Fig. 1. Esculapio o Asklepios. Dios de la medicina griega. 3 PRÓLOGO En octubre del pasado año, 1997, arribé al cuarto de siglo en el desempeño del cargo de historiador médico del Ministerio de Salud Pública, y como parte de las funciones del mismo, de director de Cuadernos de Historia de la Salud Pública. En tres ocasiones anteriores he recogido en dicha publicación algo de la bibliografía producida al frente de la Oficina del Historiador del Ministerio de Salud Pública, con los títulos de: Estudios sobre historia médica cubana (Cuad. Hist. Sal. Pub. No. 66, 1983), Temas y personalidades de la historia médica cubana (Cuad. Hist. Sal. Pub. No. 72, 1987) y El cólera morbo asiático en Cuba y otros ensayos (Cuad. Hist. Sal. Pub. No. 78, 1993). En esta ocasión, tan propicia a la evocación de la labor intelectual realizada, he querido nuevamente recoger un grupo de mis últimos trabajos, aún inéditos, en el presente Cuaderno No. 84, con el título de En los dominios de Esculapio, como una modesta justificación de la larga permanencia en el cargo. Los trece trabajos reunidos abarcan estudios que tratan aspectos de la historia de la medicina cubana desde el siglo XVI al presente: la influencia mexicana en nuestras ciencias médicas hasta el primer tercio del siglo XVIII; los orígenes de la enseñanza universitaria de la medicina en la atención hospitalaria y primaria en Cuba; instituciones no oficiales y academias privadas para el aprendizaje de la medicina en nuestro país; la enseñanza de la psiquiatría en la Universidad de La Habana (1906-1961); algunos aspectos históricos de la operación cesárea; el desarrollo de diversas especialidades médicas entre nosotros, tales como la angiología, las ciencias patológicas, la salud pública, la medicina interna y la obstetricia, visto a través de pinceladas biográficas de importantes representantes de ellas, como los doctores Jorge Mc Cook Martínez, Zoilo Marinello Vidaurreta, Jorge Aldereguía Valdés-Brito, José E. Fernández Mirabal y Celestino Álvarez Lajonchere, así como estudios sobre dos importantes personalidades médicas que desbordaron el campo puramente científico para adentrarse de manera destacada en la historia política cubana, los doctores Fermín ValdésDomínguez y Quintanó y Enrique Núñez de Villavicencio y Palomino. El título me lo ha sugerido un viejo libro, En los dominios de Herodoto (1937), del ya desaparecido historiador profesor Gregorio Delgado Fernández, mi padre, en el que reunió una veintena de sus trabajos sobre historia general de Cuba, cuya lectura me inclinó, hace ya muchos años, al fascinante campo de la investigación histórica. Espero, como en ocasiones anteriores, que la información que se ofrece en el presente Cuaderno, sea de ayuda a estudiantes y profesionales de la salud y a todo amante de la historia médica cubana. Dr. Gregorio Delgado García Historiador Médico del MINSAP 4