EL SAHARA ESPAÑOL el arcilloso costrón, reseco y resquebrajado por la extrema aridez del ambiente; en fin, todo nos habla de un país degradado y estático, que evoluciona muy lentamente por inercia y en el que la Naturaleza nos muestra lo que fué de él en otros tiempos y en el cual hoy, debido a su terrible desnudez, a su absoluta soledad y a su pavoroso silencio, hace que nos sintamos extraños. E l Dráa: fenómenos de captura de su antiguo cauce El Dráa es, sin duda alguna, el único río verdadero que desemboca en el Atlántico, entre Ifni y el Senegal, si bien su característica de aridez esté bien destacada. Nace, como se sabe, en las vertientes meridionales del Alto Atlas, y después de un recorrido o!e unos 1.000 km., tomando como origen las fuentes del Dadés, desemboca en el Atlántico, sirviendo en su último segmento en más de 275 km. de frontera actual entre el Sahara español y el territorio de dominio francés. Los uadi Dadés y Uarzazat al unirse lo forman, corriendo durante 200 km. más o menos de N W . a S E . a través de los contrafuertes del Atlas; después, cuando ha atravesado las alineaciones del Yebel Bani y del Yebel Beni Selman y alcanzando el Sahara, tuerce bruscamente hacia el W., corriendo paralelamente y al S. del Yebel Bani, alineación que atraviesa de nuevo, pero ahora de S. a N . , unos 500 km. aguas abajo en Kheneg Dra, corriendo ya en líneas generales rápidamente y siempre hacia el W., hasta llegar a la costa. Se ha supuesto por muchos que este interesante y curioso «codo del Dráa» pudiera ser testigo de un fenómeno de captura; de ello se ha ocupado el Capitán PIGEOT y otros autores. Así, pues, puede suponerse que en otras épocas el Dráa corría hacia una gran depresión lacustre situada en el interior del Sahara central, al N W . de Tumboctú, en la que desembocarían, igualmente, el Niger, el Soura y el gran Uad Tamaugharet. Esta gran cuenca lacustre podría corresponder más o menos con la región denominada hoy El Djul —la depresión— por los indígenas, según el Capitán PIGEOT. Si las cosas fueron o no así, es difícil de determinar con seguridad, dado el desconocimiento general que hasta ahora se tiene de las' regiones centrales del valle del Dráa y del Dura; no obstante, algunos nuevos datos de estas regiones pueden dar luz sobre tan interesante problema.