivos directores, siéndolo
del Gabinete de Historia Natural el profesor Tornos, y del Jardin
Botánico el único encargado de las dos enseñanzas correspondientes á esta sección del Museo de Ciencias, quedando el Jardin
Zoológico bajo la inmediata inspección del Comisario regio,
porque razones atendibles impidieron que aceptase su dirección
uno de los zoólogos más celosos y distinguidos de la presente
época.