Ley 7/1996, de 15 de enero, de ORDENACIÓN DEL COMERCIO MINORISTA Ley 11/2006, de 22 de diciembre, sobre RÉGIMEN DEL COMERCIO MINORISTA Y PLAN DE EQUIPAMIENTOS COMERCIALES DE LA REGIÓN DE MURCIA Toda actividad promocional de ventas, salvo la venta de saldos, deberá reportar al consumidor final ventajas económicas reales. ¿Qué actividades son consideradas como promoción de ventas? Tendrán la consideración de actividades de promoción de ventas: Las ventas en rebajas Las ventas en oferta o promoción Las ventas de saldos Las ventas en liquidación Las ventas con obsequio Las ofertas de venta directa Queda expresamente prohibida la utilización de estas denominaciones, u otras similares, para anunciar las ventas que no respondan al correspondiente concepto legal. Queda prohibida la venta en pirámide. ¿Cuales son los requisitos comunes que deben cumplir estas actividades? Todas las actividades de promoción de ventas deberán procurar información clara, veraz y suficiente sobre el contenido y las condiciones de sus actividades promocionales. La información y publicidad relativa a las actividades no podrá contener cláusulas abusivas y en particular de desvinculación basadas en errores tipográficos y, en general, de imprenta. Para ser anunciadas como una medida general deberá afectar como mínimo a la mitad de los artículos puestos a la venta. Deberá informar sobre el día inicial y final de la actividad de promoción de venta (tanto en el establecimiento como en la difusión publicitaria que realice respecto de la citada actividad) Cuando se oferten artículos con reducción de precios deberá figurar, junto con el precio reducido, el precio anterior, entendiéndose como tal, el aplicado durante un período continuado de al menos 30 días en el curso de los seis meses precedentes. Cuando se trate de una reducción porcentual al conjunto de artículos, bastará con un anuncio genérico de la misma sin necesidad de que conste individualmente en cada artículo ofertado. En el caso de venta de artículos a precio normal y reducido, unos y otros deberán estar suficientemente separados, sin posibilidad de que exista error. La disponibilidad y existencias de los productos ofrecidos objeto de la actividad promocional habrá de ser suficiente. (Si la actividad promocional quedara limitada al agotamiento de los productos destinados a la misma, el comerciante minorista habrá de informar claramente sobre el número total de unidades objeto de la actividad). La actividad promocional por la que se garantice el precio menor o más bajo respecto a la totalidad o parte de los productos objeto de venta en un mismo establecimiento mediante la entrega al comprador de la diferencia entre el precio pagado por éste y el menor aplicado por un competidor indeterminado, deberá ofrecer al comprador un plazo mínimo de quince días naturales, desde la fecha de la compra, para solicitar la entrega de la diferencia entre ambos precios. El precio más bajo del competidor será el señalado por el comprador dentro del citado plazo de quince días. El comerciante que practique cualquier tipo de promoción de venta promocional o especial tendrá la obligación de informar al consumidor sobre medios de pago admisibles en la operación, a través de su publicidad general en la exposición visible desde el exterior del establecimiento. Régimen sancionador Podrá ser sancionado como infracción administrativa cualquier incumplimiento al régimen vigente de las actividades de promoción de ventas y en particular, las siguientes conductas: Como infracción leve, sancionable con apercibimiento o multa de hasta 3.000 ¤ Realizar ventas en rebajas fuera de los casos autorizados. No hacer figurar en los artículos rebajados los precios habituales de los mismos. El incumplimiento de las normas sobre venta conjunta Como infracción grave, sancionable con multa de 3.001 a 15.000 ¤ La oferta de operaciones comerciales en pirámide en la forma prohibida por la Ley. La falta de veracidad en los anuncios de prácticas promocionales calificando indebidamente las correspondientes ventas u ofertas. Ofertar como rebajados artículos defectuosos o adquiridos expresamente con tal finalidad. El incumplimiento del régimen establecido sobre entrega y canje de los objetos promocionales. Anunciar o realizar operaciones de venta en liquidación con incumplimiento de los requisitos establecidos al respecto. Anunciar ventas como directas de fabricante o mayorista con incumplimiento de lo establecido al respecto en la presente Ley. La reincidencia en la comisión de faltas leves. Como infracción muy grave, sancionable con multa de 15.001 a 600.000 ¤, cualquiera de las definidas como graves si existe reincidencia o bien el volumen de la facturación realizada o el precio de los artículos ofertados objeto de la infracción es superior a 600.000 ¤. Si la sanción se impone por la forma de actividad comercial o por los productos comercializados, las sanciones comportarán, además de la multa correspondiente, la incautación de pérdida de la mercancía objeto de la actividad comercial de que se trate. En el caso de tercera reincidencia en infracciones calificadas como muy graves, podrá decretar el cierre temporal de la empresa o establecimiento infractor por un plazo máximo de un año. Ventas en promoción Son aquellas que se realizan por un precio inferior o en condiciones más favorables que las habituales, con el fin de potenciar la venta de ciertos productos o el desarrollo de uno o varios comercios o establecimientos. Los productos objeto de promoción, no podrán estar deteriorados o ser de peor calidad que los mismos productos que vayan a ser objeto de futura oferta ordinaria a precio normal. A las ventas en promoción, le serán aplicables las reglas de las ventas con obsequio. Ventas en rebajas Se entiende que existe venta en rebajas cuando los artículos objeto de la misma se ofertan en el mismo establecimiento en el que se ejerce habitualmente la actividad comercial, a un precio inferior al fijado con anterioridad. Los artículos objeto de la venta en rebajas deberán haber estado incluidos con anterioridad y, durante el plazo mínimo de un mes, en la oferta habitual de ventas. Dichos artículos no podrán haber sido objeto de práctica de promoción alguna en el curso del mes anterior a la fecha del inicio de la venta en rebajas. Queda expresamente prohibido calificar como venta en rebajas la de aquellos artículos no puestos a la venta en condiciones de precio ordinario con anterioridad (adquiridos para ser vendidos a precio inferior), así como la de productos deteriorados. Las ventas en rebajas sólo podrán tener lugar como tales en dos temporadas anuales: una iniciada al principio de año, y la otra en torno al período estival de vacaciones. La duración de cada período de rebajas será como mínimo de una semana y como máximo de dos meses, de acuerdo con la decisión de cada comerciante dentro de las fechas concretas que fijarán las Comunidades Autónomas competentes. Ventas en liquidación Se entiende por venta en liquidación aquella que, de forma excepcional y con finalidad extintiva de las existencias, se hace por decisión judicial o administrativa, o bien por iniciativa del comerciante en alguno de los siguientes casos: cese total o parcial de la actividad comercial, cambio de ramo o modificación sustancial en la orientación del negocio, cambio de local o realización de obras de importancia en el mismo, y cualquier supuesto de causa mayor que cause grave obstáculo al normal desarrollo de la actividad comercial. No podrán ser objeto de este tipo de actividad comercial aquellos productos que no formaran parte de las existencias del establecimiento o aquellos que fueron adquiridos por el comerciante para este fin. El anuncio de la venta en liquidación, deberá indicar la causa de la misma. La duración máxima de la liquidación será de 3 meses, y de un año, cuando haya cesación total de la actividad. En el curso de los tres años siguientes a la finalización de la venta en liquidación, el vendedor no podrá ejercer el comercio en la misma localidad, sobre productos similares a los que hubiesen sido objeto de liquidación por los siguientes motivos: cese total o parcial de la actividad, cambio de ramo de comercio o modificación sustancial en la orientación del negocio. Ventas de saldos Son ventas de saldos las de aquellos productos cuyo valor de mercado aparezca manifiestamente disminuido a causa del deterioro, desperfecto, desuso u obsolescencia de los mismos, o se realizan por un precio inferior al habitual. Los productos objeto de este tipo de venta deberán pertenecer al comerciante seis meses antes del inicio de la misma, salvo en los establecimientos dedicados específicamente a la venta de saldos. Las ventas de saldos deberán anunciarse necesariamente con esta denominación o con la de “venta de restos”. De igual forma deberá precisarse si se trata de artículos deteriorados o defectuosos. Ventas con obsequio Son aquellas que, con el objetivo de fomentar las ventas, ofrecen otro producto o servicio adicional, gratuito o a precio especialmente reducido, bien de forma automática o mediante sorteo o concurso. El plazo máximo de entrega de los obsequios será fijado por la Comunidad Autónoma, sin que pueda exceder de 3 meses. Si el ofrecimiento se ha hecho en el envase, el derecho a obtener la prima ofrecida podrá ejercerse, como mínimo, durante los tres meses siguientes a la fecha de caducidad de la promoción. Cuando los obsequios formen parte de una colección, la empresa estará obligada a cambiar cualquiera de ellos por otro distinto, a no ser que en la oferta pública del incentivo se haya establecido otro procedimiento para obtener las diferentes piezas de la colección. Queda prohibido ofrecer conjuntamente y como una unidad de contratación dos o más clases de unidades de artículos salvo que, exista una relación funcional entre ellos, sea práctica comercial común vender ciertos artículos en cantidades superiores a un determinado mínimo, se ofrezca simultáneamente la posibilidad de adquirir los artículos por separado y a su precio habitual o cuando se trate de lotes o grupos de artículos presentados conjuntamente por razones estéticas o para ser destinados a la realización de obsequios. Venta directa Para ofertar al público mercancías de cualquier clase alegando la condición de fabricante o mayorista, será necesario que el vendedor fabrique realmente todos los productos puestos a la venta en el primer caso, o que su clientela esté compuesta fundamentalmente por minoristas en el segundo. En ambos supuestos, los precios deberán ser los mismos que se apliquen a los comerciantes mayoristas o minoristas según los casos. Colabora: Consejería de Economía, Empresa e Innovación. Dirección General de Comercio y Artesanía.