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Temas Públicos
Nº 693 -
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24 de
deSeptiembre
septiembre 2004
2004
ISSN 0717-1528
Gasto en Defensa:
Un Activo para la Paz y el Desarrollo
El gasto en defensa es uno de los tópicos habituales tanto en el estudio de las finanzas públicas, como de la ciencia política, entre
otras disciplinas.
dios Nueva Mayoría de Argentina, sobre la base de estudios del International Institute for
Strategic Studies2, antecedentes de cada país,
entre otros.
Este interés se sustenta,
para las finanzas públicas, en
las características de bien público puro que ello conlleva, ya
que en el consumo de este La determinación del gasto en
bien no existe rivalidad, es de- defensa óptimo es una tarea de
alta complejidad, que debe
cir dos o más personas pueden
tener a la vista elementos
consumir simultáneamente la
técnicos y económicos más
protección que otorga este gascompletos que la somera
to. Adicionalmente, no existe
posibilidad de excluir consumi- comparación del gasto militar
per capita u otros utilizados.
dores, ya que en el evento de
un conflicto la defensa de los
habitantes se hace sin distinción alguna.
En el Cuadro N°1 se
puede apreciar que en términos absolutos Brasil es el país
que más dinero gasta en la región, seguido por Colombia,
Argentina y Chile. Ahora bien,
si dicho gasto se toma como
porcentaje del PIB de cada
país, la lista es encabezada
por Surinam, seguido de Ecuador, Perú y Chile. Asimismo, si
se compara el gasto per capita
el ranking lo encabeza Chile,
seguido por Uruguay, Brasil y
Ecuador. Es necesario señalar,
adicionalmente, que cada país
tiene una metodología propia para clasificar y
financiar el gasto en defensa, siendo el caso
de Chile el de un financiamiento mixto: una
parte por Ley de Presupuestos y otra en virtud
de la Ley Reservada del Cobre con la que se
financia la compra de sistemas de armas. El
gasto que se observa en el cuadro N°1 para
Chile incluye ambos conceptos. En cambio en
Perú es probable que la cifra presentada sólo
represente el gasto operacional ya que la
compra de nuevas armas se realizan habitualmente por leyes secretas y cuentas extrapresupuestarias. En Bolivia, por su parte, se
ha establecido un impuesto de 7% a las exportaciones de gas que tiene por destino la compra de armamento, por lo cual el gasto final
puede ser mayor al presentado en el cuadro
citado.
(ver
Esta característica de
bien público conlleva ciertos problemas en la
asignación de recursos, siendo uno el comportamiento “free rider” u oportunista1 de lo
cual se desprende la dificultad habitual de decidir el monto óptimo a ser usado para el financiamiento de este bien público.
En este punto, las ciencias políticas tratan de diseñar sistemas de elección pública
que traten de determinar el gasto óptimo que
la sociedad está dispuesta a financiar.
Las Comparaciones
Habitualmente se realizan comparaciones sobre el gasto en defensa que realizan
distintos países, tales como las que muestra el
Cuadro N°1, elaborado por el Centro de Estu
4
http://www.lyd.org/noticias/opiniones/gasto.htm
l)
Cuadro N°1: Gasto en Defensa 2003
Argentina
Bolivia
Brasil
Chile
Colombia
Ecuador
Guyana
Paraguay
Perú
Surinam
Uruguay
Venezuela
Total
Las comparaciones anteriores sitúan a
nuestro país en el promedio de la región o encabezando la lista respectivamente, lo que nos
indica que debemos ser cuidadosos en la simple comparación entre países y utilizar metodologías más adecuadas para poder realizar
un juicio al respecto. Estas metodologías recomiendan evaluar en primer lugar el escenario bélico que podría enfrentar un país, con lo
cual se puede evaluar el gasto de naciones
como Nueva Zelandia, sin escenario alguno3 o
Israel con un escenario concreto que lo obliga
a tener uno de los presupuestos más elevados, incluyendo capacidad nuclear disuasiva.
Gasto
En Mills US$
1.508
133
9.118
1.435
1.540
639
6
47
874
9
175
1.111
16.594
Gasto % PIB
1,2
1,8
1,9
2,1
2,1
3,6
0,7
1,9
2,3
5,0
1,1
1,8
2,0
Gasto per
capita US$
39,3
15,1
51,6
91,0
34,5
47,9
8,0
8,9
32,2
19,5
51,8
43,5
46,0
sido consistente con la disminución de la hipótesis de conflicto vecinal.
Los Escenarios para Chile
A lo anterior debe agregarse una realidad política insoslayable: nuestro país exhibe
una fortaleza económica y una estabilidad política que lo transforman en términos relativos
en una actor más relevante en el concierto
mundial. Se trata de un prestigio que normalmente trae aparejados mayores deberes en
términos de política internacional y que no es
posible eludir con simplismo pacifista, pues la
celebración de tratados de libre comercio con
países como EEUU y de la Unión Europea,
considerados como positivos por todos los
sectores, imponen se quiera o no una mayor
identificación con las políticas de seguridad y
defensa de esas naciones. En ese sentido debe entenderse la participación chilena en operaciones de mantenimiento de la paz recientes,
partiendo en Kuwait a comienzos de la década
pasada, y posteriormente en Timor Oriental y
hoy en Haití. Todo hace presagiar que mantendremos una participación activa en esas
operaciones en el futuro, que si bien pueden
importar costos, significarán crecientes lazos
políticos que determinarán que Chile sea considerado un aliado confiable y comprometido,
del cual pueden seguirse importantes beneficios, no sólo políticos, sino económicos, permi-
Tradicionalmente los países se ocupan
de los escenarios vecinales y Chile no es una
excepción. Si bien en la actualidad tales escenarios han disminuido en forma importante
como hipótesis de conflicto, en el pasado no
lejano fueron una realidad tangible, ello no habilita a ignorarlos. Así, es menester mantener
una nivel de fuerzas que importe una disuasión
creíble, lo que unido a acciones de integración
y confianza mutua, garantizan una convivencia
pacífica. Chile ha sido muy activo en tales acciones de confianza; así por ejemplo, en estos
días se están llevando a cabo en el norte del
país los ejercicios aéreos “Salitre 2004”, con
participación de las Fuerzas Aéreas de EEUU,
Brasil y Argentina.
Cuando se analiza el gasto militar de
nuestro país, se debe tener presente que si
bien en los últimos 15 años se ha mantenido
estable con una leve tendencia al alza en cifras absolutas, en los hechos como proporción
del PIB ha disminuido aproximadamente en un
tercio. Dicho en otras palabras, el país no ha
invertido su mayor riqueza en gastos de defensa, sino que la ha focalizado en gasto de
tipo social, como educación y salud. Ello ha
5
tiendo el máximo aprovechamiento de los
acuerdos celebrados.
Dadas las características de Chile en el
escenario mundial, que hacen prever una
constante participación en escenarios de mantenimiento de la paz, pero siendo políticamente
inviable, tanto interna como externamente, un
incremento en el gasto, se debe continuar haciendo esfuerzos de una mayor eficiencia en
los recursos utilizados.
Un último elemento que debe tenerse en
cuenta, es el grado de transparencia que exhibe el gasto en defensa nacional. La fuentes
son totalmente abiertas y su monto es absolutamente conocido y verificable: basta con sumar las partidas del Presupuesto Público del
Ministerio de Defensa y algunos ítem del MiPara lograr una mayor productividad, es
nisterio del trabajo, relativo a las pensiones del
necesario ser muy eficientes en la asignación
personal milita, con las memorias anuales de
de recursos en defensa e implementar para
Codelco, que permite conocer el aporte de la
ello sistemas de evaluación de proyectos que
Ley Reservada del Cobre; no hay más. La Dipermitan priorizar la adquisición de nuevos sisrección de Presupuestos entretemas de armas. Así, la discuga en su página web informasión que se viene sobre los
ción detallada del gasto en deusos de la ley reservada del
fensa, a lo que debe adicionar- La Dirección de Presupuestos cobre será de gran valor, ya
se la edición de los Libros de la entrega en su página web in- que se saldrá del sistema de
Defensa I y II, que explicita las formación detallada del gasto tercios estancos, hacia un sispolíticas y capacidades de de- en defensa, a lo que debe adi- tema de competencia de profensa nacionales. No cualquier cionarse la edición de los Li- yectos que permitan maximizar
país de Latinoamérica puede bros de la Defensa I y II, que el retorno de los recursos inexhibir estándares de transpavertidos. En todo caso, la modiexplicita las políticas y capaci- ficación del sistema debe harencia como el nuestro.
dades de defensa nacionales. cerse como corresponde en
La conjugación de los es- No cualquier país de Latinoa- democracia: mediante una mocenarios, tanto vecinal como mérica puede exhibir estánda- dificación de la legislación viinternacional, y antecedentes
res de transparencia como el gente y no mediante reinterpreanteriores motivan a pensar
taciones dudosas de la existennuestro.
que no es muy probable que el
te. Por lo demás, ello es necenivel de gasto militar sea redusario para genera la instituciocido, sino que más bien cabe
nalidad apropiada para realizar
esperar una mantención de los
dichas evaluaciones, que suniveles en el mediano plazo, sobre todo mienpone evaluaciones en el mediano y largo plazo
tras los países del cono sur no tomen medidas
y otorgamiento de una mínima estabilidad en
efectivas para transparentar y reducir efectiel tiempo a las decisiones. Hoy el Ministerio de
vamente el suyo.
Defensa carece de tal institucionalidad y la reinterpretación que se ha hecho implica el riesGasto en Defensa Óptimo de Chile
go que se transite en un esquema de simple
discrecionalidad de la autoridad, con peligro de
La determinación del gasto en defensa
una inadecuada politización de las institucioóptimo es una tarea de alta complejidad, que
nes armadas.
debe tener a la vista elementos técnicos y
económicos más completos que la somera
1 El comportamiento free rider es que los consucomparación del gasto militar per capita u
midores no manifiestan deseo de pagar para que este
otros utilizados.
bien público sea provisto ya que saben que si otro consumir paga y lo financia podrán consumirlo sin problema.
2 www.iiss.org
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3 Salvo los conflictos en los que participe la Commonwealth.
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