En tales parajes, aun hoy la acción erosiva es enérgica, pues el per

LA
RED
FLUVIAL
En tales parajes, aun hoy la acción erosiva es enérgica, pues el perfil de equilibrio no se ha conseguido. Las aguas erosionan y remueven
los materiales violen tísimamen ce, y cuando la avenida pasa,-es frecuente que en tales lugares quede un charco más o menos permanente, un
guelta; buen ejemplo nos lo ofrece el de Sarga, aguas abajo del Tragasuasil.
A s í , pues, el Dráa a lo largo de su cauce desciende bruscamente en
escalones cada vez que atraviesa uno de estos grandes accidentes orográficos, determinados por rocas resistentes del Paleozoico. Entre cada dos
de ellos su cauce es siempre amplio, regular, de típica forma de artesa
y con escasa pendiente, que no ha de ser mayor d é . i a 2 por i.ooo.
Este uadi es relativamente rico en aguas subálveas, lo que se denuncia por la gran permanencia de charcos que en su cauce se forman y por
lo apretado y buen desarrollo del matorral, adelfas, tarajes, guerbsis,
Lerroxia y , además, álamos que alcanzan a veces gran tamaño, y que sólo
faltan allí donde la arroyada los desarraigó o la gran masa de arcilla, al
recubrirlos, determinó su muerte. N o obstante, el Dráa ofrece una mayor abundancia de matorral, que poco a poco se hace más claro y mísero, a medida que se avanza más hacia el S.
Uadi afluentes al Dráa.
Hacia el Dráa fluyen después del codo que este gran uad traza en el
Mehamid, un conjunto de grandes uadi que vienen todos del Antiatlas
y aparecen siempre caracterizados por rasgos muy semejantes. Sus zonas
altas son típicas con grandes torrentes que sufren frecuentes e impetuosas
avenidas, pero poco a poco, al avanzar hacia el S., disminuye su inclinación, se ensanchan más y más sus cauces, que ofrecen características
cada vez más áridas y, finalmente, alcanzan al Dráa, en el que depositan
enormes masas de aluviones y, de vez en cuando, las cenagosas aguas de
sus accidentales avenidas.
Sus cauces son de unos 100 a n o km. de longitud media, alcanzando el principal, el Uad Akla, que desde Tidgar viene, unos 1 3 5 km. Dentro del segmento fronterizo recibe a los uadi Icht e Imi Ugadir, desembocando este último aguas arriba de la posición francesa de Assa. Entre
estos uadi principales, quedan otros cauces secundarios muy numerosos,
que hienden y acarcavan profundamente el terreno.
Del S., el Dráa recibe muy pocos afluentes, pues en esta dirección